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Sacrificio

Kyle abrazó el la cintura de Damien. Sintió como este dió uno, dos, tres pasos y dió un salto hacía el infierno.

El pelirrojo no lo creía. A pesar de no ver, sentía el sofocante calor, el frío de las almas pasando a su lado, y los gritos de sufrimiento tratando de engañarlo.

-D-damien... Hace demasiado calor. No lo soporto.

-Aguanta. Es una ilusión, sientas lo que sientas debes resistir, o te perderás entre el millar de almas.

Damien hablaba como un experto, sus palabras tan serías y que expresaban su gran conocimiento, despertaron la curiosidad de Kyle.

-Por cuanto tiempo viviste aquí?

-Alrededor de 1300 años... Soy un demonio joven en comparación con los demás...

-1300!? Cuantos años tienes!?

-1715 años.

Al igual que Pip, Damien vivía eternamente, y hasta ahora estaba en su juventud de demonio. El equivalente a sus 1715 años eran como 16 años en vida humana.

-Damien... Cuanto más vamos a bajar? Siento que mi cuerpo se empieza a quemar.

-Tienes que resistir, esto es sólo el comienzo, aun nos falta descender aun mas

Solo el comienzo, del infinito mundo inferior. Tan grandd y tan inmenso, parecería imposible encontrar a Kenny allí, pero Damien conocía perfectamente ese lugar, y sabía donde estaban.

Mientras ellos dos descendían mas y mas, Satán se había apoderado del alma de Kenneth, con el cual tenía varios problemas.

-Oye niño, callate un maldito día. Acostumbrate a la vida que buscaste.

-Dejame ir idiota! Yo no tengo nada que ver contigo!

-Tu fuiste quién ayudo a Damien a escapar no? Por tu culpa su coronación como nuevo príncipe de las tinieblas se vio apalazada.

-Y a mi que mierda me importa... Si moría debería ir a cielo.

-Eso no funciona así hijo. Yo tomé tu alma desde el día que te llevaste a Damien. Hasta que el no vuelva, tu, tu familia y tus seres queridos sufrirán.

-Entonces es tu culpa. Tu fuiste quien hizo que Kyle perdiera la memoria, ty hiciste que mi familia fuera pobre... Siempre tú, Satán.

Damien sabía que algo grande se venía. El aire del infierno estaba enrarecido, el calor infernal era mas alto que el que recordaba, y los temblores no cesaban.

-Papá, que mierda tienes pensado hacer? -Dijo Damien con gran desespero.

Satán estaba cerca de su trascendencia. Su tiempo como rey de las tinieblas estaba terminando, y sin un digno sucesor, su reino estaba en caos total, y sin Damien ahí, necesitaría otro sucesor.

-Tu eres un humano muy interesante McCormick, fuerte, de grandes capacidades y con una mentalidad excelente, eres justo el ideal para ser el próximo rey de las tinieblas.

-Olvidalo... Para eso estaba Damien. Yo no tengo el minimo interés.

-Pues Damien no está, asi que, aunque vayas en contra, creo que serás perfecto para esta posición.

Damien hizo lo posible para llegar mas rápido al último nivel del infierno. Pero gastó gran parte de su energía protegiendo a Kyle de las llamas del infierno.

Después de haber caído varias horas, Damien y Kyle finalmente habían llegado a la morada de Satán.

-Kyle, ahora, mas que nunca, no debes soltarte, bien?

-S-si.

-Ahi voy.

Con las energías que le quedaban, Damien corrió hacia su padre. Estaba mas cerca que nunca, y alcanzaría a llegar a tiempo para evitar una tragedia.

-Papá!!!

Habia sucedido? Kenny había tomado el lugar de Damien?

-D-damien... Hijo... Has vuelto a casa.

-Donde esta Kenneth, habla!

-Hijo... Porque no regresaste nunca, porque no avisaste donde estabas.

-Repito. Dónde está Kenneth.

-Oh, quieres hacerlo así? Entonces... Kenneth!

Un Kenny entre barrotes gritaba desesperado pidiendo ayuda.

-Ese es Kenny!? -Gritó Kyle.

-Satan... Quiero al verdadero Kenny, no vas a engañarme nuevamente.

-No vas a tenerlo hasta que asumas.

-Dame a Kenneth, Ahora!

-Hijo, debes entender, eres el príncipe, tu futuro está aquí, en las tinieblas.

-Padre... Quiero que entregues a Kenneth.

-Damien, calma tu sed de sangre.

-Sabes que al estar en el infierno recobré mis poderes, verdad?

-Si...

-Creo que haré lo que tanto ansías, es hora de que el principe se convierta en Rey.

-El momento de mi muerte, a manos de mi hijo...

-Asi estaba escrito no? Así querias que esto sucediera, así acabaría. Tu y yo, definiendo...

-Asi es...

-Pip... Perdóname por esto -Dijo Damien para si mismo.

-Antes que nada. Quieres ver a McCormick?

-Es lo único que necesito...

-Kenneth! Vinieron por tí.