La mejor tarde de fútbol ⚽(Jinkook)

Familia

Encontramos una película de superhéroes, al parecer a Jungkook le gustan esas películas porque en momentos dejaba la comida por concentrarse completamente en la pantalla.
La verdad a mí también me gusta, sería increíble poder volar o ser invisible y tomar los dulces de las tiendas sin ser descubierto, pero ahora que lo recuerdo mamá me dijo que eso es robo y está mal así que descarto la idea de ese súper poder.

—Jin, ¿tú crees que algún día pueda ser tan fuerte como él?—Me preguntó Jungkook señalando a un personaje de notable musculatura, mientras que ya en confianza tomaba grandes cantidades de popcorn, aunque no podría llamarlas "grandes" ya que sus manos son la mitad de las mías.

Si yo fuera él y tuviera comida deliciosa frente a mí, la tomaría con ambas manos.

—Estoy seguro que sí, Kookie, pero no debes exagerar, sino parecerás un señor conejo rudo—Dije serio y lo observé de reojo porque ya sabía lo que se venía.

—No soy un señor y menos un conejo—Protestó Jungkook con el ceño fruncido, tomó la almohada donde se reposaba para moverla a un lado y separarse de mí.

—Es de cariño, Kookie. No te molestes— Sabía que no le hacía gracia que lo llame señor conejo, pero de ahí a que se amargue conmigo por eso ya es otro tema.

Tomé el bol vacío que está en la mesa, me levanté sin decir algo más y me retiré de la sala.

Fui a la cocina para llenarlo de papas fritas, esas que mamá compró la noche anterior y se le olvidó dármelas; no me dijo que eran para mí. Pero...me pregunto a mí mismo.

¿Para quién más serían? Si soy el único que las come en casa.

Tomé otro bol para añadirle otra bolsa de papas extra, ya que luego del partido de hoy estoy muy hambriento y al parecer Kookie también porque cuando estiré mi mano para tomar un puñado de popcorn, solo sostuve mi propia mano.

Una vez con todo lo necesario voy en dirección a la sala, espero no haberme perdido lo más importante de la película. Me acerco al sillón para darle un bol a Kook, pero no está.

Quizás fue al baño, pensé.

Me acomodé como hace unos instantes y empecé a comer mis sabrosas papas fritas, no hay mejor situación que ver una emocionante película comiendo estas delicias.

Transcurrido varios minutos, cuando iniciaron los comerciales nuevamente, no había rastro de Kook.

Ahora sí me preocupa, estoy seguro que han pasado por lo menos 20 minutos y ni siquiera me ha avisado que iría al baño ahora que analizó la situación. El siempre pide permiso antes de ir.

Me paré del sillón sin importar que la película haya iniciado de nuevo, voy al servicio higiénico que está al lado del pasillo, pero veo la puerta abierta, desde mi posición puedo notar que nadie se encuentra dentro de este.

Continúo con mi recorrido y para no ponerme más nervioso de lo estoy pienso en mi segunda opción; mi habitación. De seguro fue por un juguete.

Avanzo hacia la escalera con paso acelerado y al ver el último peldaño, me detuve al pie de esta.

Jungkook está sentado en ese peldaño con las dos manos cubriendo sus ojos, sus brazos están apoyados en sus piernas y su cuerpo temblaba un poco emitiendo pequeños sollozos.

—Jungkook... ¿Qué paso? —Cuestioné al verlo en ese estado, quizás mamá dejó los juguetes en el mismo lugar que la otra vez, es una posición alta para Kook.

Levantó la mirada al escuchar mi voz, su rostro expresa tristeza. Se puso de pie luego de un segundo de observarme y vino corriendo hacia mí. Me acerqué para tomar su mano con miedo a que pueda tropezarse y caer.