Tengo que concentrarme plenamente para esto. Paso a la derecha. Izquierda. Me apoyo contra la pared. Pulso el primer interruptor. Me empujo con los dos brazos y cambio mi centro de gravedad. Salgo impulsado unos tres metros adonde quería. Estoy en terreno seguro. No hay tiempo para pensar. Por instinto, giro la cabeza. Dos saltos. Me doy la vuelta y hago un giro imposible. Toco una pared. Interruptor dos conseguido. Tercero. Hago un sprint. Se me está yendo la adrenalina. El cansancio es casi demasiado. Tengo que seguir. Me agacho e intento tocar el suelo donde está el tercer interruptor. Lo consigo. No puedo descansar. Sigo corriendo. Meto la mano por un agujero de la pared. Mi pelo me entorpece la vista. No veo bien. ¡Mierda! La mano se ha quedado atascada. Necesito... ¡Lo conseguí!. Me voy de esa zona. El suelo desaparece. Yo ya me he apartado. Hacia el quinto interruptor. Éste tenía que ser el último o si no las puertas se cerrarían.

—¿Por qué alguien hizo algo como esto?

—No pensemos en eso, Navi. No puedo parar. No quiero rendirme. Me paro un segundo. Suena tan bien

-No- Dice navi.

Es cierto. No debo perder este juego. Es un todo o nada, Y considerando que no tengo nada no quiero ser menos que eso. El quinto estaba en la entrada del pasillo. Un esfuerzo más

—Un esfuerzo más.

Tiene razón. Ya. Recojo el portátil. No puedo perder blue magma. No perdería yo, sino miles de humanos inocentes. No pienses en como serán. Navi, haz algo útil

-Te he animado—.

Tiene razón. A veces viene bien tener dentro una vocecita parlante.

—No soy una vocecita— Contesta.

Ahora hasta el otro lado. necesito andar con absoluta precisión. Un poco más y estoy fuera. Creo. Izquierda, izquierda. casi me equivoco. Paso de la sala de los interruptores. Me duelen las piernas. Necesito descansar. No puedo descansar. 30 segundos pasarán antes de que se cierre la puerta. Corro. Huyo de mi destino.

—¿Por qué huyes, Juan?—No lo ha dicho Navi... Aun así:

Huyo por mi injusta e inmerecida vida. Huyo por mi soledad. Huyo aterrado por las atrocidades que se harán con el experimento. Huyo porque sí. Huyo por Navi. Por y gracias a W. Huyo porque es lo único que puedo hacer. Huyo por mí mismo. Por eso huyo.

Después de tantos meses no puedo fallar. Deprisa. Me apoyo con la pared. Salto pequeño. Salto grande. No voy a fallar. Si caigo NO.

Me he caído. Mierda. Ahora no. Me levanto. Cinco segundos, todo el margen que tenía, a la mierda. Corro. llego a la puerta. La contraseña. 2276. La segunda puerta se abre. La primera puerta se cierra. Un esfuerzo más y saldré del edificio. Paso. Tengo que correr. Un segundo.

La segunda se ha cerrado. Estoy atrapado. No. NO. No puede ser. Lo he revisado todo hasta el límite. Caigo al suelo. Si he fracasado no merece la pena estar de pie. Ahora va a abrirse la puerta. 3, 2, 1,... Lo que decía. Aparecen un par de numerados y se apartan. Pasa un segundo. La calma que precede la tormenta. Ahora aparecerá un numerado importante y a saber lo que me hará. ¿Apuestas?

-Te van a machacar—. Gracias. Nadie en contra, como siempre. A ver quien pasa.

Una figura demasiado conocida cruza la puerta. ¿Por qué él?. De los cientos numerados tenía que ser 30. El de siempre últimamente. Desde ese mensaje misterioso no ha parado de meterse en mi aburrida vida, y ahora cada vez que pasa algo emocionante aparece allí para recordarme que no significo nada. Que se lo cree él. Ahora que lo pienso.

No ha parado de aparecer desde W. Desde entonces está constantemente en mi vida. Aparece sólo después de que contacte con él. Intenta que no me emocione y actúe. Podría ser.

Blue MagmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora