La maestra, la hechicera y la Wonderbolt (By Wabbrit)

Capítulo 6: Excusas (versión lemon hard)

Un silencio de muerte llenó la habitación durante varios tensos latidos hasta AppleJack gruñó – Terroncito, dependiendo de la respuesta podríamos terminar - los ojos de Rarity se abrieron, y una sensación de malestar en el estómago sustituyó la alegría que había sentido momentos antes, cuando había ayudado a Trixie - Nunca te he levantado un casco, y nunca lo haré. Pero nunca ha estado tan enojada como lo estoy en este momento. Sabe lo que siento acerca de mentir y romper promesas, son cosas malas. Entonces, ¿qué te hizo hacerme esto después de la promesa de la otra noche de que no harías nada? ¡Sin mencionar que usaste nuestra palabra "clave" en frente de otros de esa manera!

Un terror absoluto se apoderó de Rarity. Se puso de rodillas y se lanzó alrededor del fuerte cuello de AppleJack; no fue rechazada, pero tampoco le fue devuelto el abrazo - ¡Oh, AppleJack perdóname! ¡Por favor! Sólo quiero lo mejor para Twilight, y creo que ella y Trixie se harían mucho bien la una a la otra. Para un poni encontrar a ese alguien con quien compartir tu talento especial, es como... es como... encontrar ese accesorio perfecto que va con tu vestido favorito, sólo que mil, mil veces mejor.

Se dio cuenta de que la granjera seguía sin estar convencida y tal vez un poco confundida por la analogía, por lo que intentó con otra – Imagina si mientras buscaras a través de las cosas de tus ancestros, encontraras la receta para la cubierta hojaldrada perfecta que combinara con una nueva especie de manzana que acabaras de crear ¿Cómo negarte a ponerlas juntas? ¡Por qué, eso sería criminal!

Parecía aceptarlo, Rarity pudo ver algo de enojo dejando el rostro de su amante. Sin embargo, todavía podía ver la decepción en sus ojos, y eso le cortó peor que mil cuchillos en el pecho - Eso todavía no cambia el hecho de que rompiste tu palabra. Me prometiste que no interferiríamos en su vida después de que salir de esa fiesta.

Incapaz de seguir mirando el dolor en los ojos de AppleJack por más tiempo, Rarity bajó su mirada hacia sus pezuñas - Yo... lo siento, AppleJack. Sólo quería que fueran tan felices como lo somos nosotras. Desde el día que quedamos atrapadas en tu granero por esa tormenta, me has hecho tan feliz, que sólo quiero cantarlo desde lo más alto de las montañas - dirigió una mirada de soslayo hacia la poni terrestre - Eres lo mejor que me ha pasado AppleJack, y quería que todas nuestras amigas fuesen tan siquiera una fracción de felices, tal como tú me haces sentir.

Lo último de su enojo desapareció de su rostro. Lágrimas brotaron en sus ojos, amenazantes, pero nunca lo suficiente como para derramarlas. La granjera se movió un poco sobre sus pezuñas y miró al techo como buscando la respuesta – Te das cuenta de lo que esto significa ¿no?

Si Rarity pensó que antes su estómago se había hundido hasta el fondo, este se hundió a nuevos niveles ante esas palabras. Cerró sus cascos alrededor del cuello de su amante, si ella pensaba salir por esa puerta tendría que arrastrar al unicornio con ella, porque no tenía ninguna intención soltarla.

AppleJack miró los ojos de Rarity - Esto significa que todas las apuestas quedan canceladas. No intervenir en los planes de los otros, pero podemos apoyar al poni que cada uno quiere que gane, de cualquier forma que queramos.

De repente, el mundo tuvo lugar para la felicidad, todo temor desapareció de la yegua blanca. Ferozmente presionó sus labios contra los de la poni naranja, tratando de ahogarla en un diluvio de pasión. Sus lenguas se entrelazan, los húmedos músculos luchan por dominar. Incapaz de sostenerse más, las piernas traseras de Rarity cedieron, arrastrando a AppleJack al suelo con ella.