Recuerdos Grabados en el Corazon

Aroma tranquilizante

"Este aroma... esta sensación que recorre mi cuerpo... la paz que me rodea... mi cuerpo realmente se siente cansado, pero a la vez protegido, será que..."

El cuerpo de Diane estaba totalmente deteriorado, se sentía realmente exhausta, los ataques que recibía del enemigo ya no le dolían, su cuerpo está realmente entumecido por los golpes, se sentía que su alma salía del pecho.

-¡No permitiré que le hagas daño a mi querida Diane! -grito un hada desviando los ataques enemigos 

Los ataques del enemigo recayeron sobre su nuevo contrincante, realmente le costaba trabajo esquivar las raíces del enemigo, su fuerte era el ataque a distancia.

-Oh King, ¿Quieres ver a tu pequeña chica pulverizada hasta los huesos? -dijo tomandolo del cuello con una de sus ramas y apuntando hacia Diane-

Varias raíces apuntaron hacia la ubicación de Diane y de forma despiadada empezaron a golpear.

-Realmente lo siento querida hada -dijo Helbram-

Los ataques que había infligido sobre Diane habían sido absorbidos por una habilidad de su lanza espiritual.

-¿Acaso preferiste salvar la vida de esa gigante que a defenderte? -dijo lleno de rabia el hada-

King se levantó lentamente del piso y respondió: "Porqué le prometí que la cuidaria aunque eso acabe con mi vida"

Diane sintio ese aroma tan nostalgico, pero a la vez tranquilizante, sus ojos se abrieron lentamente, pero solo lo suficiente como para poder ver pero borroso, divisaba a dos figuras volando mientras peleaban, uno con una espada, y otro con una lanza "King.. tu siempre proteguiendome.." pensó dulcemente la chica, realmente ella no podía moverse, aunque su mente quisiera su cuerpo simplemente no reaccionaba.

La pelea terminó y King se acercó a ver como estaba ella, su cuerpo estaba totalmente lastimado y su ropa toda rota.

-¿Estas bien Diane? -pregunto preocupado su compañero de orden-

-Si, gracias King -respondio con una leve pero dulce sonrisa-

-Ya veo... -dijo el chico bajando la cabeza-

-Harlequin... -dijo suavemente Diane-

Los ojos de King se abrieron como platos y subió su mirada rápidamente para verla.

-Me suena un nombre muy nostálgico, pero por mas que pueda no puedo recordar quien es-

-No te esfuerces, descansa -sonrio King mientras fingia que no conocía ese nombre-

-Si... -dijo Diane cerrando sus ojos-

Diane se encontraba en una camilla junto a Merlín, ella estaba haciendo unos examenes a su compañera sobre su estado.

-Diane ya despertaste -dijo Merlín cuando vio que Diane abría sus ojos-

 -¿Porque... porque me siento tan pequeña?.. -respondio con los ojos entre cerrados-

-Deberas tomar una medicina que te mantiene en forma humana hasta que repare tu ropa -agrego Merlín

-Como digas Merlín -respondio levantándose de la camilla-

Diane salió del laboratorio de Merlín y vio hacia el cielo, el día estaba bellísimo, "la taberna" se hacia olvidado que trabaja en ella por un momento, seguramente estaría llena con el día que era, en el camino se cruzó con Elizabeth.

-¡Hola Eli! -dijo Diane-

-Hola Diane, veo que mejoraste -sonrio mientra respondía-

-Si ya me siento mejor por suerte -sonrio mientras miraba su cuerpo-