Cerveza IPA

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Cervezas IPA

Llegó a la esquina de siempre y lo vio esperando impaciente

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Llegó a la esquina de siempre y lo vio esperando impaciente. Cruzó la calle y levantó levemente una mano para saludarlo, sonrió tímidamente y comenzó a pedir perdón antes de llegar hasta él.

- Perdón, perdón- juntaba las manos y sonreía- te juro que no quería dejarte pagando acá media hora- agarró la mano del chico que comenzaba a acercarse a él y las apretó.

La vereda de la calle poco iluminada era un lugar tentador para darse un largo beso. Se saludaron apasionadamente, el joven que acaba de llegar le dio un fuerte abrazo y lo soltó levemente.

-Otra vez me hiciste esperar, Benicio- el tono era de reclamo pero contenía risa.

-Perdón, se me hizo re tarde y el bondi no venía más- respondió Benicio tomándole las manos nuevamente.

-Ya está, todo bien- unas pintas coloradas se encendieron en las mejillas del chico que esperaba, un leve calor subió por su cabeza y sentía el roce de sus manos unidas. Nada de todo eso podía estar mal, su cuerpo hablaba por sí solo y su cabeza se nublaba al punto de no saber qué más responder.

-Vamos a tomar unas birras, dejame invitarte la primera- propuso Benicio y le indicó con un dedo hacia la calle que recién había atravesado.

Caminaron de la mano durante tres cuadras, Benicio le contaba sobre la demora del colectivo y sobre el día agotador que había tenido.

-... y encima tuve que cargar la SUBE porque estaba en saldo negativo.

-Uff, bajón- respondió su compañero.

-¿Estás bien, Julián? Te noto algo colgado

Julián despertó de repente y se percató que no le estaba prestando atención. Se había distraído siguiendo la línea de vellos que formaban su barba y subían hasta encontrarse con pequeñas canas pasando las orejas. También observaba su boca, Benicio hablaba mucho y no dejaba de moverla y humedecerse los labios con la lengua, eso lo dejaba completamente sordo.

-Sí, sí, todo bien. Te estaba escuchando nada más- respondió improvisadamente e intentó desviar la mirada para no volver a su jueguito con la barba.

-Entonces justo en Congreso me agarró un embotellamiento y el bondi no avanzaba más- Benicio continuaba con su relato y cada tanto moderaba la tensión con que agarraba la mano de Julián.

Llegaron a la vereda de unos de los bares ubicados frente al cementerio de la Recoleta, entraron al lugar encarando a la barra y luego salieron con dos pintas de cerveza tirada y oscura. Tomaron asiento en una de las mesas y Benicio una vez más continuó su historia.

-Gracias por esperarme, odiaría si me hacen esperar así que te agradezco haberte quedado- Sus manos buscaron el vaso de vidrio frio para darle un largo sorbo y saborear el gusto de la cerveza que más adoraba.

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⏰ Poslední aktualizace: Dec 26, 2018 ⏰

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