30 Days Spideychelle

Día 27

—Exacto.—Dijo Michelle, con una sonrisa.

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Peter sonrió al ver a su esposa salir de la habitación de los dos con un vestido negro con detalles dorados apegado al cuerpo y su cabello, el cual se lo había alisado, lo tenia en una coleta baja.

—Señora Parker, no me cansaré de decirle lo hermosa que es.

—En serio, Peter. Tienes que dejar de llamarme así, o las primeras palabras de nuestros futuros hijos serán «señora Parker.»—Dijo de manera sarcástica, haciendo reír a Peter.

—De acuerdo, ¿estás lista para irnos, señorita Parker?

MJ aguantó una carcajada. Tomó su bolso junto con su chaqueta y salió del departamento junto con su esposo. Ambos bajaron por el ascensor, y estando afuera Peter ayudó a MJ a entrar al auto, puesto a que ella llevaba tacones y se le complicaba el caminar.

—Hey, ¿sabes algo?—dijo Peter, mientras que conducía.—¡Miles le pedirá matrimonio a Kamala!

—Pues le deseo suerte, a ver si Kamala le dice que sí en la primera.

—¡Oh! Y también, Gwen me dijo que ella y Cindy están pensando en adoptar.

—¿En serio?—Preguntó Michelle, sonriendo.—¡qué lindo, seremos tíos!

Peter sonrió. Tomó una de las manos de Michelle, y la besó.

•••

—¿Por qué me miras así?—Preguntó Michelle, sin despegar la vista del menú.

—Porque eres hermosa.

—¿Qué eso no es de Bajo la misma Estrella?—Preguntó, levantando la mirada y viendo a Peter, esbozando una sonrisa.

—Sí, es mi parte favorita de la película.

Michelle sonrió. Puso sus manos en su regazo, las apretó, tomó aire y suspiró

—¿Estás bien?—Preguntó Peter. Michelle solo hacia eso, cuando intentaba calmarse.

—Sí, estoy bien, solo...—Tomó su bolso, y sacó una pequeña caja de regalo roja con un listón azul.—no te he dado mi regalo...

—MJ, no tenías que...

—Cállate y ábrelo, Parker.

Peter rió. Retiró el listón y abrió la pequeña caja. Miro confundido el contenido adentro. Era una pequeña camisa con los colores y el diseño de su traje de Spider-Man, y en la camisa decía con letras negras «Spider-Baby».

—MJ, ¿qué...?

Casi se queda sin aliento al notar lo que había en el fondo de la caja. Peter tomó el pequeño aparato entre sus manos, sintiendo como las lágrimas llegaban a sus ojos. Era una prueba de embarazo. Estaba positivo.

—¡Sorpresa!—Chilló Michelle, quien también había empezado a llorar.—es la primera prueba que me hice. También me hice como otras seis solo para estar segura. Y para estar más segura, fui al doctor y me dijeron que...

—Oh, te amo tanto...—Dijo Peter, para luego levantarse e ir a abrazar a Michelle.—¡MJ, ESTE ES EL MEJOR REGALO DE CUMPLEAÑOS QUE ME HAN DADO!

—Peter, estamos en un restaurante...—Dijo entre risas.

—¡Es una mesa privada, nadie nos va a escuchar!—Dijo para luego besar a Michelle.—¿Ya sabes qué será? ¿O al menos cuántos serán?

—¡Tranquilo, tigre!—Dijo riendo.—¡apenas estoy en mi tercera semana, todavía no sé nada!

—¡Tendremos una pequeña arañita!—Chilló para luego volver a abrazar a Michelle.—¡Oh, los chicos van a enloquecer! ¡Ya me imagino a Tony llorando!

Michelle rió y Peter rápidamente sacó su teléfono y llamó a Tony a través de una videollamada.

—¿Qué pasa, Niño?—Preguntó y Michelle se asomó a ver. Como era una videollamada, en el fondo se podía ver a Natasha y a Thor.

—¡MJ ESTÁ EMBARAZADA!—Chilló Peter, y Tony casi deja caer el teléfono.—¡TONY, STEVE, SERÁN ABUELOS! ¡NAT, SERÁS TÍA!

—¡YA ERA HORA!—Gritó Tony desde el teléfono.

MJ rió mientras que negaba con la cabeza. No importa su edad, su esposo nunca cambiaría, y, ella tampoco quería que cambiara.