El Lado Oscuro de la Vida

Capitulo 34 "Mi pequeño héroe"

—Aun no puedo creer que nos haya tratado de esa forma —comienza hablar Lore aún molesta.

—Ni yo, pero si no nos quiere ver pues no le vamos a insistir —dice ahora Gaby.

—Chicas no podemos pensar así, tenemos que seguir con ella, nos necesita así no quiera aceptarlo, su situación no es nada fácil y es muy duro tener que cargar con ello, no debemos dejarla sola, independientemente de como nos haya tratado, su madre tiene razón se siente hostigada con el tratamiento —les digo y todas lo piensan para luego asentir más convencidas dándome la razón.

—Si, y aunque no debió tratarnos asi porque ningúna de nosotras tiene la culpa por lo que esta pasando, de igual manera somos sus amigas y estaremos al pendiente de ella, debemos tenerle paciencia —dice esta vez Gaby.

—Ademas si cualquiera de nosotras estuviera en su lugar también se sentiría de esa manera, no es fácil dejar que la vean a uno así y pensar que no tienen lastima, aunque ese no es el caso con Elena, nosotras no la vemos con lastima, solo que ella no lo quiere entender, pero igual debemos estar con ella como sus amigas que somos—Sara continúa y todas estamos de acuerdo, no dejaremos que se rinda.

Elena

Papá entra en la habitación, los resultados ya están listos.

—La quimioterapia ha funcionado, el tratamiento dio resultados, ha destruido la médula y ya se puede hacer el trasplante —Mariela y yo sonreímos, ella me abraza y papá también lo hace.

La parte difícil del tratamiento ha terminado y he resistido, lo hice por tí mamá, lo hice por tí y por mi pequeño hermano.

La vida siempre nos pondrá dificultades que debemos afrontar, pruebas que una vez superadas te hacen más fuerte y te dejan una gran satisfacción.

Después de una dura batalla, después de tanto sufrimiento, vienen los buenos resultados, ahora sólo me toca cruzar los dedos para que el trasplante también funcione y todo habrá terminado.

Voy acompañada de papá y Mariela, quién lleva a Andrew en sus brazos, hoy es el día que tanto espere, llegamos a la sala donde se llevará a cabo el trasplante, papá toma a Andrew y Mariela nos da la bendición a ambos y me da palabras de aliento ya que no le permiten la entrada a la sala.

Ya adentro y acostados Andrew y yo sobre unas camillas, la enfermera nos coloca una vía con un sedante, Andrew comienza a llorar, me siento mal al ser yo la razón por la cual lo están pinchando, pero lo que me reconforta es saber que el trasplante funcionará y luego más adelante seré yo quien de mi vida por el, siento mis párpados pesados en señal de que el sedante ya está haciendo efecto.

—Todo saldrá bien, yo estaré aquí —la voz de papá es lo último que escucho cuando mis ojos terminan por cerrarse.

...

Despierto y miro todo a mi alrededor, recuerdo que estoy en el hospital, intento levantarme ya que siento que mi vejiga va a explotar pero siento un dolor fuerte en el brazo, veo que todavía tengo la vía con una bolsa que contiene sangre la cual cuelga de un atril, siento un dolor en mi cabeza y náuseas pero se que esto es solo los efectos secundarios del trasplante, miro hacia los lados y Andrew no esta, además me doy cuenta que estoy en una habitación y no en la sala donde me encontraba antes de la anestesia, en ese momento entra papá a la habitación.

—Elena ¿Cómo te sientes? —

—Me duele el brazo y la cabeza —

—Bueno eso es normal, le diré a la enfermera que traiga un analgésico —

—¿Y Andrew donde está? ¿Cómo está?—

—El está bien, gracias a Dios todo salió como esperábamos, el esta con Mariela en otra habitación —me dice y siento un alivio, mi pequeño es muy fuerte.

—¿Cuanto tiempo estaré aquí? Ya quiero irme a casa —

—Acabas de despertar y debemos ver si tú organismo no ha rechazado el trasplante —dice, sale de la habitación y vuelvo a dormirme.

...

Cuando desperto veo a Mariela sentada en el borde de la cama, me mira y sonríe.

—¿Te sientes mejor? —

—Si, me duele el brazo pero no es nada, Mariela llévame a donde esta Andrew, quiero verlo —

—Esta dormido, pero creo que puedes verlo —Mariela me ayuda a colocarme en la silla de ruedas, primero me lleva al baño y luego nos dirigimos a la habitación donde se encuentra Andrew, entramos veo una pequeña cama y en ella yace mi pequeño hermano con el rostro sereno.

Solo observo y no puedo hacer otra cosa que darle gracias a Dios y a la vida por haberme dado a este angelito como hermano, mi salvador, papá me acerca ya que él se encuentra también aquí cuidando de Andrew, cuando estoy cerca de el comienzo a acariciarlo.

—Mi pequeño, te debo tanto que daré mi vida por tí, no permitiré que nadie te dañe, lo eres todo para mí, siempre estaré para ti, es una promesa de hermanos —

Mi pequeño héroe...

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(Lore en multimedia)

Gracias por leer personita,aunque seas un/@ lector fantasma

Igual se les quiere (aunque no se quienes son) pero bueenoo

Chau Chau 😘

Chanti 💕