Me sonrió a medias y yo me encogi de hombros. La tos seca de Pietro me hizo verle. Él señaló mi vestimenta y hasta ese entonces no me había dado cuenta que seguía en pijamas. Las cuales, eran bastante reveladoras a mi parecer.

Sonrojada  a más no poder a causa de la mirada de Pietro y la discreta miradita del castaño de otra dimensión. Les pedí que me esperasen en la cocina para ir a cambiarme.

Entre en silencio a mi cuarto. Y fui directo al armario en busca de algo de ropa.  No estaba de ánimos cómo para usar algo extravagante, así que saque

Comencé a desvestirme en la puerta del armario y cuando estaba en pantis y brasier, la voz ronca de Parker me hizo pegar un brinco.

-Bonita vista.-Me sonroje a más no poder, tomé la bata que tenía en mi closet y me la puse antes de girarme a verlo. Si bien ya me había visto desnuda varias... Muchas... Demasiadas veces, siempre tenia pena con él cuando no era en esa situación.

-¿C-Cu-Cuanto t-Tiem-tiempo tienes v-vien-dome?-Pregunté con la cara encendida acercándome a él con lentitud.

El castaño, que tenía cara de querer seguir durmiendo, río abrazandome por la cintura y apoyando su cabeza en mi vientre cuando estuve cerca.

-Lo necesario como para ver tu conjunto de panditas.-Rei junto a él. Aunque sabía que su risa era más forzada que la mía.-No lo hagas.-Pedí dejando de reír. Sabía lo que estaba haciendo y no me gustaba.

Él me miro con una mueca de desagrado. Alzando una ceja.

-No fingas que no pasó, Pete. Sabes que es peor si lo haces.-Le pedí. Poniéndome de rodillas para verlo a la cara. Él acaricio mi pómulo derecho con su mano, mientras cerraba los ojos que se habían comenzado a aguar.

-Lo sé, cariño. Lo sé... Pero es qué...-Comenzó diciendo con la voz cortada. Lo calle besandolo cortamente.-Por favor no me dejes tú también.-Pidio este tomando mi rostro con sus manos y dedicándome una mirada cristalina y de dolor. Cerré los ojos negando. Es horrible ver a una persona que es tan alegre y chistosa así, tan triste que su voz tiembla cuando habla, que sus ojos están rojos por tanto llanto amargo y que este tan roto por dentro que no entiendas cómo a alguien tan bueno y puro, le pueden pasar cosas tan terribles.

Peter es la representación humana de que la bondad y la alegría existen. Pero también de que la vida es dura y se necesita más que sólo bondad y alegría para poder sobrevivir a la tiranía del mundo exterior.

-Peter Benjamin Parker, sabes que eso es imposible, ¿sí?-Le dije con la voz cortada yo también, tomando sus manos y acariciandolas.-Pete, estoy aquí. Estoy aquí y no me voy a ir a ningún lado. ¡Te juró por Goose que el día en que me vaya de tu lado va a ser porque tú me lo pidas!-Desespere abriendo mis ojos y encontrándome con el castaño derramando lágrimas a diestra y siniestra.

-Eso nunca va a pasar.-Me respondió sorbiendo su nariz. Su voz salió ronca y bastante rota. Mis manos viajaron de las suyas a su cara, secando las lágrimas que salían.

-Entonces no me voy a ir nunca.-Le dije en un susurro con dulzura. El sonrió a medias. Me acerque para besarlo cortamente. Haciendo que él colocará sus manos en mi cintura y yo en su cuello.-Te amo, Peter. Eso no va a cambiar nunca, ¿entendiste?-Él asintió cerca de mis labios.

-Gracias por estar a mi lado a pesar de todo.-Sususrro antes de darme un beso corto. Yo me solté de su agarre y fui al baño a cambiarme.

Una vez lista, salí. Fui al armario una vez más y le saqué una muda de ropa. Se la puse en la cama y lo abrace.

One-shots (Peter Parker /Tom Holland)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora