"Quebrantados" [En Proceso]~(*MxM*)~

Capitulo 14; Impensable.

Una doncella se encontraba enjaulada apartada de una maga y un chico rebelde, los cuales son sus amigos más cercanos. Habían compartido y planeado algo para salir del lugar donde se encontraban hospedados, un infierno total, durante esos días no podían ni descansar por el miedo y hedor que los rodeaba; húmedo, un aroma a excremento y carne pasada, cadáveres degollados, hechos trizas y el único color que se percibía en mayor medida en la habitación... Ese rojo carmesí y casi cobrizo.

Dejaron transcurrir dos semanas, con tal de hacerlo con exactitud, pues el verdadero problema era que, una de sus amigas estaba siendo manipulada a través de un hechizo oscuro.

Pero por más que pensaron, la ojos rojos les era impredecible. El fétido olor del lugar se volvía más intenso por el pasar de los días, por alguna razón a ellos todavía no les ejecutaban, tan solo recibían maltratos severos, pero pronto podría ocurrir su ultimo respiro. Joude quería ejecutarlos...

El "maestro" se aproximo a los jóvenes enjaulados con mueca de repulsión en su ya pálido rostro...

— Hm... —Se escapo de sus labios aquel murmuro dudoso — Veo que ya están desesperados... Pero no dejare que se vayan... No con vida... —Jugueteó con ellos esbozando una sonrisa, sino se equivocaba al solo continuar sobre la marcha, tal vez llegarían al mayor enfrentamiento de todos... No aseguraría su victoria aún ni mucho menos, debido a sus acciones analizados a ojos de la sociedad seria el ser más detestable del reino, pero en su interior sabía con específico detalle lo que vendría... Y evidentemente no se rendiría en todos sus intentos.

— Maestro... —Mascullo con terror ante su superior la joven Judit, este solo volteo con una mirada engreída e ira en sus ojos verdes oliva — ¿Le parece si... Los ejecuto esta noche...? —Se sentía indefensa, desde esa tortura, su mentalidad y rudeza bajo considerablemente.

La mirada se guió al mejor amigo — Primero... Al pelos chinos —Sonrió coqueto, la pregunta anterior le parecía absurda por completo, normalmente los mataban sin aviso alguno.

Hizo caso a la petición de inmediato, intento sacar al joven de un solo tirón de brazo, más no percibió que la joven hechicera Karla se aferraría al rizado Gael, no permitiría que una amiga destruyera a su otro amigo por mero capricho de un loco, por desgracia, aquel esfuerzo resulto ir en vano, la ojizcarmesí consiguió liberar a Gael del agarre.

Judit arrastro a Gael por el suelo lleno de cadáveres, al principio trato de escapar, solo que olvido que dos de siete locos aseguraban la única entrada y salida, estos lo detuvieron sin siquiera parpadear y lo ataron con unas cadenas a la pared.

Sonrió confiado. — Creo que olvidas un par de detalles, Jou—fue irrumpido por un golpe seco en su mejilla izquierda. — Que soy masoquis—Otro golpe, esta vez este llego a su estomago.

Una risa invadió su boca. — No importa, al menos lo disfrutaras como un par más de asquerosos degenerados —Le replico sujetando el cabello del pálido con agresividad.

Unos puñetazos al rededor de su torso, cara, muslos y brazos no fue suficiente para saciar la ahora repulsiva mente de Judit, gustosa saco su daga para por fin acabar con el trabajo. Mientras tanto, Karla y Therese rogaban para lo dejara en paz, más sin embargo Joude hizo caso omiso. Aquel acto teatral debería terminar... Hasta que... Algo la detuvo de hacerlo, ese sentimiento de remordimiento apareció otra vez, floreciendo desde su helado corazón, en desorientación absoluta y guardia baja. Intento apartar el sentimiento y arrancarle la garganta con aquella afilada daga, pero seguía sin lograrlo ¡¿Que rayos le paso a ese impulso asesino, donde había quedado?! Intento incluso forzando su otra mano a terminar lo que había comenzado, no respondió, solo provoco que sus manos temblaran de forma exagerada, esto se reflejo en los ojos rojos de la chica, cosa que el pálido Gael pudo observar . — ¡Ya matalo! —Exigió El "Maestro".