Buscando Redimirme (Remilia x Oc)

Capítulo 1 "Nieve Roja"

Frustración

Quinto y penúltimo sentimiento. De mi Odio y Desesperanza nació mi frustración, el ver que no podía hacer nada me hacia sentir imponente, débil seria mejor palabra. ¿Que podría hacer yo? Un niño de 13 años contra esta enorme bestia. Pero por si no fuera poco lo que continuo me dejaría completamente devastado

Culpa

Ese fue el ultimo sentimiento que tuve, tal vez el ultimo sentimiento que alguna vez tendré. Me sentía culpable por la muerte de mi familia, quizás si hubiese llegado un poco mas rápido, podría haberles advertido de los Yokai que se acercaban por el bosque. Si tan solo no me hubiese entretenido hablando con la gente del pueblo esto quizás no hubiera pasado. Por que tuve que ser tan tonto

Una vez que mi mente se rompió, solo me quede viendo como la bestia seguía decorando los cuerpos, ahora estaba comiéndose el de mi madre. A un lado de la sala, casi como si del mismo destino se tratase. La luz de la luna ilumino, el kimono y hakama que mi hermana siempre utilazaba en su entrenamientos. Aunque no lo pareciese, este alguna vez fue un dojo en el que se practicaba el arte del kendo. Seguro que todos lo estudiantes ya deben estar muertos en sus casas o por los calles del pueblo, siendos comidos por las criaturas de la noche.

Mi cuerpo por si solo se levanto y camino hacia el armamento que quedaba intacto, a su lado habia una katana de madera destrozada, signos de que opusieron resistencia pero que al final fallaron en el intento.

Como recuerdo, agarre el kimono rojo de mi hermana y me lo puse por debajo de mi hakama negro. Habia una posibilidad, pero esa posibilidad era una apuesta muy arriesgada. Detrás del enorme Yokai estaba la katana que mi familia habia pasado de generación en generacion, supuestamente seria Saya la que la portaría. Pero visto lo visto, no me queda de otra.

Lo siguiente que recuerdo, creo que fue lo mas estúpido que habré hecho en mi vida. Agarre la katana de madera y la arroje al otro lado de la sala. Queria creer que la bestia no me habia detectado, que se acercaría a donde se habia producido el ruido y yo tomaría ventaja de ello. Mis ilusiones cayeron en picado cunado la bestia se volteo y me miro con sus enormes ojos rojos con pupila rasgada. Su boca bañada en sangre le daban un aspecto a un mas tétrico y como si de un artrópodo se tratase, comenzó a caminar en cuatro patas.

Pero recalco, mi cuerpo seguía moviendose incondicionalmente, y debía darle las gracias a dios por ello, por que cuando la bestia se abalanzo sobre mi, con sus dos garras a punto de cortarme en pedazos, logre escabullir me por debajo suyo. Pero lamentablemente una de ellas logro darme en la cabeza, provocando que cayera girando por el piso hasta golpear la pared. Un hilo de sangre cayo desde mi cabeza hasta la nariz y cerca del ojo hasta el mentón.

Lo curioso fue que no me dolió. Mi concentración paso a la katana de metal que estaba encima mio. Me levante rápidamente mientras el Yokai se daba la vuelta y continuaba con su ataque. Agarre el arma e inmediatamente me volteo para ver a la enorme criatura dándome otro zarpado que ahora si, destruyo la pared de la casa.

Ahora si dolía.

Me encontré con la cabeza boca abajo, mirando la nieve roja manchada por mi sangre. Queria gritar, pedir ayuda, pero sabia que nadie vendría. Creo que la katana logro amortiguar el daño, mi brazo derecho quedo completamente inutilizado, la sangre caía por ahí, las tres garras de la bestia seguro que dejaran una cicatriz.

Mire delante mio, la bestia seguía ahí, caminando hacia mi, a querer darme el golpe final supongo. Mi arma estaba a centimetros de mi, estoy seguro de que podría levantarme y agarrarla, el problema era de que no era zurdo. Y levantarla con la otro me produciría un ernome dolor. Y para empeorar las cosas, mi ojo derecho estaba empapado de la sangre que caía de mi cabeza, obstaculizando mi vista.