-¿Pensabas que me ibas a engañar?,- coño.
Casualmente como era mi casa sabía perfectamente donde estaba la luz, estire mi brazo derecho y empecé a tantear, hasta que me tope con el interruptor, la encendí y me encontré con Kilian mirándome intensamente, sus ojos resaltaban de tal manera ¿porque tenía que ser mi tío?. Puse mis manos en su pecho y lo empuje.
-No tengo porque darte explicaciones a ti,- camine hacia la puerta, pero él la trabó con la mano.
-O no señorita tu no vas a ningún lado, la cosa es que ¿si me metes en tus mentiras? mínimo debo saber.
-Quien dijo que mentí. Fui a la casa de una amiga, fin.
-Si claro, ahora tus amigas tiene barba y te subes encima de ellas,- jodido idiota.
-¿Me estaba espiando?,- sabía perfectamente que si.
-Claro que si. ¿Sabes lo que me costo mentirle a tu padre cuando se dio cuenta que llegue solo?
-Okey.
Salí de la habitación y me metí en la mi. Me tire sobre la cama ¿soy la única que piensa que hay tensión sexual?
Debía bañarme, estaba toda envuelta en el perfume y los líquidos de Ethan, wow que feo sonó eso pero era la verdad.
Conecte el estéreo y puse una de mis canciones favoritas Angie de los Rolling Stones. Me desvestí dejando mis cosas en el canasto de la ropa sucia. Abrí la canilla, el agua caliente empezó a brotar, me sumergí debajo de esta. Pensaba en Angie, la de la canción; ella era la esposa de David Bowie, casualmente leí que ellos tuvieron un amorío y las cosas se salieron de control, se fue, abandonando a su hijo, dejándolo con Bowie. Me pregunto que ¿paso con ellos? me refiero a David y a Mick Jagger aún así cuando cuento esta historia no me creen, o cuando dije que el guitarrista de The Who estaba enamorado locamente de Jagger y este lo descarto.
No se cuanto tiempo habré estado pensando pero el agua comenzaba a ponerse fría.
Me envolví en la toalla y me puse otra en el pelo, me puse un short y una remerita que se encontraban en el baño -mi pijama-, al salir de allí me encontré a Killian recostado, con los brazos debajo de la cabeza y moviendo los pies.
-Por lo menos tienes buen oído,- dijo volteando e instantáneamente apretó la mandíbula, me rebajo de arriba abajo, de pronto su mirada se oscureció, pareció algo sombrío y tenebroso, era fascinante,- Demonios. Vilma dice que ya está la cena.
A duras penas le entendí porque en cuanto lo dijo se fue casi corriendo. Bueno eso produzco en los hombres, pero él se encontraba bastante raro, o sea ustedes entenderán, cuando llegó era el chico tímido que era humillado y ahora es el que humilla. Caray en que me había metido. Bueno en realidad no me metí, al fin y al cabo es mi tío ¿no?.
Tomé mi teléfono y fui hacia el comedor para ver que basura había cocinado la bruja de Blanca Nieves. No era que cocinaba muy mal, era que todo lo que saliera de sus manos me repugnaba, apuesto que la comida de mamá era mil veces mejor que ese estiércol.
Al bajar ya sabrán que había. La familia feliz. Estaban comiendo lo que parece ser pollo con papas; seis ojos se posaron en mí, los mire extrañada pero en ningún momento deje de comer. Hasta que mi padre rompió el silencio.
-¿Como la pasaste de tu amiga?- caray.
-Bien, miramos unas películas,- él asintió con aprobación, pobre, si supiera que me estaban estampando contra un sillón no se lo creería.
Todos seguían mirando su plato y comiendo, solo que alguien que estaba sentado al frente mio no me quito un ojo de vista, lo mire con disimulo, negó con la cabeza y siguió comiendo.
Apenas terminó de comer me levanto y subo las escaleras, pero cuando iba por la mitad mi padre hablo.
-Si sales con tus amigos, como todos los viernes, quiero que lo lleves a Kilian,- ¿Y cómo explicar que la mandíbula me callo al suelo?, esto era el colmo, no podría tenerlo como un perro faldero para siempre.
-¿Acaso es mi guardaespaldas? No pienso llevarlo.
-Si lo harás.
-No, no lo haré.
-Si, porque sino tu tampoco iras,- ¡jodida madre! mi enojo no daba para más.
Pose mi mirada penetrante contra él, no pensaba actuar una mejor. Si lo odiaba queria que lo sintiera con todo el peso.
-Pues bien, kola. Tu conduces. Recuerda que eres el conductor resignado y no debes beber,- pero yo sí puedo.
Me esfume como si un mago hubiera tirado la bomba esa.
No se si debería de advertir el ambiente que me gusta, pero él debería atenerse a la consecuencias y si quería ir conmigo se la tiene que aguanta.
Decide una cosa Dios. ¿Porque a mi?
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Wabi Sabi
Teen FictionLa vida de Rudy no podia ser mas miserable. Ella vivía en la locura. Llegaba a su casa después de la escuela y no hacia mas que comer y drogarse. Era una chica desquiciada y rota. Se la agarraba con todo el mundo. Y nadie la entendía. No tenía...
Capítulo 4
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