El Cazador llegó donde Adeline y le dio el Fluido Cerebral.
'' -Ploc,Ploc,ploc-
¡Aah... ooh! ¡Lo oigo, sí! El sonido que me guía.
Gracias. Muchísimas gracias. Me has salvado.
Toma este amuleto . Me lo regaló Lady María –Estiró la mano mientras el Cazador recordó su objetivo principal con desasosiego- pero es todo lo que tengo, aparte de mi sangre.
-El Cazador tomó la Llave del Balcón- No me abandones, por favor... prometo hacer el bien...''
《0》: Dejame ver...
''Lady María, de la Torre del Reloj Astral, regaló esto a la paciente Adeline.
María esperaba que Adeline le reconfortase la leve brisa que transportaba el aroma de las flores del exterior, pero Adeline no podía imaginar las implicaciones de sus intenciones''.
El Cazador volvió en sí mismo y se dirigió a la puerta del balcón, cruzó el umbral y se dejó caer por el no tan alto muro para llegar a un patio con un olor a sandia.
Encontró en un tarro lleno de vidrío un poco de sangre rara, algo amarillento brillaba en su interior, lo envió al sueño para analizarlo detenidamente más tarde y continuó.
Habían más pacientes ahí, pero estos podían invocar hechizos arcanos, lo bueno es que si no les hacía nada, ellos tampoco. En el centro del jardín había una paciente muerta sentada en una silla y algo en su mano.
《0》: ''Ojo de Cielo Oscuro".
Ojo blando bendecido por un fantasma.
En las profundidades del ojo hay un enorme trozo de cielo oscuro que brama con una tormenta de meteoritos interminable. Con el más leve roce del minúsculo orbe, la roca saldrá disparada. ''
El Cazador usó una marca intrépida de cazador y despertó en la lámpara de las celdas, cerca de donde Ludwig.
¿Por qué lo hizo? Ni él mismo lo sabe.
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Una Noche Interminable
FantasyNo recuerdo quien me contó sobre una ciudad, privada del mundo, escondida entre la niebla, un lugar donde tenían la cura para cualquier enfermedad por muy mortal que fuese, con ella el cáncer parecía una simple tos. Mi estado de salud era mortal, po...
Lady María; la Hija de Gherman.
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