Sin dudarlo le di un abrazo suavemente, pues sabía que le gustaba que la abrace y mucho más cuando se sentía triste, yo le recordaba a su hija, yo le recordaba a Lorance.

---Ella siempre estará con usted, en cuanto nunca la olviden, ella nunca olvidará los recuerdos vividos en este lugar, ella siempre los guardará en su memoria. ---Dije mientras la abrazaba y pegaba mi cabeza en su pecho.

---Gracias pequeña, tu haces que los recuerdos de mi hija se vuelvan más especiales, eres igual a ella, me alegra que estés acompañandome.

---Gracias a usted señorita Ilein.
Usted a sido muy buena conmigo y siempre estaré dispuesta a ayudarle en lo que sea, estoy muy agradecida con usted.

Luego de eso, ella me abrazo y seguimos preparando la comida, contándonos más sobre nosotras, la señorita Ilein se sentía más alegre que antes, y eso me alegraba a mi de igual manera.

Cuando acabamos pasamos a servir el almuerzo y a comer mientras hablábamos varias cosas. Después de acabar la comida pasamos a limpiar todo y a dejarlo en su lugar, limpio y ordenado como siempre.

Cuando estaba a punto de salir de la cocina hacia la sala, la señorita Ilein me llamó, y yo me voltie hacia ella, del bolsillo de su delantal sacó una pequeña foto, y me la entregó, diciéndome que ella era su hija, era tal y como ella me la describió, tan linda, con pelo rizado y alborotado, ojos color avellana y su piel blanca como papel llena de pecas café. Luego me dijo que me la podía quedar y sin más decidi subir a la habitación.

Al estar en la habitación dejé la foto en la mesita de noche que estaba a un lado de la cama y luego me recosté sobre el colchón suave y tan fresco, cubierto por sábanas blancas, luego comencé a pensar mientras miraba por la ventana, el cielo estaba tan azul con muchas nubes en él, varios pájaros volaban y cantaban su sereno canto, y una brisa fresca entraba con gran serenidad por la ventana abierta. Decidí levantarme y sentarme en la ventana a observar el bosque que quedaba cerca de ahí, todo era muy hermoso, el gran verdor del césped y las hojas, el azul del gran cielo y los rayos de luz que cruzaban por las nubes, todo era magnífico, espléndido y vigoroso.

De pronto, en una parte del bosque, en la sombra de dos árboles grandes, pude observar una silueta plantada, era algo pequeña, no se veía bien, pues estaba algo lejos, ¿era alguien? ¿era algo?, no lose pero me estaba mirando, ya lose que escalofriante, me miraba fijamente pero no pude distinguir su figura por la sombra de todos los árboles que lo rodeaban, en un instante vi que se movió y desapareció bajo las hojas de los árboles.

¿Qué fue eso?¿quién era?¿qué era? Sólo vi una silueta parada bajo un árbol, mirándome fijamente, y fue algo aterrador.

En ese momento comencé a debatir conmigo misma sobre si ir a investigar o quedarme y pensar, pero como yo era muy curiosa y poco miedosa decidí ir a observar.

Volví a bajar las escaleras intentando no hacer ruido alguno, logre cruzar la sala y llegar hasta el pasillo que daba a la puerta principal, pero una voz me hizo dar un pequeño brinco.

---¿Lori? ¿Eres tu?

La voz era de la señorita Ilein y venía desde la cocina.

---Asies señorita Ilein, iba a salir a contemplar el paisaje en este bello día, ¿Puedo?.

---Claro pequeña, ve y diviértete pero regresa antes de que obscuresca, suele ser peligroso de noche, hay muchos animales por aquí.

---Esta bien, tendré mucho cuidado. ---dije dedicándole una sonrisa a la señorita Ilein, mientras giraba la perilla de la puerta para salir.

Una vez fuera de la casa me dirigí a pasó rápido hacia el bosque, justo donde vi la silueta observandome, pero al llegar un escalofrío recorrió mi cuerpo, como si echaran cubitos de hielo por mi espalda, como si un viento helado abrazara mi cuerpo. Me quedé congelada por unos instantes frente a aquel árbol donde vi la silueta, pero de pronto volví a mi, y me adentre en el bosque, caminado de forma tranquila y lenta.

Una vez en el bosque comencé a observar hacia todos los lados, intentando encontrar algo, pero lo único que vi fueron: ardillas y unos cuantos conejos.

Cuando estaba a punto de salir y dirigirme hacia la casa, tuve la impresión de que alguien, ¿quién?, me observaba, me detuve un momento porque me sentí un poco asustada, y después de un rato decidí buscar al individuo que me miraba, durante unos segundos, minutos, todo quedó en total silencio, ni los grillos, ni las aves, ni el viento rompía tal espesa barrera, tan callada, tan perturbadora.

De pronto, la sensación de sentirme observada fue más grande, sentía como si se acercaba hacia mi, como si cada vez estaba un paso más cerca. De un brusco movimiento me moví, de un lado a otro, buscando y buscando, pero ¿que?, que es lo que buscaba, no tenía idea alguna. Sólo tenía por propósito encontrar a quien me hacia sentir incómoda con su mirada, hasta que al fin lo encontré.

Detrás de un árbol, había una persona asomando solo la mitad de su cuerpo, era una niña, una niña de mi edad, estaba asomada mostrando solo su hombro y el brazo con el que se sostenía de aquel árbol, un árbol con muchas raíces, enormes y curvadas, rodeado de muchas flores blancas, y mucho césped de color verde Claro.

Mientras miraba el encantador lugar, no me di cuenta, que aquella niña ya no estaba. Me acerqué para ver si acaso estaba detrás del enorme árbol, mientras me acercaba, sentía menos miedo, al llegar detrás del árbol, no había nada, nada ni nadie. Eso me asusto un poco nuevamente, por lo que decidí salir de ahí. Mientras caminaba el silencio iba desapareciendo poco a poco.

Estaba tan cerca de salir del bosque, cuando de pronto aquella sensación volvió otra vez, mis pasos se volvían más pesados, y mi respiración agitada, volví a mirar hacia los lados, pero no veía nada. Me detuve un momento para observar con más cautela, pero por más que intente no logre mirar nada, pero de pronto.

---Lori

Mi cuerpo se congeló por completo, quedé paralizada, estupefacta con tal escena. Me habían llamado por mi nombre, estando sola en el bosque, era un susurro frío y suave a la vez, uno que me estremeció por completo, sentí un escalofrío recorrer cada parte de mi cuerpo, cada parte de mi ser.

Dejando mi miedo a un lado decidí voltearme y encarar lo que sea que me llamó, y fue entonces que la vi, mis ojos se abrieron como platos, mi boca se entreabrio un poco y dejó salir un pequeño suspiro, no lo podía creer.

Acaso... ¿era ella?¿cómo puede ser posible?¿en verdad esta aquí?¿frente a mis ojos?.

Tal y como estaba en aquella foto.

---Lorance...

○○○


¡Bueno aquí Angus de nuevo!
¿Que tal?
¿todo bien?
¿todo correcto?
Jejeje Y yo que me alegro

Primero, lamento la tardanza, pues estuve muy ocupado, bueno eso ya lo saben jeje
Espero que este capítulo les esté gustando, pues se vienen más sorpresas para Lori, algo que nunca vivió y nunca pensó vivirlo.

Bueno nada más jeje no doy spoilers XD
Nos vemos amigos. :)

Salu2
AngusAsies. 👋



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