30 Días Para Enamorarla [SooShu]

Capítulo Veinticinco

—Hemos llegado.

La puerta se abrió y respiré hondo mientras bajaba después de Yuqi, justo como habíamos acordado.

Caminé por la alfombra sintiendo una cantidad excesiva de miradas sobre mí, pero trataba de no inmutarme y permanecer lo más seria posible. Me dejé fotografiar unas cuantas veces ofreciendo a cada cámara una media sonrisa, hasta que la mano de Miyeon me adviertió de la presencia de un micrófono a mi lado.

—No lo olvides, no te pongas nerviosa. —Escuché a Tzuyu detrás de mí.

A mi lado solo quedó Yuqi, las demás se alejaron de nosotras. La mirada de la periodista iba dirigida a mí, al parecer ya me reconocía de sobra.

—Es un placer tenerte en nuestro programa. —Dijo la periodista llamada Chaeyoung, mirándome de arriba a abajo —Te ves fabulosa. —Su vista fue a la cámara —Por si no saben quién es, ella es la misteriosa persona de la que se ha estado hablando últimamente. —Sonrió —¿Quieres revelar tú misma tu identidad al público?

Reí. —Eso sería lo justo. —Miré a Yuqi, que solo asintió —Soy Shuhua Wintour, la sobrina de Anna Wintour.

—¿La siguiente heredera de Oh Boy!? —Preguntó la chica.

—No lo creo, la única jefa ahí es mi tía. Yo solo me encargo de alguna que otra cosa, no quiero robarle el puesto.

—En cualquier caso tienes un gran futuro, tu tía lleva adelante una de las revistas más famosas del mundo.

Después de algunas preguntas sobre el evento, sobre cómo me sentía al estar frente a tanto público por primera vez y sobre mi "tía", la entrevista siguió con aquel par de R.V, quienes me provocaron mucha ternura haciendo que mis nervios se alejaran notoriamente.

Ahora me tocaba la última entrevista, me hallaba en medio de aquellas dos de Capital JD. A diferencia de las anteriores, estas también centraban su atención en Yuqi haciendo que no se siguiera sintiendo incómoda, estar parada y en silencio todo el tiempo frente a las cámaras no debía ser fácil ni para alguien tan experimentada como ella.

—Y dinos, ¿de qué diseñador es tu vestido? —Me preguntó Jihyo.

—Valentino Garavani. —Afirmé.

—No sé si estoy equivocada, pero ustedes se conocen, ¿no? —Preguntó la otra chica, si no recordaba mal llamada Dahyun.

—Por supuesto, ella es amiga de mi mejor amiga. —Me guiñó —Son muy buenas amigas.

—Amiga de Seo Soojin, ¿debo suponer? Eso sí que es una sorpresa, seguro que ninguno de los televidentes tenía idea, ya que ella no comentó nada al respecto. —Comentó ahora Jihyo.

—Tuvimos que mantenerlo en secreto, ya que por el momento yo no podía aparecer en los medios.

—¿Y eso por qué?

—Para tener una buena primera presentación, ¿no es obvio? —Dahyun miró a la cámara —Y esto ha sido todo con Shuhua Wintour, ahora la dejaremos tranquila, debemos entrevistar a más gente. —Me miró —Disfruta del espectáculo, Soojin cantará hoy.

—Entonces sin duda lo disfrutaré. —Respondí con una sonrisa.

Todo el show había terminado, y eso significaba que por lo menos las cámaras no me enfocarían más, o al menos eso esperaba.

Me encantó la presentación de Soojin, me quedé embobada de tal manera que cualquiera podría haberse percatado de mis sentimientos. Aún no habíamos tenido la oportunidad de vernos y mucho menos de hablarnos, pero de seguro Dahyun y Jihyo ya la habrían interrogado sobre mí y nuestra "amistad".

Saliendo del lugar sentí todos los flashes de las cámaras en mí, y con un poco de dificultad avancé hasta llegar a la camioneta y entré. Una vez dentro quedé paralizada al verla, la puerta se cerró tras de mí y noté a las chicas despidiéndose con un movimiento de manos exagerado, al parecer ellas sabían de esto, y seguramente eran las culpables.

—¡Al fin! —Soojin me abrazó mientras que el vehículo se ponía en marcha, suponía que en dirección al hotel.

—Soojin... Creí que te quedarías en la fiesta de después de las presentaciones.

—¿No querías verme? —Se separó de mí, haciendo un puchero.

Adorable.

—Hey, ni en broma digas eso. Solo pensé que no podríamos vernos hoy, ya sabes, por eso de que tu novio te acompañaría. Hablando de él, ¿dónde está?

—Supongo que en la fiesta. —Me acomodé en el asiento, acercándome más a ella —¿Y qué tal? ¿Te gustó tener todas la miradas sobre ti?

—Para nada, ha sido bastante incómodo. —La miré —¿Sabes? Estuviste genial en el escenario.

—Gracias, te busqué con la mirada, pero no conseguí encontrarte. —Rió —Al menos las chicas de Capital JD me confirmaron tu presencia.

—Ya sabías que iba a venir. —Sonreí —Aunque realmente tenía asimilado que hoy no podríamos hablar, me alegro de que no haya sido así.

—Ya... —Mostró una tímida sonrisa —A decir verdad, te extrañé. —Confesó colocando una mano sobre mi mejilla —Me siento rara con todo esto que siento cuando estamos juntas.

—Yo también te extrañé. —Cerré los ojos ante la agradable sensación de sus caricias —Y también me siento extraña. —Respondí sinceramente, justo antes de notar sus cálidos labios sobre los míos y respondiendo a aquel beso.

—Bien... —Suspiró separándose unos centímetros —Entonces pasaremos la noche juntas para olvidar estos dos terribles y aburridos días que hemos pasado sin vernos. —Mi garganta se secó de repente, los nervios volvieron otra vez y mi cuerpo parecía congelado.

¿Qué quiere decir exactamente con "Pasar la noche juntas"?

No creo que se refiera a nada sexual... ¿O sí?

—¿Qu-

—Estás pálida, ¿estás bien? ¿Pasa algo?

—¿A qué te refieres con pasar la noche juntas?

—Podríamos ver alguna película acompañada de palomitas, o jugar algún juego de cartas, ¡soy imbatible al pocker! O- —Al parecer se percató de la pesadez del ambiente, pues me miró confundida —¿Acaso creías que yo...? ¿Que tú...? ¿Y-Yo...?—Balbuceó nerviosa y con el rostro completamente rojo —¡N-Nada de eso! Yo... —Agachó la cabeza y sonrió tímidamente —Me gusta estar contigo, reír contigo, y desde luego adoro dormir a tu lado... No iba con segundas intenciones, no esta vez... —Rió.

Genial, Shuhua, has quedado como una pervertida.

Eh, ¿"esta vez"? ¿Cómo?

—Lo siento, soy idiota. —Me aparté un poco —Pero no creo que podamos divertirnos, las asistentes y Minnie creen que estaré en el hotel, y así debe ser.

—Creí que eras la jefa.

—Lo soy. —Afirmé.

—¿Entonces? Que desaparezcas un rato no tendrá importancia, solo serán unas horas... ¿Por favor? —De nuevo hizo aquel adorable puchero y me miró con suplica, era demasiado tierna.

—Bien, bien... No creí que fueras tan rebelde.

—Aún no me conoces bien. —Apegó nuestros rostros nuevamente —Esta noche nos conoceremos como nadie, antes de que tome una decisión.

—¿Qué decisión?

—Lo sabrás al final de la noche, ahora iremos a mi casa. —Contestó antes de iniciar otro beso.

Soojin parecía diferente, no en el mal sentido, sino todo lo contrario, como si estuviera feliz consigo misma. Sus ojos mostraban un brillo sincero e irradiaban tanto seguridad como tranquilidad.

Cortó nuestro beso y al segundo me abrazó más fuerte que nunca, haciéndome sentir un cosquilleo. Sin duda esta chica me estaba volviendo loca.

¿Qué es lo que tienes planeado, Seo?