"Seelie, ¡mira lo que encontré!" un pequeño niño de sedoso cabellos amarillos cenizos se acercó a la pequeña niña de grandes ojos dorados y largo cabello blanco platinado, "Mira, ¿no es hermosa?" una pequeña gema dorada descansaba en las pequeñas palmas del niño de cabellos amarillos.
"Wow, que bonita es." Exclamo la niña de ojos dorados asombrada y fascinada por el brillante color dorado que salía de la pequeña gema.
"Si, es tan hermosa como tus ojos, Seelie." Recalco el niño, con una sonrisa cálida extendiéndose en su pequeña boca.
"¿Mis ojos?" pregunto la niña confundida, mirando sin entendimiento al niño de ojos plateados.
"Si, como tus ojos, que son tan dorados como esta gema." Respondió el niño convencido.
La niña de ojos dorados sonreía alegremente.
"Entonces, tus ojos son tan fascinantes como la luna." Dijo de improvisto la niña, provocando un pequeño rubor en las mejillas del niño.
Ambos niños se tomaron de la mano, retomando su camino a la gran casa que se encontraba en una colina cerca de la costa del océano en donde ellos se encontraban.
"Seelie, ¿estarás conmigo para siempre?" le pregunto el niño, sonrojándose hasta las orejas.
La niña lo miro sonriente, mirando al niño con cariño.
"Pues claro. Después de todo, tu eres mi pareja destinada." Contesto la niña con obviedad, tranquilizando al agitado corazón del pequeño niño, que esperaba con impaciencia crecer solo para volver a esa niña suya.
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El recuerdo de un destino olvidado ©
Teen FictionSeelie Morgana no solo es hermosa, inteligente y de carácter fuerte, sino también una persona con la habilidad de predecir el destino de los demás con tan solo ver. Su vida se vuelve trágica después de perder a su primer amor. Escapando de la culpa...
