Jimin despertó al otro día por el sonido de los pajaritos cantando en el balcón de su habitación.
Hoy había amanecido con muchas ganas de ver a Jungkook.
El lobo en su interior estaba deseoso por ver como se encuentra y si ya está mejor del celo.
Se incorporó en la cama, cubrió sus pies descalzos con las pantuflas mientras toma el móvil que esta en la mesita de noche y bajó para poder desayunar.
Caminó hasta el comedor entre bostezos aburridos y pequeños quejidos.
Miró a sus padres hablando muy alegres entre ellos, tienen las manos unidas y sonrisas complices en el rostro.
-Buenos días.
Tomó asiento dándole un mordisco a una tostada con mermelada de mora mirando como su madre le sirve jugo.
-Buenos días cariño.
Recibió el vaso agradeciendo en el proceso.
Hoy se siente muy tranquilo. Bueno su parte humana por que Mimi esta ansioso por ver a Jeon.
En cuánto vio la comida el apetito se le fue de repente. Suspiró cansado y volvió a mirar como sus progenitores están muy acaramelados.
Decidió salir al patio de la gran mansión mientras camina por el extenso jardín.
Sacó su teléfono para fotografíar las hermosas flores coloridas.
Cada vez que los trabajadores lo miraban suspiran como si estuviesen viendo a un ángel pero Park no parecía darse cuenta de eso.
Su teléfono vibró en las manos asustándolo en el proceso, juntó ambas cejas y leyó rápidamente el texto.
Poco a poco una sonrisa se fue formando en su rostro.
Corrió por todo el jardín deslumbrado el lugar con su increíble aura.
Los jardineros detuvieron su trabajo simplemente para observar al precioso omega joven que corre en dirección al interior de la mansión.
-Es increíble su belleza. No puedo describir lo fascinante que es mirarlo. Va más allá de simplemente llamarle ángel.
La señora que cortaba las espinas de algunas rosas miró los ojos soñadores de su hijo.
Sonrió de medio lado para seguir con su trabajo.
-El joven Park es una cosa de otro mundo.
Jimin subió las escaleras siendo observado por sus padres. Ambos se miraron entre ellos un poco confundidos.
Lo primero que hizo al llegar a su habitación fue bañarse como un rayo y correr hasta el armario mirando toda su ropa.
De repente pareciera como que si todas las prendas fueran horribles y no tuviera ropa aunque el armario este lleno.
-Solo es trabajo... Hoseok hyung dijo que vamos a trabajar mientras Jungkook descansa.
Tomó el pantalón de cuadros amarillos y negros junto con una camisa negra para ir en busca de sus zapatos.
Una vez listo se dio una mirada en el espejo. Alborota un poco más su cabello castaño dándole un aura tierna y juvenil.
Se dio varias palmaditas en las mejillas para que tomen color y salió. Corrió hasta la sala mirando a sus padres.
-¿Saldrás?
Su madre lo miró un poco curiosa por saber a donde va. Es notable que se encuentra feliz sus feromonas de felicidad están impregnadas por toda la casa.
-Sí, solo son cosas de trabajo.
-¿Trabajo? ¿No querrás decir Jeon Jungkook?
El señor Park le dio una mirada sugerente esperando alguna respuesta de confirmación. ¿Por qué otra cosa su hijo estaría feliz? Taehyung aún no regresaba de su viaje.
Las mejillas del menor tomaron color. Le dio una mala mirada y negó con su cabeza.
-Me llevaré el auto. No se si regresaré pero no me esperen. Adiós.
Observaron como el omega se marchó hasta cerrar la puerta.
-Espero que si pase la noche con Jungkook.
La señora Park le dio un sorbo a su té mientras desvía la mirada hasta el rostro de su esposo.
-Es obvio. No te preocupes, sabes que Jungkook lo va a cuidar bien.
El omega subió al auto y arrancó con cuidado. Manejar le da un poco de temor por que no tiene mucha experiencia. Su padre le enseñó hace apenas un año pero como tienen chófer ha olvidado un poco algunas cosas pero aún puede manejar. Como tortuga pero puede.
Detuvo su auto frente a la gran mansión de Jeon viendo a un guarda de seguridad acercarse a él.
-Buenos días. ¿A que se debe su visita?
Park buscó en su cartera el carnet de trabajo que Jungkook le había entregado el primer día.
-Soy Park Jimin. Vengo a realizar un trabajo con Hoseok.
Le entregó el carnet mirando expectante al hombre.
-Deme un momento. Le consultaré al señor Jeon.
Asintió y observó como ingresa a una casetilla tomando un teléfono.
¿Por que se siente tan nervioso? Las mariposas revolotean en su estómago y siente las mejillas calientes. El lobo en su interior está muy ansioso.
Volvió a su lado con una sonrisa amable y le entregó el carnet.
-Puede pasar. El señor Jung me confirmó su visita.
El gran portón frente a él se abrió dándole paso. Aceleró hasta el interior de la mansión y detuvo su auto frente la puerta en donde otro chico le espera.
Bajó para luego entregarle las llaves de su auto.
Tomó una bocana de aire ante los nervios que siente y tocó la puerta con suavidad.
Esperó unos minutos hasta que una empleada lo recibió.
-Buenos días. Pase.
Le sonrió e hizo una reverencia entrando con timidez al lugar. Se encontró con el alfa Jung en la sala, enseguida se acercó a él con una gran sonrisa plasmada en su rostro y la emoción invadiendo todo su cuerpo.
-¡Buenos días Hoseok hyung!
Hizo una gran reverencia en cuanto lo saludó provocando un sonrojo en el mayor ante tanta formalidad. Realmente lo que le averguenza es que el omega es tan expresivo y se nota lo mucho que lo admira.
-Aigo Jimin, no hagas eso. Buenos días, ¿cómo estás?
El menor se incorporó sin borrar su sonrisa.
-Estoy muy bien y ¿usted?
-Ah, un poco mejor. Ven.
Jimin se acercó a él tomando asiento en el sofá. Frente a ellos hay una mesita de vidrio donde se encuentran varios documentos y dos laptops.
-Oh hyung, traje mi bolso con todo el trabajo que realicé esta semana. ¿Alguien podría traerlo?
-Sip. ¡Helena!
Una chica joven se acercó a Hoseok esperando a que le diera ordenes.
-Trae el bolso del joven Park.... ¿Dónde está Jimin?
-En mi auto.
La empleada asintió para disponerse a realizar la tarea que le asignaron. Hoseok y Jimin se enfrascaron en una profunda conversación donde detallaban todo lo que hicieron en este tiempo de investigación, incluso el omega le enseñó algunas de las coreografías que tenía en mente y a Jung le encantaron.
-Podríamos agregar un poco de música clásica para darle más diversidad de géneros musicales al juego.
El alfa asintió mientras anota las ideas que van surgiendo entre ellos.
-Jungkook incluso dijo que le gustaría agregar coreografías "normales" para que personas sin discapacidades también puedan jugar.
-Me parece bien. Será más fácil para nosotros.
Hoseok asintió. Minutos después la empleada le entregó sus pertenencias al omega quien agradeció en el proceso.
Estuvieron trabajando durante toda la mañana y resto de la tarde. Jamás imaginaron que fueran avanzar tanto hasta el punto en el cuál solo les hizo falta acordar el día para escoger a los bailarines que se harían cargo de grabar las coreografías para el juego.
Park se sentía mas que exhausto, jamás imaginó trabajar tanto y sintió que sus hombros dolían cuando el sol se escondió dándole paso a la noche. Se removió en el sofá tronando su cuello en el proceso.
Hoseok se había ido hace unos minutos diciendo que necesitaba ir al baño. Se entretuvo tanto con el alfa y en el trabajo que no pensó en donde estaba metido Jungkook.
El pelinegro ni se asomó para saludar, ¿realmente se encuentra bien? La inquietud se instaló en su corazón. Se mordió fuertemente el labio inferior y acarició sus manos en un gesto de nerviosismo. Huele un poco el aire buscando el aroma a pino y naranja pero solo puede percibir el olor de los productos de limpieza.
-¿Quieres ver a Jungkook?
Se asustó hasta tal punto en el cual ahogó un grito y llevó ambas manos hasta su pecho.
-¡Hyung! No me asuste de esa manera.
-Lo siento..
Intentó calmarse unos minutos después tomando profundas respiraciones. Llevó toda su atención hasta el mayor con un poco de curiosidad.
-¿Puedo verlo?
-Claro, él ha estado todo el día trabajando en su oficina. Puedes subir.
Mimi se emocionó demasiado provocando que el aroma de Park se volviera más dulce y eso no pasó desapercibido por el alfa que solo se limitó a sonreír para luego recoger los papeles que estuvieron utilizando antes.
Jimin subió las escaleras un poco rápido hasta que se encontró con aquel extenso pasillo. Inhaló profundamente percibiendo un poco el aroma del alfa pelinegro. Siguió caminando hasta que escuchó esa voz suave y grave al otro lado de una puerta, se acercó con velocidad sintiéndose emocionado y ansioso. Tocó dos veces hasta que recibió respuesta.
-¡Adelante!
En cuanto puso un pie dentro de la habitación cerró los ojos de forma instantánea al ser embriagado por ese olor a naranja y pino. Su cuerpo se relajó en cuestión de segundos, camina mientras va abriendo sus ojos con suavidad encontrándose con el rostro de su alfa.
No dudó en correr hasta él y aferrarse a su torso. La piel suave del pecho contrario chocó contra su mejilla en un roce agradable que hizo a sus corazones latir fuerte.
Jeon le tomó la cintura con un brazo mientras inhala el olor dulce de su chico.
-Te llamó luego hyung.
Colgó la llamada y dejó el teléfono a un lado para concentrarse solo en el omega.
-Hola bebé..
-Hola Kookie..
Se alejó lo suficiente para verlo a los ojos, enseguida recibió mimos en sus mejillas como un gatito pequeño y suspiró más que feliz.
-¿Te sientes mejor?
Tomó la mano del alfa entre la suya y plantó un suave besó en su palma provocándole miles de sensaciones en su interior. Jungkook ni tan siquiera le respondió, se acercó hasta su rostro y lo besó rozando sus labios con suavidad. No pasó a más que ese simple roce.
Creó un camino de besos por todo el rostro del menor pasando por sus mejillas y la nariz arrancándole suaves risas.
-Mucho mejor.
Dejó libre al omega para volver a su escritorio y seguir con el trabajo.
El castaño hizo un puchero ante la falta de mimos y tomó asiento en el regazo del mayor como un niño pequeño. Sus piernas descansaron hacía el costado derecho de Jeon y apoyó todo su cuerpo contra el del mayor.
El alfa lo miró con sus característicos ojos oscuros y brillantes mientras lo sostiene de la cadera con un brazo. Soltó un fuerte suspiro negando con una pequeña sonrisa.
-¿Por qué estás tan cariñoso?
-¿No puedo darle amor a mi alfa?
Alzó su pequeña mano para acariciarle el cabello con cariño mientras siente sus mejillas hirviendo. Terminó por recostar su cabeza sobre el hombro contrario e hizo pequeños circulos imaginarios sobre el pecho fuerte mientras cierra los ojos. Se siente tan seguro aquí, podría pasar horas disfrutando de esta calidez y ese olor tan agradable que desprende el alfa.
-Claro que puedes.
Jungkook sonrió para seguir con el trabajo. Hace unos minutos se sentía un poco solitario, no es como que si no estuviese acostumbrado ya que pasó muchos años en soledad pero tener a Jimin entre sus brazos le hizo pensar que tener algo de compañía no era tan malo como pensaba.
Tantos años en los cuales alejó a las personas de su alrededor para mantenerlas seguras lo cegó hasta el punto en el cual no quería tener contacto con nadie, ni tan siquiera Hoseok y los padres de su omega. Pero ahora tener a este pequeño junto a él a cambiado ese pensamiento.
No sabe como hizo todos estos años para sobrevivir ante esa soledad que lo embargaba todos los días, ahora Jimin siempre está a su alrededor y en todas partes. Aunque han pasado solo algunos meses él ya le ha cambiado la vida por completo.
Pero no sabe si eso es algo beneficioso o malo. El miedo aún sigue en su corazón y ese instinto de estar alerta cada día incrementa más.
-Estoy cansado, ¿podemos dormir en tu habitación?
La voz adormilada del omega lo sacó de sus pensamientos. Intentó mirarlo pero la posición en la cual están se lo dificultó.
-No puedo dormir aún debo terminar este trabajo pendiente pero puedo acompañarte hasta que te quedes dormido.
Park asintió estando de acuerdo. No tuvo que decir nada para que el alfa lo alzara como una princesa y lo llevara hasta la habitación.
Sonrió en medio camino mientras mira el hermoso rostro de Jungkook. Aunque es mucho más mayor que él se sigue viendo joven y guapo. Su cuerpo fue dejado sobre la cama pero él se incorporó.
-¿Necesitas una pijama?
-Por favor.
Fregó sus ojos con ambas manos y bostezó. Jeon le entregó una de esas batas que suele usar siempre incluso ahora tiene una de color vino que deja ver parte de su pecho.
-Gracias.
Caminó hasta el baño quitando toda su ropa hasta quedar simplemente con su braga de encaje negro. Se colocó la bata pero en cuanto deslizó la prenda por su cuerpo se acercó hasta el espejo frente a él juntando ambas cejas.
Hizo un nudo para que la bata se sostenga mejor y salió del baño restándole importancia a que la tela es un poco transparente. Si Jungkook quiere ver un espectáculo él se lo daría.
Jeon fregó su rostro con ambas manos mientras busca unos papeles en uno de los escritorios. Se acercó a la puerta que da con el balcón y la aseguró bien. Luego deslizó las cortinas blancas hasta cubrir todo.
Se dio la vuelta observando como el omega sale del baño. Pudo observar a través de la tela negra y transparente sus pezones rosas y la braga que se amolda a su trasero. Detalló cada curva que puede lograr ver, jamás pensó que un hombre podría ser tan hermoso y delicado así como lo es Jimin.
Él es un frasco pequeño pero poderoso y eso es lo que más le gusta. Cuando el menor se deslizó debajo de las cobijas tomó asiento a la orilla de la cama mirándolo con adoración.
-Eres muy hermoso.
Inmediatamente sus mejillas se calentaron. Tragó grueso y desvió su mirada hasta otro lado.
-¿Te gustó lo que veías?
-Por supuesto.
El castaño abrió su boca sorprendido y volvió a mirarlo esta vez con el sonrojo hasta las orejas.
-¡Señor Jeon eres un descarado!
Jungkook sonrió mostrando sus dientes y se inclinó un poco para juntar sus labios. En cuanto el contacto llegó al omega cerró los ojos dejándose llevar por sus deseos.
Separó ligeramente sus labios permitiendo que la lengua húmeda y cálida del mayor invada toda su boca. Siente la barbilla ligeramente mojada a causa de la saliva y puede escuchar los chasquidos ruidosos que hacen sus bocas al encontrarse una y otra vez. Gimió bajito cuando el pelinegro le mordió el labio inferior de una manera tan sensual que encendió un calor en todo su interior y deslizó sus manos entre las hebras de cabello suave.
Sin poder evitarlo su olor se volvió mucho más dulce cuando los labios suaves y cálidos de Jeon bajaron por la piel de su cuello dejando lamidas húmedas y cosquillosas por su piel junto con pequeños ardores ante las mordidas suaves que le da.
El mayor se incorporó en su lugar para mirar la expresión de deseo que posee Jimin. Volvió a unir sus labios en un contacto menos mojado y ardiente disfrutando de ese sabor dulce.
Se alejó solo un poco para tomar aire.
-Te extrañe mucho..
Ese susurro suave murió contra sus labios. Jimin abre los ojos algo adormilado y roza sus narices con delicadeza. La punta de los dedos acaricia la mejilla del alfa mientras sus alientos calientes se mezclan. Es un momento tan íntimo y especial para ambos.
-Fue solo un día cariño. Ya estoy bien.
Plantó un besito rápido en su mejilla alejándose por completo y tomando distancia. Jimin notó eso así que enseguida le hizo un puchero como que si fuese a hacer un berrinche.
-No te alejes tanto.
Le tomó la mano y la llevó hasta su rostro escondiendose allí como si fuese un oso de peluche. El alfa sonrió por que esa acción se le hizo tan tierna y fue más dulce cuando Jimin le dio un besito a su dorso y cerró los ojos.
-Si sigo cerca tuyo terminaré mandando el trabajo al demonio y dormiré contigo toda la noche.
El omega abrió sus ojos de par en par al escuchar esa confesión.
-¿Sabes? No suena nada mal. ¿Debería de acercarme?
Hizo como que si fuese a lanzarse sobre el mayor pero solo sonrió para volver a acostarse sin soltar la mano contraria.
Cerró los ojos y suspiró gustoso cuando Jeon dejó suaves caricias sobre su cabello. Todo a su alrededor esta saturado con el aroma del alfa y eso fue una gran ayuda para poder quedarse dormido.
Jungkook lo miró por unos largos minutos hasta que el agarre en su mano se debilitó por completo indicándole que su omega ya se había dormido. Lo arropó bien mientras le peina el cabello.
Quitó su mano con cuidado y le dio una última caricia mirando su rostro tranquilo. Le dio un beso suave en la frente y procedió a apagar todas las luces dejando encendida solo la lamparita de noche para no dejar todo totalmente a oscuras.
Salió de la habitación en busca de Hoseok pero se lo encontró justo en la puerta principal colocandose sus zapatos.
-Oh hyung, regrese con cuidado.
Llegó hasta su lado con una gran sonrisa plasmada en el rostro y Jung juró que jamás había visto ese brillo tan especial en sus ojos. Realmente Park Jimin es algo mágico.
-Claro Kook. No trabajes hasta tarde y acompaña un rato a tu omega.
-Sí Hobi...
-Nos vemos luego.
-Adiós.
El mayor se marchó bajo la atenta mirada del pelinegro. Son pasadas las siete así que cuando se aseguró de que Hoseok se fuera activó la seguridad de la mansión colocándolo en lo más alto. Solo son él y Jimin aquí.
Subió las escaleras pero antes apagó todas las luces dejando encendidas solo las del segundo piso. Cuando pasó frente a su habitación sintió la inquietud instalarse en su pecho así que abrió la puerta solo para ver al menor profundamente dormido y volvió a encerrarse en la oficina.
Mientras las horas pasan se siente un poco cansado pero la sensación de inquietud crece cada vez más. Su lobo está un poco tenso hasta incluso puede decir que también está alerta activando todos sus sentidos por que puede escuchar con claridad cada mínimo sonido, desde el traqueteo de las escaleras hasta las hojas de los arboles fuera de la mansión.
Siguió con su trabajo ignorando la manera en la cual se siente.
Jimin se remueve incomodo en la cama sin llegar a despertarse. Todo está en total silencio y tranquilidad hasta que escuchó un fuerte "click" que lo despertó.
Fregó sus ojos con ambas manos mirando a todos lados. Olisquea un poco el aire notando algo extraño.... Huele raro y eso opaca un poco el aroma de Jungkook.
El omega en su interior se puso alerta y al igual que el lobo de Jeon puso todos sus sentidos alerta. Cerró sus ojos concentrándose en todo a su alrededor, puede escuchar el goteo del agua que provoca la ducha y el lavamanos. Tragó grueso al sentir ese olor extraño más intenso.
Siente como el miedo lo invade, la respiración se le aceleró y el sudor frío baja por su espalda. El miedo es tan grande que no puede moverse por completo, se siente observado y se preguntó si realmente esto no es solo su imaginación.
Pero al escuchar nuevamente ese "click" abrió los ojos de par en par y se incorporó en la cama y con la adrenalina a full. Todo sucedió tan rápido, solo pudo mirar una silueta en el balcón que se reflejó en las cortinas blancas pero antes de que algo más pudiera suceder se levantó de la cama y corrió fuera de allí pero antes de llegar a la oficina unos brazos lo tomaron de la cintura.
Dejó salir un grito de puro terror y lloró por el miedo que siente.
-¡Jungkook!
Perdón ayer les iba a actualizar y se me olvidó por estar viendo Color Rush :c
Aquí les dejo el cap.🌻❤