— ¿Em-Embarazada? — Pregunto Jennie desconcertada. Los exámenes debían estar equivocados. ¿No..?
— Jennie...Esto...Esto no estaba planeado. — Kai por quinta vez paso su mano por su cabello frustrado. — ¿Cuando paso?
— No lose, Jongin. — Contesto molesta y se levanto. — V-Voy a irme. Tal vez nos vemos más tarde.
— Espera. — Con prisa tomo de su muñeca deteniendola. — ¿A dónde irás?
— Rose. Ella es la única que podría entenderme en estos momentos. Aparte no debería importante a donde voy y con quien.
— Claro que me importa. Eres mi futura esposa y debo cuidarte.
— Nos vemos después. — Se soltó de su agarre y nuevamente partió.
Ella tenía muy claro que el bebé que esperaba no era de Jongin, si no que de Lisa. Con ella había sido la única que no se protegía y el día que se habían reencontrado, prácticamente le rogó porque culminara dentro. Ahora que lo analizaba bien...se arrepentía...o no. Sin mal interpretarla ella quería tener hijos, pero no tan repentino como aquello y mucho menos en medio de todo esa complicada situación con su matrimonio y padre de por medio.
Lo que en su mente rondaba y angustiaba era la posible reacción de Lisa. ¿Ella lo querría? ¿La abandonaría después de enterarse? Deseaba con sus fuerzas que ella no lo hiciéra, no estaba lista para siquiera pensar que Lisa se alejaría por segunda vez.
Rose de manera tierna acariciaba sus mejillas y limpiaba las lágrimas traicioneras que descendían por allí. No lo había notado, pero ahora era un completo manojo de sentimientos y cambios drásticos de humor. Hace menos de una hora estaba sorprendida por la noticia, luego enojada con Jongin, Angustiada por la reacción de Lisa y triste por no saber cómo llevar la situación.
Pero un nuevo punto más se añadió junto a la pregunta de Jisoo. Sus padres. ¿Que harian ellos o que pensarían al saber que su bebé no era de su prometido...Bueno, Lisa era su prometida; pero ellos no lo sabían. Ahora mismo la confusión se instaló en Jennie y rompió más en llanto.
— Déjala Jennie...Chichu, es una boba. — Dijo acariciando suavemente su espalda. El '¡Ey!' Molesta de la chicken se hoyo desde la cocina. — Crees...que si llamamos a Lalisa, ¿te sentirías mejor? — Rose supo que no cuando su amiga abrió los ojos como plato y el repentino llanto volvió. Ella llevaba unos dos-tres meses de embarazo más que ella y la comprendía, después de todo aún le seguía haciendo sus escenas y lloriqueando a Jisoo por todo.
Entonces el foco se le prendió a Jisoo. — ¿Te gustarían unas galletitas? A nuestro gusanito le encanta.
— ¿Gusanito? — Pregunto confundida.
— Gusanito le puso Jisoo al bebé. ¡Aún no entiendo por qué!
— A el le gusta. — Dijo segura por su instinto maternal. Ella presentía que el bebé sería un hermoso varón, deseaba que lo fuera, el podría aprender de varias cosas con ella, además de ir a los partidos y jugar fútbol todas las veces que le plazca. Y si en el caso de que fuera niña, no le importaba demasiado, la amaría con toda su Alma e igual la llevaría y jugarían fútbol con sus tíos. — Toma, son de las mejores. — Le extendió el paquete de galletitas a ambas, sabiendo perfectamente que Rose también iba a querer algunas.
— Gracias, Chu.
— No es nada. — Respondió con una sonrisa.
Las tres se mantuvieron serenas en los sillones hablando de temas totalmente lejanos o relacionados con lo de embarazo. Eso le hacia bien en cierto sentido, no podía alterarse o estresarse demasiado, podría hacerle mal.
En medio de la conversación el timbre del hogar sonó y todas se miraron extrañadas.
— Amor. ¿Pediste algo? — Jisoo nego confundida de que esta vez sonara la puerta, no había pedido nada y era muy raro que llamaran justamente a esas horas.
A paso despreocupado camino a la puerta y la abrió sin siquiera ver quién era. Una Lisa apresurada entró sin saludar y corrio a la sala donde las dos chicas estaban. Jennie sorprendida porque Lisa llegase y la abrázace le hicieron confundir y volver al llanto que había parado hace rato.
— Jennie...¿Estas bien? ¿Te encuentras bien? Dime que si lo estás...estaba tan preocupada...¿Enserio estas bien? ¿Necesitas algo? Lo que sea, pidemelo. — Las preguntas de la menor salían como toda una bomba hacia Jennie. ¿Lisa se había enterado?
— Primero que nada, Buenos días. — Hablo Jisoo detrás de ellas, estaba de brazos cruzados mirando en dirección a Lisa. — ¿Que haces aquí, Lisa?
Jennie la miro aún más confundida...¿Jisoo no se lo había contado? Prácticamente se lo había prohibido.
— P-Perdonen...Yo...Estaba arreglando unas cosas con Minnie y Seunghee...Luego Sehun y Kai...Luego tu...y yo vine corriendo...lo lamento Jisoo.
— Respira Manoban, no es un buen momento para que te nos mueras. — Bromeo mientras le entregaba un vaso con agua y volvía a su lugar; al lado de Rose. — Cuentanos que paso.
Lisa luego de haber bebido el agua asintió un poco más calmada y se dirigió a Jennie. — ¿Te encuentras bien? ¿Te sientes bien?
— Lo estoy Lisa...ahora cuéntanos por favor. — Por más que intentase ignorar los ojos preocupados de su amante, no podía ser fría con ella en esos momentos.
— Bueno. Yo estaba con Minnie en la oficina de Seunghee. Las tres no pudimos evitar escuchar la conversación de Sehun...su primo que también trabaja ahi...el estaba hablando con Jongin algo sobre ti...decía que el no estaba listo para ser padre...que no sabía en que momento se había descuidado y cuando Minnie y Seunghee susurraron que tu estabas embarazada, salí corriendo...— Lisa tomo aire para poder continuar. — ...pero la gobernada de Sorn se habia llevado mi auto por algo para Seunghee y no me quedo de otra que venir corriendo. Estaba preocupada porque el sonaba tan negativo y enojado...tenía miedo de que tu igual estuvieras así, Jennie.
Jennie aún estaba procesando las palabras de su prometida. No había mucho que procesar, pero si habían cosas.
— Estoy bien, Lisa...pero eso podriamos hablarlo en privado y cuando estemos más tranquilas.
Lisa sentía ese tono serio y frío con el que ella le hablaba. Entendía perfectamente si Jennie llegaba a estar enojada con ella, pero quería creer que era por cosa del momento, que cuando tuviera la mente fría, hablarían con más tranquilidad.
— Nosotras...les daremos su espacio. — Anuncio Rose levantándose del sillón y codeando a Jisoo para que hiciese lo mismo. Jisoo la miro con el seño fruncido y nego. — Jisoo, no seas chusma. Levántate ya. — A regañadientes la pobre tuvo que hacerle caso y ambas se marcharon de la sala.
— Lisa...Yo.. Lo sien-..
— No te disculpes conmigo. — Le interrumpió. — Si te disculpas, lo tomaré como que estás arrepentida de haber estado conmigo. — Kim la miro sin comprender muy bien.
— ¿No estás enojada? ¿Decepcionada?
— No lo estoy. No te voy a mentir que estoy confundida y aún tengo que asimilarlo... — Jennie lo sabía, bajo su mirada triste. — Pero aún así estoy feliz.
— Lisa...
— Estoy feliz, Jennie. Feliz de saber que el pequeño ser que está dentro de ti, es parte de mi, que es mi bebé. — Dijo con una sonrisa y un enorme brillo en sus ojos. — De solo pensar que es mío, hace correr millones de sensaciones por todo mi cuerpo. Hay muchas cosas que tengo que pensar aún...pero no es lo importante, estoy feliz de esto...espero que tu también lo estés. Se que es repentino y que t-...
Jennie no quería seguir escuchándola, no lo necesitaba para ser exactos. Con sus brazos rodeó su cuello y allí se escondió en un fuerte abrazo. Saber que Lisa lo aceptaba y que estaba contenta, le hicieron sacar muchísimo peso de encima y solo la necesitaba a ella. Si ambas eran felices, al diablo con sus padres, al diablo su futuro matrimonio con Jongin, Al diablo la futura esposa de Lisa.. al diablo todo.
Jennie beso con amor los labios de su amante y se fundieron en un amoroso beso. Compartiendo las mismas sensaciones y emociones que sentían por la inesperada y repentina noticia.
Solo en sus mentes vagaba el pensamiento y el deseo de querer adelantar la boda cuanto antes y ambas poder huir lejos y criar de su pequeño bebé en camino. Ahora mismo lo importante y primordial era Jennie.