Primer día de clases, los pasillos estaban repletos de estudiantes emocionados y Jacob entrevistando a todos los del Club Glee, seguramente para después burlarse de ellos; por suerte no estoy en ese Club, pero al juntarme con ellos me humillan de igual manera.
Iba caminando con Kurt, mi mejor amigo, y Jacob nos iba persiguiendo mientras preguntaba demasiadas estupideces.
-¿Cuándo aceptará la comunidad gay que la gente no los quiere...- estaba preguntando, pero justo estábamos pasando por los baños y Kurt se refugia en él.
Genial, me abandonó con el idiota que entrevista a medio mundo para su estúpido blog, en donde lo único que hacen es burlarse de los demás.
-Todos tenemos la gran duda, de que si Emma Lexus pertenece o no al Club Glee, o como lo llamamos nosotros, el Club de los perdedores- me apunta con su micrófono y su compañero con la cámara casi encima mío.
-No pertenezco al Club Glee, pensé que ya lo tenían claro, solo participo en las reuniones y ayudo aveces- digo obvia y dudosa, justo cuando termino de hablar, mi amigo sale del baño para dar frente a las críticas por parte del estudiante.
-Escucha Jacob, no se necesita mucho coraje para que una persona acomode su trasero flácido en una silla fea y entre a la internet para burlarse de los demás ¿si?- da una pausa- ¿Pero sabes para que sí se necesita coraje?, lograr pasar al frente y cantar sobre algo.
-Tiene razón, ustedes solo impulsan a las personas para que se sigan burlando de los demás- apoyo a Kurt a su lado.
-La próxima vez que pongan un comentario anónimo en línea, dígan lo que tengan que decirme en mi cara- termina su genial discurso, pero no nos dimos cuenta de que el imbécil de Karofsky venía a lanzarnos un granizado de frambuesa.
Y por estar al lado de Kurt, de paso se manchó mi suéter favorito de color celeste, genial; otra cosa que llevar a la tintorería.
-Bienvenidas, señoritas- se burla uno de los jugadores
Nos dejaron en ridículo y ellos seguían grabando, que linda bienvenida a un nuevo año en la preparatoria Mckinley.
-Supongo que se puede cortar la última parte- inquiere Kurt, pero solo recibimos un movimiento de cabeza negando de parte de Jacob.
Ruedo los ojos, genial; ahora medio mundo verá esta gran humillación.
-Ven, limpiémonos el batido antes de que comiencen las clases- lo tomo del brazo para entrar al baño de chicas.
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William Shuster observaba el pizarrón de anuncios, en donde se encontraban las hojas de inscripciones para los clubes, pero el único que no tenía futuros miembros era el Club Glee.
-¿Por qué tan triste William, tu gato usó de baño tu café?- pregunta seria, mirando el pizarrón de corcho, dándose cuenta que todos se inscriben para las pruebas de porristas- ¿O te preocupa que nadie se está anotando para tu club?
-No, este año las nacionales serán en la ciudad de Nueva York, creo que la lista estará llena en poco tiempo- le responde con entusiasmo.
-No, el problema es el "sin audiciones, sólo anotense"- dice tomando la hoja y leyendo lo que decía-. Nadie quiere entrar a un club al que puede entrar cualquiera, mira-le muestra una hoja-. Un citatorio judicial, por riesgos a menores, hay una fila de aspirantes a porristas desde finales de julio, creo que perdieron un poco de humidad.
Termina de decir, William estaba atónito al ver a tantos estudiantes anotarse a las porristas, era impresionante y con el discurso de Sue Silvester quedó aún más.
-Una chica se comió una paloma, varias comenzaron a adorar un cadáver de tejón como su señor- lo apunta-. Tanto quieren ser porristas.
El Señor Schue niega y se acerca al pizarrón a pegar de nuevo el papel de inscripciones que le arrebató a Sue de sus manos.
-Lo siento Su, cualquiera que quiera entrar al Club Glee - pega el papel y se gira a verla-. Puede hacerlo.
-Oh dios, William, te lo voy a explicar, la preparatoria es un ensayo para la vida, no todos pueden ser campeones, no todos deben ser campeones, necesitamos cocineros, conductores de autobus.
-Bueno Sue, así hago las cosas y así seguiré- dice Will, encogiendo los hombros mirándola.
-Me gusta ser tu amiga Will- dice tocándole el hombro-. Es divertido, haces que me sea fácil no tratar de destruir al Club Glee ¿sabes por qué?, porque haces un trabajo estupendo sin mi ayuda.
Will solo la miraba con una mueca seria.
-Oh, ya es hora de alimentar a mi Lela- dice apunto de irse-. Por cierto, Figgins quiere vernos.
Dice yéndose y diciéndole a una chica de lentes que no se anotara.
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Estábamos todos reunidos, el Señor Schuester quería que escucháramos algo y yo sólo estaba expectante, esperando sus palabras.
-Estos son comentarios recientes del blog de Jacob Ben- dijo mientras comenzaba a leer- Glee es un gigantesco montón de estiércol...
Iba a seguir nombrando uno por uno todos los comentarios, pero Kurt irritado lo interrumpe.
-Ya entendimos señor Schue, todo el mundo nos detesta ¿y qué?, somos los primeros en la cadena alimenticia, la diferencia es que ahora no nos interesa- dice dando a conocer su opinión.
-Somos una familia, digan lo que quieran, pero no nos humillarán- dice Mercedes y todos le dan la razón, incluyéndome, decía la verdad.
-Me da mucho gusto que se lleven bien, el problema es que todo lo negativo evita que otros estudiantes audicionen- explica el Señor Schuester.
Él también decía la verdad, muchas veces he visto que comienzan a hablar mal de nosotros y que eso se comienza a esparcir por toda la preparatoria. Haciendo que nadie se inscriba por el temor de sufrir más burlas.
-Genial, ¿para qué necesitamos nuevos?- habla Tina sentada y cruzada de brazos.
-Como Matt se cambió de escuela, quedamos 12 miembros, y si queremos ir a las nacionales y vencer a Vocal Adrenalin, debemos ir de una pequeña fuerza rebelde a un gigantesco muro de sonido.
-El señor Schuester tiene razón, ¿no vieron a Vocal Adrenalin en las regionales?, fueron épicos, necesitamos más voces para vencerlos- se levanta Rachel de su asiento y se ubica al lado del señor Schue apoyando su opinión.
-Si, apoyo a Rachel- concuerda Finn para ponerse al lado de su novia tomándola por la cintura-. Sería genial que te pudieras unir a nosotros Emma, cantas y bailas muy bien.
Lo miro con los ojos abiertos, había pensado en unirme pronto al grupo, pero no que sería tan luego.
-Lo he estado pensando por mucho tiempo, y me gustaría unirme al grupo- digo finalmente y todos gritaron emocionados-. Pero primero necesito prepararme para una audición, mi unión debe ser igualitaria.
-Muy bien Emma, cuando quieras presentarnos algo nos avisas- dice el Señor Schue-. Tendrán que confiar en mí ahora, pero tengo un plan.
Todo lo miramos atentos.
-Las nacionales serán en Nueva York- no pudo seguir por la emoción de todos-. Y claro que iremos, vamos a mostrarles a la escuela que eso será increíble, que nosotros somos increíbles, si no vienen a nosotros, nosotros iremos por ellos.
Todos le damos la razón asintiendo.
-Todos creen que solo cantamos musicales, Pop de los 80, pero vamos a mostrarles que estamos en onda, le daremos la canción del año- el Señor Schue hace una pose "cool"-. Estilo Nuevas direcciones.
-Muy bien- aplaude entusiasta Brittany.
-¡Si!- grita emocionado Mike que estaba al lado mío, me contagiaron su felicidad.
El plan era organizar una pequeña presentación en el patio de la preparatoria, cantaríamos a Alicia Keys, iba a ser un poco improvisado, pero lo suficiente decente para llamar la atención y no parecer estúpidos, yo saldría bailando junto a Santana, Brittany y Quinn.
Se sentía tan bien hacerlo de manera libre, y junto a personas que compartian la misma emoción y dedicación por este Club. Estábamos dando un buen espectáculo, ya que seguramente nos veíamos bien bailando así y de fondo la increíble voz de Mercedes.
Al final de la presentación nadie se inmutó, de hecho fue como si nunca hubiéramos cantado. Así fue durante unos días, nadie se nos acercó a audicionar o a preguntar sobre el Club.
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Estaba guardando unas cosas en mi casillero, cuando de pronto veo que todos miraban a Quinn caminar de nuevo con su traje de porrista, no mentire, se veía increíble. Pero toda su caminata gloriosa se fue a la basura cuando Santana se acerca corriendo y empuja a Quinn cerca mío, cerré mi casillero y las quedé mirando, pensando en cuando separarlas.
Tenía miedo de que me golpeen a mi, y se separan empujándose ambas.
-Tu me hiciste esto, le dijiste a la entrenadora sobre mi cirugía de verano- le dice Santana furiosa.
-Es cirugía cuando te quitan el apéndice, tú te pusiste implantes- contesta Quinn un poco más calmada que su amiga.
-Si y ¿qué?- grita Santana cuando le da una bofetada a Quinn, nunca pensé que haría algo así, estaba muy enojada.
-No puedes golpearme- le da cara Quinn.
-Claro que puedo, a menos que te vuelvas a embarazar, zorra- le dice Santana muy cerca de Quinn, vaya eso fue un golpe muy bajo de su parte.
Quinn se enoja y empuja a Santana contra los casilleros, decidí que era hora de intervenir, así que tiré mi mochila e intenté separarlas, pero lo único que recibí fue un rasguño en mi mejilla derecha.
-Detengan la violencia- dijo Brittany viendo el caos como si fuera una película, le di una mirada de ayuda, que claramente no entendió.
Dejé mis inútiles intentos de separarlas y me hice a un lado, cuando Santana empuja a Quinn y esta se cae golpeandose en la rodilla, cuando justo llega el Señor Schue a separarlas, aliviada, ayudé a Quinn a levantarse y ella me da las gracias con una sonrisa.
-¿Qué pasó con lo de ser familia, eh?- pregunta arrinconando a Quinn, ya que iba de vuelta a golpear a Santana, pensé que había parado todo por su sonrisa, joder que tonta.
-Ella ya tiene a su familia, es madre- gritaba Santana buscando riña de nuevo.
-Lárgate y arréglate tu cola de caballo antes de ir a clases- le grita Quinn de vuelta mientras que Santana se ajustaba su cabello y se iba con la cabeza en alto, como si fuera toda una vencedora, aunque esto segundo si fue así.
Luego de ese evento, nos encontrábamos todos en la sala de reuniones Glee, esperando al chico que encontró Finn, según él, el chico cantaba bien, Puck, Artie y Mike le daban la razón porque ellos lo habían escuchado hacerlo.
-Bueno, lamento decirlo, pero parece que nadie hará audiciones, ¿por qué no terminamos por hoy?- pregunta levantándose se su asiento y se ubica al lado del piano mirándonos a todos.
-Dije que de 3 a 5, son 4:58- dice el Señor Schuester sentado junto al piano.
Todos nos levantamos llendo hacia la salida, necesitaba terminar algunas tareas y había perdido tiempo esperando al nuevo chico.
-Esperen, mi amigo Sam hará la audición, me idolatra mucho- dice Finn en un intento fallido de que no se fueran todos.
-Acéptalo Finn, ya no eres mariscal de campo, no eres el flautista de Hammelin, nadie te va a seguir porque todo lo que haces es genial- dice Kurt para luego irse, yo tendré que hacer lo mismo si quiero terminar todo a tiempo.
-Lo siento Finn, te creo, pero lo hemos esperado durante 2 horas y tengo tareas que terminar, y ya he perdido bastantes horas para hacerlas- digo yéndome del lugar.
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Hoy apareció un milagro, una chica llamada Sunshine iba a audicionar para nosotros en el auditorio, todos estábamos expectantes. Queríamos escucharla cantar y yo no era la excepción, necesitábamos nuevas voces.
Realmente necesitábamos su voz, cantaba demasiado bien e incluso le haría competencia a Rachel, quizás por eso no quería que ella audicionara, sus expresiones la delataban. Todos gritábamos emocionados, me ponía los pelos de punta. Al terminar todos aplaudimos felices.
El señor Schue se levanta de su asiento y se le acerca al escenario.
-Wow- dijo y nos miró riendo entusiasta y nosotros le dimos la obvia aprobación-. Bienvenida al Club Glee.
-Chicos, me gustaría cantarles algo, tómenlo como mi audición- todos me miran emocionados y me aplauden-. No soy tan buena como Sunshine o Rachel, pero espero que les guste mi pequeño aporte.
-Tu puedes mujer- me grita Kurt dándome apoyo emocional.
Me subo al escenario y entrego las partituras a los músicos, cantaría "On the Radio de Donna Summer", estaba muy nerviosa, intenté relajarme para que mi voz no sonara igual que mis emociones.
Me sentía euforica, al principio me quedé quieta, pero después tomé confianza y saqué el micrófono para moverme libre en el escenario.
Cuando finaliza mi audición, todos estallaron en aplausos y uno que otro vitoreo con alegría, no eran los únicos. Ya que también me sentía así, y mucho más.
-Eso estuvo increíble Emma, no pensé que cantaras tan bien- nos abrazamos de la cintura y volteamos a ver al Señor Schuester.
-¿Soy bienvenida al Club?- le pregunto contenta.
-Bienvenida al Club Glee Emma, eso estuvo muy bien- bajo del escenario dando brincos y cada uno se va por su camino.
Estaba hablando con Kurt y Mercedes en el pasillo cuando vemos al Señor Schue intercambiar palabras con el director de Vocal Adrenalin, pero este se iba con Sunshine y él llevaba la mochila de Hello Kitty en la espalda, habíamos perdido a la nueva miembro del Club Glee por culpa de Rachel Berry, era más que obvio, tan claro como el agua.
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