Los dos primeros combates habían acabado.
Se debía dar paso a los siguientes y según el elector automático aleatorio los siguientes en salir al campo de batalla eran
El tercero fue brevisimo.
Dai Aramaki contra Ouyuki Sawada.
Apenas duró diez segundos... o sea, Sawada.
Dai la cogió y la lanzó fuera de la zona de combate.
Sawada fue eliminada sin tan siquiera poder defenderse.
Al poseer capacidades de tortiga tenía tanto su resistencia como su lentitud.
No pudo esquivar los poderosos y rapidos brazos de Aramaki.
Además que hizo bien en no resistirse mucho.
Porque Dai pensaba arrastrarla por todo el campo de cememto si trataba de zafarse.
Para suerte de Sawada... Dai estaba de muy buen humor aunque repleta de una impaciencia palpable a su alrededor.
O sea que el siguiente combate fue...
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-Venga hijo mio... ponle ganas... quizas no sea el mejor adversario al que puedas enfrentarte pero... para eso tendrás que pasar a los proximos combates... ¿No crees?- Yei trataba presionar a Kenji para que saliera más rapidamente al campo abierto.
Su expresión denotaba aburrimiento.
Su cuerpo no temblaba ni un apice.
Iba caminando por el pasillo tomandose todo el tiempo del mundo.
Tenía perfectamente planeado todo lo que iba a hacer en aquel combate.
Si todo iba bien.
Le costaría dos chasquidos y un suspiro.
-Escuchame Kenji... acaba rápido... a la gemte y heroes profesionales lo que le interesa son los combates posteriores... las semifinales y esas cosas.
-No te preocupes... mi adversario es una copia mal procesada de mi mismo- dijo mientras dejaba atrás a Yei, pero antes de salir al exterior... -Sin embargo Yei... te recomiendo que tu si lleves cuidado con tu adversaria. Me da mala espina esa chica.
Yei asintió y Kenji pasó por el umbral de la puerta.
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Primero los vitores.
Después el silencio.
Primero una avalancha de nieve y unos muñecos hechos de escarcha.
-Atacarme con un elemento que conozco y manejo mejor que él...- dijo Kenji levantando un brazo y abriendo la mano.
En cuanto la nieve rozó las yemas de los dedos de Yaoyorozu apenas llegaron a pasar unos segundos y unas espinas de hielo gigantescas destrozaron el infimo ataque de su adversario. Atravesando el ejervito de muñequitos de nieve... dejando todo como si un aterrador invierno glacial hubiera acabado con un pueblo en epoca navideña.
Yemon estaba completamente congelado menos la cabeza.
Y cuando vio la mano de Kenji sobre su cara, que emanaba vapor frío por toda la palma... supo que había perdido... casi tan vergonzosamente como la anterior.
-Me rindo- dijo Nakajima con pleno resentimiento.
El hielo empezó a desaparecer y Kenji salió de aquel en dirección a las gradas mientras sonaban vitores hacia su persona.
Que obviamente le eran indiferentes y de valor nulo.
Lo unico que de verdad importaba es que aquella victoria le hubiera costado trabajo.
Y apenas fue una imitación de lo que hizo su padre tiempo atrás.
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-¿He sido lo suficientemente rapido?- preguntó Yaoyorozu a la presidenta de la clase.
-Ya tienes a agencias babeando por ti en minuto y medio de actuación... si, a sido suficiente, ahora recuperate... que hacer esos movimientos te congela los nervios.
-¡Proximo combate!... ¡¡YEI BAKUGOU contra OISHI OKA!!
-Joder, que oportuno... justo cuando estaba organizando las informaciones personales de nuestra clase para la semana de las agencias...- Yei hizo un puchero.
-Deja que acabe yo el papeleo... céntrate en el combate, no te confies, esa chica es muy fuerte
-Sepas que me fio de ti solo porque eres el subdelegado... por cierto dile a Yune que esté atenta al combate- pidió Yei mientras bajaba las escaleras.
Kenji asintió y después murmuró -Siempre esta atenta a ti.
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Cuando Yei estuvo frente a su adversaria se la encontró jugueteando con los dientes de sus brazos.
Yei la observó.
Estatura media, piel morena, pelo gris claro y unos brazos verdaderamente musculosos.
Le recordaba a una heroina que estuvo antes en el top diez... pero no recordaba cual en ese preciso instante.
-No importa- dijo en voz baja.
Sacudió la cabeza y la miró desde la perpectiva de rival.
-"Mientras no me saque del area de combate no será capaz de dejarme K.O en ningún momento"- pensó.
Y eso era verdad.
La singularidad de Yei era algo que no permitía a ninguno de sus adversarios disfrutar de la frase "me rindo".
La unica forma de ganar a Yei era descalificandola. Pero si alguien quería derrotarla en si... que se fuera preparando para la batalla que menos le gustaría haber protagonizado jamás.
Sin embargo... Yei no era la unica con una visible cara de seguridad.
Su adversaria no la estaba ni mirando.
Simplemente habría las bocas de sus brazos y las volvía a cerrar después de comprobar, seguramente... que todo estuviera en orden.
Yei se mordió los nudillos de ambas manos.
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-Perdone señor, pero debo pedirle que no retransmita el siguiente combate por televisión- pidió Himiko al jefe de telecamaras de los canales que retransmitían el festival en directo.
-¿Tiene una petición directa de algún alto cargo de la U.A?- preguntó él revisando sus papeles.
-Tengo mi criterio personal en lo referente a que clase de combate estan a punto de presenciar... la que va a combatir es mi hija y debo advertirle que no será algo agradable de ver por televisión- argumentó lHimiko tratando de convencerlo de alguna manera.
Sin embargo no fue efectivo.
-No podemos cortar la transmisión en directo, ya está a punto de empezar y necesita al menos el permiso de seis superiores de la U.A- hizo un silencio -¿Tiene esos permisos?
Para Himiko esa pregunta le parecio casi retorica. Frunció el ceño.
-No, dejelo... pero luego no digan que no se lo advertí- y se fue escaleras abajo para sentarse junto a su marido.
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-Tu cuando comes te dicen que zampas a seis carrillos ¿he?- Yei trató de sacarle al menos una mirada de ofensa.
Y lo consiguió más o menos.
Oishi profirió una risilla dura y grave pero no muy visible.
Y dijo en voz ronca...
-A ti te tiene que comparar mucho con Lobezno ¿no?
-Casi- Yei levantó los puños a la altura de su cara.
Oishi cerró sus brazos y adoptó una posición semejante.
Y tras oir el grito de inicio Oishi se lanzó rapidamente sobre Yei.
Preparó un puñetazo que dio de lleno en la cara de su adversaria que salió rodando uno metros y acabó boca abajo.
Silencio.
Yei no se movía.
-¿¡Ya ha acabado?!- exclamó Ms Joke -Pues si que son rapiditos estos primero comba...
La interrumpió Mic mientras señalaba a Bakugou.
-¡Parece que todavía no esta K.O!
Yei se levantó y todos vieron como el enorme ematoma de su cara volvía a ser piel perfecañtamente normal.
-Duele... pegas fuerte... pero no más que Kasumi... ni ella consigue dejarme fuera de combate- Yei sonrió.
-¿La chica cuervo?- preguntó Oishi recordando la segunda prueba.
-Esa misma- dijo trás un largo y visible bostezo.
Yei se pasó un dedo por los dientes de la mejilla recién golpeada y comprobó que estaban correctamente en su sitio -¿Vas a venir? Me aburro.
Oishi no perdió ni un segundo y volvió a lanzar el mismo puñetazo que esta vez Yei esquivó bajando la cabeza, pero recibió sin embargo una patada en la barbilla.
El resultado fue el mismo que el anterior.
Yei cayó al suelo y tras un par de segundos ya estaba de pie bostezando de aburrimiento.
Esta acción se estuvo repitiendo un buen tiempo.
Oishi cada vez parecía más sudorosa y ligeramente más y más cansada.
Ella derribaba a Yei una y otra vez y esta se caía casi a proposito y después de dejar pasar unos segundos se encontraba la misma historia.
Yei ni siquiera se estaba moviendo.
-La regeneración es una singularidad maravillosa me permite ganar combates sencillos mientras duermo- dijo Yei.
Y eso fue lo que verdaderamente molestó a Oishi.
-"¿¡SENCILLO?!".
Yei se preparó para recibir el proximo puñetazo que si embargo no llegó como ella esperaba.
La boca de los brazos de su adversaria se había abierto y ahora la sostenía por el cuello levantada casi medio metro del suelo.
Oishi aún agarrandola del cuello la lanzó al suelo y se puso sobre ella inmovilizandola mientras enseñaba los dientes de unos de sus brazos muyuy cerca de la cara.
Oishi gruñó como una bestia... pareció al menos una especie de ronco mensaje de amenaza.
Sus ojos relucieron en un pequeño resplandor rojo.
Yei apartó la cara hacia un lado -Por todos los shonens... ¿es que no te lavas los dientes o que?
El puño de Oka se estrello contra el suelo a muy pocos centimetros de la cara de Yei que dio un pequeño respingo todavía estando tumbada en el suelo.
-Te voy a dejar peor que a mis sacos de boxeo- la amenazó .
Yei puso cara de aburrimiento.
Dio un largo bostezo porque estando tumbada en el suelo empezaba a darle sueño... y si no se movía acabaría por dormirse.
Se dislocó un de los hombros para escapar del agarre de su adversaria y le propinó un codazo en la nariz.
Después dio un voltereta hacia atrás y se alejó de Oishi.
La chica de enfrente con la nariz ligeramente sangrante se la recolocó bruscamente.
El brazo de Yei giró un par de veces sobre si mismo hasta estar como nuevo.
Se dio cuenta de que la nariz de su adversaria sangraba y giró la cabeza para no mirar directamente -"Controlate Yei... ¡controlate!"- pensó para si.
-Tienes la nariz ligeramente fracturada, ya tienes la primera herida abierta... mientras sigas luchando te iras cansando ¿Te quieres retirar?
Por toda respuesta Yei recibió un potente puñetazo que produjo unos ensordecedores crujidos en su cara.
Después cayó al suelo con la marca de un puño en su rostro.
¡PLOP!
Su cara volvió a ser la que era antes.
-No se quiere rendir... no.
Se levantó mientras se crujía el cuello
Y Osihi llegó frente a ella dandole otro puñetazo igual de fuerte que el anterior.
Yei se agachó para evitar una patada.
Y lanzó una patada baja contra las piernas de su adversaria haciendo que esta callera en seco contra el suelo.
Después volvió a retirarse.
Notó que tenía algo en la boca.
Lo escupió en el suelo dandose cuenta que era un diente.
-La virgen... como pega esta flipada.
Oishi se incorporó.
-¡Me debes una cita al dentista!- exclamó Yei.
Oka se quedó en silencio.
Parada, de pie mientras transpiraba, cada vez más lentamente.
Tenía que relajarse.
Obviamente había comprendido que fuese cual que fuese la potencia del golpe solo jugaba a favor de su adversaria.
Ella se cansaba... empezaba a notarlo.
Mientras que Yei también se cansaba... pero de aburrimiento, se dormía de pie.
-Voy a sacarte de aquí- dijo empezando a correr hacia Bakugou.
-¿Que me vas a invitar a salir? No gracias no eres mi ti...- Yei no pudo acabar la frase porque recibió un placaje poderoso que empezó a a empujarla y a llevarla hasta el limite del campo.
Yei percibió lo que quería hacer y apoyó el pie en el suelo, agarro a Oishi y dio un ligero giro lanzando a un lado a su adversaria usando la fuerza generada por su placaje.
Oka derrapó en el suelo y volvió a empujar a Yei, le cogió de los brazos con las bocas de sus brazos clavandole los dientes.
Yei posó sus manos sobre los hombros de su adversaria y dio un cabezazo sobre la frente de Oishi. Pero ella no la soltó y le dió una patada en el estomago mientras tiraba hacia atrás de sus brazos.
Al mismo tiempo Yei trataba de escabullirse del agarre.
Pero entonces los diente, encallados en los musculos de Bakugou desgarraron los dos amabrazos.
Se separaron y Yei contempló las heridas abiertas de forma irregular en sus brazos.
Apretó ambos puños y las heridas se cerraron estrepitosamente.
-Parece que ya has dejado de soltar chistes- dijo Oishi.
Y en ese momento fue ella quien recibió un puñetazo en la mejilla que la hizo retroceder un metro.
Al abrir los ojos se encontró otro puño muy cerca de ella.
Logró esquivarlo para recibir otro en el estomago.
Y otro mas en la cara.
Y una patada, y otro puñetzo, y otra patada y otros tantos golpes que la iban llevando al otro extremo del campo.
Los golpes que estaba recibiendo eran como pedradas.
Como si aquellos golpes se los estuvieran dando con un mazo de madera.
No exageradamente fuertes, pero si muy contundentes.
Y uno tras otro llegaron los golpes de una, ahora muy seria Bakugou, haciendo honor a su apellido.
Oishi no podía esquivarlos, porque de alguna forma antes de que acabara un golpe llegaba otro o dos a la vez.
Empezaban a acercarse al limite del campo y Yei concluyó su combo con un derechazo en la mejilla de su adversaria.
Esta estuvo a punto de salirse de la zona de combate pero se mantuvo dentro.
En ese puqeño instante dedescanso hizo una ligera revisión de su estado.
Ematomas por todas partes, le sangraba el labio y tenía la mejilla derecha inflamada.
-¿Quieres repetir?- preguntó Yei con una cara que hacia mucho contraste con su anterior tono bromista.
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-Se ha descontrolado- dijo Yune.
-No me jodas... ¿No... no ha aguantado? ¡Pero si solo le estaba sangrando la nariz!- Chihiro empezaba a ponerse nerviosa.
-Katsuki y Himiko deben de estar bastante preocupados en este momento- declaró Kenji tratando de no perder de vista a Yei.
-Esto se le está yendo de las manos... Alguien debería intervenir antes de que vaya a peor- sugirió Chihiro al mismo tiempo que recordaba la ultoma vez que le pasó algo semejante a Yei.
No fue una experiencia agradable.
-No se le ha ido la pinza del todo... está cuerda... mejor que otras veces. Pero sin duda si el combate no acaba rapido esto podría volverse un escenario que diera una imagen terrible al evento- explicó Yune.
-¿Y si bajas para calmarla Yune?- propuso Asa -La ultima vez se relajó cuando te miró a los ojos.
-La ultima vez le di tal clase de bofetada que se le salió la tonteria de golpe en una hostia con la mano abierta.
-Me sirve- concluyó Asa.
-Ya a perdido- dijo simplemente Kenji.
Todos volvieron la cabeza al campo de batalla y vieron que Yei estaba recostada sobre el suelo fuera del campo de batalla.
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-¿Quieres repetir?- Yei no parecía la misma en absoluto.
Por culpa de la sangre.
Y Oishi lo había entendido.
-Si, aquí te espero- y escupió un poco de sangre que tenía por el labio partido.
Eso fue la gota que colmó el vaso.
Los ojos de Yei se volvieron de un negro profundo y sus caninos crecieron exponencialmente.
Se lanzó como una fiera sobre Oishi con el puño en alto.
El golpe acertó justo en la zona de la ceja izquierda de Oka pero entonces esta giró hacia la derecha y con un puñetazo potente sobre el cuello de Yei la mando fuera del campo.
Lo ultimo que vio Yei fue el cielo cerrarse en un tono borrosos después de dejar paso al oscuro del sueño.
No se la puede dejar K.O a menos que un golpe en la arteria que provoque un desmayo.
Silencio.
-Oishi Oka... ¡vence el combate!- el silencio desaparece cuando sobre el cae una estrepitosa avalancha de gritos de jubilo y risas.
No habia sido un combate bonito de ver... habia sido terriblemente violento. Y sin embargo la gente había disfrutado con esa carniceria.
Al menos una gran parte.
Oishi tenía el ojo izquierdo cerrado.
Le caía la sangre de la ceja por encima.
Transpiraba con dificultad y no sonreía. No tenía motivos para sentirse feliz.
Solo aliviada de que aquello hubiera terminado.
Simplemente trataba de calmarse.
Se había hecho realmente daño y necesitaba descansar.
Se marchó mientras el equipo medico se llevaba a Yei en una camilla.
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Yei abrió los ojos que reflejaron el claro y impoluto azul del techo de la habitación medica.
Se encontraba perfectamente pero no recordaba mucho hasta unos segundos después cuando le llegaron de sopeton todas las imagenes del combate.
Se tocó los caninos.
Volvían a ser normales.
Se tocó el cuello.
No le dolía ni lo más minimo.
Suspiró.
-¿Te encuentras bien?- la inconfundible voz de Yune la sacó de sus pensamientos y se giró para ver a la chica apoyada en una barra metalica.
-Si... si, estoy perfectamente solo... me encuentro confusa, eso es todo- contestó con la voz un poco ronca.
-Es normal... nunca te habías desmayado- dijo Yune con voz amable.
Yei enrojeció de verguenza.
-Lo siento... a sido humillante, me he vuelto a quedar sin autocontrol- su voz sonaba desconsolada, se sentó al borde de la camilla y se quitó las inutiles tiritas que llevaba encima.
Yune se acercó y se sentó junto a ella.
-No te culpes demasiado a ti misma- empezó ella -Si te falta practica... eso es todo. Llevas entrenando este problema psicologico muchos años y debes admitir que haces progresos... por ejemplo, hoy has hablado mientrs estabas en trance quiere decir que estabas luchando con todas tus fuerzas por mantenerte cuerda... ¿no?
Yei miraba hacia abajo -Supongo... pero he herido a una chica golpeandola sin parar durante dos minutos enteros o algo asi... debería disculparme, incluso si me burlé de ella al principio... me siento fatal- pareció que le daba un bajón.
Entonces Yune se rio un poco.
-Lo ves... eso no quiere decir que seas un monstruo, sientes culpa y lástima... y por ende tienes sentimientos como cualquier persona- la tranquilizó Yune.
-No todas las personas son buenas- contestó Yei.
-La pena es que tengas razón... pero tu no eres de esas ¿verdad?- la pregunta de Yune esperaba un respuesta positiva.
-Si... ¡Por supuesto!- contestó tratando de volver a su tono bromista.
-Me alegro- dijo Yune con una sonrisa.
-"¡¡¡ADORABLE!!!"- gritó Yei para si misma.
-¡CHICAS!- exclamó Tadashi entrando en la habitación de golpe con un derrape muy conseguido -No os perdais el proximo combate, Asa en acción.
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Mi mensaje de hoy:
Lumity es canon.
*baile de la victoria max lv*
Au revoir!