Escógeme

By knivanessa

73.5K 5.4K 879

SEGUNDO LIBRO DE LA TRILOGÍA -Debes tomar una decisión, Abigail -me miró con desesperación. Necesitaba saber... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Epílogo
Capítulo extra
Capitulo Extra (2)

Capítulo 4

2.9K 226 26
By knivanessa

-Julio, no puedes solo decirme eso y esperar que me quede tranquila -lo miré impaciente-. ¿Cómo es que nadie tiene información de ese hombre?

-Solo aparece un par de veces en las cámaras de seguridad, no hay manera de reconocerlo pues su rostro estaba oculto.

-¿Revisaron la lista de invitados? -asintió seguro.

-Ninguno de los invitados tenía una máscara parecida, mi equipo pasó toda la mañana trabajando en ello.

-¿Si no era un puto invitado como pudo burlar la seguridad de esa forma? -lo miré molesta-. ¡Baile con él! Pudo haber sido cualquier loco con intenciones de hacerme daño y lo hubiera logrado.

-Lo sé, señora. Eso estamos indagando más -me levanté de mi escritorio y me acerqué hasta donde estaba parado.

-Julio -lancé ahora más calmada y le mostré la imagen que tenía en mis manos-. ¿Ves esta foto? ¿Puede ver ese tatuaje? -asintió y me miró como si entendiera perfectamente lo que quería decirle.

-Ahora mismo mi estabilidad emocional depende estrictamente de ti, si no encuentras ese hombre y lo traes frente a mi, juro que podría perder la poca cordura que me queda -en esta ocasión quería que fuera claro que se encontraba hablando con Abigail y no con su jefa. El asintió.

-Lo encontraré -respiré más aliviada y volví a mi asiento.

-Puedes retirarte, infórmame de inmediato si encuentran algo, quiero saber lo más mínimo -asintió-. De esto ni una sola palabra a Gustav, por favor.

-De acuerdo -segundos después se marchó.

Mi cuerpo había pasado lo que iba del día en la oficina, pero definitivamente mi cabeza estaba en otra parte. Repetía una y otra vez ese baile, esa pequeña charla, su voz, su aroma.

Quizá había pasado tanto tiempo tratando de superar a Enzo que ahora no podía siquiera reconocerlo aún teniéndolo de frente, me parecía increíble pero no imposible. Un escándalo en la recepción de mi oficina llamó mi atención y salí a ver qué pasaba.

Una hermosa pelirroja discutía con mis asistentes que se negaban a dejarla pasar a mi oficina.

-¿April? -las tres voltearon a verme y mi amiga se acercó a mí con confianza.

-Debes tener una puta foto mía por aquí, me acaban de decir que no podía verte -las mató con la mirada desde lejos y yo la abracé como si acabara de llegar la solución a todos mis problemas. Las chicas se relajaron al ver que evidentemente era una visita que si quería recibir y volvieron a sus puestos de trabajo.

-Amiga, ¿qué haces aquí? -ella veía asombrada mi oficina.

-Abigail, ¿Robotina vive aquí? -reí a carcajadas y nos sentamos en uno de los sofás-. Obvio tenía que venir, ayer cuando hablamos pensé que ibas a colapsar. ¿Qué mierda es todo eso?

-No tengo idea, nadie vio nada. Ni siquiera era un invitado. No tengo más que unas fugaces imágenes de las cámaras de seguridad y la foto que te envié anoche de la prensa.

-Sentí escalofrío de solo ver esa foto, no puedo ni imaginar como te debes sentir tu.

-No sé por qué cada vez que logró avanzar viene algo que me pone unos pasos más atrás de donde estaba -acarició mi espalda en un vago intento de consolarme.

-¿Qué puedo hacer por ti? Haré cualquier cosa -sonreí con nostalgia.

-Que estés aquí me ayuda no te imaginas cuanto -alguien abrió la puerta de repente y rodeé los ojos divertida.

-Escuché que una loca pelirroja estaba haciendo un escándalo en las oficinas de presidencia y supe de inmediato que era mi mujer -se acercó a ella y la beso con amor.

-¡Ay por Dios! Consíganse una habitación -me levanté-. Iré por unos cafés, por favor compórtense.

Dylan sentó a su chica en las piernas y ninguno de los dos pudo parar de sonreír ni por un momento, sentí envidia de su amor sin tantas altas y bajas, sin ningún drama. Salí dándoles un poco de privacidad.

Almorzamos los tres juntos en mi restaurante favorito y decidí tomar la tarde libre para hacer turismo e ir de compras con mi mejor amiga. Dylan a regañadientes fue a cubrirme, le prometí que a cambio le prestaría a su chica toda la noche.

-Abigail -miraba un par de vestidos que pronto estarían en el armario de mis hijas cuando April llamó mi atención.

-¿Y si está vivo? -la miré confundida-. Has pasado todo este tiempo repitiendo que Enzo está vivo pero, ¿y si lo está? No quiero darte falsas esperanzas pero si está vivo cómo dices, ¿qué harás? -su pregunta me desenfoco por completo. No supe qué responderle.

Como había prometido, al anochecer deje al par de tórtolos a solas y volví a casa. El hecho de que no había vuelto a ver a Julio en todo el día antes de tranquilizarme, me alteraba. Mi teléfono comenzó a sonar y conteste de inmediato.

-Pitufa, ahora si que lo jodí todo, en serio -reí.

-Hola, Giancarlo. ¿Qué cómo estoy? Bien, ¿y tú? -lancé sarcástica.

-Hablo en serio, Abigail -gruñó y rodeé los ojos.

-¿Ahora que le hiciste? -se quedó en silencio-. Giancarlo...

-Le dije que tu tuviste gemelas y que nunca me dijiste que no querías coger -arrugué la cara y sentí pena por él.

-Decir que estás jodido es quedarse corto -lancé sin más mientras me bajaba del auto al llegar a casa y me dispuse a ir hasta el ascensor.

-Me siento horrible, lo dije de repente y sin pensar -estaba sinceramente arrepentido.

-Esta reconciliación si que te saldrá cara, Tarzan.

-Lo sé -suspiró-. Pero lo merezco.

-Nunca debes comparar a tu mujer con otra, mucho menos si está embarazada y peor aún, nunca debes compararla con tu ex -le regañé mientras entraba a mi departamento.

-Ya lo se, no se que me... -no pude escuchar nada más porque el teléfono resbaló de mis manos al ver a la persona que me esperaba de pie en la sala.

-¿Enzo? 

--------------------------------------------------------------------------------------------

Para que luego no digan que soy cruel  😇

¡Una escritora los quiere! Gracias infinitas por leerme.

Continue Reading

You'll Also Like

42.9K 6.1K 33
Emmanuel Boyoli, un atractivo cirujano de origen francés, está convencido de que no merece nada excepto la soledad. Se enfoca en la ayuda humanitari...
420K 37.8K 61
Colin llevaba una vida plena y feliz junto a su novia Lili, pero su amor por ella se ve fracturado cuando se entera de la verdadera intención por la...
11.2K 438 47
Le di mi cuerpo y mi alma, mis sueños más secretos y mis miedos más ocultos, todo para que al final se fuese sin despedirse. -Anónimo. Gabriella es u...
150K 10.5K 43
- ¡¿Por qué me odias?!- le gritó y en seguida soy metida por el en un salón que inmediatamente reconozco, es el salón de ensayos - ¿Que te molesta de...