NUEVAS AMISTADES
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Hoy Heather me dijo que fuéramos a una discoteca.
Quería salir a bailar, y a tomar.
Y pues le dije que sí.
Así que me estoy alistando para poder irme.
Mientras se escucha "Kiss you" de One Direction por todo el apartamento yo estoy vistiéndome. Mientras canto y bailo, obvio. Esas canciones son para disfrutarlas.
Después de varios minutos ya estaba listo. Me coloque una camisa de botones negros y un jean azul oscuro, para no hacer el outfit tan aburrido opte por colocarme unas gafas de sol. Me gustó el resultado.
Recibí la llamada de Heather diciéndome que ya están esperándome abajo. Recojo mis cosas y salgo del apartamento.
Una vez ya afuera de mi hotel puedo ver una camioneta estacionada, así que me dirijo a ella y entro al carro.
—Hola chicos –salude apenas entre.
—Hola –dijeron al unísono.
Todos habían venido, Félix, Damien y Grace.
—Me encanta tu outfit –dijo Grace
—Gracias –le regale una pequeña sonrisa.
Comenzamos camino para la discoteca.
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Llegamos a la discoteca y entramos fácil, ya que Heather ya había reservado una mesa. Es súper increíble todo. La música, la iluminación y el ambiente eran increíbles.
—Oye Eros vamos a bailar –me dijo Grace al oído.
Y yo acepté y me fui con ella a la pista de baile.
Comenzamos a bailar mientras sonaba "live while we're young" de One Direction.
Bailando, saltando, cantando a todo pulmón y alentando a gente que daba sus gran coreografías.
Después de varios minutos y varias canciones ya estaba cansado.
Le dije a Grace que iba a ir por una cerveza y ya volvía.
Me aleje de la pista para ir a la barra del bar para poder pedir mi cerveza.
Llegando a la barra un chico me empujo, haciéndome empujar a otro chico que tenía en frente de mí.
—Mierda, lo siento, lo siento –dijo el chico cuando volteo.
—Tranquilo –dije.
Me volteo para poder ver al chico que yo empuje sin culpa; se le regó la cerveza que tenía en la camisa y se estaba limpiando.
«Mierda» dije mentalmente.
—Lo siento –dije al chico que empujé y él se volteó para verme.
El chico que me empujó hablo:
—Lo siento yo lo empuje, no fue culpa de él.
Vuelvo y dirijo mi mirada al chico que empujé y comienzo a detallar muy bien. No muy bien, ya que estábamos a oscuras y no le veía bien la cara. Pero pude detallar un poco. Tiene el pelo negro, una mandíbula bien definida, era más alto que yo, y se veía que le gustaba el gimnasio. Él me está viendo a mí. No lo podía ver muy bien. Pero eso fue lo que pude detallar en esta oscuridad. Se me hacía conocido, pero no sabía dónde lo había visto.
—Tranquilos, no se preocupen –dijo y el chico que me empujó asintió y se disculpó otra vez y si más se fue.
Yo también volví a pedir disculpas y seguí mi camino para la barra de la discoteca, para pedir mi cerveza.
Cuando llegué le dije a un chico que estaba atendiendo que me diera una cerveza. El chico asintió y se fue a servir la cerveza, ya con la cerveza servida me la entregó.
—Muchas gracias –asintió y se retiró a atender a otro chico.
Estaba cansado así que me senté en los asientos que están en la barra.
El chico que empuje minutos antes apareció al lado mío pidiendo un vaso de whisky. Se lo entregaron y se sentó al lado mío.
—Hola –dijo el chico.
—Hola –respondí dándole una sonrisa–, lo siento por lo de ahora.
—Tranquilo, no pasa nada –dijo–, esto lo mandó a lavar y listo.
—Ok –dije y le di una sonrisa.
—¿Cómo te llamas? –preguntó el chico.
—Me llamo Eros, mucho gusto –le estrechó mi mano en forma de saludo.
—Me llamo Ulrik –dijo él, mientras recibía mi mano–, mucho gusto.
Le regalé una sonrisa y él me la devolvió.
Estuvimos hablando por bastante tiempo, conociéndonos y así.
Por lo que me dijo Ulrik, se que sus papás son empresarios muy importantes en Dinamarca. Tiene 3 hermanos también. Y otras cosas más.
Ulrik era un chico bonito, no hay que mentir. Pude apreciar que sus ojos son verdes igual que los míos. Su pelo negro alborotado lo hacía ver muy sexy.
—¿Quieres ir a bailar? –preguntó Ulrik.
—Si, vamos –me levanté del asiento y él hizo lo mismo.
Ulrik me siguió hasta la pista. Comenzó a sonar "without you" de David Guetta y Usher. Comenzamos a bailar y cantar.
Después de varias canciones ya me dolían mucho los pies.
Le dije a Ulrik que ya volvía, ya que tenía que ver cómo estaban los chicos. Él asintió y me dijo donde iba a estar y yo asentí.
Cuando llegue Grace estaba sentada tomando y hablando con un chico que la verdad no sabía quién era. Cuando me vio me llamó para sentarme a su lado.
—Hola ¿dónde estabas? –Preguntó Grace cuando me senté a su lado.
—Estaba bailando con un chico
—Esooo, conquistando a los Daneses ya ¿Eh? –suelto una pequeña risa.
—Ven te presento a este chico que conocí –yo asentí.
—Mira él es mi amigo Eros –dijo ella al chico que estaba a su lado– Eros él es Alexander.
—Hola –dijo el chico estrechando su mano–, mucho gusto
—Mucho gusto - dijo aceptando su mano.
Me senté y Grace me habló al oído, ya que ella le dijo algo al Chico y él se fue.
—Y cuéntame qué tal el chico ¿eh? –dijo con una sonrisa enorme–, cuéntame todo ¿está bueno? ¿Ya se besaron? ¿Cómo se llama? ¿Cuántos años tiene? Cuéntamelo todo.
—Ok –dije riendo–, calmante un poco. No nos hemos besado, apenas lo conozco. Y se llama Ulrik y tiene 22 años. Y obvio está bien bonito.
—ESOOO!! Conquista al mundo hoy –dijo súper feliz
Alexander volvió con unos tragos. Me gastó una cerveza y me la entregó. Le dije a Grace que ahora volvía, y comencé otra vez a ir a donde estaba Ulrik.
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Ya era la hora de irnos para nuestras casas. O bueno no, la discoteca todavía no la cerraban. Son las 2:30 de la mañana, y la discoteca la cierran a las 4:00 de la mañana.
Grace me dijo que ya casi nos íbamos y yo les dije que bueno. Pero...
Bueno, le dije a Ulrik que ya me iba a ir y me dijo que no; si, que no. Me dijo que él me podía llevar a mi hotel, que todavía no me fuera, que él no se quería quedar solo en el bar.
Me costó mucho decidirme, ya que apenas lo conozco y no se que pueda ser capaz de hacer él.
Pero al final acepté.
Le dije a Grace que Ulrik me llevaría.
—Adios Eros –dijo mientras me abrazaba– por favor, protéjase, usen condón.
—¡¡POR DIOS GRACE!! –empecé a reír– no va a pasar nada esta noche, te lo juro.
—Me han jurado muchas cosas, pero nunca las cumplen, pero vamos a decir que te creo.
—Boba - dije y ella me dio un beso en la mejilla.
Me despedí de los otros chicos y ellos se fueron.
Quedándome yo en la discoteca con Ulrik.
Me dirigí donde estaba la mesa de Ulrik.
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Ya son las 3:37 de la mañana.
—Ulrik –lo llame–, ya me quiero ir.
—Ok, yo te llevo –dijo y se levantó del asiento.
Comencé a caminar detrás de él para salir del bar.
Cuando salimos le pasaron el carro, no cualquier carro, esas camionetas blindadas que usan los presidentes y lo mire. Ulrik me regaló una sonrisa y me abrió la puerta de la camioneta, entre y cuando ulrik cerró mi puerta se montó él.
Cuando él se montó en el lado del conductor, comenzamos camino a mi apartamento.
La camioneta de Ulrik era súper lujosa. Era una "Cadillac Escalade" súper increíble esta camioneta.
Después de darle la explicación de donde yo vivía llegamos.
Estacionó el carro en frente de la puerta del hotel.
—Gracias por traerme –le regale una sonrisa.
—Ok, y gracias por quedarte en el bar conmigo, me la pase súper bien.
—Adiós Ulrik –abrí la puerta del carro.
—Espera –dijo y yo volteé a verlo–, ¿me podías dar tu número? Para poder salir otra vez algún día.
—Si, claro - él sacó su teléfono, apuntó mi número y yo le di un beso en la mejilla y me baje del carro.
Entré a la recepción y arranco el carro.
Cuando llegué a mi apartamento, abrí la puerta y me dirigí directo a mi habitación.
Necesitaba dormir.
Me quite la ropa y me acosté a dormir. Estaba cansado por todo lo que bailé y canté hoy.
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EDICIÓN EDITADA 2022 ✨
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