~Capítulo 4~
Me giré lentamente hasta encontrarme con los hermanos Lehner, uno me miraba con una sonrisa y el otro con un semblante frió ya ustedes sabrán identificar quién es quién.
- Finge conmigo - le susurre a Logan - Hola queios companeros - fingi estar borracha, aunque lo estaba pero no tanto para que se me trabara la lengua.
- Emily ¿Cómo te va? - preguntó Kyle sonriendo.
- Bien - miré a logan y estaba confundido - ¡Oh! Logan el es Kyle Lehner y su hermano el sim...perdón Ian Lehner - corregí y aún tenía que mantener mi actuación - y par de simios...ups quero decir bellezas tropicales les pesento a Logan...mi n-novio - dije y al instante me arrepentí, ya qué vi como Logan abría sus ojos de par en par y como el ambiente se ponía un poquito pesado.
- Hola, mucho gusto - habló Kyle estirando la mano.
- Lo mismo digo - respondió Logan estrechando su mano con la de él.
- El es mi herma... ¿Dónde está? - miré al lado suyo dónde se supone que debería de estar el otro hermano, pero ese lugar estaba vacío. Ya no estaba.
- No lo sé - dije - bueno Kyle me tengo que ir, mañana si no te acuerdas tengo que levantarme temprano.
- Si, lo que no sé es como dejaste de estar borracha de un momento a otro - levantó una ceja y sonrió.
Abrí mis ojos y me di una chachetada interna. ¡Qué estupida!
- ¿De quie hablash? Yo etoy bolacha - dije lo más enredado que pude - buneo, nos vemos - tomé el brazo de Logan y salí casi corriendo de ahí.
- ¿Qué acaba de pasar? - preguntó Logan ya enfrente de su auto, era mejor que nos fuéramos de ese bar.
- Nada - dije.
- Entonces explicame de como pase de ser un amigo a un "novio".
- No hay nada que explicar - el miró y yo suspiré - ¡Está bien! No sabía que decir, ellos son mis nuevos jefes ¿Recuerdas el proyecto? - el asintió - pues yo empiezo a trabajar desde mañana en su empresa.
- Ya - dijo - pero estas consciente de que los acabas de llamar simios y bellezas tropicales ¿verdad?
- Y-yo, en mi defensa aún no estoy en mis cinco sentidos - dije y el rio.
- Lo único que quiero hacer realidad de todo esto, es la parte en que yo soy tu novio.
¿Qué?
-¿Qué?
- Hagamos eso realidad, así no todo sería mentira - se acercó a mi.
- Logan,no - le dije - ya habíamos hablado de ésto, ya no siento lo mismo por ti y eso que fuiste tú el que me dejo en la etiqueta de "amigos".
- ¡Ya lo sé! Pero me arrepiento, lo hice en el mismo momento que te dije eso.
- Ya no más Logan, hablaremos de esto otro día ahora no me siento bien.
- Está bien - suspiró - sube,te llevaré a tu apartamento.
~*~
Antes de entrar al edificio que sería mi "trabajo" e infierno al mismo tiempo, me tomé una aspirina para el dolor de cabeza, menos mal que ya me había tomado un café para poder estar activa o si no definitivamente ya estaría babeando en el suelo.
- Buenos días Señorita Morrison - saludó una de las secretarias "soy perfecta y lo sé" yo solo me limité a levantar la mano.
- Hola Emily - me recibio Kyle apenas se abrió el ascensor.
- Hola Kyle.
- Mi hermano no puede recibirte en este momento pero me ha pedido el favor -levanté una ceja - bueno, me ordenó que te recibiera y te instalará en lo que va a ser tu puesto mientras estas aquí.
- Está bien - suspiré - sólo espero poder acostumbrarme a esté lugar - señale todo el piso.
- No es tan malo una vez que te acostumbras.
- ¿Cuánto te tomo a ti acostumbrarte?
- ¿La verdad? aún no lo he hecho y eso que llevo aquí demasiado tiempo - abrí mis ojos y él se río - es broma Emily.
- La verdad dudo que alguíen "normal" se acostumbre a esto.
- Mi hermano lo hizo.
- Dije alguien normal - el río y me uní después.
Cinco horas. !Hace cinco benditas horas estoy sentada aquí! Mi trasero ya no aguantaba más, he leído demasiados manuscritos, he enviado y reenviado emails, he corregido algunos de ellos y al mismo tiempo he empezado el informe para mi universidad.
Necesito un descanso y por si fuera poco aún no he almorzado.
- ¡Hey! - me saludó Kyle.
- !Hey! - le devolví el saludo.
- ¿Cómo te ha ido en tu primer día? -sonrío.
- Pues mis ojos me arden,mi trasero me duele a montones,mis dedos están entumecidos de tanto teclear y no he almorzado aún, pero bien.
Se rió y se le formaron unas líneas en sus ojos que lo hacían ver aún más atractivo.
- Vamos te invito a comer,ya es tu hora de almuerzo.
- Creo que no sería muy adecuado que los demás me vean saliendo a comer contigo, digo con usted señor Lehner.
- Por favor llámame Kyle y tutéame por favor. Odio el "señor". ¿Qué pasa si todos nos ven? Hay algo malo que dos viejos amigos salgan a comer.
- Pero si apenas nos conocemos - repliqué.
- Si ya lo sé, pero las demás personas no lo saben - sonrío.
- Buen punto.
- Así que ¿Tienes 23 años? - me preguntó Kyle.
- Si - me metí un pedazo de carne a la boca - ¿Cómo lo sabes?
Enarcó una ceja.
- Emy estás "trabajando" para la empresa tenemos que estar al tanto de tú currículum - dijo pero yo solo me había quedado en la primera parte donde me dijo Emy, me gusta como lo dice parecía como una ligera caricia.
- Oh - me limité a decir y el soltó una risilla,miré a mi alrededor y observé el restaurante, era grande y con un aire sofisticado.
Me sentía fuera de lugar con tantas personas bien vestidas alrededor mío.
- ¿Qué te parece el restaurante? - preguntó.
- Es...grande - dije y me provocó darme una cachetada ¿grande? No se me ocurrió nada mejor - quiero decir, es bonito imponente aunque no es mi estilo de lugar.
- ¿Cuál es tú estilo?
- Algo menos intimidante, supongo. Más sencillo y relajado.
- Lo tendré en cuenta para la próxima vez - lo miré y me guiñó un ojo. Me sonrojé. ¡Por dios! ¿Desde cuándo empecé a sonrojarme cada vez que un hombre me guiña el ojo?
- Claro - dije.
Al regresar ambos charlábamos de cosas sin importancia, tomamos el elevador hasta llegar al último piso del edificio. Entramos y sentía algunas miradas curiosas y otras eran las de las mujeres para ser exactos recelosas. Pero sentí una que me puso la piel de gallina.
- ¿Dónde estaban? - preguntó con tono autoritario.
- Comiendo - respondió Kyle.
- Señorita Morrison hace más de veinte minutos que se acabo la hora de almuerzo, se supone que ya debía estar trabajando. Mejor dicho, debería estar en este instante sentada en su escritorio trabajando para hacer funcionar mí empresa y por lo tanto haciéndome ganar dinero - dijo recalcando el "mi".
Sentí que toda la sangre se me subía a la cabeza, traté de controlarme. Inhala,exhala,inhala, exhala. Emily inhala por el amor de Dios pensé.
- Claro, señor - la última me salió con un gruñido y me fue alejando hacía mi escritorio pero antes de poder irme del todo agregó.
- Por cierto, a dónde fueron también era mí restaurante - escuché como se burlaba y su hermano le propinaba un golpe en el brazo y antes de que se formará una discusión me alejé.
¿Cómo sabía a qué lugar habíamos ido a comer?
Luego pasadas unas dos horas bastantes largas, salió Kyle informándome de que ya podía irme. Miré el reloj y eran las seis de la tarde.
Me levanté de la silla y tomé mi cosas ya lista para irme, sentía todo mi cuerpo entumecido y mis ojos ardían. Necesitaba dormir.
Bajé por el ascensor y antes de que se cerrarán las puertas alguien entró. Sentí mi cuerpo tensarse y apreté más la cartera como si fuera me la fueran a robar.
- Señorita Morrison.
- Señor Lehner.
Se cerraron las puertas.
- Espero que mañana no ocurra ningún incidente como el de hoy - dijo rompiendo el silencio.
- No es para tanto - murmuré pero alcanzó a oír.
- Vaya que si lo es, un minuto que no trabajen es un minuto que no producen por lo tanto un minuto que no gano dinero.
Fruncí el ceño. Es un crío.
- Ah - dije no me importaba en lo más mínimo,solo necesitaba terminar mi informe y ya.
Silencio, había silencio y no era del bueno,era realmente incómodo. Me rasqué el cuello como sinónimo de que estaba nerviosa, siempre me pasa. Hasta que al fin se abrieron las puertas.
- Buena tarde - dijo, pero antes de salir sentí un ligero roce en mis manos y se me puso la piel de gallina.
- Ah si, lo mismo - dije y rápidamente traté de salir del edificio. Pero recordé que no traje auto.
Mierda.
Caminé hacía la salida fingiendo naturalidad pero realmente estaba sufriendo no quería caminar y tampoco tomar un taxi. Miré de nuevo el reloj ya iba a ser las seis y media de la tarde. Hoy no podría visitar mi madre.
No me di cuenta de que estaba parada en toda la salida del edificio hasta que un auto gris-plateado se estacionó frente a mi. Wow quiero un auto así. Vi que el conductor bajo la ventana y lo reconocí.
- Emily
- Hey - saludé.
- ¿Necesites que te lleve?
- No hace falta Kyle - sonreí - puedo tomar un taxi - aunque realmente no quería - además ya fue suficiente con el almuerzo, si los demás ven que me subí a tu auto pues ahí si lo mal interpretarían.
El sonrió.
- No importa - dijo - de todas formas son mis empleados - con ese comentario se me pareció a su engreído hermano.
- No te queda el rol de tu hermano.
Se encogió de hombros.
- Sube - dijo y esta vez no me negué. ¡Vamos! Era eso o ir caminando.
- Lamento la actitud de mi hermano - dijo de repente y yo lo miré - sé que es engreído pero no es mala persona.
- Seguro, de todas maneras no me importa,en estos momentos estoy más concentrada en acabar mi tesis.
- Ya se me había olvidado ese detalle ¿Cómo vas con eso?
- Bien, aún no lo he empezado a hacer espero a que pasen unos días y analizó la información.
- ¿Analizar la información?
- Si, mi manera de hacer un trabajo es diferente supongo. Primero determino como es el problema y escojo varias posibilidades de solución, a medida que pase el tiempo o periodo de observación empiezo a descartar las soluciones que planteé al inicio. Y así es más o menos como lo hago.
- Vaya, yo si apenas organizo mi tiempo - dijo.
Me reí y él me siguió, luego de eso empezamos a hablar de cosas sin importancia.
Pero ahí descubrí que le gusta la música clásica y que toca el violín y el piano, su color preferido es el gris y que en algún momento le gustaría tener una familia. Qué está ¡soltero y a la orden! Dato importante.
- Emily ¿No crees que deberías darme la dirección a la cual dirigirme? He estado dando vueltas sin saber para dónde voy.
Sentí mi cara caliente y me excusé, me sentía tan cómoda hablando con él que se me había olvidado. Se la di y en menos de diez minutos ya estábamos frente a mi edificio.
- Bueno aquí es - miré por la ventana el edificio y luego me giré para despedirme - Gracias Kyle.
- No hay de que - sonrío mostrando sus dientes. ¡Que lindo! - Espero verte mañana, te acostumbrarás - añadió al ver mi cara de disgusto.
- Eso espero - murmuré y me bajé del auto - Nos vemos mañana -me giré pero antes de poder entrar dijo.
- Mañana seguramente irás a comer conmigo, otra vez - lo miré y me guiñó un ojo. ¡Oh Dios mío! Arrancó y se fue, observé como se alejaba sentí mis mejilla encendidas, de nuevo. ¡Pero que me pasa!
Saludé a Pedro el portero, y el me recibió con una sonrisa cálida. Ese señor es un amor, tome el elevador y oprimí el botón del quinto piso.
Al llegar al vestíbulo, rebusqué en mi cartera las llaves y antes de llegar a la puerta, me quedé quieta ante la imagen. Observé a al persona que se encontraba sentado al frente de mi puerta.
- Logan.
*******
¡Volvi!
Realmente lo siento pero he tenido varios problemas y uno de ellos fue el celular.
¡Ahora tengo iPhone 6!
Bueno ya jajaja. Voten y comenten.
Multimedia: Kyle Lehner