"No quiero que te vayas." Susurro mientras abrazo a Leah con fuerza. "No quiero irme, pero mañana tienes un gran día y necesitas estar preparada". Ella dice y me aprieta aún más fuerte."¿Podemos almorzar mañana entonces?" "Cualquier cosa que quieras. Solo llámame cuando tengas un descanso, ¿de acuerdo?" Ella dice y toma mi cara.
Asiento con la cabeza y ella besa mis labios lenta y muy y suavemente, "duerme un poco". Ella dice.
La veo salir por la puerta y tan pronto como se va, entra mi hermana."Bueno, hola, te ves deprimida." Ella se ríe y arrastra su bolso al apartamento."Solo estoy cansaao." Digo y me obligo a actuar feliz."Cierto... ¿te vas a la cama?" Me pregunta ella. Asiento con la cabeza que sí y ella me detiene, "mírame". Ella dice. Le levanto las cejas y ella me lanza una mirada, "¿Te estás acostando con ella?" "Dios mío... ¡¿por qué todo el mundo me sigue preguntando eso ?! ¡No es asunto tuyo!" Me río y niego con la cabeza, un poco frustrado. "¿En serio? Soy tu hermana, Jennifer. Te estaba haciendo una pregunta simple. No actúes como si fuera a interrogarte por acostarte con otra mujer". Ella se queja, "¿cuándo ni siquiera hemos compartido este tipo de cosas?"
Respiro hondo y me calmo un poco antes de decir algo más. "Sí, me acuesto con ella. Te juro que si dices algo inteligente-" siseé. Lynda sonríe y cruza los brazos sobre su pecho. "Tenía la sensación de que lo estabas haciendo. ¿Qué es? ¿Solo por diversión? ¿Hay sentimientos involucrados?" Me pregunta ella. "Demasiado pronto para decirlo." Digo y camino hacia mi habitación.
Sé. No es demasiado pronto. Hay muchos sentimientos involucrados y me da náuseas pensar en eso. Me siento tan abrumada tan rápido...es ridículo.
*****
Entro en mi nuevo trabajo con una sonrisa en mi rostro. Hoyva a ser un buen día... de todos modos lo espero. Subo a la oficina de mi nuevo jefe como me dijo y lo atrapo en la puerta.
"Hola, Aaron." Digo y él sonríe y me da la mano con delicadeza. "Jennifer, que bueno verte." Él dice. "Lo mismo digo yo." "Normalmente no haría esto, y definitivamente voy a hacer enojar a algunas personas, pero en realidad tengo una pequeña oficina que está esperando a ser ocupada en este momento. ¿Te gustaría?" Él pide. "Yo-yo-yo no quiero pisar los dedos de los pies de nadie... es mi primer día." Digo tímidamente.
"Usted ya ha hecho eso, tiene el trabajo que más de algunas
de estas personas aquí han tratado de conseguir". Se ríe y señala al final del pasillo. Empezamos a caminar y me lleva a la oficina que mencionó. Abro la puerta y entro, este lugar necesita algo. Es tan...no lo sé.
"¿Estás totalmente seguro de esto?" Pregunto y me muerdo el labio. "Absolutamente, es tuyo. Decora como quieras." Él dice. "Muchas gracias, de verdad lo aprecio." Digo con una sonrisa. "De nada. Ahora, te daré tiempo para que te arregles, pero primero necesito que me eches una mano con un documento. Lo reenviaré a tu correo electrónico y si puedes revisarlo y enviarlo sería increíble". Él dice. Asiento con la cabeza y sale de la oficina. Este trabajo va a ser genial si sigue así... Me encanta tener mi propia área. Es tan... privado.
Varias horas después y termino teniendo que cancelar el almuerzo con Leah porque mi jefe quiere llevarme a almorzar. A Leah no le gustó demasiado la idea, pero no me sorprendió en absoluto. Ella se pone protectora, supongo. Ni siquiera soy suya, pero aún así...
Nunca en mi vida había estado tan feliz de ver mi propia cama. Me quito los zapatos y salto a la cama y me quedo ahí, totalmente quieta, durante varios minutos.
Casi me duermo y luego escucho... y siento... algo que me despierta rápidamente.
"¿Día largo?" Leah murmura mientras se cierne sobre mí, pasando su mano por la parte posterior de mis muslos expuestos. La miro rápidamente y sonrío y ella me devuelve la sonrisa. "¡¿Que demonios estas haciendo aquí?!" Yo jadeo. "Quería verte." Ella sonríe y yo recuesto la cabeza en la cama. "¿Como estuvo?" "Fue bueno, realmente bueno". Yo digo. "Yo sólo-" Me detuve a mitad de la oración cuando su mano pasa por debajo de mi vestido y toca mis bragas. "Ohh Leah." Digo y trato de darme la vuelta. "No, quédate quieta." Insiste y besa mi hombro.
Sus dedos me presionan más y los mueve de un lado a otro. "¿Por qué me haces esto?" Gimo y mi espalda se arquea un poco. "Porque me gusta la forma en que suenan tus gemidos." Susurra en mi oído y besa mi cuello. "Uh- está bien. Al menos ve a cerrar esa puerta..." digo y ella. sonríe, pero no se detiene. Esto continúa durante varios minutos y luego empuja mis bragas hacia un lado.
"Está bien, eso es suficiente. ¡¡LYNDA !!" Grito y obligo a Leah a alejarse de mí, rodando sobre mi estómago. "¿Qué?" Mi hermana pregunta y entra en mi habitación.
"Cierra mi puerta, por favor." Digo y ella me lanza una
mirada, luego mira a Leah.
"Asquerosa!. Espera hasta que suba mi música lo suficientemente alto como para ahogarlas a las dos." Ella dice y cierra la puerta.
Leah se ríe y me mira, "ahora tú... ven aquí". Ella sisea y agarra mi cintura y me desliza hasta el borde de la cama. Esta es la mejor parte de mi día, sin duda.
Aproximadamente una hora después, Leah y yo estamos aquí desnudas y felices.
"¿Sabes algo?" Murmuro mientras me acuesto sobre su pecho. "¿Qué?" "Comerte fuera es mucho mejor que hacer una mamada". Digo y ella se echa a reír al instante. "¡¿Qué?!"
"Eres tan tonta." Ella dice y miro hacia arriba y beso su mandíbula.
Ella me mira y nos miramos a los ojos durante unos segundos. "Leah, me has estado haciendo muy feliz." Susurro y paso mi mano por su clavícula. Ella se agacha y coloca un poco de cabello detrás de mi oreja, "Me alegro entonces". Ella dice y me besa lentamente. Yo también.