CUARTO AÑO
NARRA T/N:
Volví a Hogwarts después de las fiestas. Unos días antes de que la mayoría regresara. Se veía tranquila la escuela, blanca por la nieve. Vi a Stark sentado en la nieve.
—Oye, ¿Te has quedado aquí?—preguntó captado tu atención.
—Hola T/N, si. He pasado las festividades aquí.—contesta levantándose.—Que raro verte aquí estos días, pensé que volverías más adelante.
—Yo también pensé lo mismo Gryffindor, pero mi madre quiso venir. Le gusta cuando hay nieve en Hogwarts.
—¿Por qué?
—Por mi padre. Le recuerda a él.
—Oh... cierto.
Desvío mi mirada por detrás de Thomas. Vi a Snape.
—Te veo luego ¿Vale?.—digo despidiéndome.
Camino hacia donde estaba Severus.
—¡Snape!—digo para asustarlo.
Tuve éxito en eso.
—¿Qué quieres?¿Qué haces aquí?—pregunta tocándose el pecho.
—Esa no es una linda forma de saludarme ¿no crees?.
Tomo sus cosas y empezó a caminar. Lo sigo.
—¿Me has extrañado?
—Oh si. Muchísimo—dice irónicamente.
—¿No has extrañado mi presencia al menos? Molestándote como una buena amiga.—digo orgullosa y Snape ríe.
—Realmente estoy mejor sin ti. Pero veo que mis deseos nunca se cumplen.
—Que malo eres.
—Gracias, es mi especialidad.
Caminamos en silencio por unos momentos.
—Severus ¿Puedes ayudarme con algo luego?.
Snape me mira por encima de su hombro.
—¿En qué?.
—Pociones—digo a lo que él arquea una ceja.
—Grindelwald, los dos sabemos que no necesitas ayuda.
—¿Tú que sabes?. Solo ayúdame. Te esperaré en la biblioteca a las 5p.m.—digo mientras deja escapar un suspiro— Lo tomaré como un si. Te veré luego entonces.
Espere ansiosa. No lograba entender que me sucedía.
Lo esperé 10 minutos, pensando que iba a dejarme sola tomo mis cosas. Molesta claro esta.
—Me he quedado leyendo un libro—dice una voz detrás provocando que me asuste.
Era Snape. Le doy un golpe por haberme asustado.
—Me has asustado.
—Te recuerdo que has hecho lo mismo, y no te pegué.
Bufe y volví a sentarme. Snape tomo asiento lado mío dejando sus apuntes y libros sobre la mesa.
—¿En cual requieres mi ayuda?—pregunta con un suspiro.
—En esta que está aquí—digo señalando en mi libro.
La poción pimentónica, cura el resfriado. Básico.
—¿Qué es lo qué no te sale?.
—Cuando trato de agregar los ingredientes.—digo mientras abre su libro.
Estaba llena de anotaciones.
—¿Cuántos sueles poner?—pregunta mientras le explico.
Pasamos unas horas analizando unas pociones más. Luego de ello me acompañó hasta mi Sala Común y se fue.
No necesitaba ayuda con las pociones, las sabia perfectamente pero quería pasar tiempo a su lado.
NARRA SEVERUS:
Era de noche. Mi cumpleaños a punto de terminar. Estaba solo en mi Sala Común armando algunos hechizos para contraatacar a los inútiles de Gryffindor. Alguien entra por la puerta.
Grindelwald. La miro extrañado, ¿Cómo es qué sabe la contraseña? pense.
—¿Qué haces aquí?—preguntó guardando lo que estaba haciendo.
Me miro sonriendo extendiendo sus brazos con una caja.
—Es para ti, ábrelo.
—¿Cómo creeré que no es alguna broma?. Mejor no gracias.
—Vamos aburrido. Hazlo.
—No, gracias.
—Agh.
—Esta bien.
Me acerque lentamente mientras tiraba de la seda que estaba atada sobre la caja. Saco la tapa dejando ver un pastel.
"Feliz Cumpleaños mi pequeño".
—Es por parte de tu madre y Lily. Aunque Lily dijo que luego te daría otro pero en fin.
—Gracias... Grindelwald.
—No hay de que.
Tome la caja y me senté en el sofá. Mire por unos minutos la torta. Grindelwald tomó asiento junto a mi.
—Sabes... se sintió algo vacío no estar contigo allí.—dice llamando por completo mi atención.
La miro con los ojos abiertos como un plato.
¿Sin mi? pensé.
—Es decir... de que... osea... no estar molestándote.—aclara algo nerviosa.
—Así que ¿Te has aburrido sin mi?¿O la palabra es extrañar?—digo ruborizando a Grindelwald.
—Es "aburrido" la palabra. No te creas que tienes ese papel aún en mi vida Snape.
—Claro—susurre.
Ella dejó escapar un suspiro y abrió su campera Buscando algo en sus bolsillos. Sonrío al haberlo encontrado y volvió a extender sus brazos. Con una sonrisa embriagadora.
—Feliz cumpleaños Slytherin—dice con brillo en sus ojos.
La mire a ella y luego al regalo. Lo tomo y lo abro. Era una cadena plateada con un dije relicario.
—Este es de mi parte—dijo.
Abrí el dije y había una foto de mi madre. Trate de evitar sonreír, pero una curva se formó en mis labios delatándome.
—Linda sonrisa—susurra.—Deberías sonreír más seguido. Queda bien en tu rostro amargado.
La mire.
—Gracias T/N.
Hubo silencio y el sonido de la chimenea era lo único que se lograba escuchar. Nos quedamos mirando. Ella a veces inclinaba un poco su cabeza pero parecía no querer despegar su mirada de mi. Me agradaba esa sensación pero a la vez no. Mis latidos iban rápido, me sentía algo indefenso.
Su mirada se sentía cálida, acogedora y penetrante. La sentía tan cerca pero a la vez tan lejos. No se que es lo que ocurre conmigo. Por un segundo no me molestó que no fuese Lily.
Estoy confundido.
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Pufff hola que tal, espero que les guste el capítulo, saben que pueden votar o comentar, siempre ayuda.
Cuidense, lxs quiero🌈