—Bien ahora dime de donde conoces a mi omega— Mingi negó.
—Una vez más, no lo conozco pero aquí la razón por la cual se me hacía conocido— Le entrego una carpeta— En pocas palabras sus padres me deben dinero o me debian porque aparentemente murieron en extrañas circunstancias— Yunho lo miro— Jongho nos busco algunas veces para saber cómo pagar esas deudas.
—Nadie lo toco ¿Cierto?— Mingi negó dudando un poco— ¿Seguro?
—En realidad no lo sé— El rubio gruñó— No fui yo quien lo atendió, a mi sólo me pasan los mensajes, pero lo dudo, saben cómo se pone Hongjoong cuando alguien toca a un omega.
—Igual no me convence— Al castaño no le sorprendió para nada.
—No me sorprende, siempre lo haces ¿Le vas a preguntar a él?—Yunho asintió— Perfecto tengo que buscar reemplazos.
El mayor rodó los ojos y siguieron conversando de otros temas aparte, hasta que recordaron que debían volver a sus casas con sus respectivos omegas.
Yunho se sentía ansioso por llegar a su casa y mimar a su omega, ya que llevaba horas sin verlo e iba a aprovechar que no tendría que ir a la empresa. Apenas llegó y entro a su casa pudo notar un cambio en el ambiente, frunció levemente su ceño y camino con prisa hasta la habitación donde suponía estaba Jongho, mientras se acercaba averiguo que el cambio se debía al aroma de su omega el cual era intenso, gruñó molesto cuando no vio a nadie fuera de la habitación donde dormía con Jongho, su mente lo traicionó por un momento, y más cuando escuchó suaves gemidos en el interior. Y cuando entro se encontró con la sorpresa de ver a su pedacito de cielo acostado boca abajo con su trasero alzado con dos de sus dedos en su interior. Si era sincero jamás se imagino ver a su omega de esa posición tan comprometora, pero ahí estaba admirando a su pedacito de cielo masturbándose y soltar suaves gemidos y lloriqueos, sin hacer tanto ruido cerró la puerta y se recargo en está para seguir observando.
—¡Yunho!— Chilló cuando alcanzó a rozar con su punto.
Jongho estaba profundamente concentrado en su propio placer que ni siquiera había notado que el aroma de Yunho estaba más presente que antes.
No sabía muy bien como era que había terminado en esa posición, él estaba leyendo en lo que esperaba a su alfa y cuando reaccionó ya le había pedido al alfa que cuidaba la puerta de su habitación que se fuera pues Yunho estaba por llegar y después de eso se desvistió apurado para comenzar su trabajo y sumirse en el placer.
Siguió sin notar la presencia del alfa y bueno este tampoco quería que lo notará al menos no aún, estaba maravillado de tal acto que su pedacito de cielo estaba protagonizando. Hasta que Jongho finalmente llegó a su esperado orgasmo dónde soltó su nombre en un lindo gemido, saco sus dígitos de su interior y se dejó caer rendido en la cama para recuperarse de lo que acababa de suceder, se sentía ligeramente avergonzado, frunció el ceño al notar que el aroma de su alfa estaba más presente, se levantó asustado y su vista se encontró con Yunho.
—Hola cielo— Jongho se sonrojó con fuerza— ¿Todo está bien?— El pelinegro abrió sus boca para hablar pero nada salió de la vergüenza que sentía— Nunca me imaginé verte de esa forma, pero eso ocasionó un problema— La inocente mirada del omega no le ayudó mucho a la erección de Yunho.
—A-alfa— Yunho alzo una de sus cejas.
Yunho se acercó y Jongho no evito jadear al distinguir había tentado a su alfa sin querer, esa no era su intención pero tampoco era como si le molestará.
[…]
—No, no— Jongho detuvo a Hosung cuando apartó bruscamente a un alfa que se le acercó.
Sabía que esas órdenes eran de Yunho, pero no le gustaban al menos no de esa forma cuando no estaba en peligro.
—Lo lamento, se disculpó por el alfa ¿Necesitas algo?— Le preguntó amablemente.
—S-si, me acaban de transferir y estoy un poco confundido— Jongho ladeo su cabeza— Pero si no puedes está bien— Murmuró notando las amenazantes de los alfas detrás del lindo omega.
Y no, no eran que los alfas estuvieran en esa posición por órdenes de Yunho, si no que ese alfa los alertaba demasiado, la forma en que se había acercado a Jongho no había sido con dudas o tímido, sino seguro de a quien se estaba dirigiendo por eso Hosung reaccionó ante la amenaza. Ese día por primera no estuvieron tan alejados de Jongho, tenían que estar cerca por si pasaba algo, ese alfa no les genera a confianza.
—¿Y como te llamas?— El tono amable de Jongho seguía ahí, sin notar que los dos alfas a su cuidado estaban en alerta.
—¿Sejun?— Murmuró con una impresionante duda, que hizo desconfiar aún más a Geumhyuk y Hosung— Lim Sejun— El pelinegro asintio con una inocente sonrisa.
—Yo soy Jongho, se supone que aquí es tu clase— El alfa miró el lugar— Bueno yo debo irme, fue un placer ayudarte.
—Gracias, enserio— Jongho negó.
—No fue nada, adiós— Antes de que se diera vuelta tomo el brazo de Jongho.
Aterrando a más de uno que veía la escena y no era porqué los alfas que cuidaban a Jongho se acercaron alertados, si no que alguien más estaba siendo espectador de como un alfa tomaba el brazo de Jongho, pues el único que podía tocarlo era Yeosang por ser su amigo, nadie más.
Un gran gruñido se escuchó por todo el pasillo y Jongho lo reconoció sin ningún problema, se zafó de Sejun y busco a su alfa, cuando lo encontró le preocupó al ver su mirada oscurecida, eso sólo significaba una cosa, el alfa rubio se acercó a pasos amenzantes y su rostro no lograba más que intimidar a todos menos a Jongho. Al llegar tomo la cintura de su omega ynlo atrajó a su cuerpo, bufando de molestia por ese alfa que había tocado a su omega como si nada, como si fuera un omega más de todos los de ahí.
—Es mi omega— Jongho instintivamente le mostró su marca, la cual había sido renovada recientemente— No puedes tocarlo como su fuera un omega más, y si vuelves a tocarlo habrá consecuencias.
El alfa más bajo por unos segundos alzo una de sus cejas retando las palabras de Yunho y eso sí lo notó Jongho antes de cualquier acción por parte de nos alfas, él decidió llamar a su alfa.
—Yun— El rubio lo miro— ¿Podemos ir a comer ya?— Le pidió.
—Por supuesto, cielo— Jongho entrelazó su mano con la del mayor y comenzó a caminar junto a él.
Sejun rodó los ojos y entro a aquel salón que el omega le ayudo a encontrar. Jongho le pareció lindo y ahora entendía el irracional odió a ese omega, de su prometido, Yunho lo prefería a él sobre cualquier cosa, era su prioridad número uno, no importaba si pensaba atacar él se calmaría por su omega, él lo daría todo por su omega, y no dudaba que sería capaz de morir por él.
A Yunho debieron decirle que jamás dejará a la vista sus debilidades, o sus enemigos podrían utilizarlas.
Si gente el drama está próximo a llegar a esta historia :)