Tu antebrazo aún cubría tu rostro con lágrimas pero dejo de hacerlo cuando sentiste algo entrar en tu interior, uzui había puesto dos dedos en tu intimidad y con su otra mano acariciaba uno de tus senos, no pudiste evitar gemir pero era de placer? o de dolor?.
El peliblanco sacó sus dedos de tu interior para poder sacarse el kimono completo, pudiste ver su torso desnudo y trataste saliva cuando viste su miembro erecto "es muy grande" pensaste.
Al ver el miembro de Uzui retrocediste pero este agarro tus piernas y las abrió.
- Porque quieres huir? La diversión está por empezar- te dijo con una sonrisa lujuriosa y empezó a rozar su miembro en tu entrada.
Sin previo aviso el peliblanco entro en ti de una sola escotada y se quedó ahí para que te acostumbraras a su tamaño por tu parte lágrimas salían de tus ojos acompañado de gemidos.
- No llores... - sus manos se acercaron a tus mejillas para limpiar tus lágrimas, ibas a decir algo pero sus labios ya estaban besando los tuyos, te sorprendió su reciente acto es decir hace unas semanas te decía que eras lo más feo de este mundo y ahora te estaba besando con su miembro dentro de ti.
Uzui te dejo de besar para acomodar sus manos tu cintura, este saco la mitad de su miembro y lo volvió a meter de una fuerte escotada, entraba y salía de tu interior, al principio te dolia pero ese dolor de formó en placer.
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Unos rayos de sol alumbraban tu rostro haciendo que te despertarás al abrir tus ojos entraste en pánico por qué no estabas en tu habitación y estabas desnuda, al darte vuelta estaba uzui durmiendo a tu lado, completamente desnudo, recordaste todo lo que había pasado y al intentar pararte vino un dolor profundo en tu espalda.
Necesitabas irte de esa habitación sin hacer el más mínimo ruido te pusiste el kimono que te habían prestado, fue milagro que te pusiste de pie y saliste de la habitación.
Aún era muy temprano te diste una ducha rápida querías evitar ver a las esposas de uzui, ¿que excusa les darías después de que te acostaras con su esposo?, Después de aquella ducha cálida saliste de la casa a comprar algo para comer, en realidad solo querías evitar a uzui y a sus esposas.
Mientras escogías unas verduras sentiste una mano tocando tu hombro rápidamente te diste la vuelta para ver de quién se trataba y ahí estaba con una hermosa sonrisa era Kyojuro.
- Es bueno verte, ya que estás aquí no es necesario visitar a uzui- dijo sonriendo, cuando estabas por contestarle el te arrebató la bolsa donde cargabas las verduras - déjame llevarlo por ti o podrías lastimarte. - al escuchar eso solo soltaste una carcajada y el te miro con confuncion.
Ya que habías terminando de hacer tus compras kyojuro te acompañaba a tu casa era amable, caballeroso y hermoso pensaste, antes de llegar a casa pudiste notar a un hombre parado en frente de la casa y si era uzui.
Al verte soltó un pequeña sonrisa pero se borró cuando te vio que te acompañaba kyojuro tanto como tú y el rubio se detuvieron, le quitaste la bolsa a rengoku y estabas lista para irte pero kyojuro te detuvo para acercarse a tu oído para decirte "espero volver a verte" y el rubio te dejo para que te marcharas, mientras que tú estabas más roja que un tomate y con lentitud entrabas a la casa te habías olvidado por completo que uzui estaba ahí.
- Oye - su voz era fría que al escucharla te trajo al mundo real - lo de anoche jamás sucedió entiendes? Si te atreves a decirle algo a mis esposas te mataré - entro primero a la casa dejandote con la piel erizada con un poco de miedo entraste a la casa y encontraste a 3 mujeres con una hermosa sonrisa.
- Bienvenida a casa _____!- dijieron las tres al mismo tiempo, sin previo aviso tus lágrimas salieron y las tres mujeres al verlo corrieron hacia a ti y te dieron un abrazo preguntando por que estabas llorando. Te sentías terrible por acostarte con Uzui y engañarlas pero no podías decirles nada solo las abrazabas y llorabas.
Creo que está historia sera unos 5 o 7 capitulos para no hacerla muy larga.