Icarus

By Gameover475

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Harry es un chico omega que a simple vista parece tenerlo todo, absolutamente todo, lujos, joyas, dinero, una... More

Capítulo 1 "Styles"
Capítulo 2 "Vendido"
Capítulo 3 "Recorrido"
Capítulo 4 "Libertad y Sentimientos"
Capítulo 5 "Él"
Capítulo 6 "Presente, pasado y futuro"
Capítulo 7 "La bella y la bestia"
Capítulo 9 "Tres deseos... tu y yo"
Capítulo 10 "Fantasmas del pasado, fragmentos de un corazón roto."
Capítulo 11 "Las sombras de la Luna, una manada en tinieblas"

Capítulo 8 "Verona, otra parte de ti"

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By Gameover475

Sí, se puede decir que la tensión era palpable, Liam parecía mucho más amenazante, en realidad, Louis también tenía una pinta intimidante y seria que le daba algo de miedo, el silencio era tal, que si una aguja caía se podría escuchar su sonido, Tristan estaba siendo juzgado por los ambarinos ojos de Zayn, Perrie, Camila y Niall, pero quien realmente parecía querer borrarlo de la faz de la tierra era Louis, ignora el temblor de su mano, realmente le cuesta creer que ese sea el mismo chico que descansaba cómodamente en su regazo ayer en la noche.

Vestido de negro como la primera vez que lo vio, sus ojos no expresan alegría, ni inocencia, nada, nada de lo que acostumbra a verse en él, esta vez se puede ver a un desalmado, en cualquier momento Harry teme que los omegas en la habitación vayan a llorar, incluyéndole a él, no ayuda el hecho que un arma cuelgue de una funda negra atada a su cintura, luce como n potencial peligro y si no lo hubiese visto antes, estaría aterrado, por suerte, no es el destinatario de aquel frívolo desprecio que expresa el joven alfa, sino Tristan.

¡Lo que hiciste estuvo mal! – gruñe Liam, Zayn es el único que no está ni en lo más mínimo, incómodo y ansioso, el omega está impasible, como si nada pasara - ¡Y no es solo esto Tristan! Tu comportamiento en los últimos meses me ha hecho enojar, en esta casa hay límites y hay reglas, o las respetas o te vas, pero no soy tan desalmado como para echarte del único hogar que tienes.

El omega de ojos azules lo mira arrepentido y esperanzado, a Harry le da algo de pena verlo así... Tristan es solo un cachorro, justo como está ahora, se ve mucho más joven de lo que en realidad es, sus ojos están rojos e hinchados, se nota que no ha dormido, se ve pálido y desprotegido, un recuerdo amargo le hace apartar la mirada.

L-lo l-la-lamento – logra decir en voz baja.

Claro que lo lamentas – agrega Zayn con ferocidad – y lo vas a lamentar mucho más, ya es tiempo de que dejes de comportarte como un maldito cachorro, sé que lo eres, pero si has decidido que no quieres serlo, enfrenta las consecuencias y responsabilidades de un adulto.

Las palabras provocan que el omega jadee, su mirada azulada baja hasta el suelo, la vergüenza cubre su rostro, Niall luce como si quisiera decir algo, pero opta sabiamente por callar, Camila está incómoda en esta situación y Perrie guarda silencio, Harry se mantiene pendiente de Louis quien en verdad empieza a preocuparle; no por el hecho de que se vea distinto, sino porque puede ver a través de sus ojos que hay una tormenta en su mente, navega en aguas peligrosas y lo peor de todo es que está dispuesto a enfrentarlo solo.

Zayn... - habla Camila con voz maternal, Liam levanta su mano ordenándole callar.

Hoy mismo te vas a Escocia – decreta sorprendiendo hasta al mismo Zayn – dos meses, tendrás al igual que todos un trabajo y funciones que desempeñar, y espero que cuando regreses, entiendas tu lugar y madurez en el proceso.

N-no, P-por fa-vor Liam, haré lo- lo que q-quieras... - súplica desesperado el chico – l-lo prome-meto.

Ve a empacar – es todo lo que dice.

Liam creo que estás... - interviene Niall

Sicilia sabe lo que hace – los omegas se miran entre ellos con temor, luego observan a Tristan que llora a lágrima viva, Louis no muestra emoción alguna – Tristan, a empacar.

Liam... -

¡Te di una orden! – gruñe molesto, Harry abraza su torso, lágrimas se forman en sus ojos y Arae gimotea asustado, su mirada se encuentra con la de Louis, el chico niega, intenta distraer su pánico mirando atentamente al otro lado. ¿Qué hay en Escocia? ¿Quién es Sicilia? ¿A qué le temen los omegas? ¿Tristan merece ese castigo? La imagen del alfa indefenso y asustado llega a su mente y la última pregunta se responde sola, pero aún así muchas más llegan ¿A que irán a Italia? ¿Qué sucede entre Louis y él? ¿Tienen algo? ¿Por qué anoche pudo tocarlo? ¿A qué se debe la fobia de Louis al tacto? ¿Quién le hizo eso? ¿Por qué no habla? ¿Por qué todos creen que él es la respuesta a los problemas del alfa? Son demasiadas preguntas para las cuales no tiene respuesta, eso lo estresa, las cosas se están saliendo del orden y su vida lo que más necesita es estabilidad, no puede esperar menos, después de todo está metido con la mafia, ¡La Mafia Inglesa por amor a Dios! No hay un retorno y no quiere regresar, pero todo aquello amenaza con destruir los pocos suministros de cordura que le quedan.

Pueden retirarse – indica Liam en voz baja, pero imperiosa.

No hay que repetirlo dos veces, el primero en escapar corriendo es Tristan, Niall lo observa, intercambia una mirada con Camila y ambos lo siguen apresuradamente, Perrie, Louis y él salen del despacho sin querer hablar, lo siguiente en su lista es ir escaleras arriba y buscar la protección de su nido, porque lo necesita desesperadamente, su corazón está a punto de romperle las costillas por lo rápido que late.

Iré a ver como se encuentra Mike – dice Perrie nerviosa – Luke también debe estar cansado, los mellizos son... complicados ahora.

Pasaré más tarde, yo solo... - hace un gesto indicando todo aquello, Perrie asiente comprendiendo – es demasiado por ahora.

Te entiendo Harry – ella le regala una dulce sonrisa antes de caminar por el pasillo.

Louis lo observa, le rehúye la mirada como el cobarde que es, se aleja, a grandes zancadas, su lobo gimotea triste, Liam es implacable cuando habla, realmente da miedo y su Louis... Dios, él es solo escalofriante, como si no fuese humano, luciendo como el mismísimo lucifer entre el caos, no puede creer que ese mismo chico se acurruque en su regazo.

Una mano se cierra sobre su muñeca, grita, escucha una risa escandalosa, se aparta bruscamente y se lleva las manos al pecho, suelta aire por la boca, no pasa nada, todo esta bien, se repite, desgraciadamente nada de eso haya sentido en ese momento, sus ojos se llenan de lágrimas, un puchero marca sus facciones, odia ser omega cuando la sensibilidad lo supera y cede a sus emociones, normalmente eso solo pasa cuando esta cerca de su celo o cuando se somete a muchísimo estrés.

Perdón – susurró avergonzado.

Una mano fuerte se desliza dentro de la suya, es reconfortante, Louis tira de él, caminan lentamente por el lugar, trata de calmarse, pero no está llevando bien tantas cosas, para él no es bueno manejar tanto estrés. Para nadie en realidad.

Se ven frente a su puerta en menos de lo que espera, el alfa continúa como si nada, adentrándose en la habitación, arrastrándole hasta el nido, Harry no habla, simplemente se acomoda bajo las sábanas, con Louis a su lado, las feromonas que suelta ayudan a relajar su cuerpo, dándole una sensación de seguridad, Arae suspira adormilado, Deneb está muy cerca del lobo marrón, calmando sus nervios de forma efectiva.

Cuando el omega despierta, lo primero que se le viene a la mente es su episodio de drama en el pasillo, a su lado, Louis duerme pacíficamente, manteniendo su distancia del omega, tan solo sus manos están unidas en medio de ambos, sonríe, solo... su Louis, se queda viéndole descansar durante un rato, de alguna manera le gusta que el alfa confié en él para quedarse a su lado, porque Louis es muy quisquilloso con los otros, pero no con él, lo que es increíble, lo hace creer estúpidamente que es especial para el alfa, aún cuando quizás no es así.

Suelta su mano y se levanta, recuerda a Luke, su alegría decae, pero necesita ver al rubio y asegurarse de que este mejor, además de acompañarle un rato, supone que los gemelos están asustados y confundidos, lo suficiente como para hacer preguntas o llorar, suspira mientras toma la libreta más cercana y deja un mensaje para su al-... su nada, se sonroja y abandona la habitación.

Llegar a la habitación de Michael y su omega es complicado gracias a que se pierde varias veces, pero lo logra, toca antes de entrar, espera unos segundos hasta que escucha la confirmación para entrar.

Michael está dormido, se ve muy pálido, pero su respiración es constante, Luke está en un sillón viéndose cuatro veces peor que anoche, Lía duerme en su regazo e Ian se acurruca a su costado.

Hola – saluda sin saber que decir, Ian se levanta y corre a su encuentro, el omega lo carga

Papá está durmiendo y debo ser silencioso – susurra

Caminan hasta sentarse junto a Luke, el rubio está visiblemente agotado y preocupado, el omega puede jurar que no se ha movido de esa habitación en toda la noche.

¿Cómo está? – pregunta mirando a Mike, Luke suspira tembloroso.

No lo sé, Ed dice que solo necesita descansar – responde desanimado mientras acaricia la cabellera rubia de su hija.

Va a estar bien Luke – intenta animarlo – en un par de días ya estará mejor y cuidando de ustedes tres.

Cuatro – responde Luke, Harry no entiende a que se refiere, repasa todo lo dicho y sigue sin entender – jamás nos dejaría, mucho menos ahora que tendremos otro hijo.

Se queda anonadado, luego se alegra como si se tratase de él mismo, puede ver una chispa de alegría en Luke que se ve empañada por la preocupación.

¡Luke! – chilla de forma suave, atrae al otro omega en un abrazo de felicidad, lo que hace que se ría un poco – muchas felicitaciones, ¡Oh Dios! Que emoción.

Shisss – gruñe Ian – papi duerme, silencio.

Los omegas se ríen suavemente, el niño niega.

¿Mike ya lo sabe? – Luke niega

No se lo he dicho, pero creo que ya lo sospecha – dice mirándole – quería otro hijo desde hace tiempo.

Eso ha de ser muy lindo – comenta de la nada, Luke lo mira esperando que se explique – tener un alfa, una familia, todo lo que ustedes tienen, se ve como el sueño de cualquiera y eso es hermoso.

Lo entenderás mejor cuando tengas un hijo – asegura – se ve que serás una gran madre.

Siempre he querido ser madre – responde sonriendo – pero quizás no es lo mío.

¿Por qué crees eso? – pregunta Luke confuso

Se supone que debo tener un alfa, para crear un bebé, una marca y todo eso, la vida de ensueño de las películas – habla recordando todo lo que su madre decía – y ningún alfa va a quererme siendo como soy.

Harry – la exasperación del rubio lo sorprende – eres precioso, tanto por fuera como por dentro, cualquier alfa del mundo sería afortunado de estar contigo y darte hijos, deja de decir tonterías... Además, en esta casa hay muchos chismes acerca de ti y cierto alfa cuyo nombre no diré.

Sus mejillas se colorean acusadoramente y Luke se carcajea un poco.

¿Qué está pasando entre ustedes? – quiere saber, el omega rizado suspira, incluso él mismo desearía saberlo

No lo sé, hay muchas cosas que no entiendo, tanto que quiero preguntar y no lo hago porque de alguna manera sé que voy a herirlo, pero necesito saber antes de esto se vuelva más grande – Ian se acomoda en su hombro prácticamente dormido

Eres un gran chico – su mirada verde musgo se llena de orgullo al decirlo – se que encontraras la forma de llegar a él.

Me asusta lo que siento – confiesa

Al inicio es así – Luke se pierde en su cabeza un momento, hasta que habla otra vez – él también está asustado, cuando lo conozcas más... entenderás cosas que pueden parecer, ¿Complicadas?, sí, complicadas, ahora, debo ser honesto, Louis es como un hermano para mí, lo he visto desde que éramos niños básicamente, para él esto es difícil, créeme, tienes que esperar que el mismo te lo diga, solo voy a pedirte, que no lo lastimes.

¿Por qué haría algo así? – pregunta

No es como los otros alfas, eso ya lo sabes, pero la mayoría lo ve como algo malo, son imbéciles – gruñe enojado, está de acuerdo – según las normas de la sociedad, no es un "alfa normal" y se que le afecta que lo consideren inferior, aunque créeme que no lo es, puede ser lindo, pero es un completo bastardo cuando quiere serlo, jamás he visto que le tiemble la mano cuando dispara y no conozco a nadie que sea más ágil al volante, ah, claro y pase lo que pase, no lo hagas enojar, porque no sabes lo que se te viene encima.

¿Qué quieres decir? – su omega se asoma con curiosidad.

Harry – empieza muy serio – Louis es mafioso, un asesino y es despiadado cuando se trata de proteger a los suyos, lo que tu conoces es su parte relajada y familiar, pero no sus demonios internos y mucho menos lo aterrador que puede ser cuando cumple su función aquí.

Entiendo – susurra algo aturdido

No lo entiendes, no todavía, pero cuando regreses de Italia, probablemente pensaras otra cosa – advierte, dentro de Harry hay algo que se rehúsa a creer en las palabras del rubio, pero su parte consciente, le dice que esto va a salir muy mal.

¿Por qué me estás diciendo esto? – cuestiona el rizado

Porque quiero saber si te alejaras antes de que lo lastimes o en verdad sientes algo muy fuerte por él, lo suficientemente fuerte como para que lo salves – su mirada regresa a Mike y se ve algo brillante por las lagrimas, ¿Salvarlo? ¿De que?

¿Omega? – un carraspeo y luego la voz cansada del alfa rubio los sobresalta

¡Mike! – grita Luke despertando a Lía, la niña se aleja y el omega corre a la cama, besa la frente de su alfa y lo abraza – ¡Gracias a la luna estas bien!

Tranquilo Lukey – Michael lo abraza con suavidad, a lo que el omega le gruñe enojado.

Estoy muy enojado contigo, idiota, prometiste que te cuidarías y mira como has regresado – regaña asustando al alfa - ¡Casi muero de preocupación! ¿Tienes idea de lo que pase? Dios, pensé que tendría que cuidar yo solo de nuestros hijos, nunca vuelvas a hacerme algo parecido Michael Gordon Clifford

Luke... lo siento – de verdad suena arrepentido, Harry sonríe, Ian y Lía miran todo muy tranquilos.

Claro que lo sientes – recalca antes de besarlo, aquello es tan hermoso, piensa el omega – ahora recupérate, porque vas a necesitar mucha paciencia y fuerza para los siguientes nueve meses.

¿Qué? – Mike se ve confundido mientras se aparta de Luke

Sí Mike, serás papá otra vez – suelta como si nada, bueno... Luke es Luke.

¡Oh por La Luna! – grita el chico abriendo mucho los ojos

¡Quédate quieto! – gruñe el omega – tienes una herida de bala en el costado, te puedes hacer daño.

¿Mami tendrá un bebé? – pregunta Ian emocionado

¡Sí! – responde Michael eufórico - ¡Tendrán un hermanito!

Y empiezan los gritos, los dos cachorros brincan del sofá y corren con sus padres, ellos celebran como la familia que son, Harry se aleja en silencio, cree que ha alcanzado su objetivo cuando Luke le llama.

Harry – dice sonando esperanzado, ellos se miran, en sus ojos hay algo extraño – se que tú puedes salvarlo.

Asiente sin saber a que, Michael se ve muy perdido mirándolos a ambos, sale de la habitación, su mente está hecha un lio y su omega no deja de clamar por su alfa, lo único que pide es no tomar una decisión errónea y no lastimar a Louis.

El día pasa lentamente, no ha visto a Louis desde que regreso a su habitación, lo que le da mucho en que pensar, sobre todo en su conversación con Luke, termina con un dolor de cabeza insoportable, para relajarse decide ordenar su maleta, la última vez que viajo a Italia su padre quería casarlo con Marco Grasso, un hombre diez años mayor que él, cuya empresa de vinos era la más famosa del país, gracias a la luna, nunca se llevaron muy bien, lo que no llamó el interés del empresario, pero dejó muy malos recuerdos para Harry, soba su mejilla recordando cuando su padre lo golpeó y dijo que era una vergüenza para su familia, luego de eso estuvo castigado todo el viaje, sin derecho a tan siquiera asomar su nariz a la ventana.

Una ola de malos recuerdos llega, provocando que llore, pero no deja de empacar, porque es momento de dejar el pasado atrás y seguir con su vida, alejar todo aquello, ya no está con sus padres y nunca volverá, necesita ser fuerte, no va a derrumbarse otra vez, respira hondo y limpia sus lágrimas, no va a ser débil otra vez.

La casa está en silencio, lo que usualmente es malo, Tristan se ha ido, durante la cena todo se siente diferente, como si una sombra se acercará de forma amenazante faltan varios a la mesa, Louis no baja a cenar, es frustrante la manera en que Arae insiste en buscarlo, no lo hace, necesita darle su espacio, sabe que no es el único confundido con el giro que las cosas han tomando entre ellos, la cena termina y todos suben a sus habitaciones, se remueve en su cama no queriendo estar en el nido que tiene el olor del alfa, no se siente preparado para acostumbrarse a algo que quizás no pase o no deba pasar, porque siente que quizás está malinterpretando lo que el alfa quiere, confundiéndose con sus propios sentimientos, todo es muy confuso, como caminar a ciegas entre la neblina, odia sentirse así.

Lo último que se le ocurre como única opción para despejar su mente, es salir de su habitación a media noche, recorre la casa en silencio y tratando de ser sigiloso, va arreglado para entrenar, se ha recogido los rizos que ahora son más largos en una colita detrás de la cabeza, algunos nos son lo suficiente largos como para estar atados, por lo que caen por su rostro, el gimnasio está vacío, tal como esperaba, busca entre los objetos de entrenamiento los guantes, Zayn siempre es quien los coloca, esta vez lo hará él, una vez siente que están bien puestos, descarga su rabia contra el saco.

No tiene conocimiento del tiempo que pasa, solo que de alguna forma eso ayuda, cada golpe le deja un poco más libre, Zayn y Niall son grandes entrenadores, le han enseñado mucho en unos pocos días, lo suficiente como para sepa que los omegas no son débiles, que pueden ser letales si saben usar la inteligencia, golpea con más fuerza el saco, nunca debió creer en las palabras de sus padres, ellos son estúpidos, un golpe cargado de ira hace eco en el salón, ¿A quien le importa si no es el omega perfecto? A nadie, porque ese es solo su asunto, odia lo que le hicieron creer, las cosas que lo obligaron a hacer, lo patético que es.

Una mano tira de su hombro, por instinto se aleja y tira un golpe, su corazón se acelera, solo está seguro de que debe defenderse.

¡Harry! – gruñe Zayn apartándose, él se detiene

¡Me asustaste! – le recrimina, gracias a Dios Zayn tiene experiencia suficiente como para que no haya logrado pegarle – lo siento.

¿Se puede saber qué demonios haces aquí a las dos de la mañana? – pregunta torciendo la nariz.

Necesitaba... entrenar – miente, muy seguro de que el omega moreno no le ha creído nada.

¿A esta hora? – asiente

Harry, no soy idiota, además estabas golpeando ese saco como si fuera la raíz de todos tus males – baja los hombros relajando su pose - ¿Qué pasa por tu mente?

Suelta un largo suspiro.

Muchas cosas Zayn – responde con la verdad

No voy a inmiscuirme en tus asuntos, pero te diré que intentes arreglarlo o no pensar en eso – aconseja serio

De acuerdo – se gira para soltar más golpes al pobre saco

Detente – ordenó el moreno – es suficiente por hoy Harry, ve a la cama.

Pero... - el chico niega.

No, se lo que haces y no funciona así, ahora ve a tu cama – está molesto, se quita los guantes con brusquedad, sin decir una palabra más sale del gimnasio, el sudor cubre su cuerpo, realmente necesita una ducha, una vez está en su cama, cae en un profundo sueño.

La dura verdad es que Zayn tenía razón, pero solo lo entiende cuando despierta muy tarde el día siguiente sintiéndose como la mierda y con los brazos doloridos, se ha perdido el desayuno, no quiere bajar, además no falta mucho para el almuerzo, se dedica a leer, porque eso lo hace desaparecer de la realidad por un tiempo.

Lo que tiene en sus manos es una historia de amor, como las que solía leer cuando era adolescente y pensaba que el príncipe azul iba a aparecer en cualquier momento y tendrían su felices para siempre, eso no pasa en la vida real.

Si, claro – gruñe cerrando el libro – ella debería escoger su salud mental en lugar de llorar por un idiota que beso a su mejor amiga para darle celos, gobernar el reino por si sola y mandarlo a ejecutar frente al palacio, por infeliz, entonces debe casarse con el príncipe de otro reino para aumentar su poder y nunca más ser la chica en apuros.

El resto del día su mal humor le impide salir de su habitación, ni siquiera le importa comer, lo único que desea es dejar de estar enojado y no sabe porqué le sucede eso, ni siquiera está cerca de su celo, ¿A que se debe su mal comportamiento?

Niall entra a su dormitorio a las seis de la tarde, junto a él Jade, la chica alfa lo saluda y toma su maleta, Niall comienza a hablar de algo divertido que hará en Italia y de cantidad de pizza que va a ingerir en los próximos días, cuando bajan descubren que Zayn y Liam ya se han marchado y los esperan el aeropuerto, Harry se pone nervioso al recordar que esta siendo buscado por la policía.

No puedo ir – dice alterado

¿Qué? – pregunta el rubio

No puedo pisar un aeropuerto, en cuanto lo haga me llevaran con la policía – informa justo cuando Louis baja las escaleras – no iré.

Ah Harry, inocente Harry – se burla Niall – ¿De verdad crees que alguno de aquí planeaba ir a un aeropuerto cualquiera? Venga deja de imaginar cosas locas, harás que lleguemos tarde.

Lo hala, Louis pasa por su lado ignorando deliberadamente su presencia, no puede decir que eso no doliera, mucho más cuando Deneb no apareció.

Ellos entran en el auto, Niall en el asiento del copiloto, Lauren conduce, Louis y él tratando de ignorar por completo la existencia del otro, creando una atmósfera extraña entre ellos, que está seguro de que Niall y Lauren notaron, no es muy cómodo viajar así, pero afortunadamente el viaje toma solo diez minutos, llegan a una pista privada, ahora entiende la diversión de Niall, se relaja un poco, un par de chicos recogen sus maletas del auto, Lauren se despide y regresa a casa, Harry sigue las instrucciones de Liam y sube al elegante avión privado, no es que no hubiese viajado en uno antes, pero es muy distinto al de su padre, en teoría es lo mismo, lo cual es difícil de explicar, escoge una fila de asientos y se queda junto a la ventanilla, no tiene nada que hacer, por lo que será un viaje muy aburrido, espera dormir, al menos.

Alguien toma el asiento a su lado, se encuentra con los ojos azules de Louis, está indeciso, Harry gruñe, ahora si quiere verlo, genial, aparta la mirada y arruga la nariz, desde ayer lo ha estado evitando, pues bien.

Recibe un suave golpecito en el brazo, luego algo cae en sus piernas.

"¿Estas molesto? :/" lo mira esperando que no sea en serio, pero el alfa parece de lo más normal, siente la necesidad de preguntarle ¿Tu que crees?

No – responde seco

"Sí estás molesto" asegura

¿Qué es lo que quieres? – pregunta ya harto

"Nada, lo siento" responde antes de alejarse, bien entiende que tal vez esta jodiendo las cosas, por lo que lo detiene

Louis – llama apenado – no te vayas, perdón si estoy siendo un idiota.

Él esboza una sonrisa mientras se sienta nuevamente, Harry extiende su mano y Louis la toma, aquello se ha vuelto una muestra común de afecto entre ellos, solo tomarse de la mano, sin segundas intenciones.

¿Sabes dónde iremos? – el asiente - ¿Me lo dirás?

Sus ojos brillan, su sonrisa le indica que trama algo, su cabello se sacude mientras niega.

Es injusto Lou – se queja de forma infantil.

Lo escucha reírse y eso provoca que su corazón se acelere, es el sonido más dulce que ha escuchado en toda su vida, tierno y único.

"Liam dijo que no puedo decírtelo, por tu propio bien" escribe con una carita triste.

Conozco Italia mejor que Liam – se jacta orgulloso – sabré dónde estamos en cuanto lo vea.

El vuelo no es tan interesante como creía que seria, después de jugar "uno" Louis se enojo con él cuando lo envió a tomar ocho cartas y cambio de color, entonces, para indignación de Harry, Louis dejo de prestarle atención alegando que había hecho trampa, por lo que el alfa lo ignoro durante lo que duro el vuelo, que en realidad fue poco, Niall por otro lado, los estaba viendo desde detrás de su revista y sonriendo sin que ellos lo notaran, Liam se encontraba dormido y Zayn resolvía un crucigrama, era el único que podría decirse, estaba cómodo con pasar tiempo encerrado, siempre tranquilo, tanto que llega a ser confuso para los demás.

Aterrizaron en una pista privada, nada sorprendente, pero lo curioso es que no parecía haber mucho a parte de eso, gracias a la oscuridad divisó que estaban en el campo, pero honestamente, no haber dormido la noche anterior le estaba pasando factura, lo cual era extraño porque durmió todo el día; para cuando estaban en el auto, el omega ya estaba más dormido que despierto, por lo que al estar junto a Louis trato de no acercarse mucho a él, pues sabía que era incomodo que lo tocaran.

Para su suerte, estaba demasiado cansado como para que aquello importara por mucho tiempo, así que gracias a todo lo ocurrido el día anterior y la presión de su omega, acabo dormido y lentamente cayó en el hombro del alfa, fue por eso que, no noto la sorpresa en el rostro de Louis, ni la forma en que sonrió antes de dejar caer su cabeza sobre la del omega y acariciarla suavemente, luego alejarse y depositar un beso en sus rizos.

Cuando despertó eran casi las diez de la mañana, se sentía como nuevo, se halló a sí mismo en una habitación desconocida, se levantó de un salto, luego recordó que ya no estaba en... donde sea que estuviese la casa Icarus, ahora se encontraba en Italia, se estiró perezoso y repaso el lugar. Una enorme cama con sábanas blancas, finas ventanas por donde la luz apenas y se colaba por las cortinas agua marina, sillas y una mesa en medio de una lujosa sala, la chimenea polvorienta en el centro de todo, una puerta que ha de ser el baño y del lado izquierdo de la cama, un armario enorme.

No recuerda cómo llegó allí, lo último que tiene en mente es no caer sobre Louis, se sonroja, espera no haberlo incomodado.

En cuanto sale de la cama lo primero que hace es ducharse y arreglarse un poco, encuentra su maleta junto a la cama, lo que agradece, alistarse no es nada, pero encontrar a alguien en aquel lugar sí que es difícil, la casa es enorme y parece estar desierta, o eso piensa cuando baja las escaleras y no encuentra a nadie.

Tu debes ser Harry – una voz femenina lo hace girarse asustado, sus alertas se encienden, hay una omega detrás de él, una rubia muy hermosa, de labios rojos y carita de muñeca, sus ojos son azules como el cielo, sus piernas son largas y perfectas, su piel parece de porcelana y su cabello largo cae en ordenas ondas hasta su cintura, para complementar aquello su voz es como la de un ángel y el acento italiano le cae de maravilla.

¿Quién eres tú? – pregunta trayendo a su mente todas las enseñanzas de Zayn

Baja la guardia conmigo niño – se burla ella mirándole – soy Taylor, no tienes nada de qué preocuparte.

¿Dónde están los otros? – exige saber sin relajar su postura.

Salieron – es todo lo que responde, parece que lo está evaluando y de pronto Harry se siente torpe y patoso a comparación con la gracia y majestuosidad que exhibe Taylor

¡Taylor! – gruñe una tercera voz, es un alfa, retrocede cuando el chico entra, un castaño de ojos negros lo observa, es alto y fornido, muy apuesto - ¿Quién es?

Los dos sonríen, no le gusta estar así, por lo que quiere alejarse, pero ambos le observan atentos, el chico no tiene acento italiano, algo que lo extraña.

Mira lo que tenemos aquí, ¿Cuál es tu nombre, precioso? – pregunta amablemente, pero Arae se ofende, no quiere que cualquier alfa le llame con cariño.

Devo ammettere che hai il coraggio di mettere gli occhi su Louis Omega – comenta la rubia, el otro alfa palidece y Harry se sonroja por completo ¿Omega de Louis? Arae celebra oculto, ¿De donde salió eso?

Y-yo... yo no soy... - inicia para que ella se ría y niegue

Perdona, no tenia idea, soy Thomas – se presenta el chico – Louis di sicuro ha buon gusto.

Thomas cállate – le riñe la rubia, vuelve su atención a Harry - ¿Cómo está mi hija?

¿Tu hija? – pregunta el omega confundido

Melanie – dice ella

Oh, está bien... es encantadora – respondió algo sorprendido, la chica sonríe orgullosa

Ed es un buen padre – asiente sin saber qué decir.

¡Hola! – Niall entra cortando la incómoda conversación, seguido de Zayn y Liam – Harry, ¿Despierto tan temprano? Bueno, no importa, ven a desayunar conmigo – abre la boca, pero el rubio lo calla rápidamente – antes de que preguntes, salió, tenía cosas que hacer, pero volverá para la media tarde.

¿Cómo sabias que iba a preguntar por él? – quiere saber la rubia

Le brillan los ojitos – responde resuelto haciendo reír a todos.

No tenia idea de que Louis tuviese omega, debo admití que fue una grata sorpresa – agrega Thomas sonriendo

¿Por qué creen que soy su omega? – exige saber Harry cruzándose de brazos

¿Eres ciego o lento? – pregunta Zayn sarcástico como siempre

¡Zayn! – le regaña Liam aguantado la risa

Ah, bello bambino – Taylor sonríe mientras habla en italiano, ignorante a que Harry entiende cada palabra.

Mira, durante lo que llevo trabajando con Louis, he visto miles de omegas y betas cerca de él, pero nunca tocó a ninguno – narra Thomas divertido – ni lo miro más de dos veces... saca las conclusiones tu.

Eso... no significa algo – enrojece sabiendo que sus labios se han tocado muchas veces como para llamarlo casualidad o accidente.

Niégalo si te hace feliz – Liam camina por la sala alejándose de ellos – pero eso no cambiará la realidad.

¡Vamos a comer! – gruñe Niall tirando del brazo de su brazo en dirección a donde, cree, es la cocina.

La mañana en Italia comienza de forma loca, Niall habla sobre ir de compras, Zayn se les une demostrando que tal vez... si tiene una vena omega, trata de ignorar las compras, porque realmente las ama, la idea le seduce, pero ¿No se supone que deberían tener un bajo perfil? Al menos eso cree, por las películas de criminales que ha visto, aunque teniendo en cuenta como es la casa Icarus y el lugar donde están, se da cuenta de que a nadie le importa mantenerse oculto.

¿No les preocupa la policía o que los descubran? – exterioriza sus pensamientos solo para para que los omegas estallen a reírse.

La policía trabaja para nosotros – dice Niall de forma despreocupada – la gran mayoría al menos.

Además, estamos en Italia, aquí reina la mafia, si hay un lugar donde no nos preocupa ser vistos, es precisamente aquí – indica Zayn

¿Me estás diciendo que pueden hacer lo que quieran? – no disimula su sorpresa ante tal cosa, mucho menos cuando el moreno de olor a vainilla asiente

Iremos de compras – informa Niall comiendo el último pan del cesto

Pero... - inicia para que los dos le griten

¡Pero nada! – se ríe, y piensa que Zayn puede ser intimidante.

En resumen, salieron de casa a las doce en punto, al parecer están en Verona, o eso deduce Harry, el camino a la cuidad tarde aproximadamente quince minutos, ellos visten como todos unos turistas adinerados, incluso el auto va a juego con ellos, pues su chofer, quien por cierto esta armado, viste un elegante traje negro y los transporta en un Ranger negro, también cuentan con un grupo de seguridad que los sigue a todas partes, pero eso ni les incomoda ya que, en cuanto las tiendas aparecen frente a ellos, nada es relevante, Harry puede decir que se siente como en paraíso cuando Niall y Zayn comienzan a probarse trajes Gucci, él les sigue animadamente, pasan de tienda en tienda, poco a poco los guardias se convierten en sus mozos personales para cargar las bolsas que se amontonan más y más, es allí cuando Harry se preocupa por la cantidad que están gastando, pero Niall le tranquiliza diciendo que no importa, compran regalos para todos en casa, Harry lleva cosas para los gemelos y Luke, porque simplemente sabe que son para ellos, es divertido pasar tiempo con Zayn y Niall, viendo lo relajados que pueden ser, le da una sensación de familiaridad y confort que adora, porque no solo escogen su ropa y le dice a donde ir, sino que piden su opinión y le dicen lo fabuloso que luce o lo mucho que les agrada una prenda, eso es algo que nunca hizo con sus "amigos" porque solían decir que estaba gordo para algún traje o que el color no le quedaba, y aunque Zayn suelta las cosas sin anestesia, también le dice que el traje era el problema y hace bromas que lo ponen cómodo otra vez, por primera vez descubre cosas sobre sí mismo, se siente libre, feliz y querido, ahora cuando Niall come su helado y Zayn se burla de su bigote morado, tiene la certeza de que tomo la decisión correcta al quedarse con ellos.

A veces la familia no son esas personas con quien compartes ADN, son las que están para reír y llorar, quienes no critican tus locuras, sino que se burlan de ellas, pero te apoyan, aquellos que saben cuanto puede herirte un comentario y quienes te protegen de eso, personas con quien sabes que puedes discutir, pero tienes la seguridad de que se arreglaran de una u otra manera, porque los une un cariño sincero y sin ataduras, aquellos por los que vale la pena vivir y quedarse juntos, eso es una familia, no quien te impone, te juzga, denigra y te critica sin piedad alguna.

Cuando el sol se oculta, ellos terminan su pizza en un restaurante y regresan a casa, sonríe al pensar en eso, lo bien que suena decirlo, en quien le hace pensar, a casa... con Louis, un sonrojo se expande por sus mejillas.

¡Estás pensando en Louis! – chilla Niall acusadoramente

¿Por qué crees eso? – pregunta

Sonríes como borracho y tiene las orejas rojas – señala Zayn arrancándole una carcajada

Me atraparon – confiesa mirando sus manos

¿Realmente te gusta? – quiere saber Zayn

Si – el vértigo lo hace reír nervioso.

¿Por qué? Bueno... no te ofendas, pero nunca creí que un omega de tu clase pudiese interesarse en Louis, de esa forma – Niall lo mira durante un momento.

¿Por qué? Es Louis, ¿Quién no lo querría? Y no me ofende, se a lo que te refieres, mi madre estaría escandalizada si lo viera, ellos creen que un alfa debe rugir y romper cosas para demostrar que es fuerte, definitivamente Lou no sería de su agrado – Zayn le sonríe con cariño desde el otro lado – y Louis... es especial, es dulce, es tierno y se que tiene secretos, que no es un santo, ni un ángel, eso me asusta un poco... cuando está conmigo no pienso en nada más.

¿Por qué te asusta? – Niall se aproxima con cara de confusión, suspira antes de hablar

Porque estoy seguro de que me estoy enamorando de él... lo suficiente como para que no me importe nada más – los dos omegas lo miran sorprendidos, nadie dice nada durante un buen rato.

Cuando... conozcas su historia, entenderás mucho sobre él, pero es Louis quien debe contarte todo, cuando se sienta preparado, pero confía en mí cuando te digo que no es un mal chico, todo en él tiene un porque, el miedo, el silencio, su agresividad a lo desconocido... - Zayn habla primero, Niall solo guarda silencio – tú solo... sigue haciendo lo que haces.

¿Qué se supone que hago? – en realidad no lo sabe, por lo que necesita desesperadamente una guía.

Lo haces feliz – responde Niall a la distancia

Llegan a casa en silencio, los guardias bajan una cantidad bastante elevada de bolsas, en la sala no hay nadie, eso lo hace extrañar a Luke y los chicos, se pregunta, ¿Qué estarán haciendo? ¿Cómo están las cosas en casa? Arae lloriquea extrañando a los gemelos, pude decir que está de acuerdo, sube las escaleras en busca de su dormitorio, ha sido un día agotador, lleno de cosas buenas, pero sin duda ha drenado toda su energía, lo que es bastante, sonríe alegremente al estar frente su puerta, abre, pero justo cuando va a entrar, la puerta de enfrente cruje, gira y se sonroja mucho por lo que ve.

Louis exhibe su torso desnudo, frente a él, como si nada, se obliga a apartar la mirada de su bien trabajada figura.

"Alfa" coquetea Arae con descaro

Hola Lou – saluda, el chico levanta su mano en forma de saludo, Harry puede ver que en su otra mano está la camiseta - ¿Cómo estuvo tu día?

Se encoge de hombros, a veces es desesperante.

El mío fue muy loco, ¡Fui de compras! – aquello se gana una sonrisa que pretende ser alegre, pero causa otro efecto cuando se apoya despreocupadamente en el marco de la puerta – y-yo... he, ¿Sabes? debería entrar.

Su mirada se pasea por su rostro, algo le dice que Louis nota lo inquieto que su presencia lo pone, su rostro enrojece, a estas alturas ha de parecer una luz navideña, mierda; el alfa asiente, pero Harry no presta atención, porque la maldita sonrisa coqueta no sale de su rostro, ¿Por qué sonríe?

Sin mayor explicación se adentra en su habitación y cierra la puerta, se apoya allí hasta que su respiración se calma, al cabo de un minuto escucha la puerta de Louis cerrase y una suave risa, maldición.

Cierra los ojos y es una pésima idea, porque visualiza aquellos hombros fuertes, de lo que podría... ¡Padre santo! ¿Qué demonios le pasa?

"Nuestro alfa podrá cuidarnos bien durante un celo" comenta su omega rodando boca arriba

¡Arae! – se queja en voz alta – contrólate por amor a todo.

"Yo solo decía..." lo escucha reírse mientras apoya su cabeza entre sus patas.

Se niega a seguir hablando con su omega, que dice cosas cada vez más disparatadas, así que toma un largo y relajante baño, para luego colocarse un pijama de seda y acostarse a dormir, es tan bueno hacer aquello, no cuenta con que el día de mañana será agotador, aunque estando con Niall y Zayn, todo es extenuante.

Como todo en su vida, nada es normal, dos minutos después de irse a dormir, Zayn le tira encima un traje negro, sus alertas se encienden y se levanta de un salto.

Te quiero vestido y listo en quince minutos, tenemos trabajo – informa antes de salir.

¡Zayn! – grita enfurruñado a lo que solo obtiene

¡13 minutos Harry! –

Mientras se arregla se pregunta ¿Qué sucede? Y sobre todo ¿A que se refiere Zayn con Trabajo? Espera no tener que presenciar un crimen, se ríe de su propia estupidez, está en la mafia, su sola estadía en Italia es un crimen, con tiempo de sobre se reúne con Niall en la sala, para su sorpresa el rubio viste jeans y una camiseta, sonríe despreocupado y saluda amablemente, Zayn va igual de arreglado que él, no entiende a los chicos, por último, está Thomas, este ni siquiera se ha arreglado, como si aún fuese en pijama.

Solo estamos esperando a Louis – informa Niall

¿Qué se supone que vamos a hacer? – pregunta mientras tanto

A reunirnos con los italianos – responde Niall

¿Por qué no estás listo? – exige saber

Porque yo, solo soy el apoyo técnico, tu eres la cara del trato – así de sencillo se encoge de hombros

Los pasos de Louis bajando las escaleras suspenden la pregunta de Harry, se siente completamente embobado por el chico, lo mira de pies a cabeza, un sonrojo suave cubre sus mejillas, el traje negro resalta su cuerpo de manera impecable, sus ojos se ven más azules que nunca y la corbata a medio hacer solo le da un aire seductor que lo pondría de rodillas si el alfa se lo ordenara, maldición.

Amarra esa corbata Louis – dice Thomas desde el sofá.

El chico rueda los ojos y hace una mueca, antes de que Harry sepa qué demonios está pasando, sus pies se mueven solos y se encuentra frente al chico atando la corbata, sus ojos azules lo miraban con algo intenso y salvaje detrás, su omega ronronea y un jadeo sale de su boca, los demás miran impresionados como él alfa se deja hacer.

Listo Lou – susurra avergonzado alejándose

Vámonos – anuncia Zayn mirando su reloj – Niall y conmigo, Taylor con Liam y Louis... te toca cuidar de Harry.

Asienten, la noche afuera es fría, se estremece cuando Louis entrelaza sus dedos meñiques, sonríe discretamente mientras caminan hasta un elegante bugatti gris del cual el alfa como el galante caballero que es, le abre la puerta, no puede evitar sentirse emocionado, aunque solo estén trabajando, ronronea libremente por el olor que ocupa el auto, su pecho se siente cálido, una vez el motor cobra vida y Louis esta tras el volante, sus sentidos enloquecen, el chico sonríe, tiene la certeza de que esta noche será incomparable y no quiere saber si de buena o mala forma.

Veinte minutos después se encuentran bajando en un casino, un lugar elegante y repleto de personas, alfas bien vestidos que miran todo con lujuria, betas armados y malhumorados, omegas con escotes bajos y trajes ajustados que ríen por todo, de pronto entiende lo que dijo Niall, siente su bilis en la garganta, un alfa lo desnuda con la mirada, escucha un gruñido grutal, luego una mano protectora se pasa por su cintura, el olor de Louis lo rodea y lo hace sentir seguro, en la entrada Liam sujeta la mano de Zayn, Taylor y Niall no están.

Carlo Di Angelo nos espera en su salón privado – comienza Liam – Antonni Di Angelo estará allí, podemos tratar con Carlo, Antonni no es de fiar, mientras más pronto salgamos de aquí, mejor, los quiero a todos donde pueda verlos, sobre todo a ti Louis, que no se repita lo que paso con Antonni hace años – el chico bufa y Liam lo mira intensamente, suspira para luego mirar a Zayn y Harry – omegas, no se alejen de nosotros.

Entran en parejas, la mano de Louis le da cierta calma, muchos los miran sorprendidos, otros intrigados y el resto no les presta atención en absoluto, la principal es, en una palabra, deslumbrante, techos altos, mueblería costosa y de elegancia exquisita, las mesas de apuestas están llenas, los alfas estúpidos animan a su alrededor, alcohol de varios tipos van y vienen, la casa está llena, Liam saluda a muchas personas, estas no pierden su tiempo en echar una mirada sobre el hombro del alfa y fijarse en él y Louis, se siente incómodo con eso, Arae se acerca a Deneb, no le agrada la cantidad de personas que lo evalúan.

¡Non credo a quello che vedono i miei occhi! - una voz rasposa llega desde atrás, Louis tensa cada músculo de su cuerpo.

Liam y Zayn se giran, su mirada preocupada va de Harry a Louis y luego al desconocido que llega rápidamente a ellos.

Un chico de cabello amarillo y ojos marrones los mira, su porte es claramente de un alfa, su olor a Tabaco lo delata, su mirada no es agradable, ni su sonrisa, en realidad nada en él.

No creí que los vería esta noche – dice con su acento italiano marcado en cada palabra.

Antonni – saluda Liam de forma cordial, el agarre de Louis se hace más fuerte.

Lian – la incorrección en el nombre es producto de su acento, es escalofriante, para peor suerte su maquiavélica mirada pasa a Louis, el de ojos azules parece un león amenazado, sigue hasta posar sus ojos en Harry, la oscuridad en su mirada le provoca miedo – bello

Louis gruñe, Antonni sonríe apretando los labios.

¿Se Tuyo? – pregunta deficiente, Louis asiente sin relajarse un ápice.

Antonni – interrumpe Liam viéndose incómodo al igual que Zayn – llévanos con Carlo, ahora.

El chico deja de sonreír, los escolta por el casino, la tensión lo pone ansioso, su omega observa a Deneb quien está excesivamente cerca.

¿Estás bien Lou? – pregunta en un susurro cuando llegan a un corredor oscuro que se aparta del casino, el chico suelta su cintura y toma su mano, un suave beso cae en sus nudillos, agradece que el lugar este oscuro, tomara eso como un sí.

Caminan y suben por las escaleras pobremente iluminadas, una cantidad exagerada de peldaños, sabe que tratan de despistarlos, la idea es que no sepan donde está Carlo, Zayn advirtió que muchos quizás harían lo mismo para proteger a sus líderes.

Varios minutos después llegan a una puerta custodiada por guardias alfas, Antonni sonríe burlón y altanero cuando se para frente a la misma.

El bambino se queda – decreta mirándole

El bambino viene con nosotros – protesta Zayn

No arriesgo a Carlo, no lo conoce, no esta en la lista – Louis aprieta su mano, su mirada desafía al otro alfa, Harry agradece no ser él quien reciba esa mirada.

No – habla Liam

No hay trato – lo está haciendo a propósito, lo está retando, claro, solo quiere molestar, piensa que es un niño asustado.

No hay trato entonces – repite Zayn girándose – nos vamos.

Carlo se va a enojar – en la voz del chico hay un poco de sorpresa

Vayan – insiste Harry, Louis lo mira mal – me quedaré aquí

No es... - inicia Zayn preocupado

¡Perfetto! – grita de forma loca el alfa, Louis no suelta su mano y gruñe constantemente

Lou... - llama, el chico aparta sus orbes añiles del italiano – está bien, no pasa nada ¿Bien?

Lo ve dudar, sabe que solo quiere protegerlo, eso llena su corazón de amor, simplemente quiere abrazarlo y ronronear en su cuello, pero Louis no va a permitir tal cosa, por lo que un apretón de manos y una sonrisa bastan

Si le haces algo.... – advierte Zayn enojado

Zayn – regaña Liam – sabe lo que puede pasarle si lo toca.

El alfa bufa, Louis no aparta sus ojos de Harry.

Prometo que estaré bien, no tienes que preocuparte – susurra bajo, el niega, se rehúsa a dejarlo solo y eso le hace sentir importante – anda, Louis.

A mi fratello no le gusta esperar – apura el desagradable italiano

Cállate de una maldita vez – gruñe Liam – Louis, vamos.

La mirada de Louis decreta muerte, Harry teme, el alfa besa su mejilla antes de que Liam abra la puerta, Antonni hace un sonido de asco, el omega quiere golpearlo, su alfa se aleja con lentitud y ellos tres desaparecen.

Su corazón se acelera, no le gusta estar en ese lugar a solas con esos hombres, en realidad está aterrado, pero tiene que ser valiente, los primeros minutos el silencio reina, sabe que lo están mirando no le gusta nada, solo puede rogar que la reunión no tarde.

Perteneces a Loui – añade tocándose el labio con diversión.

Guarda silencio, es mejor alejarse de ese tipo, no le da buena espina.

No creí que tuviera omega, menos uno tan bello como tu – Arae se aleja y gruñe asqueado - ¿Puede complacerte?

Abre la boca sorprendido, ¿Qué? ¿Acaso insinúa que...? Desgraciado, necesita alejarse, le repugna un tipo como aquel.

Se acerca hasta él, invadiendo su espacio, algo que le incomoda de sobremanera, su mano sube a tocar su mejilla, pero nunca lo logra pues le aparta de un manotazo no muy suave.

...Un omega con carácter – sonríe solo para que el chico se sienta enfermo en su presencia - ¿Cómo es que tu alfa es un cobarde?

No te permito que hables de él – gruñe fieramente

Hablas, interesante, por un momento creí que serías igual de mañoso que Loui – se ríe de su propia estupidez mientras el omega se aleja – yo podría ser un mejor alfa para ti...

Se ríe, a carcajadas, dando directo en el ego del presuntuoso y desagradable chico, de solo imaginarse con un idiota como ese, le recuerda a Maxwell, son patéticos, no le llegan ni al tobillo a Louis.

No te compares con Louis – advierte – no quieres humillarte.

Es un patético intento de alfa – dice enojado

No estamos hablando de ti ¿O sí? – pregunta cabreando al rubio.

¿Acaso no te enseñaron a guardarle respeto a los alfas? – su respiración se acelera, quiere irse, el chico se ríe – oh, es cierto, tu alfa es como un omega.

Cuida lo que dice de él – reta enojado – porque es mucho más alfa que tú.

Su expresión engreída se transforma en enojo, ha tocado una fibra sensible, puede verlo con claridad, no se arrepiente de lo que dijo, pero algo le dice que debió callar, las feromonas de rabia se disparan en el lugar, Antonni está loco y lo sabe cuando producto de la furia que no hace un esfuerzo por disimular, saca una pistola y apunta al omega.

Retira lo dicho – amenaza, Harry no puede ver más allá de su mano, se asusta, Arae se hace una bolita, ¿Ahora qué? no quería provocar la ira de ese loco, su rostro forma una sonrisa desquiciada, retrocede un paso, los alfa de la puerta se miran sin saber que hacer, está acorralado y en todo lo que puede pensar es en Louis.

Maldito omega – gruñe acercándose y tomándolo del brazo - ¿Cómo te atreves a...?

Signore – le recuerda uno de los alfas – Suo fratello...

Voy a enseñarte a respetar a un alfa – su omega emite un chillido – y vas a aprender a cerrar la maldita boca.

Recibe una cachetada que lo desorienta, con descomunal fuerza lo arrastra por el pasillo, le duele la mejilla y no sabe a dónde va, siente mucho miedo y se arrepiente de haberse quedado, quiere correr con Louis para acurrucarse en su pecho y estar a salvo, cae sobre una superficie dura, se lastima, escucha un sonido metálico de una puerta azotarse con furia.

Luego un cuerpo se cierne sobre el suyo, reacciona, esto no puede estarle pasando, mueve su mano y golpea al alfa, el golpe lo hace jadear, pero no lo mueve, en su lugar lo toca con fuerza del brazo y lo lastima.

Grita, Antonni se ríe.

¿Tan pronto y ya estás así? – se burla provocando que Harry lagrimee

¡Me das asco! – escupe su rostro y continúa forcejeando.

Las garras del alfa arañan su brazo y luego la tela de su camisa, se rompe, no se rinde, grita y patalea, no se lo dejará fácil, acertar una patada en su pierna que lo hace gruñir y moverse, nuevamente golpea su mejilla.

¡Louis! – grita intentando llegar a la puerta

¡Silencio! – lo empuja al suelo otra vez

Bastardo – el omega lo golpea en la cara satisfecho con ver sangre en su nariz

Sus brazos son inmovilizados contra el suelo, pero antes de que pueda hacer algo la puerta se abre de forma estrepitosa.

Su cuerpo se sacude cuando el alfa es arrancado de encima, Zayn se arrodilla a su lado y lo abraza, la habitación se llena de olores de furia, vergüenza y miedo. Louis golpea con brutalidad a Anttoni, el alfa rubio se ve maltratado y asustado, el castaño luce como una bestia, enfadado impacta su puño en la cara del chico, gruñe y lo empuja al suelo, Liam lo detiene, pero el líder de su manada se ve dominado por la fuerza del joven, un chico que exactamente igual a Antonni intenta detener a Louis y lo logran, una omega delgada y hermosa se arrodilla junto a Zayn, se ve decepcionada, la lucha entre los alfa sigue.

Louis – susurra Harry

El chico no le escucha, Antonni le apunta con su arma, ni dos segundos pasan cuando Louis sostiene en su mano una pistola, su pulso no tiembla, su mirada es frívola y cruel, está seguro que va a disparar, todo se detiene, Harry se suelta a llorar, no, no, ni una pisca de miedo aparece en las facciones el joven alfa que está dispuesto a acabar con el italiano, ver a Louis así es como estar en un campo de guerra, un completo despiadado y solo para protegerlo, nunca se perdonaría si algo le pasa, Liam se ve precavido y el gemelo de Anttoni no luce nada contento, el olor a vodka y café predominan en el aire, extendiéndose con enojo, se marea con eso, no puede perder a Louis.

Baja esa pistola – ordenó el rubio - ¡Antonni!

Su mirada se busca con la de Harry, por un momento olvida lo que sucede, solo son ellos dos, su miedo crece, no puede perderlo, se lo suplica, las lágrimas ruedan por sus mejillas, algo fiero se ve en los ojos azul tormenta del chico, aparta su mirada, el omega cierra los ojos, un disparo resuena, muchas exclamaciones.

¡Louis! – grita Liam

¡Fratello! – otra voz

Es levantado del suelo, el pequeño y casi imperceptible olor a caramelo le dan paz, abre sus ojos y ve todo de cabeza, se da cuenta de que está sobre el hombro de Louis, hay sangre en el piso, los italianos se amontonan alrededor de Antonni que chilla y grita, al menos está vivo.

Querido Lian – pronuncia el otro rubio lleno de sangre – perdonad los inconvenientes... espero que esto no trunque nuestro trato.

Liam responde, pero no escucha nada, los sonidos se pierden a medida que baja las escaleras, las manos del chico lo sujetan de las piernas evitando que caiga, mas no que se maree y se sienta peor.

No tiene idea de donde está, pero parece que Louis está perfectamente orientado, el camino se hace interminablemente largo y tormentoso, el olor altera, pero le hace sentir seguro, una combinación extraña, gruñidos furiosos salen sin control de los labios del alfa, Deneb lleva a Arae del cuello como si de un cachorro se tratara, la luz le incomoda, hay mucho ruido en el casino, gritos, risas, se asfixia con los intoxicantes olores del lugar, por suerte para él, no tardan mucho en estar lejos, el aire fresco de Italia le hace bien.

Se siente alterado cuando el agarre de Louis decae y es colocando en una silla, trata de moverse, más el alfa no lo permite, lo empuja a los asientos y pasa el cinturón de seguridad por su pecho, se queda viendo como cierra la puerta y en pocos segundos el motor ruge.

La velocidad a la que van posiblemente no es permitida, Louis no lo mira, en realidad parece ido en su mente, aprieta el volante tan fuerte que sus nudillos se ponen blancos, gruñe asustándole, sabe que no están yendo a casa, el panorama cambia, Deneb no ha soltado a Arae, Harry solloza cuando el acelerador se hunde hasta el fondo, un sonido silbante le indica que sigue con vida, la mano del chico va a la palanca de cambios y se mueve con total experiencia, se jura que no volverá a subir a un auto con Louis enojado.

Piensa que de no ser por el cinturón de seguridad ya habría atravesado el vidrio y cada vez que acelera o toma una vuelta, si ha de ser honesto, cree que está desarrollando una nueva fobia: los alfas enojados y los autos.

La casa está oscura, es enorme, un viñedo se extiende hacia atrás, por lo demás, está muy oscuro para ver algo, la respiración del alfa es errática, mira al frente y está pálido, se pregunta ¿Qué sucede? Intenta controlar su miedo, ya es suficiente, quiere acercarse a Louis, lo necesita, porque es lo único que tiene en este momento, quizás con un teléfono logre llamar a Zayn en la mañana, probablemente estén preocupados, Louis se lo llevó sin decir nada.

¿L-louis? – pregunta en un tartamudeo nervioso, niega y sale del auto.

No entiende qué le sucede, pero es claro que lo que pasó esta noche le ha afectado, a Harry también, pero él... se veía dispuesto a asesinar a Aantonni y luego, quería ponerlo a salvo... de todos, quiere entender a Louis, pero no puede hacerlo; las palabras de Luke llegan a su mente: "Él también está asustado, cuando lo conozcas más... entenderás cosas que pueden parecer complicadas..." Sus manos temblorosas quitan el cinturón de seguridad, sale del auto, tiembla por el frío que hace, debe ser como las dos de la mañana, hay muchas estrellas en el cielo, Louis se apoya en el auto, sus ojos están cerrados y su cabeza está levantada hacia arriba, respira hondo y suelta lentamente, sus manos se abren y cierran a sus costados, Harry siente su corazón romperse, él está intentando calmarse, se acerca hasta quedar frente al chico.

Lou – llama lo más suave que puede

Abre sus ojos y lo mira asustado y algo arrepentido.

Estoy bien, de verdad, no estoy asustado – por su rostro puede darse cuenta de que no entendió – no de ti, contigo yo... me siento a salvo, es solo que esta noche ha sido mucho y luego condujiste como un loco.

Una sonrisa se asoma en sus labios, Harry también sonríe, las cosas mejoran un poco.

¿Estás bien? – pregunta buscando heridas o algo en su cuerpo, a parte de sangre y que su traje está sucio, no parece tener nada, el omega agradece aquello, asiente, sus manos se posan en los hombros de Harry, la solapa del traje se la quitó ese mal nacido y su camisa está rasgada y sucia, las manos amables de Louis bajan hasta los botones y los quitan uno a uno bajo la atenta mirada del rizado, el aire frío le pone la piel de gallina cuando se ve libre de la prenda, el alfa arruga la nariz cuando coloca la camisa en el capó del auto, se quita su saco y lo pasa por el torso desnudo de Harry, su olor le da paz, lo protege y lo envuelve.

Gracias – susurró sonrojado, solo se miran - ¿Dónde estamos?

Una mueca se posa en sus facciones, Harry casi puede escuchar a Ian decir "Lou no habla" maldición a veces odia que Louis no diga nada.

Un tirón en su mano lo hace seguirlo, caminan por el césped y llegan a la puerta, de su bolsillo saca una llave, cierra los ojos un momento, ¿Qué tiene esta casa? ¿De quién es? ¿Dónde están? Gira la llave y abre la puerta, ningún olor llega, lo que indica que este lugar ha estado deshabitado desde hace mucho, enciende las luces revelando la belleza que escondía la oscuridad.

El piso de madera pulida, muebles de cuero y un sofá blanco, una chimenea de piedras grises en el medio, algunas fotografías sobre la repisa, una alfombra blanca en el suelo, luce acogedor, como para tirarse en el sofá con Louis y abrazarlo durante un día lluvioso.

Las escaleras blancas muestran que hay más para ver, el pasillo sigue hasta lo que él cree sería la cocina y el comedor, Louis camina llevándole hasta las escaleras, la tensión de su cuerpo es casi propia, cinco habitaciones hay en la parte de arriba, sus puertas están cerradas, caminan hasta la última.

Parece que ha pasado mucho desde que Louis estaba allí, aunque todo está limpio, pero lo dice porque no hay casi nada suyo, además de algunos carteles y objetos... como de un niño.

El alfa se aleja y busca en el armario algo de ropa, mientras Harry repasa la habitación, la ventana tiene un como respaldar de color azul, hay una lámpara de balón de futbol en la mesita de noche, un dibujo de palitos y un sol pegado con cinta adhesiva, una repisa con algunos juguetes y figuras de acción, un juego de muebles, en el techo hay pegadas estrellas, las paredes son de color gris claro, lo que llama la atención de Harry es una foto en la repisa, la toma entre sus manos.

Cuatro niñas y un niño, todos muy parecidos, los ojos azules del niño son brillantes, se ve travieso y feliz, tiene el cabello lacio y castaño... es Louis, oh, pero entonces ¿Quiénes son ellas? Las examina minuciosamente, una es rubia, las otras castañas, sus facciones son parecidas, no parece muy mayores que el niño, excepto las dos más jóvenes que son gemelas.

La foto es arrancada de su mano y colocada de vuelta a donde estaba, sus mejillas enrojecen, quiere preguntar, elige no hacerlo, recibe la ropa que el alfa coloca en sus manos, no lo mira, él solo señala al baño, obedece porque en sus ojos hay tanta tristeza que le duele verlo así.

Al salir encuentra a Louis con un suéter gris y pantalones sueltos, esta acostado de lado en la cama, luciendo como un niño, se acuesta a su lado, solo escucha su respiración.

Louis – susurra muy cerca, pero sin tocarlo – no se que pasa por tu mente ahora, ni porque este lugar te pone triste, solo quiero que sepas que estoy contigo sin importar nada.

Se gira luego de unos minutos, sus ojos están un poco rojos, va a llorar, no necesitan palabras, Harry lo atrae en un abrazo, él se rompe, Louis es frágil, pero puede mostrarse tal como es con Harry, incontables sollozos desesperados escapan de su boca, las lágrimas fluyen, el tiempo se paraliza, los abraza fuerte, como si nunca quisiera soltarlo, esa sensación de estar enamorado pesa sobre Harry, llora por Louis, porque no tiene idea de quien le hizo esto, ¿Quién lo hirió tanto? ¿Quién le quitó la alegría a ese niño de la foto? Hay tanto que no sabe, aunque lo único que importa ahora es recoger todos los pedazos de Louis, porque Harry también tiene el corazón roto y si está dispuesto a darle las partes que encajen de sí mismo, como eso, y le daría su corazón, si eso los lleva a comenzar de nuevo.

Se siente como una eternidad, lloran sin saber porque, pero se siente como liberarse, porque Louis ha estado solo mucho tiempo y Harry necesita a alguien que lo ame, de alguna manera se complementan y eso los une.

Louis se aleja, busca entre los objetos hasta que encuentra una libreta y un lápiz.

"No hagas preguntas, solo confía en mí" Harry sujeta su mano izquierda

Confió en ti Lou – susurra

"Aquí en Verona, hay cosas que no puedo olvidar... cosas que espero algún día poder contarte, solo si tu quieres escucharlas" una lágrima cae sobre lo que escribió, Harry sonríe tristemente

Siempre estaré para escucharte – promete besando acercándose y sellando su promesa con un beso en la mejilla.

Yacen en la cama con sus manos unidas, mucho después de eso, no hay nada que Harry deseara con mayor anhelo que abrazarlo y que eso momentos duraran más que un par de segundos, sueña con el día en que Louis descanse en sus brazos sin ningún tipo de miedo, pero puede esperar, lo hará, no importa cuanto tarde, estarán juntos, lo sabe. 

@soupe28 esto es para ti. 

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