LONDRES
DYLAN
A principios de Agosto, yo seguía trabajando en la oficina con nuevos tratos comerciales, el año pasado habia cerrado tres y este año tenía ya en mi cartera cerca de veinte empresas multinacionales, y eso estaba increíble, ya que habia recibido correos de algunas revistas para entrevistarme, era uno de los millonarios menores de veinticinco más ricos del mundo, era heredero de tres enormes fortunas y tenía mi propia compañía.
Acepte las entrevistas y nos reuniríamos después para hacer las fotografías originales, me habían preguntado sobre las drogas, mi sobriedad, la fundación y aunque me habían preguntado sobre mis relaciones yo solo dije que era feliz con quien estaba ahora. Claro que se habló de mi bisexualidad asi que tuve que mencionar a Jack, aunque solo dije mi ex, ya que no deseaba que se mencionara para nada su nombre.
Ashley no me habia perdonado aun, pero ya no estaba tan castigado.
La reunión anual de la fundación llego, yo no iba generalmente pero este año tenía un interés especial en los fondos que se repartían
- Hola, lamento llegar tarde – dije entrando a la reunión
- ¿Qué haces aquí? – pregunto Jess algo perpleja
- Bueno, no pretendo interrumpir, solo quiero ver una reunión del consejo de la fundación – conteste
- Bien – dijo y siguió hablando
Vimos a todas las asociaciones a las que se le asignarían fondos este año y estaban las fundaciones familiares con su presupuesto fijo, entre ellas la mía, recibía anualmente ocho millones de la fundación Bearsdley, las caridades de la abuela recibían diez millones, las caridades del abuelo recibían otros diez. Y la lista seguía.
- Jess, quiero hacer una propuesta – dije
- ¿Qué propuesta? – pregunto seria
- Quiero retirarle a Oxford el noventa por ciento de sus fondos – solté
- ¿Qué?, estas demente – dijo mirándome como si hubiera enloquecido
- No, no enloquecí, pero no quiero que ellos reciban nuestro dinero, recaudamos demasiado dinero año con año y no quiero que Oxford reciba más dinero – conteste
- Dylan, mucha gente depende de esos fondos – dijo abue
- Lo sé, no planeo quitarle a los estudiantes sus becas, quiero quitarle los fondos que son directos de la universidad – conteste
- No entiendo – respondio Jess
- Jess, hace unos años papá inauguro una biblioteca que lleva nuestro apellido, él estuvo ahí, vimos las fotos, Max y tú la visitaron, estudiaron ahí, donamos el edificio y todos los libros – dije
- Lo sé, he visto la placa cientos de veces – respondio
- Yo no, nunca llegue a ir, y no poder hacerlo nunca, y si seguimos dando dinero a esa universidad jamas podre inaugurar nada, no puedo ir ni aun hospital que sea de Oxford, por una maldita orden de restricción, asi que si no puedo tener relación alguna con ellos, eso significa que también les quitare los fondos – dije serio
- Tú no puedes decidir eso – contesto Jess molesta
- No, es tu decisión, por eso estoy explicándote, podemos quitarles esos fondos y darlos a otra causa, ellos reciben demasiado dinero año con año, creo que podemos añadirlo a los hospitales, dar más becas, ayudar a la comunidad y no a Oxford – replique
- ¿Becas para Harvard? – se burlo
- Si, porque no, y para Yale también, George estudia ahí, si muero sin un heredero, George se quedara a cargo, ninguno de los dos estudio en Oxford, el prefiere Yale y yo no puedo hacerlo, asi que propongo quitarle los fondos a Oxford y enfocarnos en dárselos a quien de verdad los merezca – dije
- ¿Qué sugieres Dyl? – pregunto mi tía curiosa
- Mujeres y niños, hospitales, comida, educación, porque no, que mi fundación reciba un poco más, después de todo estoy por anunciar una extensión y necesito financiamiento – dije
- Ah, sí claro, ahí está el dilema, quieres más dinero – respondio mi hermana molesta
- Sí, quiero más dinero y a pesar de que yo soy el heredero, estoy aquí pidiéndotelo, Oxford no necesita más edificios a los que no puedo entrar, mis refugios, los hospitales de la abuela Alice, los veteranos del abuelo George, podemos dar más becas, ayudar a enfermos con medicinas, mis adictos, ellos lo merecen, no una universidad – dije
- ¿Asi que retiraras tus becas a Harvard y Yale? – pregunto sarcástica
- Si no quieres financiar las nuevas becas, ya que, pero no le pienso dar ni un solo centavo más a Oxford, ellos me echaron, ahora yo les quito mi dinero – respondi
- Es una venganza – dijo ella retándome
- Si, es una venganza, porque solo quería estar contigo en tu graduación y ellos dijeron no, no puedes estar aquí, no debes tener relación con la universidad de Oxford, asi que no pienso tener más contacto con ellos, y eso incluye mis millones – replique
- Creo que Dylan tiene razón, hospitales, medicamentos, veteranos, personas sin hogar, comida para los pobres, creo que ellos merecen el dinero y no un montón de edificios viejos – dijo abue Alice
- Gracias – conteste
- Apoyo los hospitales y los medicamentos – contesto Audrey
- Pero – decía mi hermana
- Estoy de acuerdo, los hambrientos y la gente sin hogar merece más dinero – dijo nuestra tía
- Lo vez, ya votaron, sé que tú tienes el voto decisivo, como hija de Max tú decides, pero tu decidirás si los hambrientos, los enfermos y los niños recibirán mas, o les dejas todo a tus edificios – dije casi con el triunfo en la mano
- Eres un imbécil – soltó Jess
- Lo sé – conteste seguro
- Oxford se queda sin fondos – respondio ella y vi que Audrey sonrió, ya que habia escuchado que ella deseaba apoyar hospitales y dar medicamentos a los necesitados
- Papá va a matarte – dijo Jess furiosa
- Dime algo que no sepa – la rete - Por cierto familia, la extensión de la fundación se trata de eso, apoyo y ayuda a niños y adolescentes maltratados, abriremos casas refugio y les daremos tratamiento médico y psicológico, además de educación, ropa, comida, medicinas, los cuidaremos – dije orgulloso
- Excelente, felicidades, bien hecho – escuche que decían excepto mi hermana
La reunión termino y firmamos las hojas por los fondos, yo habia recibido cinco millones más y todos estábamos felices por haber recibido más dinero, el siguiente año Oxford no recibiría sus millones y cuando llamaran les dirían que la familia Bearsdley habia terminado su relación con ellos, después de todo mis hijos podían ir a la universidad que quisieran y sinceramente los alentaría a ir a Harvard.
Llegue a casa y le conté a Carol, casi se cae cuando le dije que le habia quitado a Oxford sus fondos, no las becas, pero si sus fondos que usaban para edificios y no sé qué más cosas, después de todo el nuevo heredero seria graduado de Harvard, Max hizo un escándalo, pero no me importo, en unos años él se largaría de la compañía y yo haría lo que quisiera
- Escuche lo que paso – dijo Rob entrando a mi oficina
- Hola, asi es – dije
- ¿Has estado trabajando mucho? – pregunto
- ¿Qué? – respondi
- Es que no te he visto esta semana, solo se de ti rumores y soy tu mejor amigo – contesto
- Si, necesito firmar estos contratos antes de volver a Boston, Ashley ira a Parsons, estará en Nueva York, asi que estaré ocupado y es mi último año, debo hacer cientos de cosas, entre ellas mi tesis – conteste tomando mi te
- Lo sé, el último año es complicado – contesto subiendo los pies al escritorio
- Lo supuse – dije y ambos bebimos té
- ¿Ashley sigue sin perdonarte? - pregunto tomando otro pastelito
- Si, está molesta, y tiene razón, fui un imbécil y un patán, pero al menos puedo estar con ella y no me refiero al sexo, me está ayudando a decorar mi nuevo apartamento aquí en Londres, cenamos, conversamos, el otro día montamos y saltamos juntos, no solo es sexo, me involucró, ella puede ordenar por mí y sabe lo que me gusta, somos compatibles, la lleve a cenar a un nuevo lugar en Padington y fue estupendo, admito que vimos el amanecer desnudos desde la torre, y ha sido lo más increíble que he visto, ella desnuda en mis brazos el sol alzándose sobre Londres - suspiré
- Creo que podrías darle tu corazón a mi prima - sugirió
- No sé si estoy listo para otra relación - respondí
- Debes decidirlo o saldrán lastimados - contesto
Las semanas avanzaron y Rob, Ashley, los gemelos, George, Ethan y yo volvimos a América, Ethan, George y Ashley irían a Nueva York, asi que nos despedimos en el aeropuerto de Boston, y fuimos hasta nuestros respectivos autos, ya que Rob se quedaría en su apartamento, al ser un estudiante de Posgrado ya no viviría en los dormitorios del MIT, los gemelos Vivian juntos en su apartamento y yo volvería a mi casa en Harvard.
Llegue hasta la bodega, saque mis cosas y fui hasta Eliot, donde me asignarían mi nuevo ultimo dormitorio, todo esto lo estaba disfrutando, pero al mismo tiempo me dolía, amaba Harvard, era mi hogar, incluso más que Londres, era la última vez que llegaba para mi semestre de otoño, me darían por última vez mi llave y seria mi último dia de mudanza.
Los de ultimo año llegábamos primero, ya que nos darían los mejores dormitorios, y debíamos mudarnos antes que los de tercero y segundo y claro mucho antes que los de primero, ya que al ser alumnos de último debíamos participar en la bienvenida, los de ultimo dando la bienvenida a los nuevos, eso era casi poético.
Subí hasta mi cuarto con mis maletas y cajas repletas y Henry ya estaba en el cuarto
- Hola tu – salude a mi amigo y lo abrace
- ¿Qué tal Londres? – pregunto
- Bien, húmedo, mucha lluvia, la extraño – conteste
- Yo deje el soleado Malibu para venir por un poco de frio – respondio sarcástico
- Me alegra que prefieras el frio – dije y comencé a meter mis cosas
Los demás fueron apareciendo, de nuevo estábamos con Dom y Joel, eran divertidos, me agradaban y Joel le daba un toque diferente a todo, en navidad habíamos puesto un candelabro para que pudiera encender sus velas por Hanukkah y se habia emocionado que recordáramos su tradición.
Nos acomodamos perfectamente, teníamos una enorme sala de estar, éramos seis y teníamos en total ocho habitaciones, Mike y yo nos habíamos quedado con la habitación compartida más grande, incuso teníamos nuestro propio baño, asi que yo estaba feliz por tener más espacio para todos mis productos, mi secadora y mi plancha de cabello.
La sala era gigantesca, tenía muchos sillones, dos mini fridge, teléfono, y teníamos una habitación solo para estudiar con seis escritorios y un enorme librero, tenía ocho pisos, asi que cada quien tendría su piso y los otros los repartiríamos para los libros comunes como diccionarios, material de lectura clásica, hojas y esas cosas.
Revise mi correo universitario y tenía una enorme lista de libros, algunos ya los habia comenzado a leer desde casa, pero algunos solo estaban disponibles aquí, ya que solo eran para alumnos de Harvard.
Fui con Mike a la librería y compramos nuestros libros el seguía recibiendo la beca de Justin, incluso por ser último año, le habían dado dos mil dólares más para libros, lo cual fue estupendo ya que un libro de pre medicina le costó doscientos dólares.
Terminamos de elegir los libros y fuimos hasta la caja, en la fila estaba Jack comprando también sus libros
- Veo que Inglaterra se terminó – dijo Mike en voz baja
- Solo ignóralo, si no te mueves no te vera – dije
- Eso es con los T-Rex – contesto Mike mirándome divertido
- No, lo vi en un documental – respondi convencido mirando a mi ex
- No es cierto – contesto Mike
- Si, lo vi en un documental, tú estabas conmigo – respondi seguro
- Era Jurasic Park, y estabas muy drogado – se burlo
- No – conteste seguro de lo que recordaba
- Si lo era y estabas hasta arriba de cocaína – replico riendo y ese momento volteo a vernos Jack
- Tienes razón, si era Jurasic Park – conteste algo asustado ya que se salió de la fila y camino hacia nosotros
- Hola Dyl, Mike – dijo de frente
- Hola Jack – contesto mi amigo
- Hola – dije serio
- Que bueno verlos, el último año, será el mejor – dijo viéndome
- Si, eso creo – conteste serio
- Oye Dyl, olvide mi libro de física – dijo Mike y me jalo
- Claro, lo olvidamos – dije serio
- Esta en la canasta – replico Jack viéndonos
- El otro libro, el de trabajo – contesto Mike y nos fuimos de ahí hasta la sección de física
- ¿Qué diablos hace aquí? – dije escandalizado pero en voz muy baja
- Quizá seduciendo hombres – replico bromeando Mike y le di un golpe ya que Jack y yo asi nos habíamos conocido, en la fila de la librería de Harvard – Perdón – se disculpó mi amigo
- Es solo un chico con el que me acostaba, no pasa nada – dije seguro pero alterado
- Fueron novios casi un año y te rompió el corazón – dijo sarcástico y le di otro golpe - Ya deja de pegarme – replico Mike y me dio un golpe con un libro en el brazo
- Auch – me queje
Vimos que pagara y se fuera y volvimos a la fila, pagamos y nos fuimos de ahí cargados de material escolar
- ¿Imprimieron ustedes los libros? – pregunto Dom con su Kindle en la mano
- Nos encontramos a Jack – soltó Mike
- ¿Ya volvió? – pregunto Jasón curioso
- Si ya volvió y Dylan se lo encontró en la fila de la librería, ¡De nuevo! – explico Mike
- ¿Quién es Jack? – pregunto Joel mirándonos desde el suelo
- Es el ex novio de Dylan, pero le rompió el corazón cuando lo dejo en Londres para irse a Oxford a estudiar por un año – dijo Henry
- Debiste verlo, le partió el corazón – añadió Mike
- Fue triste y deprimente verlo asi, no follaba con nadie, extrañaba a Jack, pero ahora el volvió y Kirkland está a solo unos metros – soltó Jasón
- Estoy aquí gente – les dije al ver que hablaban de mi como si no estuviera
- Ya lo sabemos – dijo Henry mirándome e ignorándome y comenzó a contarle mi historia romántica con Jack a Dom y a Joel como si de una novela trágica se tratara.
- Wow, de verdad te rompió el corazón – dijo Joel mirándome como se mira a un perrito abandonado
- Eso fue hace un año – replique
- Si, pero todos sabemos que aun te duele verlo, lo amabas mucho – dijo Mike
- Mike – respondi
- Lo siento, las conversaciones del dormitorio no se dicen, pero Dylan admítelo, te costó mucho trabajo olvidarlo – respondio mirándome – A menos que aún no lo hayas hecho y por eso estas molesto – añadió escudriñándome
- Pero pensé que estabas con Ashley, ¿Aun amas a Jack? – pregunto Jasón curioso
- Todos son muy irritantes, y los odio – dije y Sali del cuarto y baje a la sala común
No volvieron a mencionar a Jack, llegaron los chicos nuevos, les ayudamos con las mudanzas y luego fuimos hasta el Yard para recibir a los de primero, conversamos con ellos, les dimos la bienvenida y organizamos algunos juegos, hacía calor de verano, asi que jugamos con globos y pistolas de agua, lo cual saco bastante a los chicos nuevos de su miedo por llegar a Harvard.
Los siguientes días, fueron divertidos, yo me inscribí al club de navegación de Eliot, ya que mis clases las tenía por la tarde, y podía ir a saltar en la mañana. Mis caballos tardarían en llegar unos días, asi que mientras practique con uno de la universidad.
El domingo antes de comenzar las clases organizamos una parrillada para todos los alumnos de Eliot, preparamos mucha carne, hamburguesas, salchichas y como ya teníamos mas de veintiuno nosotros, ordenamos cerveza, yo no bebía, pero mis amigos si, asi que Eliot estaba de fiesta.
Las clases comenzaron y yo tenía bastantes actividades, tenía mis clases, navegación, polo, equitación, el club británico, y habia decidió apoyar a los clubes LGBT de la universidad, todos mis amigos eran heterosexuales, asi que pensé que en mi último año conocería a personas con más diversidad sexual.
El servicio comunitario que hacíamos cada año yo lo haría en un centro LGBT de Boston, se repartían condones, folletos y esas cosas, además de que íbamos a pintarlo y a llevar pancartas para pegarlas en los muros recién pintados con información psicológica, médica y demás cosas.
No pensé que pudiera gustarme tanto, en mi semana ahí, conocí a un par de chicas que solicitaban ayuda legal para que una le pudiera dar seguro médico a la otra, ya que eran pareja, conocí a una pareja que estaba peleando la adopción de un bebe, un chico que deseaba cambiar legalmente su nombre y esas cosas.
Algunos abogados de Harvard donaban su tiempo para ayudarlos, al igual que médicos y psicólogos, nosotros solo ayudábamos en lo que podíamos, los estudiantes de leyes, llevaban casos a la corte, les ayudaban con asesorías, todo era muy agradable.
En mi último dia conocí a un chico que tenía problemas de drogas, no tenía hogar, su familia lo habia echado por ser gay y estaba muy herido, ya que unos tipos lo habían golpeado al verlo vestido de manera algo afeminado.
Sentí que se me rompía el corazón, ya que el centro no podía brindarle más apoyo que darle asesoría y llamar algún refugio donde pudieran recibirlo.
- Hola – salude
- Hola – contesto el llorando
- Me llamo Dylan – dije
- Will – contesto
- ¿Estas bien? – pregunte
- No, llevo unas semanas en la calle y no tengo dinero, pronto hará frio y no sé qué hacer, no puedo pagar un hotel ni comida, mira mi brazo – dijo mostrándome un enorme moretón donde se notaba que se inyectaba
- ¿Heroína? – pregunte
- Si – contesto
- Vine aquí pensando en que me ayudarían, pero siempre dicen lo mismo llamaremos un refugio – respondio – Pero no hay espacio, no para mí, no me aceptan – dijo y lloro
- ¿Por qué? – pregunte
- Eres un chico educado, es obvio que no lo sabes – contesto
- Es la primera vez que vengo – dije
- Eres de la escuela de ricos, veo tu camiseta y luces como alguien rico – contesto
- Quizá, pero también tuve problemas – dije y le mostré mi brazo lleno de cortes que ahora estaban cubiertos por mis tatuajes
- Un niño rico con problemas, eso sí es novedad – se rio un poco mientras lloraba en silencio
- Puedes decirme, también soy adicto – dije y le mostré mi ficha de año y medio sobrio
- No me aceptan porque no solo soy de la calle, mírame, me prostituyo para comprar heroína, no comida ni techo, sino heroína, mis padres me echaron hace seis meses – dijo muy triste
- Lo siento – dije y vi en su rostro mucho dolor
- No es un refugio, pero te ayudaran - dije y tome una pluma y un papel del escritorio y anote la dirección de la fundación
- ¿Qué es eso? – pregunto incrédulo
- Es un sitio seguro, puedes desintoxicarte, recibir ayuda médica, psicológica, lo que necesites – dije
- No tengo ni un dólar – contesto
- Es gratis – dije
- No es cierto, siempre quieren algo a cambio – respondio dudoso
- No, aquí no, créeme – dije serio y le di el papel
- No te creo – dijo mirándome
- Pues créeme, porque es mío, y si digo que es gratis es porque lo es, es mi fundación, es una clínica gratuita, te ayudaran, solo debes desear sanar, desear rehabilitarte, desear dejar las calles, dejar de consumir – explique
- Creo que me tomas el pelo – replico
- No, puedo pedir que te lleven y si miento puedes golpearme – ofrecí
- Si mientes me darás ese bonito reloj que podre vender – pidió
- Hecho – conteste seguro
- ¿Cuánto vale? – pregunto mirando mi Rolex
- Como seis mil dólares – respondi
- Es falso cierto – dijo
- No, es un Rolex de oro original, me lo dieron hace tres navidades – dije seguro mientras caminábamos hacia la calle
Detuve un taxi, subimos y fuimos hasta el edificio de la fundación.
Entramos y habia bastante gente en la recepción
- Hola – dije a una chica
- Hola – saludo
- Mi amigo necesita ayuda, su nombre es Will – dije
- Claro, un momento – dijo sin mirarme – Lo siento, estamos llenos, venga en unas semanas – contesto
- Te lo dije, asi que dame ese lindo reloj – pidió
- Oye, necesito hablar con Jared – pedí a la mujer
- No está disponible – replico
- Estará disponible para mí cuando yo lo diga – replique molesto
- Ya dije que no lo está – me grito
- Bien, pues estarás despedida, no permito que nadie trate asi a la gente, eres demasiado arrogante, asi que llama a Jared en este momento – pedí
- Señor Bearsdley – dijo una mujer que reconocí como una de las jefas
- ¿Bearsdley? – pregunto la mujer arrogante
- Te dije que llamaras a Jared – replique
- Sofie, necesito tu ayuda, él es Will y está solo, necesita de nuestro apoyo – dije
- Claro, cual es el caso – pregunto
- Heroína, necesita atención médica, comida, un lugar donde dormir y sistema de apoyo, está solo, no tiene dinero, y necesito que le hagan estudios completos, creo que ha estado en riesgo sexual, asi que panel completo – pedí
- Señor Bearsdley – saludo Jared el director de la unidad de Boston
- Jared, hola, él es Will, se quedara aquí, lo ayudaremos, es un amigo, y quiero que me mantengan al tanto, no tiene dinero esta solo – dije
- Por supuesto señor, un placer verlo – respondio
- Te dije que sería gratis, asi que yo conservare mi reloj, y tú te rehabilitaras – dije
- Pero – dijo
- Ya dije que te rehabilitaras, dejaras la prostitución y las calles, te dije que esto es mío – conteste
- Gracias – dijo llorando, me abrazo y se fue con Jared
Volví al refugio y todos estaban hablando de que me habia ido con Will
- Dylan estábamos preocupados por ti, ese chico no es seguro, se prostituye por heroína, tratamos de ayudarlo, pero no tiene a nadie, esta solo – dijo una de las mujeres del centro
- Yo tengo una fundación contra las drogas y él está ahí ahora, lo van a ayudar y he decidido que parte de mis recursos vendrán aquí, lo anunciare en la red, abogados, médicos, lo que necesiten, lo coordinare con el director de la fundación, creo que he estado alejado de todo esto, soy bisexual pero soy rico y blanco, asi que no he tenido problemas más que algunos tipos me llamen marica, pero se defenderme, asi que les he roto la cara, pero estas personas no pueden defenderse de esa manera, asi que los apoyare – dije seguro
Días después anunciamos en la página y en las redes de la fundación mi apoyo económico y social a la comunidad LGBT y a algunos centros de apoyo en Harvard y en Boston, Will estaba en tratamiento y estaba desintoxicándose.
Me estaba involucrando demasiado con estos centros, me gustaba ayudar a la gente, conversar con ellos, apoyarlos, incluso firme un documento donde apoyaba el matrimonio y la adopción gay a nivel nacional.
Una revista de divulgación gay hizo una reseña donde hablaban de mi bisexualidad y las veces que me habían visto con chicos y claro con chicas, habia muchas fotos, pero sobre todo habia una foto mía abrazando a Will, no sé de donde la habían sacado, pero ahí estaba.
Yo no lo hice para llamar la atención, solo deseaba ayudar, hice un Instagram para postear fotos y publicidad para lo que estábamos haciendo, promover la igualdad de derechos, apoyar a la gente de esta bella comunidad que habia olvidado desde hacía un par de años.
Incluso mis amigos estaban cooperando, no me importo si no le gustaba a Max, yo deseaba hacer esto, pero me sorprendió cuando la compañía emitió un comunicado sobre que estaban de acuerdo con lo que hacía y que poyaban mi bisexualidad, lo cual fue extraño ya que Max habia odiado a Jack cuando estuve con él.
Algunos chicos de todo el campus y sobre todo de Eliot que eran miembros de mi nuevo club, eran muy amables y me enseñaban demasiadas cosas, según ellos, yo era un tipo heterosexual al que le gustaban los hombres, así que debía educarme y ellos lo estaban haciendo y vaya que aprendía rápido, ya sabía palabras, miradas, todas esas cosas, ya era fan de algunas series y celebridades, pero ellos me enseñaron aún más.
Para Halloween habría fiestas con ellos y podríamos llevar a alguien.
Ashley estaba en Nueva York me enviaba textos y algunas fotos, y yo a ella, estaba emocionada por vivir sola y tan lejos de casa, tenía un lindo apartamento en la ciudad y ya era toda una experta en las calles neoyorquinas.
Nuestra relación se había quedado en Londres, así que ella podía coquetear con quien quisiera y yo igual, así que acepte salir a desayunar con un chico buenísimo de Adams.
Su nombre era Alex, era alto, fuerte, guapo, cabello castaño, cuerpo perfecto y tenía unos ojos verdes muy dulces.
- Pensé que salías con esa diseñadora británica - dijo cuándo nos sentamos a desayunar
- No, aquí no - respondí
- No entiendo - dijo alarmado
- Tenemos algo en Londres, cuando estamos juntos, según supe tuvo una cita hace unos días con un amigo de un amigo, y yo estoy aquí contigo - conteste
- Que abiertos - contesto
- No estamos juntos, solo en Londres, es la primera vez que lo hacemos, siempre he salido en exclusiva con alguien, pero está vez decidimos estar juntos pero solo en casa - respondí
- Entiendo - contestó - Creo - añadió - ¿Así que no aparecerá ninguna novia celosa a golpearme cierto? - pregunto divertido
- No, no hay novia celosa - conteste
Ordenamos y comenzamos a comer entre risas y conversaciones banales.
Él estudiaba política, así que podía hablar y hablar todo el día.
Regresé al dormitorio y Mike me arrastró hasta nuestro cuarto
- ¿Qué quieres? - pregunté confundido
- Saber - respondió el
- ¿Saber qué? - pregunté mirándolo
- Estás con Ashley, pero saliste con Alex - respondió
- No, Ashley y yo tenemos nuestro algo solo en Londres, ella sale con otros y yo también - expliqué
- ¿Y no hay celos? - pregunto
- No, pero en Londres solo somos ella y yo - conteste
- O están dementes o son muy abiertos - contesto
- Ambos - respondí
- Ya lo creo - dijo y me arrojó un cojín a la cara y comenzamos a pelear
Yo tenía todo mi día ocupado, así que no había podido salir con Alex, hasta un viernes en la noche que fuimos a cenar a Boston, yo entrenaba como loco en todos mis deportes, vigilaba la empresa, tenía clases y además estaba organizando la gala de la fundación que sería en una semana.
Cenamos, paseamos por la ciudad y me llevo hasta un club gay donde estuvimos bailando hasta que finalmente me besó, sus labios eran tan dulces y suaves, así que lo jale de la camisa y lo bese con más fuerza.
Seguimos bailando y besándonos, cuando cerraron fuimos a caminar por la ciudad, entramos a un café de veinticuatro horas, ordenamos tarta con café caliente y nos quedamos ahí hablando.
Poco antes del amanecer, pagamos y salimos, fuimos hasta el río, y miramos el amanecer sentados en el césped.
Ya no desayunamos juntos, pero me llevo hasta Eliot donde me dio un dulce beso de despedida.
-Espero volver a pasar una noche entera a tu lado - dije entre besos
- También yo, pero en un lugar más privado - respondió y se fue a Adams
El comedor ya estaba abierto, así que me serví un plato de fruta y crepas recién hechas, me serví jugo y desayune.
No había dormido nada, así que cuando subí, me metí directo a mi cama sin desvestirme, solo arroje el tenis.
El viernes por la noche era la gala de la fundación y por supuesto todos mis amigos estaban invitados cómo cada año, además de profesores y supervisores tanto de Eliot como de mis clubes.
Anuncie la fundación contra el maltrato infantil y aunque hicieron preguntas muy privadas evadí las respuestas, ya que el maltrato que sufrí era algo que yo no solía divulgar como mis adicciones, así que solo dije que tenía una mala relación con mi padre. Lo cual se podría traducir en qué quizá peleábamos o me ignoraba, no que era su saco personal de box.
La gente sabía que yo solía involucrarme en causas personales, muy cercanas así que tuve que mencionar que papá y yo no nos llevábamos nada bien cuando era niño y adolescente y aunque no estaban conformes no di más información.
Recibimos una gran respuesta a lo propuesto, así que conseguimos más donativos, incluso algunas organizaciones de ayuda infantil donaron a mis causas.
Yo iba por ahí saludando y conversando con todos los invitados, había desde eruditos, alumnos, millonarios, socialites y hasta estrellas. La fundación se había vuelto demasiado popular, y mucha gente la apoyaba abiertamente, sobre todo porque cualquier persona podía tener acceso a la información y a sus tratamientos.
El sábado había juego de fútbol, así que cuando termino la gala volvimos a casa a descansar, ya que Mike jugaría, está era su última temporada antes de graduarse, todos la disfrutábamos al máximo porque era la última de todos.
El juego no era Ivy, pero lo disfrutamos, ganamos por veintisiete puntos, así que salimos a festejar bastante.
Los siguientes dos juegos antes de Halloween fueron muy buenos, uno fue en Princeton donde perdimos y el otro contra Dartmouth donde también perdimos aunque no por mucho.
Yo tenía varias fiestas de Halloween, a una iría con Alex como mi pareja y en las otras solo iría con amigos.
Para la noche ya teníamos grandes botes llenos de dulces que comeríamos en las noches hasta Navidad.
Todo el campus estaba lleno de gente asustando, otros yendo de fiesta en fiesta, otros haciendo bromas, pero cada quien se divertía a su estilo.
En la fiesta con Alex era un ángel caído, así que tenía sangre falsa en la espalda lo cual era divertido, porque solo llevaba pantalones y unas cosas que me habían pegado donde simulaban las alas cortadas.
Alex iba de policía sexy y vaya que lucía espectacular, me acerque y lo bese sin decir nada, solo puse mis labios sobre los suyos y lo jale del cuello de la camisa.
Sentí sus manos en mi cintura, jalo mi cuerpo frente al suyo y me mordió un poco.
-Dyl, estas que ardes - dijo
- Lo sé, me excito tu disfraz - respondí besándolo
- No es enserio, estás ardiendo, tienes fiebre - dijo mirándome asombrado
- Claro que no, me siento bien - respondí
- Estás ardiendo, estás muy rojo y ardes - añadió asustado poniendo su mano en mi frente
- Estoy bien - dije botando su mano de mi frente
- Vamos a la clínica -dijo y me saco de ahí, le avise a Jasón y nos fuimos
Llegamos a la clínica y efectivamente tenía fiebre, tenía treinta y nueve grados, así que me despegaron las alas falsas y me acostaron para revisarme
-Tus pulmones se escuchan congestionados - dijo el doctor
- Pero no me siento mal, estoy bien -dije
- ¿Puedes respirar bien? - pregunto la enfermera
- No, pero siempre ha sido así por la cocaína, no huelo todo al cien ni respiro correctamente - dije
- Creo que debes ir al hospital, necesitas estudios, los sonidos de tus pulmones son disminuidos, tienes fiebre y tú corazón se escucha acelerado, puede ser por la dificultad para respirar - explicó el médico
- Me pierdo el Halloween - me queje pero Alex me llevo al hospital donde me admitieron y me llevaron por una radiografía ya que el médico de la clínica me había referido.
Estuve bastante enfermo los próximos días, Carol y Connor volaron a Boston para verme, tenía oxígeno y estaba aislado, ya que mi sistema inmune solo era virtual y tenía principios de neumonía
Resulta que debían cambiar mi medicamento para la neumonía ya que mi sistema inmune estaba suprimido y ya no están funcionando mi medicina, así que pase varios días con fiebre y un terrible, terrible resfriado, pero debido a mis inmunosupresores se hizo más fuerte.
Los doctores parecían astronautas cuando me revisaban, pero poco a poco me sentí mejor, hasta que Carol y Connor pudieron entrar a verme, aunque yo usaba mascarilla cuando tenía visitas. Incluso Ashley y Robert me visitaron, George y Max me sorprendieron apareciendo, para mí era solo un resfriado que pude haber pasado en mi cama con mis cosas, pero ellos insistían en que debía estar en mi burbuja hospitalaria por las posibles infecciones.
Cuando salí estaba cerca acción de gracias, faltaba un juego antes del de Yale y luego vacaciones.
El semestre de otoño se estaba yendo y con ello mi último año.
Habíamos ganado a Columbia y luego a Penn, así que yo estaba feliz alardeando con Connor, ambos equipos habían perdido contra nosotros. Fue bastante divertido ya que apostamos, una por Columbia y otra por Penn, así que Connor tenía que meterse con un tutú rosa a un lago helado cuando fuéramos a casa. No sé cómo pero la apuesta se había virilizado y hasta tuvo su propio hashtag en Instagram, mucha gente nos había etiquetado en fotos del marcador y apuestas de otros alumnos.
Para mala suerte los gemelos no habían accedido más que a pagarme mil dólares por qué Columbia perdió. Pero con el tutú de Connor me daba por servido, sería muy divertido ya que Robert se había ofrecido como camarógrafo.
George no quiso apostar, lo cual me puso triste, ya que Harvard tenía racha ganadora.
Finalmente el día del juego llegó y fuimos hasta Yale, la noche era aún más especial, estábamos todos reunidos, era un autobús solo para alumnos de último, nos dieron una mochila especial con agua, toallitas desinfectantes y más cositas bellas, pero lo mejor es que la mochila tenía la leyenda
"El juego Harvard Vs Yale 2020"
La iba a atesorar por siempre.
El autobús era una completa fiesta y Mike al ser de último año podía ir ahí con el resto de sus compañeros de equipo, al igual que las animadoras de último.
Llegamos a Yale y nos acomodamos en las casas, nos asignaron con alumnos igual de último, no sabía que todo esto podía pasar, sentía la adrenalina al máximo.
Bajamos a comer a su comedor y como éramos alumnos Eliot nos sentamos juntos y comenzamos a cantar antes de comer.
Salimos de ahí y todo el campus era una fiesta, azul y carmesí por todos lados, había vencidas, retos, toda la gente esperaba un año solo para poder vivir esto, era la segunda vez que venía a Yale y debía despedirme como alumno del College, aunque seguiría viniendo a los juegos, no sería lo mismo.
Fuimos a cenar y al ser alumnos de Harvard nos dieron las hamburguesas con una H marcada en el pan y a los chicos de Yale con una Y. George apareció con sus amigos y me empujo para sentarse, algunos se pusieron tensos al ver nuestra mini pelea, pero nos abrazamos después de eso y les hicimos espacio, era algo nuestro, era ya la tradición cenar juntos George y yo con nuestros amigos sin importar el campus cenábamos juntos.
Al salir de ahí fuimos a un club a bailar, ordenamos tragos y nos dieron una enorme charola con cincuenta shots de color carmesí y azul. Yo ordene bebidas sin alcohol, pero usaba playera de Harvard, asi que mis aguas tenían color carmesí.
La música sonaba en lo alto, y todos estábamos bailando, George y yo estábamos tomando fotos y ordenábamos mas tragos, sudábamos por la gente y las luces pero era muy divertido estar ahí con toda esa gente.
Mike se fue a las diez a su dormitorio ya que tenía hora de llegada para que descansara con el equipo, nosotros nos quedamos en el club hasta la medianoche, cuando salimos algunos iban ebrios, asi que íbamos jugando y aun divirtiéndonos, me subí a la espalda de George y me llevo por una cuadra, las risas iban al máximo y todos gritábamos y reíamos, no habia tomado ni una sola gota, pero me sentía igual de eufórico que mis amigos.
Regresamos al campus y nos fuimos al dormitorio, subimos hasta nuestras camas y nos acostamos a descansar.
Despertamos a las siete de la mañana, nos duchamos y bajamos a desayunar con los demás alumnos de Eliot.
Salimos de la casa y fuimos hasta donde se reunirían los chicos de Harvard, pasamos por café y seguimos caminando hasta donde sería la reunión Harvard.
Llegamos y habia música, tragos, la gente llevaba banderas, playeras, letreros, todos bailaban y se estaban divirtiendo, pasamos poco más de una hora entre risas y bailes. Tomamos el autobús para llegar al estadio y ahí habia más gente, asadores, cervezas, habia familias y gente mayor que iban a ver el juego, nos encontramos con una familia que llevaba a sus hijos pequeños a su primer juego, asi que nos acercamos a ellos y comenzamos a cantar, los padres eran graduados Harvard y llevaban a sus pequeños al juego, asi que los niños también bailaban con la música, algunos hombres que asaban carne nos ofrecían a todos los que pasábamos con playeras de Harvard, me llamaron los gemelos y les hicimos señas, recogimos nuestro almuerzo con la gente de Yale y luego nos encontramos con Shelby y George que iban con sudaderas de Yale.
Estuvimos un rato juntos y luego anunciaron que fuéramos entrando, nos despedimos y fuimos entrando poco a poco, nos acomodamos en unos lugares muy buenos y a lo lejos vi a Richard sentado con una sudadera de Harvard, Lizzy y Donovan estaban con él, asi que baje a saludarlos.
- Hola – dije al verlos
- Hola Dyl, sabía que estarías aquí – dijo Rich saludando con Donovan en sus brazos
- Hola Donovan ven con el tío Dyl – dije y lo cargue, me saludo con un abrazo y le di un beso en la mejilla.
- Es su primer juego, y el mío – dijo Lizzy
- Es el mejor, es mi cuarto juego y sé que seguiré viniendo cada año – respondi
- Vi a Shelby un rato y luego se fue – dijo Rich
- Lo sé, estaba con George, los vimos y luego se fueron del otro lado – conteste
- Cenaremos más tarde, cuando acabe el partido iremos a nuestro hotel y luego cenaremos, por si quieres unirte – ofreció Rich
- No gracias, mi autobús, sale en la tarde, y debo regresar a casa – dije
- Nos veremos luego entonces – contesto Lizzy, le regrese al pequeño aficionado Harvard y me fui con mis amigos solo después de hacerme una foto con la familia.
El partido comenzó y Mike estuvo en el volado, era su último año y no solo le habían lastimado la pierna en el juego anterior en nuestro estadio contra el mismo equipo, no era venganza, solo era revancha, solo era dignidad, el no solo lo deseaba, necesitaba ganar este juego. Todos estábamos de pie gritando y saltando apoyando al equipo, de nuevo teníamos letreros con el número y el apellido de Mike, los puntos ya estaban cayendo, y celebrábamos cada que anotábamos. El medio tiempo llego y todos cantábamos y bailábamos, bebíamos agua y nos movíamos con la música de las animadoras.
Se reanudo el juego y con ello la emoción, los de Yale eran rudos, pero nosotros más, asi que aunque íbamos perdiendo en ese momento, nos recuperamos y anotamos. Al partido estaba por terminar y estábamos arriba, no era mucho, pero íbamos ganando, Mike estaba jugando bastante, era la última vez que pisaría ese campo como jugador de los Crimson.
Silbaron el final del partido y todos saltamos de alegría, habíamos ganado, el equipo camino al centro del campo, le do la mano a los chicos de Yale y después nosotros bajamos corriendo a celebrar el triunfo, los chicos alzaban sus cascos en señal de victoria y nosotros mientras corríamos hacia abajo gritando y saltando, llegamos hasta el centro y comenzamos a apiñarnos junto al equipo que celebraba la victoria, Mike estaba fascinado, habia ganado en Yale en su último juego.
Me acerque como pude al equipo hasta que encontré a Mike que gritaba al centro del equipo, levantaba su casco y comenzamos a cantar la canción de Harvard, la emoción estaba al mil.
Nos quitaron veinte minutos después, salimos de ahí, emocionados y jubilosos por haber ganado, veríamos a Mike hasta casa, donde claramente tendríamos cena de victoria.