Taehyung no había estado cuando Hoseok y su familia habían venido. Tal vez fue un poco al propósito ya que la última interacción que había tenido con el -ahora- omega no había sido muy linda o cómoda que digamos.
Había sido tratado mal pero suponía que se lo tenía merecido, Hoseok le había recordado sus palabras. Le recordó las veces que lo alejó y cuestionó el porqué ahora estaba detrás suyo. Taehyung tenía una razón, estaba preocupado por su salud pero sabía que no podía decirle eso porque muy probablemente Hoseok lo malinterpretaría y creería que estaba sintiendo cosas por él. Algo que claramente no era cierto.
A Taehyung no le gustaba Hoseok.
—Taehyung, ¿se puede saber dónde estabas? Tuve que mentirle a los Jung acerca de tu ausencia. No puedo creer que no vinieras.
Seguía cenando tranquilamente mientras su padre decía todas aquellas palabras porque por supuesto que sabía que había hecho algo mal. Pero una vez más, no quería ver a Hoseok. No podía verlo. Tal vez se sentía un poco muy culpable porque se había dado cuenta de que sus palabras habían sido duras de más y que Hoseok las tenía muy presente.
—Taehyung, te estoy hablando.
—Cariño, déjalo comer. Debe de haber estado ocupado en algo importante —dijo la única omega en la mesa, su padre se quejó pero no duró mucho tiempo hasta callarse y cambiar de tema.
—Bien, luego hablaré contigo —sentenció con firmeza y luego se dirigió a Jungkook—. No nos has contado qué tal te ha parecido Hoseok.
Taehyung se tensó de inmediato y su lobo se puso tan alerta como nunca. Su padre no podía estar refiriéndose a lo que creía, esperaba que no estuviera hablando de refiriéndose a eso.
—Lindo —contestó con una sonrisa, mirando a la carne que estaba a punto de llevar a su boca—... Muy lindo.
Estaba mudo, sin saber que decir o hacer. Era su culpa, sabía que Jungkook estaba en busca de un omega para pasar su celo, ¿cómo pudo permitir que conociera a Hoseok? No, la pregunta era, ¿su padre estaba permitiendo esto?
—Bien, supongo que querrás pasar tu celo con él.
¿Había dicho celo?
—Por supuesto-
—¿Qué demonios? —soltó Taehyung, mirando a su padre—. ¿Cómo puedes hablar de eso del hijo de tus supuestos amigos?
Su padre le dio una mirada dura: —A los padres de Hoseok también les gustó Jungkook para él. No te metas, Taehyung.
—¿Acaso debería importarme si les gustó? Son los mismos que le metieron en la cabeza ideas erróneas. Es a Hoseok a quien debería gustarle Jungkook y dudo que sea así. —Porque le gusto yo.
—¿Lo dudas? ¿Por qué tan seguro? ¿Acaso hablas con él? Tengo entendido que ni siquiera son amigos. No te metas, Taehyung.
—Hoseok no es el tipo de omega que se enamora de alguien en unas horas. Y, a él le gusta alguien más. —Su padre sabía que hablaba de si mismo pero no lo mencionó, solo se veía molesto. Queriendo alzar su voz de mando.
—Eso es lo de menos —interrumpió Jungkook del otro lado de la mesa, con una sonrisa arrogante—. Si le gusta alguien, haré que lo olvidé. Haré que me quiera a mi.
—¿Por qué estás hablando como si fuera algo fácil, idiota?
—¡Taehyung! —Su padre alzó su voz de mando, los tres presentes lo miraron de inmediato. Taehyung se dio cuenta que era por la grosería que dijo y mordió su lengua sin poder creer que había dicho aquello—. Discúlpate —ordenó con mucha autoridad pero Taehyung no se sintió en la obligación de hacerlo y su lobo no se asustó por no obedecerlo, levantó su cabeza con confianza.
—No soy el único que debería disculparse aquí —respondió mirándolo a los ojos sin miedo, su padre lo miró con sorpresa y confusión tal vez porque era la primera vez que no lo obedecía—. No hablen de Hoseok como si lo conocieran y, respétenlo. Es todo nuevo para él, hace tan solo un tiempo atrás no sabía que sería un omega —recordó para luego levantarse de la mesa, haciendo una venia en despedida y agradecimiento antes de irse.
Eran cierta sus palabras y esperaba que hubiesen entendido. Le había decepcionado por completo de que su padre hubiera mencionado a Hoseok con respeto al celo de Jungkook por el hecho de ser un omega. Estaba fingiendo hacer un bien sin darse cuenta que estaba actuando como un idiota, porque dudaba que Hoseok estuviera planeando ayudar de esa forma (sexualmente) a un alfa que recién había conocido y porque sabía bien que su verdadera intención era unir como sea a los Kim con los Jung.
Por otro lado, dudaba que alguna vez se haya detenido a hablar con Jungkook y conocerlo realmente. El alfa ese ni siquiera había aceptado el apellido Kim y era prácticamente un sátiro a tan joven edad. Dudaba que su padre estuviera teniendo las mismas intenciones de juntarlo con Hoseok si supiera todo eso, o al menos eso quería creer,
Como fuese, si su padre seguía sin mostrarse diferente y aún quería juntarlo con Jungkook, Taehyung haría todo lo que fuese para separarlos. Si era necesario hablaría con los padres de Hoseok, de todas formas los conocía hace mucho.
No iba a permitir que Hoseok saliera con alguien como Jungkook.
Al día siguiente su padre no volvió a tocar el tema, Jungkook de hecho tampoco y ni siquiera para molestarlo pero si lo miraba con extraña diversión cuando el apellido "Jung" era mencionado. Con el paso de los días tampoco volvió a ser mencionado Hoseok, Taehyung se preguntaba si era solo cuando él estaba presente pero pronto se dio cuenta que su padre estaba en otra cosa, se enteró que había iniciado otra pelea legal de propiedades con su madre real y eso le estaba sacando demasiado tiempo.
Para Taehyung era una buena noticia que su padre estuviera tan distraído y ocupado como para que olvidara su tonto plan de Jungkook con Hoseok pero no era muy feliz que digamos al saber que sus padres se siguieran peleando cuando se suponía que estaban en paz. Solo lo hacían reafirmar su decisión de jamás tener pareja.
Comenzaron a pasar las semanas y luego meses. Taehyung había visto a Hoseok solo de lejos en el colegio pero eso no significaba que no estuviera al pendiente suyo, como si fuese su hermano mayor por supuesto. Sabía que seguía pasando tiempo con sus amigos de siempre aunque a Taehyung no le gustaba mucho porque le seguía molestando que en ese grupo de amigos estuviera Seokjin, con quien se había peleado esa primera vez del celo de Hoseok. De lo poco que sabía de Hoseok -fuera del colegio- era que estaba bien con su familia y en general así que estaba tranquilo. El pensamiento lo hizo reír porque casi parecía que dependiera de como se sentía Hoseok.
Era ridículo.
Y no ayudaba que hasta el momento siguiera sonriendo solo por el hecho de que había encontrado a Hoseok mirándolo fijo a la salida del colegio. Algo le decía que recordaba que día era hoy y su corazón, por alguna razón, latía rápido en su pecho. No le importaba si todos lo habían olvidado, le hacía feliz que él lo recodara.
Cualquier diría que estaba...
—Feliz cumpleaños, Tae —dijo su padre apareciendo al fin en la sala de estar—. ¿Qué se siente por fin tener dieciocho años?
—No veo la diferencia.
—Un año más es un año más, Tae —dijo la omega apareciendo detrás de su padre y tomándole la mano. Ella había resultado ser una buena omega para su padre—. ¿Nos vamos? —le preguntó y el alfa asintió con una sonrisa tonta, lo tenía tonto, sonreía solo porque le había tomado la mano.
Qué ridiculez.
—Escuchen, más tarde vendrán los Jung que conocen a Tae desde hace años, así que saldremos a comprar cosas. Ya volvemos.
El lobo de Taehyung se puso alegre, raras veces su lobo tenía alguna reacción pero suponía que era porque sabía que en todos sus cumpleaños Hoseok le regalaba algo. Taehyung perdía todo pero los regalos de Hoseok los tenía todos sus regalos bien guardados, no podía negar que el omega era adorable en ese sentido. Se preguntaba si le traería un regalo también este cumpleaños, ya era mayor de edad ahora, no podía no darle nada, ¿cierto?
—¿Vendrá Hoseok? —Taehyung se tensó, hacía meses que Jungkook no lo había mencionado hasta había creído que lo había olvidado cuando decidió pasar su celo con un omega que conoció por ahí.
—Vendrá —asintió su padre—. Bien, ahora volvemos.
Jungkook sonrió de una forma que para nada le gustó, le generó una extraña y molesta sensación. Había querido que Hoseok viniera, pero ahora prefería que no lo hiciera. Tenía que buscar una forma de hacer que Jungkook dejara de estar interesado en él. Jamás le permitiría tocar ni un pelo a Hoseok.
Era el cumpleaños de Taehyung.
Había contado los días para su cumpleaños desde hacía unas semanas, o tal vez meses cuando se dio cuenta que Taehyung no volvería a acercarse a él luego de alejarlo. Esta era su oportunidad para nuevamente estar frente a él, ahora más que estaba confiado y había aprendido todo de cómo vivir siendo un omega.
Habían muchas cosas malas de ser un omega, no lo iba a negar pero había una muy buena y esa era la posibilidad de tener un cachorro... su propio cachorro. Tal vez era un poco joven para pensar en esas cosas cuando faltaban unos meses para que cumpliera diecinueve y terminara el colegio, pero era imposible no pensar en que algún día podría tener su propia familia, le hacía mucha ilusión la idea. Aunque debía admitir que solo había un alfa con el que quería todo eso.
Y ese seguía siendo el mismo alfa al cual quería desde hacía años; Taehyung.
—Mi celo se acerca —murmuró apareciendo en la habitación de su madre, donde ella se maquillaba.
—Lo sé —suspiró ella mirándolo a través del espejo—. Pero no te preocupes, cariño. El segundo celo suele también ser igual de poco intenso, como el primero.
Hoseok se ruborizó recordando cómo había sido su primer celo. Tragó en seco porque no había sido "poco intenso", aún podía recordar lo intenso que fueron sus deseos y pensamientos.
—¿Crees que se me nota que estoy cerca de mi celo? Ji dijo que no pero...
—Hobi, no te preocupes por eso, no estaremos mucho tiempo en casa de los Kim y estaremos contigo todo el tiempo. Apenas veamos algún cambio te sacaremos de ahí.
Hoseok asintió un poco preocupado, aún estaba algo traumado por su primer celo, cuando llegó de repente sin que lo notara. Su mayor miedo es que volviera a pasar lo mismo, pero escuchar a su mamá lo había calmado un poco.
—Sé que es el cumpleaños de Taehyung —dijo su madre de pronto, terminando de maquillarse—. Pero... ¿qué tal si conoces más a Jungkook? Escuché que está interesado en ti.
—Mamá...
—Es un chico muy lindo y su madre es una omega muy educada, estoy segura que él debe ser igual. Y presiento que podría surgir algo lindo entre ustedes.
No respondió, únicamente bajó la cabeza, agradeciendo silenciosamente que no mencionara a Taehyung y dijera algo como que "En cambio entre Taehyung y tú nunca podrá pasar nada porque a él no le interesas". Cosa que podía ser cierta pero aún tenía esperanzas de que no fuera así más porque en todos esos meses que no había hablado con el alfa, no se sintió muy lejano a él, siempre lo encontró mirándolo y de alguna forma sintiéndose protegido por él.
Sentirse protegido había significado demasiado en todo ese tiempo que se sintió vulnerable y débil, donde recién aprendía más de lo que era ser un omega. Casi había confirmado de nuevo que Taehyung era su pareja predestinada aunque éste último no quisiera verlo.
Hoseok fue rápido a su habitación antes de subir al auto de su familia y tomó el pequeño regalo que le había comprado días atrás. Siempre le había dado un regalo por su cumpleaños, no sabía si Taehyung los guardaba o tiraba pero creía que era lo primero. Taehyung siempre recibía sus regalos de forma educada, casi parecía feliz cuando le daba algo y él, él también le daba regalos a Hoseok en sus cumpleaños. Sus cumpleaños eran de las pocas veces que cruzaban más de una palabra y Taehyung podía llegar a sonreírle.
Esperaba que este cumpleaños fuera igual que en los anteriores. O mejor...