Every little secret ; Minsung

By Cirly_SW

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Siempre es Minho, ¿no? Desde que conoció al maldito tipo, se ha arrastrado bajo la piel de Jisung como si est... More

Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21

Capítulo 16

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By Cirly_SW

Jisung es una especie de adicto a Lee Minho (no le preguntó a nadie por su apellido, pero pasó horas en Facebook tratando de encontrar a Minho hasta que buscó en la lista de amigos de Felix y lo encontró), bastante ridículo. Es como: Jisung se despierta con un mensaje de buenos días de él. Incluso antes de su cigarrillo de la mañana, Minho está al frente de su mente. Y luego, en el desayuno, se sienta con Felix y (bendita sea su alma loca) trae a Minho a la conversación sin problemas de una manera que solo puedes hacer cuando alguien es tu mejor amigo y está tan entretejido en tu vida que están en cada recuerdo y buena historia que quieras compartir. Y luego, a lo largo de sus clases, dice un pequeño "Te extraño, Minho" y "Odio la clase de inglés. Apuesto a que te encanta, ¿eh?" en textos. Finalmente, antes de irse a la cama, Minho le envía un breve y dulce "Que duermas bien x — Minho ", así que no es tan extraño que termine soñando con labios suaves, piel brillante y ojos marrones, ¿o sí?

Es solo que, Jisung no ha tenido citas. Y aunque nunca se lo admitiría a nadie, ni siquiera a Changbin, aunque está bastante seguro de que Changbin lo sabe de todos modos porque es espeluznantemente intuitivo, es una especie de virgen. Como, técnicamente. Ha hecho cosas con ese chico atractivo de la calle de regreso a casa. Y luego estaba Wonyoung del verano pasado, que tenía el cabello negro, una nariz pequeña y las manos más suaves (que en su mayoría solo recuerda porque esas manos se habían sentido muy bien envueltas alrededor de su pene), pero en realidad nunca ha tenido sexo. Así que todo con Minho se siente nuevo. Tal vez los besos no son nuevos. Tal vez masturbarse discretamente cuando su compañero de cuarto no está en la habitación mientras recuerda cuando se estaban besando en su cama no es nuevo. ¿Pero el resto? Las partes en las que siente que se está quemando cuando Minho lo encajona con sus extremidades y lo besa en el cuello, o la parte en la que sostiene ansiosamente el teléfono en la mano mientras espera que Minho le responda el mensaje de texto (incluso si solo había enviado ese mensaje de hace dos minutos), o la parte donde Felix llama a Minho como el novio de Jisung y se le encoge el estómago de la mejor manera posible. Nada de eso ha sucedido antes.

Una parte de él piensa que debería controlarse, ¿pero la otra parte? No podría importarle menos si solo le está dando su corazón a Minho sin siquiera tratar de evitar caerse. Y cayendo está. Es como una caída constante y larga al suelo que parece que va a terminar cada vez que Minho suspira su nombre o dice cosas como: "Algún día serás mi mejor recuerdo". Pero no lo ha hecho, todavía no. No completamente. Sin embargo, es solo cuestión de tiempo. Inevitable. Jisung lo ha aceptado.

Básicamente, Jisung está actuando como una niña de doce años cuyo enamoramiento acaba de invitarla a salir, y extrañamente está bien con eso.

"No lo soy", dice Changbin en el almuerzo. Están solos por primera vez en mucho tiempo. Seungmin y Jeongin están en la biblioteca y Felix... en alguna parte. Jisung en realidad no le hace preguntas porque, por lo general, las respuestas son raras y no ayudan en absoluto.

Jisung se encoge de hombros y clava un trozo de brócoli con su tenedor. "Demasiado."

"No es justo", se queja Changbin. "He estado enamorado de Felix durante años y no he progresado en nada. Hace aproximadamente un mes que conoces a Minho y ambos están terriblemente enamorados el uno del otro. Te odio".

Tragando primero, Jisung inclina la cabeza hacia un lado y pregunta: "¿Crees que estamos enamorados? ¿Los dos?".

Changbin rueda los ojos. "Creo que Minho llega a ver los lados de ti que no le muestras a nadie, y creo que él adoraría el suelo que pisas, si se lo pidieras. Así que sí. Ambos están enfermamente enamorados. Es arruinando mi jodido apetito".

Jisung se complace con una suave sonrisa por un momento hasta que Changbin levanta amenazadoramente su tenedor como si fuera a apuñalar a Jisung con él. "Todavía sostengo que progresarías si le dijeras a Felix cómo te sientes. Binnie, el otro día ese chico casi choca contra una pared. No se da cuenta. Podrías tener su pene en la boca y probablemente él todavía no lo haría. Dile que te gusta explícitamente".

"Todavía sostengo que te verías bien con tu pene arrancado y grapado en tu jodida frente", dice Changbin felizmente.

Jisung le arroja un trozo de comida. "¿Quieres que le pida a Minho que hable con él al respecto?"

"Te mataré si lo haces".

Jisung suspira y se pregunta por qué nadie quiere su ayuda.

A la mitad de su última clase, recibe otro mensaje de Minho. Este es un poco diferente a los demás, y lo deja más que un poco confundido. ¿Qué te gusta en tu pizza? :D - Minho

¿Cualquier cosa? Jisung envía de vuelta, y luego recibe una respuesta de Genial. Quédate despierto después del toque de queda esta noche y tus amigos también. —Minho

"¿Está enviando mensajes de texto en clase, Sr. Han?" Levanta la vista y encuentra a su maestro justo en frente de su escritorio, mirando hacia donde Jisung tiene su teléfono escondido en su regazo. "¿Me equivoco o los teléfonos ya no están prohibidos en este establecimiento?"

"Um". Jisung se lame los labios y mira a su alrededor, rezando para que alguien lo salve. Nadie lo hace. "No es un teléfono", intenta débilmente. "Es una, eh, calculadora gráfica."

Su maestro sonríe amablemente. "¿Y qué necesidad tiene uno de una calculadora gráfica en una clase de Historia ?" Jisung parpadea hacia él.

"Está bien, Jisung, entrégalo".

"¿Cuáles son mis castigos si no lo hago?" pregunta Jisung.

"Detención hasta el final del semestre", proporciona su maestro. "Y como sé que seguramente no será suficiente para asustarte, cortaremos tu almuerzo para la tutoría y ¿cómo suena escribir quinientas líneas de Ya no les diré mentiras a mis profesores?"

Jisung le entrega su teléfono, pero no antes de enviarle a Minho un " bien" y bloquear su teléfono para que nadie pueda acceder a nada más que él.

"Estoy a punto de mostrarte", dice Felix en voz baja, con un aire de gran importancia rodeándolo, "algo que solo otra persona en todo el mundo sabe cómo hacer".

Están parados afuera de la puerta lateral del gimnasio, Felix directamente al lado del teclado (que requiere una tarjeta de acceso para abrir, y solo los miembros del personal tienen una) con su teléfono en una mano y una tarjeta de crédito en la otra. Gira la tarjeta y, así de simple, la mete en el teclado y la puerta se abre.

"Tienes que estar jodidamente bromeando", dice Changbin, resistiéndose a la puerta abierta. "No puede ser tan fácil".

"Lo es, sin embargo," dice Felix encogiéndose de hombros. "Pero solo esta puerta. El teclado se rompió hace unos años y cuesta un montón de dinero arreglarlo, así que no lo hicieron. Nuclear, ¿verdad?"

"Desde luego, nuclear", Changbin está de acuerdo sin sarcasmo ni nada en su voz, lo cual es toda una hazaña, en opinión de Jisung.

"¿Vamos a entrar o simplemente nos vamos a quedar aquí?" pregunta Seungmin. "Prefiero que no me atrapen, muchachos".

Jeongin alborota su cabello. "¿Alguien te ha dicho alguna vez que estás adorablemente nervioso?"

Jisung se detiene a mitad de camino en la puerta y mira entre Seungmin y Jeongin por un momento. Jeongin es... Jeongin esta normal. ¿Pero Seungmin? Mejillas rojas, cejas levantadas sobre los ojos muy abiertos, labios ligeramente separados. Jisung retrocede y se desliza a su lado mientras el resto de ellos se filtran en el edificio, y le susurra al oído de Seungmin: "Él se cambia justo en el medio de nuestra habitación todo el tiempo. Las palabras 'bien dotado' vienen a mi mente".

El color desaparece del rostro de Seungmin mientras corre detrás de los demás. Jisung se ríe a su espalda y lo sigue al gimnasio.

Para ser honesto, no es un edificio en el que pase tanto tiempo. Dejó de tomar cualquier tipo de clase relacionada con el acondicionamiento físico tan pronto como ya no se requería (tienes que tomar al menos dos clases de gimnasia, salud o acondicionamiento físico para graduarte), pero conoce el diseño lo suficientemente bien. Felix los guía a través de la sala principal sin encender ninguna luz hasta que están en las gradas.

"No podemos encender las luces", explica mientras sube los primeros escalones de las gradas, usando la luz de su teléfono como guía. Jisung puede distinguir el contorno de su figura cuando se agacha y saca: "Guardo esto aquí para cuando Minho se cuela. Usa pilas, así que si alguna vez van a entrar aquí sin mí, solo recuerden trae un paquete extra en caso de que muera", dice antes de encender la pequeña lámpara portátil. Ilumina apenas cualquier parte de la habitación excepto el pequeño rincón en el que lo coloca.

Changbin se sienta lo más cerca posible de Felix en las gradas, mientras que Seungmin se sienta lo más cerca posible de Jeongin sin verse raro. Jisung se sienta frente a Changbin y Felix, y distraídamente retuerce las manos mientras observa la puerta, esperando.

"¿Quieren escuchar una historia?" Felix pregunta.

"No", dicen rápidamente Jisung y Jeongin. Seungmin cortésmente dice que sí, y Changbin prácticamente echa espuma por la boca por eso (no es una exageración, en realidad).

Felix frunce el ceño a Jisung antes de decir: "De todos modos. Estaba en este, um, restaurante. No, espera, lo siento. Era un restorán. Y um, estaba esta mesera, ¿verdad?, y ella, um..."

Jisung deja de escuchar. Le gusta Felix, lo hace, pero no está realmente interesado. No cuando puede escuchar la puerta por la que acaban de pasar cerrándose, y puede ver débilmente la forma del cuerpo de Minho acercándose a ellos. Las cajas de pizza aparecen a continuación (tres de ellas apiladas una encima de la otra), y luego el olor a queso grasiento y tomates.

"Lamento llegar un poco tarde", dice Minho mientras coloca la comida en el asiento debajo de Jisung. "Hubo un accidente en las afueras de la ciudad. El camino estuvo bloqueado por un tiempo".

"Trajiste pizza", dice Jeongin soñadoramente. "Podrías haber llegado una hora tarde y nadie te habría culpado por ello."

"Es cierto", dice Changbin. "Ahora que alguien me dé una rebanada".

Hay muchos murmullos y sonrisas compartidas mientras reparten la comida, todos comen un trozo menos Minho, que está sentado al lado de Jisung y frota ansiosamente sus manos en sus jeans. De hecho, está temblando cuando Jisung lo toca, y la comida en su boca ya no sabe ni remotamente comestible, y mucho menos deliciosa y perfecta como hace unos segundos.

"Minho", dice Jisung, en voz baja, "¿Qué pasa?"

Minho lo besa. Sus labios caen a la izquierda de la boca de Jisung y se ralentiza para besarlo correctamente, húmedo, descuidado y minucioso, hasta que el único sabor que queda en la boca de Jisung es Minho. Se pierde en él mientras dura, pero tan pronto como esos labios desaparecen, el pánico vuelve a aparecer.

"Minho—"

"No pasa nada", le asegura Minho. "Estamos celebrando".

"¿Celebrando qué?" Felix pregunta.

"La vida", responde Minho. "Buena salud. Amistad". Todos resoplan. "Está bien, está bien. Tengo una entrevista para una pasantía en Manchester justo después de Navidad. Es para esta gran compañía que hace videojuegos llamada Fisco, y es solo un trabajo de escritorio o lo que sea, contestar llamadas y cosas así, pero la mayoría de las personas que hacen una pasantía allí terminan consiguiendo un trabajo real en el futuro".

"No sabía que te gustaba eso", admite Jisung.

Minho le da una sonrisa tímida. "Lo habría mencionado, pero he estado evitando pensar en cualquier cosa remotamente relacionada con el diseño de juegos desde que les envié mi currículum. No quería decir algo y que no funcionara, ¿sabes?"

Jisung pasa una mano por el muslo de Minho. "Estoy feliz por ti."

"¿Cuando inicia?" Changbin pregunta, interrumpiendo antes de que Jisung pueda terminar de cruzar la distancia entre sus labios y los de Minho. Jisung lo mira por ello.

"Bueno, todavía no tengo la pasantía, técnicamente", explica Minho. "Tengo una entrevista después de las vacaciones de Navidad. Pero si todo resulta como espero, comenzará en agosto. Y tengo que ingresar a la Universidad allí también, o de lo contrario no podré aceptar, pero... tengo esperanzas".

Esta vez es Jisung quien besa a Minho, porque esa mirada puramente feliz en su rostro es demasiado contagiosa para no hacerlo.

"¿Ven afuera a fumar un cigarrillo conmigo?" Jisung pregunta luego de un par de porciones de pizza.

"Hace un poco de frío", comenta Minho cuando regresan por la puerta por la que habían entrado.

Jisung le sonríe. "¿Te va a matar un poco de frío?"

"¡Mis pezones están duros y todo!" Minho dice indignado, con una sonrisa juguetona en su rostro.

De alguna manera, Jisung todavía está muy enamorado de él.

"Si no quieres ver uno de mis lugares favoritos en todo el mundo..." Se calla, levantando las cejas expectante.

Minho agarra su mano con fuerza. "Quiero ver todos tus lugares favoritos", dice en voz baja. "Incluso los que aún no has descubierto".

Jisung enciende un cigarrillo y tira de Minho por el campo, tratando de permanecer lo más oculto posible hasta que estén en su banco. La brisa sopla las hojas, que ya comienzan a ponerse anaranjadas y marrones, y susurran silenciosamente cuando él y Minho se sientan.

"A veces duermo aquí afuera" admite Jisung. "Me escabullo y me quedo aquí hasta la campana de la mañana. Me gusta estar bajo las estrellas".

Minho le da un codazo hasta que Jisung se acerca, justo en el borde de la banca, y luego la cabeza de Minho está en su regazo, de cara al cielo. "Puedo ver por qué", dice. Vuelve su mirada a Jisung y sonríe. "¿Puedo preguntarte algo?"

Jisung le quita un trago a su cigarrillo encogiéndose de hombros. "Por supuesto."

"Recuerdo que mencionaste que te molesta cada vez que alguien te pregunta por qué te enojas todo el tiempo", comienza Minho, y Jisung se eriza un poco. "Así que no lo haré". Jisung respira un poco más tranquilo. "Pero te preguntaré con qué estás enojado. O con quién. Y no digas el mundo, Jisung. Todos están enojados con el mundo, pero no todos golpean a varias personas en la cara por eso".

Minho ya lo conoce demasiado bien, aparentemente, porque estaba a punto de decir eso. En cambio, frunce el ceño y fuma por un momento, contemplando esa pregunta y si va a responderla o no. Pero si vas a responder una pregunta personal, quizás sea mejor hacerlo así; afuera, bajo las estrellas en la oscuridad de la noche, con nada más que la persona con la que te gustaría compartir a tu lado (o en este caso, recostado sobre ti).

"Creo", dice Jisung lentamente, "Que más estoy enojado conmigo mismo".

Los ojos de Minho se cierran mientras asiente. "¿Por qué?"

"¿Estás tratando de ser mi consejero, Minho?" Jisung bromea, aunque de todos modos sale un poco cortante.

"Solo trato de entenderte", niega Minho.

Jisung tira su cigarrillo y juega con el cabello de Minho. "Me equivoco mucho", comienza Jisung. "Siempre lo he hecho. Como…" se apaga y pone una mano sobre el pecho de Minho. "Lo que hay aquí nunca parece llegar hasta aquí". Toca la sien de Minho y luego traza los labios de Minho también. "Amo a Changbin. Es mi mejor amigo. Moriría por él, ¿sabes? Pero él no entiende eso porque no lo demuestro. No se lo digo. Actúo como si no me importara... Y se lo hago a mis padres también. Me lo han dado todo, ¿y qué hago? Me porto como una mierdecilla. Me emborracho, fumo para cabrearlos, y sé que los decepciono. Siempre lo he hecho, y desearía no haberlo hecho porque no se lo merecen".

》"Así que sí. Supongo que soy yo mismo, la mayor parte del tiempo". Hace una pausa y junta las cejas. "Creo que nunca he dicho eso en voz alta".

Los ojos de Minho se abren y sonríe suavemente. "Deberías venir conmigo a mis clases de boxeo".

Jisung frunce el ceño. "Te das cuenta de que golpear a la gente es lo que me trajo aquí en primer lugar, ¿verdad?"

"No sería así", dice Minho. Se sienta, con una mirada insistente en su rostro. "Sería bueno para ti, en realidad. Obviamente, la terapia no está funcionando, ¿verdad? Podría hablar con mi instructor, pedirle que te escriba una nota a la escuela para que puedas hacerlo y todo, y podría recogerte y dejarte después de clase. Creo que te gustaría. Está estructurado y realmente ayuda con... con todo, al menos para mí".

Jisung se muerde el labio. "¿Y tú estarías allí?"

Minho asiente rápidamente. "Es solo una vez a la semana, y estaría allí todas las veces".

"Está bien", acepta Jisung, aunque sabe que su director nunca aceptaría eso. Sabe que nunca sucederá. Pero si lo hiciera, no podría ser tan malo, ¿o sí? Si Minho está allí, Jisung quiere estar allí. "Claro. Podemos intentarlo". Alcanza la mano de Minho. "Podemos regresar ahora, si quieres".

Minho niega con la cabeza y vuelve a caer, así que vuelve a acostarse sobre Jisung. "Todavía no", dice. "Estoy disfrutando de ti en este momento. Volveremos con los demás más tarde". Realmente, ¿qué hay para discutir?

Unos minutos más tarde, Minho se mueve un poco (lo que probablemente sea algo bueno porque la pierna de Jisung se está quedando dormida) y le da a Jisung una mirada inquisitiva, con la luz de la luna brillando en sus ojos. "¿Puedo preguntarte algo más?"

"Puedes preguntarme lo que sea."

"Lo recordaré más tarde", promete Minho. "De todos modos. Tu amigo Changbin, um, él-? Quiero decir, está ido por Felix, ¿eh?"

Jisung intenta sorprenderse, pero no lo hace. Changbin es la persona más obvia en todo el mundo. Y tal vez debería negarlo, pero en realidad no se siente tan inclinado a mentirle a Minho. "Estúpidamente enamorada de él, sí".

"Eso es adorable".

Jisung resopla. "Realmente no lo es. No creo que alguna vez quiera estar tan perdido por alguien". Incluso mientras lo dice, sabe que no importa lo que quiera. Está sucediendo de todos modos.

"Creo que la mejor manera de enamorarse", dice Minho en voz baja, "es mientras tomas la mano de alguien que está dispuesto a enamorarse de ti".

Jisung toma la mano de Minho y cuidadosamente junta sus dedos.

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