05/08/2022
Narra Gavi
Hoy por fin los 18, mis padres y mi hermana me han despertado al son de "Cumpleaños Feliz" y hemos desayunado tarta casera, como todos los años desde que tengo uso de razón salvo los pocos que los tuve que pasar solo en la Masía.
Miro a mi muñeca, donde está la pulsera que traía la carta de Eric y no puedo evitar suspirar, no sé nada del catalán desde lo que pasó
Lo he intentado varias veces (en un descuido de Ferran, le cogí el móvil y conseguí el número de Alicia, la hermana de Eric, fue fácil identificarla porque el valenciano la tiene agregada como "Ali García" y además la foto de perfil de WhatsApp de la muchacha es con su hermano de cuando consiguió la plata olímpica) pero nunca he llegado a ponerme en contacto con ella, no sé cómo sería su reacción y lo último que quiero es problemas. Siempre me quedo con el dedo a punto de darle al botón de llamar.
Levanto la mirada y veo que mi hermana ha parado el coche ante un semáforo en rojo, si no me equivoco estamos casi en la ciudad deportiva. Miro a Aurora y me encuentro su mirada sobre mí.
Aurora: Si vas a empezar tu vida de adulto con esa cara no sé qué vas a dejar para cuando descubras como es de verdad.
Gavi: Estoy bien, tranqui.
Aurora: A mí no tienes por qué mentirme. Lo sabes, ¿No?
Gavi: No miento.
Aurora: Se te nota en la cara que no va todo bien Martín.
Gavi: ¿Tanto?
La veo asentir y yo resoplo, mi hermana siempre ha sido mi confidente, pero no puedo evitar que mi confianza haya disminuido un poco por lo de la carta.
Los días siguientes a enterarme de que Eric se había ido, lo pase mal. En ese momento no entendía por qué (tenía solo 12 años, no entendía muchas cosas de la vida), pero ahora que lo veo con los ojos de un chaval 6 años mayor, está claro.
Ella me vio pasándolo mal, ¿Por qué no me la dio en ese momento?
Gavi: Estaba pensando en Eric, solo eso.
Aurora: ¿No sabes nada???
Gavi: No me atrevo a hablar con su familia y menos presentarme en el hospital.
Aurora: ¿Y Ferran?
Gavi: Me dice que no sabe nada, pero seguramente me mienta. Me extraña que siendo mejores amigos no sepa nada y se quede tan tranquilo. Tú lo viste en el hospital cuando nos dijo lo del coma, estaba roto.
Aurora: A lo mejor simplemente no quiere preocuparte.
Gavi: Y además está lo de Nico.
Porque si, mi mejor amigo no ha tenido otro día para decir que se va a Valencia, el día de mi cumpleaños. Se incorpora mañana por la tarde al equipo valenciano así que hoy celebrará mis 18 conmigo, pero no sé qué le costaba esperar a mañana.
Aurora: Piensa que solo es hasta verano, que volverá.
Gavi: Además, no ha tenido más opciones.
Aurora: Y Valencia no está tan lejos.
Gavi: Y seguiremos hablando.
Aurora: Disfruta el día con él anda. Y sobre Eric, pues sabrás las cosas cuando toque.
Asiento dándole la razón y el semáforo cambia de color, por lo que mi hermana arranca y me deja en la ciudad deportiva, menos mal que no hay nadie porque no tengo ganas de poner buena cara y hacer el papel delante de los fans.
El entrenamiento transcurre con normalidad y al final me dan una tarta para que sople las velas de mis 18 y además el grupo despide a Nico, aunque cuando nos vamos a vestuarios escucho decir al míster que mañana se incorpora una pieza en la defensa, lo que me deja frío.
No van a seguir esperando a Eric, van a dejarle sin ficha y no puedo evitar sentirme culpable. Es lógico que el club busque una solución, pero el catalán no se merece esto, no se merecía lo que le hizo Lucas.
No he sabido nada de mi ex, supongo que estará escondido porque obviamente le denuncie y creo que la familia del central también lo hizo. La policía le esté buscando y obviamente el club le despidió, así que vete a saber que es de su vida. Y sinceramente, tampoco me importa.
Me meto en el vestuario, me ducho y me pongo la ropa que traía de casa para después recoger mis cosas en mi mochila. Estoy dispuesto a marcharme cuando Ferran me da un toque en el hombro.
Gavi: ¿Pasa algo?
Ferran: ¿Qué tal la mayoría de edad?
Gavi: Es un año más, tampoco noto mucha diferencia.
Ferran: Ya la empezarás a notar, créeme.
Gavi: A saber.
Ferran: Oye, ¿Tienes algo que hacer?
Gavi: ¿A qué te refieres?
Ferran: Me han pedido que te lleve a un sitio.
Gavi: ¿Quién?
Ferran: No puedo decírtelo. Te espero en el aparcamiento, tienes 5 minutos para pensarlo.
El valenciano sale del vestuario y yo me quedo pensativo sobre si aceptar o no, tanto secretismo me desconcierta. Un momento...
¿Y si tiene que ver con Eric?
Me acomodo la mochila rápidamente y salgo disparado del vestuario, ni cinco segundos me han hecho falta para decidirme, si existe la posibilidad de que tenga que ver con el catalán no lo dudo ni un instante.
Le pongo un mensaje a mi hermana para que no venga a buscarme y estoy a punto de llegar al aparcamiento cuando tiran de mi brazo metiéndome en un almacén. En cuanto veo a la persona que lo ha hecho, todo mi cuerpo empieza a temblar.
Gavi: Lucas suéltame.
Lucas: Tengo que hablar contigo.
Gavi: No quiero saber nada de ti, déjame.
Lucas: Tenemos cosas que arreglar.
Gavi: Olvídate, no tengo ni quiero nada que tenga que ver contigo.
Lucas: ¿Has visto en el lío que me has metido?
Gavi: Te metiste tú solito. Me mandaste al hospital y a Eric casi lo matas, nosotros no te hicimos nada.
Mi ex me suelta un bofetón que me hace girar la cara y mirarle con miedo, ahora mismo estoy aterrado.
Lucas: Me va a escuchar, quieras o no.