Hacía ya unos meses había vuelto a su cuerpo original tras haber derrotado a la organización , aunque aún no era capaz de explicarle a Ran el por qué había ocultado su identidad bajo el rostro de Conan . Había vuelto otra vez a ser el Sherlock Holmes de la nueva generación , sin embargo , algo había cambiado en su vida.
—𝑴𝒂𝒍𝒅𝒊𝒄𝒊𝒐́𝒏...
Dijo casi en un susurro , no podía sacar de su mente la imagen de ese detective de Osaka que se adueñó de sus pensamientos.
Llevaba toda una vida enamorado de su amiga de la infancia , como es que sus sentimientos comenzaron a cambiar de un día a otro?
—𝑪𝒐𝒎𝒐 𝒔𝒂𝒄𝒂𝒓𝒕𝒆 𝒅𝒆 𝒎𝒊 𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆...
Últimamente habían sido más cercanos , al punto en el que era inevitable para el de ojos cobalto, sentirse atraído por aquel chico de piel morena.
—Encontraste algo Kudo ?
Se escucho la vos del Inspector Megure , incluso había olvidado que estaba en medio de un caso de asesinato. Sabía quién era el asesino y estaba a punto de revelar identidad.
—El asesino....
No había ni siquiera terminado la frase cuando detrás suyo se escucho una voz , aquella voz grave que hacía a su corazón latir a mil por hora
—El asesino lanzó el arma por la ventana de la habitación después de cometer el crimen , tuvo un cómplice que le ayudó a esconderla después.—Soltó Hattori recostado al marco de la puerta en la habitación
Si antes no podía concentrarse ahora lo haría menos , sorprendido aún por la aparición de Heiji. Le miro sin mostrar ninguna emoción, notando como el moreno terminando su deducción, le guiñaba coquetamente el ojo.
Los pensamientos del de ojos cobalto estaban tan confusos que ni siquiera notó cuando todo había acabado y tan solo quedaban ellos dos y uno que otro policía.
—Andas distraído
—Que haces tu aquí idiota—Soltó esquivando el comentario anterior.
—A caso debe haber motivo para visitar a mi mejor amigo? Y robarte el crédito claro.—dijo revolcando el cabello de Kudo.
"Amigo" esas palabras dolieron, incluso para ambos chicos.
—No creas que soy idiota.—Dijo tratando de mantenerse "normal" ante la presencia del moreno.—Suéltalo.
Luego de haberse acomodado nuevamente el cabello golpeó simpática con su hombro el brazo de Heiji
—La ahou de Kazuha me arrastro a venir con ella.—Soltó heiji colocando sus manos en sus bolsillos.—𝑴𝒐𝒓𝒊𝒂 𝒑𝒐𝒓 𝒗𝒆𝒓𝒕𝒆 𝒊𝒎𝒃𝒆𝒄𝒊𝒍, 𝒆𝒍𝒍𝒂 𝒏𝒊 𝒔𝒊𝒒𝒖𝒊𝒆𝒓𝒂 𝒆𝒔𝒕𝒂 𝒂𝒒𝒖𝒊.—pensó este.
La mirada del chico de Osaka se notaba insegura , incluso su voz se escuchaba ¿nerviosa?
" Kazuha ". Solo de escuchar ese nombre sintió una sensación incómoda , esa sensación que sentimos cuando nuestro corazón se quiebra en mil pedazos.
—Al fin conseguiste tu declaración perfecta Hattori?—le miraba como niño queriendo hacer una travesura , claro está , ocultando lo que de verdad siente.
—Me di cuenta de que nunca habrá un momento perfecto ni una declaración perfecta, además... lo que sentía por ella era solo amistad.
Shinichi aun no creía lo que escuchaba de los labios de Hattori. Aunque si no era Kazuha , sería otra chica la que cautive al moreno. Ninguno de los dos se sentía capaz de mirarse a los ojos. El ambiente se notaba un poco tenso durante unos instantes hasta que uno de los dos rompió el silencio incomodo de la sala.
—Aún se me hace raro verte así y no como el enano.
Shinichi arqueo la ceja ante el comentario comentario moreno el cual reía levemente. Él solo observaba la forma en que Hattori reía y sin darse cuenta lo estaba mirando como tonto enamorado.
Ninguno de los dos se había percatado el MUY poco espacio que separaba a un cuerpo del otro . Las mejillas de Shinichi se mostraba un leve rubor al igual que las de Heiji.
...
Pasaron unos días después del encuentro entre los detective del este y oeste.
—Donde se habrá metido.
Un impaciente Shinichi golpeaba con sus dedos suavemente la mesa puesto a que llevaba al rededor de media hora esperando a Ran.
Estaba a punto de marcharse hasta que vio cuando una agitada chica de cabellos marrones y ojos violetas entraba y se sentaba junto a él.
—Disculpa la demora.—Su respiración era entre cortada.—Llevas mucho aquí?
—No , recién llegaba también.—dijo el ojiazul con algo de ironía , lo que la chica ignoró.
Pasaron al rededor de síncope minutos charlando hasta que Shinichi rompió el hielo con lo que realmente venían a hablar.
—Que era eso tan importante que debías decirme?
Derrepente Ran lo miró a los ojos , un leve tono rosa apareció en sus mejillas mientras después bajaba la mirada.
—Desde hace cuanto nos conocemos?.—esa pregunta dejó más confundido a Kudo , que de por sí ya lo estaba.
—Desde hace cuanto? Mmmm....pues desde niños.—mantuvo silencio por un instante.—Pero que tiene que ver con lo que ibas a contarme?
Los ojos de Ran se cristalizaron y visibles lágrimas amenazaban con salir de su rostro. Se mantuvo callada por un momento.
—Y no has sentido nada?—una pequeña lágrima corrió por su mejilla.
—Eh?.—seguía sin entender a lo que su amiga quería llegar.
En un abrir y cerrar de ojos Ran se puso de pie y con una de sus manos golpeó con fuerza la mesa. Más lágrimas salieron de sus ojos mientras que su voz se escuchaba quebrantada.
—Es tan difícil de entender!? No te das cuenta de que yo...—hizo una leve pausa.—No te das cuenta que te amo?!
Las palabras de la fémina fueron un golpe para el de ojos azules. No importa lo mucho que hubiera deseado escuchar esas palabras en el pasado cuando sentía aun algo por ella ahora había otra persona en su corazón. Por mucho cariño que sintiese por su amiga de la infancia no podía dejar que viviera de un sueño inalcanzable.
Esta bien fue Shinichi quien se levantó de la mesa. Su mirada mantenía una pose baja mientras que un incómodo silencio se apoderaba de la cafetería. No le importaba cuántas personas estuvieran mirando.
—Ran.—comenzó a decir.—No quisiera tener que decirte esto por que se que te dolerá según tu confesión pero...—trataba de agarras valor para loque quería decir.—Hay otra persona a la que amo.
Diciendo esto se alejó de la mesa dejando sola a la fémina. Tal vez lo que siente no sea correspondido por el chico de Osaka , pero no amaba a Ran.
Recién salía del lugar y cuando disponía a alejarse de este vio como en la parte donde estaba con la ojivioleta , un chico moreno, pendiente a cada palabra como si lo recién sucedido fuese una telenovela.
Se acercó silenciosamente notando como aquel suspiró ¿aliviado? Se retiraba.
—𝑰𝒎𝒃𝒆𝒄𝒊𝒍...—se repetía una y otra vez en su mente mientras sonreía como estúpido al haber visto el rostro de esa persona.
—Se puede saber que hacías.
Diciendo esto el que estaba viendo a través se la ventana se sobresalto se manera algo exagerada.
—Yo? Como crees , no vi nada.—su sarcasmo era notable.
Pasaron algunos minutos charlando cono si no hubiera un mañana. Ya estaba comenzando a atardecer.
Uno silencio durante unos instantes hasta un disparo se oyó no muy lejos.
—Oíste e-...
Shinichi no había si quiera terminado la frase cuando vio que el de Osaka caía lento. La respiraciones del de piel morena se sentía agitada. Tenía una mano en su pecho , frenando inútilmente el sangrado.
Siendo inevitable , una pequeña lágrima corrió por la mejilla de Shinichi.
A caso este sería el fin?
Su mente trataba de procesar todo mientras que con sus manos trataba de frenar el sangrado.
—Este no es el fin...
La débil voz de Hattori hacia que al desesperación del otro aumentara. Kudo solo trato de mostrarle una debil sonrisa.
—Lo se , no es el fin.—rosó levemente la mano del contrario.—𝑷𝒐𝒓𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒐 𝒑𝒖𝒆𝒅𝒐 𝒗𝒊𝒗𝒊𝒓 𝒔𝒊𝒏 𝒕𝒊 𝒊𝒎𝒃𝒆𝒄𝒊𝒍.—Soltó prácticamente entre susurros mientras que inevitablemente una pequeña lágrima recorría su mejilla.
Llamó una ambulancia , más aún sentía la impotencia de no poder hacer nada más para ayudarle.
...
—Por cierto , quien eres?—dijo Kogoro el durmiente.
El moreno giró su gorra hacia un costado , mostrando una mirada firme y hacia adelante.
—Es verdad , aún no me he presentado.—dejo un poco de suspenso por algunos segundos.—Me nombre es Hattori Heiji , detective adolescente , como Kudo.
El detective encogido recién comenzó a reconocerlo , era con aquel de Osaka con quien en variadas ocasiones le comparaban.
Un leve estornudo se oyó en la sala. El de Osaka miró hacia el pequeño y sacó entre sus cosas una botella.
—Ten , es un medicamento muy bueno.
El moreno se acercó a él sirviendo en un vaso ese líquido medio transparente. Conan solo tomo un pequeño sorvo y enseguida sintió su pequeño cuerpo medio atontado.
—Ran nee-chaaaa.—el de lentes se tambaleaba.
—Que le diste.—peegunto extrañada la karateka mientras miraba al pequeño y a la vez algo alterada al ver su estado debido a la bebida.
—Un licor llamado Paikaru, es un regalo, porque me quedaré hasta que conozca a Kudo.
...
Por qué? Por qué mientras el chico que amaba estaba tirado en el suelo con su vida peligrando llegaban a su mente otra vez ese recuerdo del momento en cuanto llegó a su vida , recuerdos de cuando descubrió su identidad y de todo el tiempo que pasaron juntos.
—Te necesito...
No le importaba si le escuchaba o no , si no lo decía ahora tal vez no podría decírselo nunca.
No pasó mucho tiempo y la ambulancia llegó llevándose consigo al chico de piel morena.
...
𝑫𝒐𝒔 𝑺𝒆𝒎𝒂𝒏𝒂𝒔 𝑴𝒂́𝒔 𝑻𝒂𝒓𝒅𝒆...
Todo había resultado bien y en cualquier momento le darían el alta del hospital a Hattori. No hubo día en que no fuera a visitarlo desde lo sucedido.
Nunca lograron identificar ni saber quien fue el que le disparó a Heiji , la policía continuaba buscándole.
Se escuchó el timbre seguido de unos golpes en la puerta
—Quien será a estas horas.—dijo para después bostezar.
Abrió la puerta con flojera mientras su sorpresa fue enorme al ver quien estaba detrás.
—Te desperté?—dijo y rió un poco al ver el rostro con sueño de Shinichi.
—Casi.—Mostró una pequeña sonrisa , se sentía alegre de verle.
—Llegué a escuchar lo que dijiste ese día...
Shinichi se paralizó por un momento sintiendo una leve ardentía en su rostro. Hattori se acercó un poco a este pelliscando una de sus mejillas suavemente.
—Si vieras tu rostro en este momento quisieras...—se acercó a él.
—Quisiera qu...
Sus palabras fueron cortadas prácticamente al instante. Heiji tomó de su mentón acercándose a sí mismo y eliminar un poco la distancia que les separaba , dejando sus respiraciones chocar.
Como es que derrepente llega alguien y es capaz de cambiar toda tu vida?.
se preguntaba shinichi sellando la poca distancia entre los labios de ambos.
—Te quiero idiota
—Te quiero imbecil.
—Me vas a dejar entrar de una vez o me seguirás dejando como perro callejero?
Fin
...
Dedicado a YahirAbisai gracias por la idea y espero que te guste , muak