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El capítulo será en perspectiva de Vausha.
Había intentado hacer que durmiera Sofía, no sé porque Elsie se queja si conmigo no tardó mucho en dormir... No sé como describir esa sensación tan linda de ese momento, tranquilidad... Todo estaba bien ahora, o ese fué mi pensamiento erróneo solo hasta que se escucharon sonidos de balas al rededor de la casa, me asusté, lo admito, no lo veía venir.
Elsie entró corriendo a la habitación e inmediatamente cerró la puerta, los balazos despertaron a Sofía y comenzó a llorar.
—¡¡Maldita sea!! —vociferó Elsie, entrando a la habitación, cerró la puerta muy fuerte y puso el seguro, al igual que Vausha, mantenía una cara de asombro.
—¡¿Qué está pasando?! —preguntó Vausha, preocupado.
—¡A fuera hay unos tipos armados! —exclamó y se acercó a él.
—¡¿Qué hacen aquí?! —molesto, preguntó.
—¡No tengo idea!, ojalá no se trate de que nos hayan querido mandar a asesinar —dijo Elsie, con la voz agitada y preocupada a la vez.
—¡Hay que salir de aquí, tengo a Sofía en brazos! —gritó Vausha.
—¡¿Cómo vamos a salir de aquí si estamos rodeados?! —Elsie volvió a alzar su voz.
—¡Deja de gritar primero, asustas más a Sofía! —contestó Vausha a su grito.
—¿¡Eso que importa?! —enojada, Elsie seguía alzando la voz.
—Hay que escondernos en el baño de este cuarto y salimos por la ventana —agregó el rubio mientras miraba fríamente a Elsie.
—¿Hablas enserio? Que idea tan más... —dijo molesta.
—Idea tan buena en esta emergencia en la que no podemos salir de otra forma —interrumpió Vausha.
Mientras cerraban la puerta escucharon que habían entrado aquellas personas a la casa, debían salir rápido del lugar, era más peligroso teniendo a Sofía consigo.
—Carga a Sofía, brincare la ventana y luego me la pasas y brincas tú —ordenó mientras se acercaba a la ventana.
—¡Pero rápido! —exclamó Elsie.
Habíamos logrado salir rápido de casa y correr más lejos, parecíamos cobardes por huir así, más bien luciamos como cobardes pero en ese momento no estabamos armados y teníamos a Sofía con nosotros... Supongo que esta sería la vida peligrosa que ella llevaría con nosotros, tal vez esto convencería a Elsie de regresarla con sus padres y evitar más problemas.
Mientras corríamos del lugar, Sofía no dejaba de llorar y estaba asustada.
Elsie cubrió a Sofía para que nadie más la viera, llegamos a casa de Esteban pero él no estaba, en su lugar, su hermana estaba ahí y sin explicación no nos dejó entrar, al vernos, su reacción no fué la mejor.
Continuamos con nuestro camino y pasamos por lugares donde habían carteles sobre la búsqueda de Sofía, tal vez Elsie no sentía culpa y tampoco yo la sentía, pero estaba seguro que nada de esto lo merecía vivir Sofía, ahora ella no entendía de que se trataba, pero si ella seguía creciendo y no la regresábamos a casa sería peor explicarle este tipo de cosas.
No había donde pudieramos pasar la noche, o espera... Si había, caminamos a casa de Karla y nos recibió, tengo que admitir que no quería estar ahí, quería irme y no estar involucrado en esto pero no tenía escapatoria y tampoco quería dejar a Sofía con Elsie.
—Que bueno que pudieron salir bien... —dijo Karla con una sonrisa.
—Como sea, hemos pasado por peores cosas —contestó Elsie a Karla muy cortante.
—¡Espera! ¿Tienen ahí a Sofía?
—Si, pero Elsie la cubrió para que no la reconocieran en la calle —dijo Vausha.
—Pobrecita, dámela, voy a acostarla en mi habitación. Debe estar muy asustada
—Sofía ha llorado desde que escuchó los balazos
—Voy a llevarla a la habitación —dijo Karla de camino al cuarto con Sofía.
Mientras Karla se iba, Vausha miró con enojo a Elsie y se acercó a ella.
—Debemos hablar seriamente tu y yo, Elsie
—¿Qué quieres ahora? No me dirás que hacer...
—Sabes perfectamente a qué me refiero, fué muy peligroso para Sofía lo que acaba de pasar, ¡Debes regresarla ya!
—¿Regresarla? Ya pasaron 2 años y nos meteremos en problemas, no siento que sea suficiente aún...
—No, ya es suficiente, es peligroso y lo sabes.
—Dije que serían unos años.
—¿Qué más quieres? ¡Han pasado dos años! —Vausha alzó la voz y miró a los ojos a Elsie.
—Probablemente Abriil y Azael ya lo hayan olvidado, me contaste que tuvieron otro chamaco... ¿No es así?
—Si, pero...
—Ellos tienen otro hijo ya, han rehicieron sus vidas —interrumpió Elsie.
—Ellos siguen buscando a Sofía con la chaparra policía —asintió.
—Esos carteles de búsqueda que vimos deben estar ahí desde hace ya tiempo y ya no les importe —dijo Elsie tratando de evitar la mirada de Vausha.
—Pues claro que tienen tiempo ahí, ella sigue perdida...
Elsie no estaba ni un poco decidida a regresar a Sofía y estaba seguro que pronto se volvería peor esto.
A veces me sentía algo mal por ser cómplice de este secuestro, pero no podía hacer nada si no quería más problemas.
• • •
Algunas veces también en la calle miraba de lejos a Azael camino a su trabajo, sabía de que se ha tratado su vida porque mamá me contaba, ya sabía que siempre lo vería caminar por ahí, también yo tomaba ese camino cuando iría a mi trabajo también, pero no podía evitar algunas ocasiones sentir un poco de culpa por esto.
Él es un empresario, tenía una familia, tiene dinero, era felíz en pocas palabras, pero les faltaba Sofía.
Pensaba en como sería si yo decidía abandonar este trabajo que tenía, si lo hacía moriría y arriesgaría a mi familia, ni siquiera me querían pero me veía obligado a seguir en esto si quería que sus vidas continuaran como ahora.
En la mañana fuí de camino a ver a mi jefe, Karla iba a cuidar hoy a Sofía y eso me tranquilizó más.
En el camino de ida me topé a Azael en el camino, vaya sorpresa, tenía a su hijo en brazos, el me vió a mí pero aunque no me lo haya pedido él ya me conoce y sabía que lo iba detener para molestarlo un rato...
—Muévete, voy a pasar —dijo Azael.
—Así que este es tu otro hijo...
—¿Qué te importa a tí?, dejame pasar —Azael comenzaba a molestarse.
Él intentó seguir caminando pero lo detuve, tenía curiosidad de conocer a mi otro sobrino aunque él no quisiera dejarme.
—¿A dónde vas? Yo quiero ver a mi sobrino —Vausha insistió mientras le impedía el paso a Azael.
—¡Ya te dije que te muevas! —exclamó.
—¿No me dejarías cargarlo?
—¿Por qué te dejaría? —preguntó Azael cada vez más molesto.
—Soy su tío y quiero conocerlo.
—Eres muy molesto... Ya deja que me vaya, en serio —trató de seguir avanzando mientras contestaba.
—Pff, adelante señorita—dijo Vausha como burla.
—¿Cómo me dijiste? —Azael volteó de vuelta.
—Ya largo, no queremos que vayas a llegar tarde... ¿O si? —dijo Vausha con una sonrisa burlona.
—Que infantil eres, de verdad—molesto, Azael continuó con su camino.
Si que me gusta molestarlo aunque en cierta parte tiene razón, pero no me importa.
Camine unas manzanas más adelante y cuando llegué, ya estaba presenciando una pelea, ¿Elsie?, me pregunté al ver que era ella quién enfrentaba a Logan, nuestro jefe.
—Anoche nos atacó una banda enemiga, ¡¿Cómo saben donde vivo?! —vociferó.
—Digamos que les debía algo... —contestó el jefe como si poco le importara lo que Elsie decía.
—Lo sabía...¡¿Porqué?! —volvió a preguntar con la voz alzada.
—No me alses la voz, La última misión que los envié fallaron y no conseguimos el dinero para pagarles, no me sirvieron en esa misión así que les dí tu dirección para que te reclamen a tí la deuda, pensé que ya les habían matado, pero al final escaparon... —contestó el jefe manteniendo una cara de seriedad y enojo a la vez.
—¡Era imposible entrar a ese lugar donde nos enviaste, la seguridad era mucha, por eso fallamos! —exclamó.
—No me gusta que me fallen así, ¿Sabes que les pasa a los que me fallan?... Exacto, mueren.
Logan, su jefe tomó una pistola y la puso frente al rostro de Elise, ¿Porqué el jefe mataría a una de sus mejores asesinas y narcotraficante?
Me pregunté y la preocupación empezó a invadirme pero no lo demostraba.
—¡Espere! No la asesine —interrumpí.
—¿Quién eres tú para ordenarme? Si me ha fallado morirá —contestó el jefe.
—Podemos hacer algo para recuperar lo que debe... —agregué con seguridad.
—¿Cómo qué? Vamos Vausha, salva el día —lo dice su jefe con tono burlesco.
—No lo sé, pero de eso nos encargamos nosotros —contestó el rubio mientras se acercaba más a ellos.
El jefe retiró el arma de frente de Elsie y ella nunca había puesto una cara que demostrara susto, preocupación o algo similar.
—Tienen dos semanas —ordenó su jefe.
—Bien, nos vamos —me acerqué a Elsie, tomé su mano y la llevé conmigo.
—Ya quiero ver que tal fallas tus palabras... —soltó una risa mientras el jefe nos miraba irnos.
Habíamos salido de ahí con vida, no sé como...
Llegamos a casa para el anochecer y se me hizo raro no ver a Sofía hasta que recordé que ella estaba con Karla.
Yo estaba sentando en el comedor mirando a los lados y Elsie estaba sentada en la sala, ninguno de los dos decía nada y todo se mantuvo en silencio, mientras la miraba, ella volteó hacia mi y se dió cuenta de que la estaba mirando; ambos nos miramos a los ojos y después le solté una sonrisa de manera hacia burla pero solo ví que ella se volteó molesta, me acerqué y me senté junto a ella, luego nos volvimos a mirar. Sigo pensando como fué qué pasó pero, mientras nos mirábamos, por el impulso me acerqué más a ella, se dió cuenta de eso y apoyó sus mano en mis hombros y pasaron unos segundos mientras seguimos mirándonos hasta que sin poderlo evitar, me acerqué aún más y nos besamos.
Luego me separé al darme cuenta de lo que hacía y los segundos en los que me separé, ella fue quién se acercó hacia mi y volvió a besarme, ambos seguimos el beso.
Nos separamos y seguimos mirándonos por unos segundos más.
—Hay que recojer a Sofía —dije mientras volteaba a todos lados pensando.
Ella se levantó y salió de la casa, supuse que estaba de acuerdo conmigo, por un momento muchas cosas habían pasado por mi cabeza.