"Welcome, beauty"
Capítulo IX.
━━━━LA CABEZA DE AKIRA DOLÍA DEMASIADO, Usagi había entrado a su habitación para que ambas, junto con Arisu pudieran desayunar juntos
─ Realmente la pasaron bien en la fiesta ─ se burlo Arisu
─ Ahora desearía que no sea así ─ se quejo Akira
El sol hacia que los ojos de Akira ardieran, la chica se sentía mejor al estar con sus amigos aunque preferiría estar durmiendo en aquel momento sin embargo podía hacer aquel esfuerzo por ellos
Cuando los tres terminaron de desayunar unos toquecitos se hicieron presentes en la puerta, Akira rápidamente se levantó acercándose a esta y abriéndola sin mucho problema. Chishiya estaba del otro lado, sus manos estaban en sus bolsillos mientras el esperaba
─ Chishiya ─ saludo la chica con una sonrisa
─ Lamento molestar, pero el sombrerero te requiere. Se que estas cansada pero será rápido ─ habló rápidamente
Akira no comprendió a lo que se refería con "se que estas cansada" debido a que estaba segura que no lo decía por la fiesta. Chishiya, había visto la noche anterior a Niragi saliendo de la habitación de la pelinegra, idea que sin duda no le había hecho mucha gracia
Akira aviso a Arisu y Usagi que la requería el sombrerero y salió siguiendo a Chishiya
─ No quiero ser entrometido ─ comenzó sin siquiera mirar a la chica ─ pero insisto en que tengas cuidado con Niragi
Akira miro con sus cejas arriba a Chishiya, aun no comprendía aquel interés en lo que ella estaba haciendo. El por que a Chishiya le importaba lo que le sucediera a Akira era todo un misterio
─ ¿Por que tanto el interés por salvarme? ─ se preguntó más para ella misma, pero en voz alta de todas formas
Ni el mismo Chishiya podía responder aquella pregunta
─ Solo se que tienes demasiado potencial para ser arruinado por un idiota así ─ su tono se tornaba algo brusco al hablar de Niragi. Se paro en frente de una gran puerta dorada ─ llegamos
Akira se acercó a la puerta, pero luego se giro a mirar a Chishiya
─ ¿Me esperaras? ─ observó sus afilados ojos
El asintió
─ Si es lo que quieres ─ eso basto para que Akira girará el picaporte
Al abrir la puerta, pudo ver que aquella habitación era mucho más grande que la de los demás. Era una especie de Suite, que tenía varias cosas diferentes, una hermosa vista a toda la playa que se veía mejor desde justo este punto, no era para nada extraño que aquel hombre tuviera aquello teniendo en cuenta de que era una especie de rey en la playa
─ Oh, Akira ─ la voz del sombrero resonó en el lugar ─ Toma asiento, por favor
Akira observó aquellos grandes sillones en medio de la habitación y tomó asiento en el que se notaba más cómodo para su gusto, en frente del sombrerero que frente a el se encontraba una apetecible bandeja con diferentes frutas. La chica miró aquello por unos segundos y luego su vista se devolvió al sombrerero
─ Chishiya me trajo la carta de conseguiste en aquel juego ─ dijo con una sonrisa ─ buen trabajo. Era una de las que nos faltaban
─ Gracias ─ Akira asintió levemente
El sombrerero sonrió, Akira a veces y cuando quería podía ser hasta más silenciosa que Chishiya. Soltando solo palabras justas, ni más ni menos
─ Dime Akira ¿te gustaría tener más beneficios aquí? ─ tal vez, pensó Akira ─ ¿Te gustaría poder ayudarnos a tomar decisiones en cuanto la playa? ─ no, volvió a pensar
Aquello era una responsabilidad más, ella, no quería tener aquello. La playa no le importaba en absoluto, la única gente que estaba en sus prioridades en ella eran Usagi, Arisu y aunque no quisiera admitirlo Niragi también
─ ¿A que viene esto? ─ re preguntó Akira sin entender a lo que quería llegar
─ Hay una forma de que lo logres ─ Akira frunció el ceño
No sabia si realmente había malinterpretado el tono que aquel hombre frente a ella había usado pero para adelantarse a cualquier propuesta fuera de lugar se apresuró a hablar
─ No voy a acostarme con nadie ─ avisó de antemano
Aquella respuesta hizo que el sombrerero soltara una larga carcajada
─ No, no querida. No es la propuesta─ el negó ─ solo tienes que seguir ganando cartas, poniendo todo el empeño que has puesto, así como Arisu ¿que piensas?
━━━━AKIRA BEBIÓ UN POCO DE JUGO, Sus pies estaban en el agua de la piscina mojando solamente eso. El sol de la mañana pegaba justamente frente a ella, Chishiya estaba a su lado, claramente sin mojar sus pies
─ ¿Nunca te has bañado aquí? ─ preguntó de repente la chica mirando la hermosa piscina
Chishiya observó de la misma forma esta, ahora estaban completamente solos por lo que era una de las pocas veces que se podía llamar al patio un lugar tranquilo
─ Cuando recién había llegado aquí, en las madrugadas. Muy temprano ─ el miro el agua ─ si no, casi no hay espacio
Akira sonrió, podía notar que no era por el espacio. Si no que a Chishiya no le gustaba estar en lugares con tanta cantidad de gente, le fastidiaba la gente
─ Es un lugar bonito ─ la vista de Akira se dirigió a Chishiya quien asintió
─ ¿Vas a contarme que te dijo el sombrerero? ─ pregunto, un poco impaciente
─ Soy parte de ustedes ahora, eso parece ─ Akira levantó los hombros imitando las acciones de Chishiya cuando no sabia algo
Ambos se quedaron en silencio por unos segundos hasta que otra persona pasó el patio, aquel chico de cara tatuada cuyo nombre era Samura. Tenía una katana en sus manos todo el tiempo, solo las miradas frías que el daba lograban que Akira sintiera el miedo tocando su puerta
─ Es aterrador ─ susurró Akira, pero al parecer Chishiya la escucho
El pelinlanco dirigió su mirada directamente hacia donde la pelinegra estaba mirando, viendo a Samura observarlos mientras cruzaba aquel patio hacia otra parte del hotel
─ ¿Te asusta el y no Niragi? ─ soltó en tono burlón ─ Que Irónico
─ A veces me gustaría preguntarte por el odio ─ ella se apoyo un poco mejor para mirarlo
Chishiya dejo de mirar en dirección a Samura y también observó a la chica
─ Odiar en un sentimiento muy fuerte, no hay sentimientos de mi persona hacia el ─ refutó y retomo ─ Es solo un imbecil egocéntrico
─ ¿No te asusta estar describiendote a ti? ─ preguntó burlona
Chishiya sin poder evitarlo soltó una risita mirando a la chica, la manera en que sus ojos se hacían más pequeños a la hora de reír sin duda era disfrutable de ver. Ella disfrutaba ver aquello y el disfrutaba ver aquella sonrisa en sus labios