Algunas veces, Kaoru escapaba de su casa porque tenía peleas con su familia. Se encontraba demasiado enojado antes de caer en cuenta de que no tenía dónde dormir y su orgullo le impedía volver a casa, así que iba a la de Kojiro.
Después de golpear la ventana de Kojiro por unos segundos, esta se abría mientras el dueño de la habitación le decía que entre por la puerta y que deje de parecer un delincuente entrando por la ventana.
-Mis padres no están, - decía Kojiro, mientras abría la puerta para dejarlo pasar - y si estuvieran te dejarían entrar, idio...
Pero antes de que pudiera seguir regañándolo, con un vistazo al rostro de Kaoru sabía que algo no andaba bien.
Si bien ellos tenían una relación algo extraña para las demás personas, con sus insultos, gruñidos y demás, para ellos era su manera de comunicarse. Estaban completamente bien con eso, ya que ellos sabían que su amistad era muy buena, y que si Kaoru le decía algo como "impulsivo de mierda" no significaba que estaba enojado con él, era un "te puedes lastimar, ten cuidado".
Pero esta vez el rostro de Kaoru además de mostrar enojo, le mostraba que si alguien le decía algo más se echaría a llorar.
Kojiro nunca había visto esa expresión en su rostro y con solo haberlo hecho una vez, sabía que no quería volver a verla.
-Pasa, quiero probar una nueva receta. Serás el crítico culinario.
Kaoru se veía aliviado, era obvio que no quería hablar de lo que le había pasado. Pero no importaba, lo soltaría cuando quisiera. Y Kojiro estaría ahí para escucharlo.
Esa fue la primera vez que se quedó a dormir después de escapar de casa.
Al principio fue solo eso, ni siquiera iba más de una vez a la semana, dos veces a lo mucho. Solo cuando tenía peleas con su familia y no quería seguir escuchando más de eso.
Las escapadas a su casa se hicieron más frecuentes de un día para otro, específicamente cuando se dio cuenta de que se sentía mucho mejor rodeado de Kojiro y sus deliciosos desayunos. Era una buena razón para escaparse de su casa, pensó él.
Llegó a ser tan frecuente que ya tenía algunas mudas de ropa en el armario de Kojiro, un cepillo de dientes en el baño y hasta una almohada especialmente para él en la cama de Kojiro.
Así es, dormía en la cama de Kojiro.
Al principio dormía en un futón en la habitación de Kojiro, futón que fue olvidado poco a poco por una que otra queja cada vez que se quedaba a dormir.
-¿No estabas dormido en el futón? - preguntó Kojiro, tenía los ojos pesados y la voz ronca por el sueño.
En la mitad de la noche, Kojiro se despertó al sentir un peso a un costado de su cama, solo para ver a su mejor amigo, acomodándose para dormir a su lado mientras se cubría con la sábana.
-No puedo creer que me dejes dormir en el piso en invierno.
-Vienes de una familia tradicional, duermes en el "piso" todos los inviernos...
-Pero tu casa es muy fría, y tú estás caliente, me quedo aquí.
No escuchó más respuesta de parte de Kojiro después de eso.
Esa fue la cuarta vez que se quedó a dormir después de escapar de casa.
◐•◑
-Deberías de enseñarle tus notas a tu abuelo, dejaría de insistir con que eres un delincuente.
Esa era la razón por la cual últimamente había estado casi viviendo en la casa de Kojiro.
La familia de Kaoru era conocida por ser tradicional. Eso se veía claramente en el estilo de la casa Sakurayashiki; con el suelo de tatami, puertas corredizas y todos los demás elementos dentro de la casa. Si entrabas, podrías ver a los miembros de la familia siguiendo el estilo de su entorno, vestidos con yukatas y kimonos, con excelentes modales y excelente educación. Por eso el que, de la nada, el menor de la familia empezara a patinar y a tener perforaciones, - como un delincuente juvenil, en palabras del abuelo de Kaoru - era como si una terrible mancha apareciera en la perfecta familia Sakurayashiki.
Las discusiones se veían llegar, lo único que sorprendió a Kaoru fue que llegaron meses después de que su conducta "rebelde" apareciera.
Llegaron tarde pero con mucha fuerza.
-Sería una pérdida de tiempo.
En ese momento se encontraban en la habitación de Kojiro, después de un largo día de colegio. Ese día les habían entregado las calificaciones de algunos exámenes, Kaoru tenía excelentes notas que iban desde un 90 hasta un 100. Como todos esperaban de un Sakurayashiki.
-Quizá así las peleas paren un poco, - siguió sugiriendo Kojiro- y dejes de escapar de casa.
Al estar escribiendo, no vio cómo Kaoru se tensaba con su sugerencia. Sin embargo, el pelirrosa se recompuso rápidamente y le respondió sarcásticamente: -Iré a dormir a la casa de Adam, si tanto te molesta compartir la habitación.
Fue el turno de Kojiro de tensarse.
-No creo que a Adam le guste compartir su habitación... ni siquiera conocemos su casa.
-Podría pregun... - fue interrumpido por el chirrido de la silla de su compañero
-Tengo algo de hambre, ¿y tú? - Kaoru no pudo responder cuando Kojiro ya había salido de la habitación- ¡Voy a comprar!
Quizá Kojiro no se dio cuenta de que había alguien en su camino o estaba demasiado concentrado en insultar a Adam en su mente, sea lo que fuere, chocó con alguien y todo habría sido normal de no ser por la persona con la que lo hizo.
-¡Oh, perdón...!, señora...
-Oh, Kojiro. ¿Cómo estás? - lo saludó con más normalidad de lo que Kojiro habría esperado- Estaba pensando en ustedes, quería preguntarte algo.
Sí, era la mamá de Kaoru.
◐•◑
-¿Ya estás aquí? - fue lo primero que Kaoru dijo cuando entró a su habitación- estaba pensando en quedarme a dormir, no me siento totalmente seguro de ir a mi casa hoy...
Si Kaoru hubiera dicho eso antes de encontrar a su mamá ese día, le habría creído. Pero en ese momento, viéndolo evitar su mirada mientras fingía arreglar su cabello, se dio cuenta de que no conocía completamente a su mejor amigo como pensaba.
Había cosas que le ocultaba, y que por más tiempo que le diera no se atrevía a contarle.
-¿Preguntarme algo? - ella asintió
-Kaoru ya me dijo que tienen un trabajo juntos, pero no me dijo mucho más. ¿Es necesario que se quede a dormir en tu casa?, no quiero molestar a tus padres demasiado.
-Está bien, ya me acostumbré a compartir habitación, empezarás a pagar por noche - respondió Kojiro tirándose a la cama-.
-Tu hotel no es lo suficientemente bueno como para pagar.
-Tienes servicio a la habitación y un guapo chef privado, ya debería ser rico.
La respuesta que recibió fue una libreta voladora que cayó en su cara.
-¡Ey, no maltrates al chef!
No importaba si Kaoru le ocultaba cosas, o si no se atrevía a decirle, Kojiro también tenía algunos secretos.
-No se preocupe, mis padres adoran tenerlo en casa.
En especial yo.
Lo dirían cuando estuvieran listos.
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Cherry chikito mintiendo porque tal vez no se atreve a declarar (o a aceptar) sus sentimientos por su mejor amigo
y kojiro haciendo exactamente lo mismo xd
este one shot es una regalo de cumpleaños para una amiga, espero que te guste de verdad T-T pasa unas bonitas vacaciones y feliz cum <3