Vale, esto... había sido increíblmente bueno.
Aun estaba sobre Pablo, tratando de regular mi respiració, él aun me sostenía de las caderas, impidiendo que me moviera. Me temblaba todo, y no era figurativamente, literal me temblaba todo. Pablo pareció darse cuenta porque me levanto cuidadosamente y me colocó a su lado abrazandome por la cintura.
Miré mis piernas, que temblaban como si no hubiera un mañana. Mis mejillas estaban rojisimas, más que nada por que ahora me había invadido un sentimiento de vergüenza. No me atrevía a ver a Pablo.
Por su parte, él se coloco bien su ropa interior y me paso su camiseta para que me la pusiera. Lo hice, sin mirarlo aun, y escuche un bufido de su parte.
-¿En serió vas a ignorarme después de lo que acabamos de hacer?-por su tono de voz, deduje que un "Si" no le haría mucha gracia.
-No te estoy ignorando.
Vale, era muy mala mintiendo.
-¿Y por qué no me estas mirando?
-Porque... porque la posición en la que estoy no me...
Pablo me cogió de la cintura y me giro completamente para quedar cara a cara. Enrojecí más, si eso era posible, y la sonrisa ladeada de Pablo se ensanchó más.
-¿Estas nerviosa, Larita?-su voz era suave y baja, haciendo que algo dentro de mi volviera a removerse.
-No.
Hice el intento de sonar lo más segura posible, pero es que ni yo me lo creía.
Pablo se acerco aun más, uniendo nuestras frentes y mirandome fijamente a los ojos. Pareció estar tan concentrado en eso que ni siquiera se molesto en contestar su móvil cuando empezó a sonar.
Me empesaba a hartar un poco la cancióncita del móvil así que me aparte y lo cogí del asiento delantero. En lo que lo buscaba Pablo me rodeo la cintura con una mano y me estremecí por completo. Debía de dejar de hacer esas cosas, me iba a dar un infarto.
-¿En qué lugar están?-era la voz de Pedro.
Rápidamente se lo pase a Pablo pero hizo una señal de que no quería cogerlo, así que termine contestando yo. Pablo me sentó en su regazo y escondió su cara en mi cuello.
-En el mismo lugar donde nos quedamos la última vez.
-¿Por qué contestas el móvil de Gavi? Se enfadará.
Si. Pablo tenía un problema con que otras personas cogieran su móvil, aunque conmigo nunca tenía problema.
-¿Vienes ya? Tengo frío, Pedri.
-Si, acabó de dejar a Janna en su casa.
-¿Te la haz follado ya?-enarque una ceja. La chica no parecía ser ese tipo con las que Pedro se enrrollaba.
-¿Qué? Claro que no-contestó muy indignado-. Solo hemos ido a cenar.
¿Cenar? Vaya, esto iba en serio. Pedri en su vida invitaría a cenar a una chica con la que solo quiere follar.
-¿Me vas a decir la verdad ya o tengo que esperar a que aclares primero lo que sientes?-enarqué una ceja divertida.
Aunque toda esa diversión de fue por un tuvo cuando Pablo introdujo una mano baja la camiseta y empezó a rozar peligrosamente uno de mis pechos.
-Que pesada eres, por Dios.
-Solo ven rá... rápido, Pedri.
Colgué la llamada, tirando el móvil de lado y centrandome nuevamente en Pablo.
-¿Qué estas haciendo?-enarque una ceja-. Pedri vendrá en cualquier momento.
-Yo creo que tenemos tiempo para un round más.
Vale, era tentador, pero me negaba a que Pedri nos encontrará en una situación rara y las cosas se volvieran incomodas.
-Pablo... no creo-solte un gemido tan alto que me tuve que tapar la boca.
Pablo había vuelto a acariciar uno de mis pechos de forma muy placenterá y me había encantado. Joder, era un puto Dios del sexo o algo así.
-¿Qué decías?-sonrió burlonamente sin dejar de acariciar mi pecho.
Casí me dieron ganas de borrarle esa sonrisa de un manotazo, pero se me olvido cuando volvió a sacar mi camiseta y me colocó bajo él.
-¿Quieres que Pedri nos encuentre así o qué?-trate de levantarme, pero me lo impidió. Tampoco es como que lo haya intentado mucho, quería que esto fuera a más.
-Me da igual el puto Pedri.
-¿Seguró que quieres tener esa conversación con Pedri y explicarle todo?
Suspiro cos cansanció y se aparto para que pudiera sentarme. Empezó a sacar ropa de su maletín y antes de ponersela me pasó unos pantaloncillos, que parecía de pijama; y mi sosten para que me lo pusiera.
Nos cambiamos en silencio, muuuchooo silencio. Yo estaba nerviosa, ¿cómo era posible que me hubiera atrevido a hacer eso con Pablo? Seguía sin creérmelo.
Aún que, ahora, los único que tenía en la mente era solo una pregunta:
¿Ahora qué éramos? O ¿qué queríamos ser?
¿Yo querría algo más que una simple amistad con Pablo?
No lo se. Tal vez debí pensar en eso antes de decirle que lo necesitaba dentro.
Si. Tal vez.
-¿Lleváis esperando mucho rato?-canturreó Pedri abriendo mi puerta y ayudándome a bajar.
-¿Por qué Ferran siempre aparece contigo?-masculló Pablo a mi lado.
Bueno... ahora que lo pensaba, Ferran siempre aparecía con Pedri. Era extraño.
-¿Habéis vuelto a hacer un trío y me dejaron fuera otra vez?-fingí que me enfurruñaba y no tardé mucho en recibir un codazo de Pablo, molesto, claro-. Bueno, quiero ir a casa. Llevadme.
Decidí que lo mejor por ahora sería parar un poco con la broma del trío, no tenia la cabeza para soportar un dramita de Pablo.
Los chicos subieron antes, mientras yo cerraba el coche y dejaba todo seguro. Al subir al mini verde de Pedri note un ambiente muy raro por parte de Ferran y el dueño del mini verde. Voltee a ver a Pablo y buscar alguna respuesta, pero el pobre estaba igual, o incluso, más perdido que yo.
Como tampoco tenía cabeza para los dramas de esos dos decidí fingir demencia y me recosté tranquila en el asiento. Pablo no tardó mucho en acercarme a él y hacer que me recostara en él. Mire alarmada a los dos de enfrente, pero parecían tan metidos en sus cosas que me di cuenta de que no nos prestaban la más mínima atención, así que me permití recostarme tranquila mente en Pablo.
No tardamos mucho en llegar a casa de Pedri y Gavi, bueno, ahora que Pedri se había mudado era de Gavi y Ferran, que ahora dormía en el viejo cuarto de Pedri. Ferran se bajó dando un portazo que casi me hizo caer de culo del asiento, pero Pablo me sostuvo.
-¿Qué coño le pasa a ese tío?-me lleve una mano al corazón por el susto.
-Nada que te importe, Lara-masculló molesto.
¿Habíamos vuelto de nuevo a esa etapa?
-Pedri.-le advirtió Pablo en un tono muy poco sutil.
-Joder, lo siento-se llevo las manos a la cara y la frotó con fuerza-. Gavi, déjame con Lara a solas.
Por su tono de desesperación supuse que era algo muy importante. No puse ninguna pega y me moví para bajarme del coche y hablar con él, aunque claro, Pablo tenía que estar en desacuerdo.
-¿Por qué? ¿Qué queréis hablará vosotros dos solos?-se enfurruñó tanto que inmovilizó mi brazo para impedir que me moviera. No uso fuerza, pero igual no podía moverme.
-Deja de Cotilla, anda-lo aparte de un manotazo e hice que se bajara del auto.
Pablo bajo enfadado y al igual que Ferran, dio un portazo y se metió a casa. ¿Qué les pasaba a esos dos?
-¿Qué pasa?-pregunto directo para ir al grano.
-Es Ferran.-dijo sin más, quedándose en silencio.
-Si. Y yo soy yo, y tú eres tú, y Pablo... es un gilipollas-bromeé, pero al ver que él no sonreía igual me preocupe-. ¿Qué haz hecho ahora Pedro?
Pedri apartó la vista, empezando a jugar nerviosamente con sus manos. ¿Pedro nervioso? Vale, esto es demasiado preocupante.
Pasamos un rato más en silencio, quería darle el tiempo que necesitara para estar listo, pero empezaba a hartarme. Cuando estaba por hablar o darle un golpe para que reaccionara, él me miró nuevamente y suspiró antes de empezar a hablar.
-Que Ferran no está pillado de la tía del trío, está pillado de mi.
Y ¡Boom! La bomba explotó. Mi cara se transformó en un hermoso poema que seguro Pablo pagaría miles de dólares por ver. ¿Cómo que Ferran estaba pillado de Pedro? Si él era el "todas mías 3000".
-Me tienes que estar jodiendo-dije aún sin poder creérmelo-. Tiene que ser una puta broma.
-Pues no lo es...
-Pero, no entiendo ¿cómo lo sabes? ¿Ferran te lo ha dicho?
-Si. Lo he llamado para que me acompañara a por ustedes y me lo ha contado. Supongo que aun iba un poco borracho y por eso me lo ha dicho.
-Joder-dije tapandome la cara con las manos por la sorpresa-. ¿Y por qué esta tan enojado? ¿Le haz roto el corazón a Ferran?
De solo pensar que a Ferran le habían roto el corazón me enfuresí. Nadie era demasiado bueno para Ferran. Bueno... quizas Pedri si lo era... pero igual, le había roto el corazón.
-¡¿Qué?!-grito indignado-. Claro que no. Le he dicho que hay que hablarlo cuando esta sobrio.
-Eso es como romperle el corazón-le recrimine entrecerrando los ojos.
-¿Por qué? Esta borracho, luego no se acordará de nada. Es mejor si lo olvida.
Aseguró restandole importancia.
-¿Y por qué estas tan nervioso?-me salió un sonrisita malvada y él parecio captarla.
-Dios santo. Estas mal de la cabeza, Lara.
Me hizo mala cara. Paré de reír al ver su expresión de enfado. Vale, no era momento. Lo pillaba.
-¿Entonces qué pasa?
-Que no quiero joderlo. Tenemos una gran amistad y yo no puedo corresponderle.
-¿Por qué no te gusta o qué?
-Porque quiero estar con Janna.
¿Janna? Ah si, su amiga de Tegueste.
-Espera, ¿enserio estas admitiendo que quieres a Janna? Vale, es mucha información para mi en un día, Pedro.
-Pues si. Por mucho que te parezca sorprendente-suspiro pesado y volvió a retomar la postura-. Quiero a Janna conmigo, me gusta desde que me fuí de Tegueste, quiero estar con ella y se que ella quiere estar conmigo. Ferran... él es bueno, pero no siento lo mismo por él. ¿Lo entiendes?
Asentí. Claro que lo entendía. Era jodido cuando le gustabas a algún amigo y a ti te movía el piso alguien más. No quieres joder la amistad, pero tampoco quieres dejar de lado a la otra persona. Joder, si lo entendía. Había pasado por esto muchas veces, con la única diferencia que yo siempre había elegido la amistad...
-Cuentame algo.
Dijo de la nada haciendome dar un respingo.
-¿Qué?
-¿Te esta dando algún cortocircuito?-se rió abiertamente de mi el muy capullo-. Cuentame algo. Yo lo he hecho. Es justo que tu hagas lo mismo.
¿Debería...? No, no debería. Pero... ¿y si...? No, no debería.
Joder, es que necesito hablarlo con alguien. Necesito alguien que me diga que es lo más normal del mundo hacerlo con tu mejor amigos y que no pasa nada, y que la relación seguira igual. Si, debería contarselo, con paciencia y calma.
-He follado con Pablo.
Bueno, menos mal ibas con calma, he.
Esperé impacientemente la reacción de Pedri, pero se había quedado petrificado. Literalemente.
Poco a poco fue abriendo mucho sus ojos y su boca. Su cara era un verdadero poema en estos momentos.
-No.
-¿No?-pregunte confundida.
-No. No me jodas, Lara.
Bueno, ojalá fuera broma. Así no tendría tanto en lo que pensar.
-¡¿Te lo haz follado?!-grito tan repentinamente que casi choco con el parabrisas del coche.
Me incline hacia él para taparle la boca e impedir que dijera algo más y que alguien pudiera escucharnos.
-Calla, idiota.
Regañe entre dientes.
Quito mi mano y me cogió de la nuca para verme bien.
-¿Y estas bien? ¿Te hizo algo?-estaba... ¿preocupado? ¿O yo lo estaba imaginando?
-¿Cómo que si me hizo algo?
-Es decir, ¿fue muy rudo?-me pareció tan tierno la forma en la que me miraba preocupado que tuve que contener una sonrisa.
-No voy a darte detalles, Pedro.-sonreí burlona-. ¿Pero por qué dices que fue rudo?
Vale, eso si que quería hablarlo. ¿Alguna ex de Pablo le habría contado a Pedri que folla rudo o qué? Vamos, que si lo hace duro, pero tampoco rudo, así como para lastimarme.
-Bueno, uno de sus líos una vez me comento que lo hace rudo-levanto los hombros restandole importancia-. Pero es claro que contigo jamás podría serlo.
Pedri sonrió como si recordará algo, no entendí muy bien la verdad, y luego nego riendo.
-¿Por qué conmigo no lo haría rudo?-cuestione, más interesada de lo normal.
-Porque...
-Lara, baja ya-llego Pablo tocando como loco el cristal de la ventanilla del auto-. Parecéis dos viejas chismosas.
Pedri y yo reímos. Me despedí de él y fuí dentro con Pablo. Era obvio que me quedaría con él, así que fuí directo a su habitación en lo que subía.
No pude evitar pasar, ahora por la habitación de Ferran y abrir un poco la puerta. Estaba tirado en su cama, con sus auriculares puesto mirando al techo. Pobrecito. Tendría que hablar con el mañana.
°°°°🌧
Les dejo un cap largo como recompensa por tardar tanto :)
Espero les guste :)
Att: Sof🦋
02/04/2023🌑