A la mañana siguiente se seguía escuchando como las rocas explotaban.
— Parece que muy pronto va a erupcionar —
— Cuando eso suceda, nosotros ya no estaremos aquí, dice el hombre muy seguro —
Stefany y Mateo fueron a terminar de hacer el bote.
— Crees que entremos todos pregunta Stefany —
— ¿Como todos? —
— Tú, yo, los lobos y los cachorros —
— Piensa llevarte a ellos también —
— Sí, si les dejamos morirán con la explosión —
Mateo solo la mira y no dice nada.
Las horas pasaron y acabaron el bote.
Mateo se encontraba terminado de equipar el bote y había mandado a Stefany a recolectar frutos.
— Estás lista, dice el hombre atando unas cuerdas —
— Si estamos listos —
Mateo levanta su mirada y ve a Stefany agarrada los cachorros y ve a los dos lobos a su lado, ellos están cargando las frutas en su boca. El hombre se masajea la ceja de la impotencia que siente.
— Vamos, dice ella subiéndose con los animales —
Stefany y los lobos ocupan todo el bote, no hay espacio para Mateo.
— Mateo apúrate —
— Donde va y a ir yo —
— Si hay espacio dice ella abriéndole espacio —
Mateo se sube al bote y no tiene donde sentarse, el hombre empieza a remar, parece que se están alejando un poco de la isla, cuando de repente se escucha otra explosión que hace que el bote se mueva. El hombre abraza muy fuerte a Stefany para que no le pase nada, de pronto una gran ola se aproxima a ellos y hace que se voltee el bote, todos caen al agua. Mateo intenta sacar a Stefany, pero no puede porque, ella no quiere salir si no es con los cachorros.
— Mateo sácalos a ellos, primero dice ella con sus últimas fuerza —
Mateo carga a los dos cachorros y toma a Stefany con la otra mano, los cuatro salen sanos y salvos.
— Maldita mujer, acaso no aprecias tu vida, dice Mateo molesto —
— Lo aprecio, pero no voy a dejar que nadie muera —
— Por esos animales casi no ahogamos —
— Son unos cachorros, aún no han vivido —
Mateo sola la mira enojada y no dice nada, la mujer se acerca a ver cómo están los cachorros y ve que están bien.
— ¡Mateo! —
— Qué pasa porque gritas —
— Dónde están los lobos —
— Ellos se quedaron en agua —
— Que dice Stefany corriendo al mar —
— Espera, dice Mateo sosteniéndola, que crees que haces, acaso quieres morir —
— No, pero ellos han estado con nosotros, nos han protegido, no podemos dejar que mueran —
— Yo iré, dice el hombre entrando —
Después de unos minutos, Mateo sale del océano con la loba, Stefany corre a donde están ellos.
— Como está ella —
— Bien, pero el lobo murió —
— Que dice ella con tristeza —
— Se quedaron atrapados en una gran roca, el lobo sacrificó su vida para que la loba se salvará —
Stefany rompe en llanto.
— No es tiempo para lamentarse, el volcán a explotar tenemos que estar lo más lejos posible —
— Qué hacemos —
— Bote está hundido y tú no sabes nadar no llegaremos muy lejos —
— La loba está inconsciente como haremos con ellos —
— Sé que nunca los dejarías, por eso no podemos hacer nada y esperar a qué nos vengan a rescatar —
— Porque de repente eres bueno conmigo, puedes irte y salvar tu vida, dice ella —
— He cometido varios errores que han llevado a que nos separemos, uno de ellos fue que no confíe en ti cuando me dijiste que no habías matado a nuestro hijo, dude mucho de ti, si no hubiera encontrado a los doctores nunca te hubiera creído, pero ahora nunca dudaré de ti —
— Eso ya no importa, han pasado 5 años desde la muerte de nuestro hijo —
— No sabes cuanto me arrepiento de no haber estado contigo cuando más me necesitabas, siempre cargaré con la muerte de nuestro hijo —-
— Tú no tienes la culpa de la muerte de nuestro hijo, los únicos culpables son Pablo, Diego y la mujer detrás de ellos —
— Tú también sospechas que es una mujer —
— Sí, pero no tengo idea de quién pueda ser, igual ya no importa, moriremos aquí, no quiero morir con rencor —
— No dejaré que nada te pase, prometo cuidarte el resto de mi vida —
—- Sé sincero Mateo y respóndeme algo ---
--- Dilo ---
— Tú me amas o solo estás conmigo porque te sientes culpable de la muerte de nuestro hijo —
Mateo está por responder, pero de repente se escuchan unos ruidos de avión y helicópteros acercándose.
— Estamos salvados, dice ella emocionada —
Los helicópteros descienden de ellos, bajan rescatistas y guardaespaldas de la familia Fiore y del avión sale Santiago, Carina y Valentina.
—- Hijo, estás bien, dice Santiago preocupado —
— Estoy bien padre —
— Mateo, que bueno volver a verte, dice Carina abrazándolo —
— ¡Hija! —
— Mami, que haces aquí —
— Me dijeron que te habías perdido —
— Mami estoy bien, no llores —
— Volvamos a casa —
— Si mami —
— Stefany se escucha una voz detrás de ella, ve que sale de uno de los helicópteros —
— ¡Adrián! —
A Adrián no le importa nada y la abraza tan fuerte, son interrumpidos por los ruidos del volcán.
—- Vámonos, el volcán va a explotar, dice Mateo acercándose a Stefany —
— Los cachorros y la loba —
— Fernando encargarte de subir a los animales —
— Si señor —
Todos suben al avión y este asciende al cielo.