SIN EDITAR.
😍<<{Nolan}>>😍
Mastico mientras sostengo la porción de pizza frente a mi rostro, llego otra vez a la mesa escuchando los númerosos gritos que no me interesan, solo me importa que el queso no se me caiga.
Sería un desperdicio.
Me siento junto a mi hermana quien mira hacia adelante, hago lo mismo mientras me terminó la porción de pizza, las dos mujeres gritan a mi hermana insultos que poco le importan, pero a mí sí.
Nolan: No le digas sucia y asquerosa, háganse análisis de sangre y verán quien en realidad es la sucia aquí.
Vuelvo a mi pizza, pero ninguna parece entender mis palabras, no me gusta que insulten a mi princesa, ella es todo lo que está bien en esta vida.
Jennifer: Eres una asquerosa, ¿Te piensas que tus hermanos te seguirán defendiendo cuando empiecen a follarse a otra? —se ríe sarcásticamente— Por qué las habrá y tú serás olvidada, como la asquerosa que eres.
Nathan: ¡Basta!
Se pone de pie golpeando ambas manos en la mesa llamando la atención de toda la cafetería, incluso de los que no estaban prestandonos atención.
Agnes: Siéntate tesoro, no te gastes con dos perras que están celosas de que los hombres que quieren le presten atención a otra y no a ellas.
Tatiana: ¡Perra tú!
Levanto mi mirada para ver a mi hermana de pie sosteniendo la muñeca de Tatiana, al parecer quería golpearla.
Agnes: Intenta golpearme otra vez y te cortaré la mano delante de toda la cafetería, no soy una persona con la que puedas joder, las dejé ser porque me causan pena ajena por lo ofrecidas que están, pero intentar golpearme dos veces sobrepasa el límite.
La otra mano de mi hermana impacta con un ruido sordo en la mejilla de Tatiana haciendo que toda la cafetería jadee, los murmullos se silencian tan rápido como comenzaron cuando el director de la universidad llega a nuestro lado.
Adrian: Todos ustedes a mi oficina.
Marco: Pero tío...
Adrian: Dije, todos ustedes a mi oficina, ahora.
Mi princesa suelta la mano de Tatiana con fuerza impactandola contra la mesa y sonríe inocente cuando ella grita y el director se da la vuelta.
Agnes: Vamos.
Lo incita a seguir cuando él mira todo con sospecha, pero le hace caso, todos vamos a su oficina como si estuviéramos en el instituto y nos hubiéramos portado mal.
Al menos pude agarrar mis papitas de la mesa.
Marco: Deja de comer, a mi tío no le gusta que haya comida en su oficina.
Nolan: No nos hubiera hecho ir, yo siempre estoy comiendo.
Me meto una papa en la boca cuando entramos a la oficina, las dos mujeres se sientan en las sillas frente al escritorio llorando como magdalenas, mi hermana las mira con aburrimiento y nosotros miramos al director, me está mirando, a la bolsa de papitas en mi mano en realidad, pero no la dejare y para que lo entienda tomo otra papa y me la meto en la boca.
Suspiró audiblemente como si eso me hiciera retroceder, mi hambre no reconoce barreras, pero buen intento.
Adrian: Díganme que sucedió.
Mi hermana mira a las mujeres sabiendo que serán las primeras en hablar y así es, lloran mientras le dicen al director que mi princesa les pegó y que ellas no estaban haciendo nada.
Agnes: ¿Terminaron de llorar? Ni que les hubiera pinchado una silicona, no jodan —rueda los ojos y mira al director— señor, si le pegue un cachetazo, porque me insultaron —se encoge de hombros— ni sueñe con que me disculparme se merecían más que un cachetazo, pero hay gente muy delicada en la cafetería.
Bufa y se cruza de brazos.
Marco: Tío, le dijeron cosas horribles a la princesita y la intentaron golpear dos veces.
Adrian: ¿Princesita?
Nuestro amigo enrojece de vergüenza y me río a carcajadas al ver que incluso sus orejas están rojas y no sabe a dónde mirar, me ahogo con la papita de mi boca tosiendo como condenado.
Marca: El karma.
Pendejo.
Adrian: Silencio y tu deja de comer.
Ignoró la última parte, meto una papa en mi boca, lo único que se escucha en la oficina es la forma en que mis dientes rompen la papa.
El director se pasa una mano por el rostro frustrado de que no le haga caso antes de mirar a las dos mujeres que siguen en su papel de víctimas.
Adrian: Ví todo lo que hicieron en la cafetería desde que mi sobrino freno su mano hasta que la mano de la señorita Becker impacto en tu rostro.
Jennifer: ¿Vio cómo la golpeó? Entonces la echara ¿Verdad?
Adrian: Por supuesto —eso hace que las mujeres empiecen a sonreír victoriosas mirando a mi hermana— que no.
La sonrisa cae automáticamente y ambas giran sus cabezas para mirar al director con rapidez.
Tatiana: ¿Qué? Pero me golpeó.
Adrian: Ustedes intentaron golpearla dos veces, no me parece justo que ella pague por todo cuando ustedes fueron gran parte del problema.
Ambas se dan una mirada de soslayo, me muevo un poco hacia el costado para poder ver bien lo que harán mientras meto más papas en mi boca, es como estar en el cine.
La mano de Jennifer se extiende para tocar la mano del director descaradamente, casi me río dándome cuenta que intentan seducirlo, pero con la cantidad de papitas que tengo en la boca probablemente termine ahogado otra vez así que no.
Tatiana: Seguro hay algo que podamos hacer.
Ambas se pusieron de pie y se inclinaron sobre el escritorio mostrando sus siliconados pechos mientras tocan ambos brazos del director, la sonrisa en mi rostro demuestra lo mucho que me divierte ver cómo hacen su mayor esfuerzo con el hombre y él sigue estoico mirando sus ojos.
Jennifer: Algo que podamos hacer para que ella quede expulsada.
Adrian: ¿Saben que el acoso sexual no es solo para los profesores que molestan a sus alumnas verdad? También es acoso lo que están haciendo y puedo asegurarles que tomaré asuntos en esto.
Se separan de él automáticamente y yo me río luego de tragar.
Nathan: Fue un intento muy bajo he de admitir.
Nolan: Precario.
Agnes: Señor ¿Ya podemos irnos?
Adrian: Vayan, si sucede algo así otra vez quedarán expulsados.
Agnes: Como diga señor.
Le sonríe descaradamente antes de lamer sus labios haciendo que el director fijé su mirada en sus labios y como la princesa que es se va sin decir nada más.
Me acerco al escritorio notando como los ojos del director siguieron a mi hermana, me inclino un poco hacia él y le extiendo mi paquete de papitas.
Nolan: Tome, lo ayudarán a pasar el rato hasta que deje de mirar la puerta.
Nathan: Siempre tiene el mismo efecto.
Nos reímos con mi hermano y salimos de la oficina dejando al director con su sobrino y a las dos perras.