Ya había pasado la semana, hoy era viernes y Fuutaro estába llendo a recoger a sus hijas que, pero estaba un poco atrapado en el tráfico aún que no tenía por qué preocuparse aún quedaban 15 minutos para que las clases de las niñas terminarán, mientras esperaba a avanzar se puso a pensar en los saucesos que le habían pasado éstos días que volvió al trabajo, habían descubierto que los diamantes y las gemas que los robots querían robar tenían propiedades energéticas antiguas y que algunas incluso podían repotenciar máquinas a más del 100 por ciento, quién quiera qué los haya enviado tenía pensado poner a andar una máquina que requería mucha energía y querían que tuviera mucha potencia.
Las gemas Antigua estaban resguardadas en la acua-base y los museos estában ciendo patrullados por la S.P.D para mayor seguridad en casó de un posible segundo intento de las máquinas de querer robarlos.
En cuanto a su vida de padre todo estaba más o menos normal, las niñas estaban en periodo de exámenes por lo que las ayudaba a estudiar aún que tampoco necesitaban mucho de su ayuda ya que todas eran muy inteligentes algo que heredaron dé él y siempre se sentiría muy orgulloso por éso, pero le gustaba pasár tiempo con sus niñas y cómo sería fin de semana tendrían más tiempo para estár juntos.
Por fin el tráfico se puso en marcha, él padre lo agradeció en silencio y volvió a arrancar.
Cuándo llegó a la escuela apenas había sonado la campana que daba fin a las clases, bajó de su auto y fue con los otros padres a esperar a que sus pequeñas salieran por las puertas.
Cuando los maestros abrieron las puertas una ordande niños hiperactivos salían corriendo a encontrarse con sus padres no tardó en ver a Hiroki saludarlo desde la puerta con sus hermanas a su lado y todas al verlo corrieron hacía él.
Niñas: Papi.
Al llegar todas se aferraron a él tirando de sus pantalones cada una queriendo su atención.
Fuutaro: calma niñas, calma me podrán contar cómo les fue en él auto.
Rena: Papi ahí está el carrito de helados podemos conseguir unos.
Fuutaro: por supuesto cariño.
La familia caminó hacia la mujer que estába vendiendo helados que estaba de espaldas.
Fuutaro: disculpe, 6 helados por favor.
La mujer al momento de darse la vuelta dejó atónito a Fuutaro y las niñas.
Fuutaro: no puede ser...
Rin: es igual a...
Yuki: mi.
Fuutaro: Miku.
Miku: Fu... Fuutaro.
Al escuchar el nombre todas la mini Quintillizas recordaron las historias que su padre les contó de cada una de sus madres y lo que su tía Raiha les contó que cómo jugaron con su padre y lo abandonaron además de abandonarlas cuando eran unas recién nacidas.
Miku desvió la mirada del hombre y miró a las niñas sobre todo a la que era su vivo reflejo.
Miku: Yuki...
La castaña sintió que las piernas le empezaban a fallar quería intentar dar un paso para ver a su hija, pero Mai fue más rápido.
Mai: vámonos Papi, no debemos comprarle a está extraña desconocida, podemos conseguir helado en otro lado.
Rena: si vámonos, no quiero seguir viéndola.
Rena: ella es un monstruo.
Fuutaro: niñas, vallan a esperarme a la camioneta, no tardó.
Niñas: no.
Todas se aferraron sus pies amenazando con llorar.
Yuki: no quiero que se te acerque esa bruja.
Fuutaro: por favor niñas hagan lo que les pido, les prometo que estaré bien y no tardaré.
Se agachó y Yuki Mai y Fuuka se aferraron a su brazos y cuello mientras Rena y Rin se subieron a su espalda sujetas a sus hombros, Miku a pesar de que estába aún en shock por el repentino reencuentro inesperado se sorprendió cuando vió a Fuutaro levantarse con todas las niñas sobre él las llevo a su auto y las dejó en la parte de atrás aún que opusieron resistencia a soltarlo, pero al final logró hacer que lo esperarán, la última que faltaba era Yuki.
Yuki: Papi....
Fuutaro: tranquila todo estará bien volveré pronto.
Le dió un beso en la mejilla y la dejó al lado de Rena, cerró la puerta y regreso con Miku.
Fuutaro: así que volviste.
Miku: s...s...si.
Fuutaro: por qué?.
Miku: Ah.... Pu....pues... para... intentar comenzar de nuevo.
Fuutaro: entiendo.... Nino volvió contigo.
La cara de la mujer se quedó intimidad por los ojos del hombre que ella aún amaba en secreto cómo la veía sin casi ninguna emoción y simplemente intento esconderse cómo siempre.
Fuutaro: ya veo
Se dió la vuelta para irse de regreso con sus hijas.
Fuutaro: si tienes consideración no le digas que nos vimos, no me importa si están intentando empezar de nuevo, pero no quiero que por su prevencia mis hijas sufran así que por favor no menciónes ésto.
Se subió a su vehículo y se fué de la escuela, dejando a la Nakano de enmedio para que siguiera con su trabajo y justo en ese instante llega otra chica con gorra de heladera.
Nino: Oye Miku espabila conseguí un gran grupo de clientes en la otra callé.
Miku: s...si.
Al momento que el padre soltero se alejo de la escuela todas sus pequeñas comenzaron a hablar.
Yuki: Papi si ella está aquí, eso significa que las demás podrían....
Mai: ! No, no, no y no!... No tienen ningún derecho de aparecer ahora después casi 6 años no es justo.
Rin: Mai cálmate, tal vez sólo haya Sido una mala coincidencia.
Mai: una horrible coincidencia.
Rena: tiene razón, Papi y si vemos a otra.
Fuuka: tengo miedo.
Fuutaro: niñas por favor no piensen así, tampoco me esperaba ésto, pero les prometo que no va pasar nada malo, yo las estaré cuidando.
Niñas: pero.
Fuutaro: está bien que estén asustadas y enojadas por qué sucediera de la nada, pero en la vida las cosas pasan sin que lo esperemos, pero les juró que no dejaré que no dejaré que las dañen.
Mai: pero y tú?, qué pasa si te intentan lastimar de nuevo.
Rin: eso no pasará, yo protegeré a nuestro Papi.
Yuki: yo... yo también.
Fuuka: si.
Rena: papi le dirás a la tía Raiha o nuestros abuelos.
Fuutaro: si y no Rena, le contaré a sus abuelos sobre ésto más tarde, pero les pido que no se lo cuenten a su tía.
Mai: por qué no, ella debe saber para estár alerta.
Fuutaro: Ésto va más allá de lo que saben Mai, aún que no lo demostra lo que sus madres hicieron en el pasado afectó mucho a su tía Raiha y me asusta que si se entera de lo que pasó de golpe pueda cometer una locura.
Niñas: está bien.
Fuutaro: gracias mis princesas, ahora quién quería ir por helado.
Niñas: yo.
De regreso con las dos hermanas Nakano Nino estába terminando de atender al último hombre y después que se fué comenzó a contar su botín.
Nino: bien hicimos buen dinero hoy, suficiente para pagar la renta del carro y lo que sobre para nuestra renta.
Miku no le respondió ya que aún seguía perdida por haber visto a su hija y a Fuutaro.
Nino: oye me estás escuchando o que Miku, desde hace un rato estás atontada que te sucede.
Miku: no... No es nada.
Nino: mientes, ahora dime la verdad.
La peli rosa la miro directo a los ojos poniendo mas nerviosa a su hermana menor y cómo un libro abierto Nino la leyó completa.
Nino: te encontraste con él no es verdad.
Miku no respondió le había pedido no decir nada, pero ahora estába atrapada y quién sabe ahora que estába pensando Nino.
Nino: y estaba sólo?.
Miku: si, él estaba solo.
Hizo todo lo que pudo por mentir de la forma más convincente posible, pero tampoco parecía haber funcionado.
Nino: haci que mauro las llevó con él, valla quién diría que tendríamos esté golpe de suerte.
Miku: que, de... De que hablas?.
Nino no le hizo caso y saco su celular y uso el marcado rápido para llamar a alguien.
Nino: hola, sigues en ciber café, necesito que imprimas algo y se lo lleves a Itsuki lo antes posible te explico luego, ahora sólo pon atención.
Miku no podía creer lo que había hecho involuntariamente casi se calló de rodillas y se agarró la cabeza por el shock.
De regreso con Fuutaro y las Quintillizas Uesugi todos estában felices habían disfrutado de un Rico helado y charlado sobre su día, la cara de Fuutaro reflejaba un gran orgullo, todas sus hijas habían pasado sus exámenes con 100 puntos y estaban caminó a la casa de su padre para contárselo a él y Raiha.
Se estacionó frente a la casa y las niñas bajaron rápido y entraron a la casa.
Fuutaro: verlas así ya mejoró mi día.
Estaba por entrar, pero se detuvo al escuchar el timbre de su teléfono revisó que tenía un mensaje de voz de un número desconocido.
Mensaje: Ten cuidado, esas dos mujeres no son las únicas que volvieron a Tokyo, procuré a sus hijas.
Fuutaro no entendió nada por la vos sonaba cómo una mujer, pero no conocía el número, decidió intentar algo.
Fuutaro: Quién eres y cómo sabés ésto.
Espero a ver si quién quiera qué fuera la persona dueña del contacto le respondia lo cuál si paso recibiendo otro mensaje dé vos.
Mensaje: no soy nadie importante ni estoy queriendo algo de usted, sólo no quiero que dañen a esas niñas pido por favor que confíe en mí.
Fuutaro siguió sospechando un poco, pero si era verdad el mal presagió de Yuki se haría verdad las 5 habían vuelto a Tokyo, la pregunta era para que, qué querían de él, dinero, a él o peor a las niñas, si éso era él casó debía estár atento a cualquier posible movimiento, pero protegería a sus hijas aún que le costará la vida.
Fuutaro: muy bien confiaré en tí, sabés qué es lo que planean.
Espero a la respuesta que llegó con otro mensaje de voz.
Mensaje: vigilé el cabello rojo y no se deje engañar por cómo lusca, ella está en las mismas circunstancias que todas las demás, sea inteligente y ganará.
Fuutaro: gracias.
Espero unos minutos para ver si no le mandaba otro mensaje, pero aparecia cómo desconectado así que guardó su teléfono y Rena salió de la casa hacía él.
Rena: Papi porque aún no entras te estamos esperando para comenzar a hacer una celebración por nuestras notas.
Fuutaro: perdón Rena es que me llegaron mensajes importantes que tuve que responder.
Rena: volverás al trabajo.
Fuutaro: tal vez, aún no ha surgido gran problema y termine todo lo de la mañana, esté fin de semana sólo será para ustedes.
Rena: siiii.
Saltó a los brazos de su padre y se aferró a su cuello.
Rena: te quiero Papi.
Fuutaro: y yo a ti mi pequeña estrella fugaz.
Él padre disfruto del abrazo, pero miró hacía a un lado y sus ojos se abrieron por completo, una cabellera roja muy conocida se acercaba a ellos, no quería que Rena sufriera por tener que lidiar con el encuentro repentino de ver a su madre y mucho menos que Raiha la viera y se armara un escándalo por lo que dejó a Rena en la entrada.
Fuutaro: ve con tus hermanas y tú tía, yo hire en un momento sólo tengo que hacer una llamada importante primero.
Rena: promete que no tardarás.
Fuutaro: lo prometo, sólo serán unos 5 minutos.
La niña le sonrió, regreso adentro y Fuutaro cerró la puerta y después después puso una cara sin emociónes.
Itsuki: parece que me perdí el momento familiar.
Fuutaro: no deberías quejarte por no perderte algo a lo que no tienes derecho... Itsuki.
Cuando se vieron a los ojos parecía que los dos intentaban matar al otro, pero Fuutaro no tenía tiempo que perder.
Fuutaro: así que, tú también volviste.
El lado positivo que el peli negro le veía a todo ésto era que él contacto si resultó ser confiable después de todo.
Itsuki: no te oyes sorprendido, supongo que no has cambiado del todo.
Fuutaro: ve al grano, que es lo que quieres?.
Itsuki: creeme no planeo quedarme mucho tiempo frente a está casa, sólo vine a darte ésto.
La pelirroja le entregó un sobre, antes de ver qué tenía vió a su antigua estudiante, a pesar de llevar ropas que parecían costosas se dió cuenta de que la camisa tenía vastante espació en ves de ajustarse al estómago, Itsuki siempre fué una glotona y por ende aún que no era muy notable era más gordita que sus hermanas, pero ahora parecía que una rama.
Fuutaro: pareces más delgada qué nunca.
Itsuki: y eso a tí que te importa ni siquiera deberías estar observandome.
La ignoró y abrió el sobre era una citación a una corte una demanda y una carta exigiendo la custodia de las niñas, Fuutaro se hubiera puesto furioso, pero siguió le que le había dicho la persona en el mensaje usó mente de genio y observó bien los papeles, no podían ser legales y se dió cuenta al instante eran papeles falsos, pero decidió vencerla en su propio juego.
Fuutaro: así que de repente les interesan las niñas, cuál es la trampa.
Itsuki: nosostras también tenemos derecho son nuestras también, claro que podríamos olvidarlo por una cantidad aceptable de Dinero.
Fuutaro: así que quieren amenazarme o chantajearme.
Itsuki: velo cómo quieras, pero lo que a tí te puede costar un abogado viendo que aún vives en esté pobre lugar a nosotras no nos cuesta nada.
Fuutaro: ha así que contal de quitarme serías capas de dar tú cuerpo, y pensé que tú eras la más cobarde pará ésas.
Se dió cuenta de que se puso nerviosa por su comentario ya había caído.
Itsuki: que crees que estoy jugando, tengo el dinero para arrebatate a la niña.
Fuutaro: mientes, sé todo lo que les pasó, se del fraude y caída de Ichika en el ciene, se de la salida olímpica de Yotsuba y del fraude gastronomico de Miku y Nino, todas ustedes están en bancarrota y tratan desesperadamente de conseguir dinero, si no fuera así hubieras pagado por papeles legales y no por unas copias falsas.
Itsuki se quedó de piedra le arrebato el sobre con los papeles de inmediato.
Fuutaro: fuiste maestra así que supongo que sabes que presentar una falsa demanda y situación son suficientes para que tú seas la que esté en peligro de irse a prisión.
Itsuki: ésto no a terminado.
Fuutaro: lo sé, se que apenas están comenzando, pero que te quede algo claro, no dejaré que ustedes lastimén a mis hijas.
Con esas últimas palabras Itsuki se fue muy molesta por haber sido superada después de que Fuutaro se asegurará de que realmente se había ido una patrulla de policía se detuvo justo frente a él y su padre salió de ella.
Isanari: Hijo, que hacés ahí afuera Raiha dijo que harían una celebración en la casa.
Fuutaro: papá, mejor llama al señor Mauro hay algo muy importante que debo contarles.
Isanari: está todo bien Fuutaro.
Fuutaro: No, nada estará bien éstos días, unos problemas que habían quedado atrás volvieron para intentar dañarnos.
Fin del capítulo.
Espero que hayan disfrutado este capítulo, las cosas comenzarán a intensificarse pará Fuutaro y su familia, pero veremos si las Nakano tienen éxito o se unden aún, Hasta la próxima.