Un taxi me recibió a tiempo, habíamos seguido al auto de Matthew de cerca y digo de cerca porque el tráfico era un asco y no permitió que el tomara la clase de velocidad que a él le gustaba: con ese embotellamiento difícilmente pudo moverse! El taxista planeo cobrarme 3 veces el precio usual porque seguramente pensó que yo vivía en esta mansión, y no yo no estoy pudriéndome en dinero.
Baje a Nikola del coche de Schwartz lo abrace arropándolo con mis brazos, se sentía tan pequeño e indefenso recostando su cabecita contra mi busto, creaba esa sensación cálida y maternal que solo un niño podía generarte, pero con él de cierta manera este momento apacible era especial, cada vez comprendía más porque la pequeña gota de Schwartz era venerada por el nebuloso chico de mirada pérfida.
-Te has ganado de enemigo al sexto hombre más rico del mundo, eres consciente de eso?- anuncié cuando estuvo más calmado.
-Uno más a la lista- declaró entusiasmado -No es como que me afecte, ni si él y su hermano juntan su fortuna tendría por qué preocuparme, él por otra parte si debe temer-
-Engreído- solté a lo que él respondió con una infantil mueca en su rostro.
-Dime Leblanc como fue que llegaste a tiempo a Los Ángeles, con lo retraída que eres nunca creí que llegarías al evento en la escuela de Nikola?- parlamentó con risa satírica
-Eso es porque hay hombres que poseen algo que tu no-
-Pobreza, Fealdad, desencanto?- Preguntó con actuada falsa indignación
-Caballerosidad-
-Así que tú caballero de reluciente armadura te rescato-
-No es de tu incumbencia- no iba a hablarle de Corleone, este no era el momento apropiado, hasta yo lo sabía!
-Necesito tomar una ducha, huelo a puta barata de Nueva Orleans, me jode este asqueroso olor por estar "jazzing" con esa furcia-
-Jazzing?-
-Se me olvidaba que el de la mente pútrida aquí soy yo- respondió refiriéndose a mi falta de conocimiento ante la palabra -Entre los ochentas y los noventas cuando la prostitución y los burdeles se constituían como la segunda industria más grande de Nueva Orleans, las tías de la vida alegre contrarrestaban el fétido aroma de los prostíbulos cercanos al rio o de los hedores espantoso que producía su entorno usando por fragancia el jazmín, querían acaparar pollas y con ese oloroso y escandaloso perfume no les fue mal en eso de llamar la atención. La palabra jazz viene de la flor de jazmín, la flor por excelencia de esas furcias, en los burdeles, la música que se escuchaba pasó a llamarse "jazz" porque si alguien había estado allí había estado "jazzing" follando, vamos- La sonrisa de autosuficiencia se pegó a sus labios y aunque él era listo yo solo quería golpearlo -Esa chica, linda olía a jazmín y mierda que me siento desaseado-
-Se llama Amber no linda idiota!- le grite mientras él se dirigía a la ducha, quitaba la camiseta de su cuerpo y la arrojaba descuidadamente en el camino.
-No me interesa- respondió ahora bajando sus pantalones sin detener su andar.-Odio el olor a Jazmín, pero si tú lo usaras quizás comenzara a gustarme, todo lo que haces me gusta...- dilucidó dentro del baño, con su cuerpo pegado al marco de la puerta, su mirada yacía en el suelo y una dulce sonrisa habitaba sus labios pero no duro mucho, su ceño se frunció sus labios hicieron una mueca y la puerta se cerró, dejándome petrificada, con el niño en mis brazos y con el desconcierto en mis hombros. Se había enojado por decirme aquellas palabras?
Quite los zapaticos de Nikola, lo recosté en la cama de Matthew y con un paño retire el maquillaje de león de su cara y el de conejo en la mía, lo despoje de su ropa sin hacer que despertara y luego grite cuidadosa a Schwartz que aún estaba en la ducha (que por cierto quedaba incorporada a su habitación)
-Tienes pañales y biberón para Nikola?-
-Cuando termine aquí los buscare por ti, no vaya a ser que encuentres más armas y drogas- Alegó con cinismo pero el sentimiento palpitante en mi pecho se preguntaba si realmente se trataba de una broma de mal gusto.
-Okay- me limite a responder y lo escuche reír no quería recostar mi cuerpo en su cama por lo que me senté en un mueble pegado a una esquina de la habitación, sentí mis ojos cerrase por el cansancio y antes de que pudiera detenerlo mis ojos se cerraron.
Gotas de agua caían a mi rostro, los fríos toques hacían que arrugara mi cara inconscientemente, abrí mis ojos por la molesta sensación y lo primero que vi fue a Schwartz con el torso denudo, marcado por nuevos tatuajes y con un par de los anteriores más ennegrecidos, unos bóxeres oscuros envolvían sus fornidas piernas y marcaban su bulto, sus labios color carmesí sonreían enseñando su perfecta y blanca hilera de dientes, no tenían ese color blanco que da una sola sesión de blanqueamiento o ese lechoso tono que da la exageración de uno, era un trabajo limpio algo que solo mucho dinero y el mejor dentista pueden lograr. Su húmedo cabello se colaba en pocos mechones por su cara, jugueteaba con su mano desandándolo velozmente haciendo que las gotas se filtraran hasta mi rostro y joder esos Calvin Klein ajustados a su entrepierna me hacían pensar cosas que ningún chico antes ocasiono en mi
-Se te ha perdido algo en mi verga? No dejas de mirarla- él hablaba y cagaba todo pensamiento de Deidad sobre su postura.
-Donde están los pañales de Nicola y su biberón?- interrogue parándome del moderno mueble, me encontraba enfrente de él, de pie y no solo su alta estatura me hizo sentir pequeña, también estaba su actitud de ser superior y el hecho de que se veía benditamente sexy en esos calzoncillos.
-Los pañales los he dejado sobre la cama mientras dormías, yo cambiare a Nikola tu ve y hazle un biberón después te marchas- choque mi hombro contra su brazo pasando de él no notoriamente enojada
-Que te hace pensar que quería quedarme-
-Me gusta recordarte que no te quiero aquí, por cierto no se te ocurra salir, ya no tenemos solo rottweilers he traído un par de mastines tibetanos y si quieres defenderte te hago saber que cada uno llega a costar más de un millón de euros, como me pagarías?-
-Jodete ojala Amber tenga herpes y se te pegue- Abrí la puerta lista para marcharme hacia la cocina.
-Tu virginidad no vale tantooo Leblanc!- grito haciendo que lo oyera. Maldito se atrevía a decir que mi virginidad valía menos que un perro o que yo siquiera pensaría pagarle un perro muerto con mi virginidad!
-Ni tu polvo de hadas Peter pan!- tenía que recordarle el apodo, esa era mi ventaja hoy, restregarle en la cara que uno de sus secretos me había sido revelado y darle solo un señuelo de todo lo que yo podría saber sobre él (todo lo que Nikola me había dicho) -
Corrí hasta llegar a la enorme cocina, abrí de par en par las dos puertas del frigorífico y entre tanto alimento me fue un poco difícil encontrar lo que buscaba.
Enjuague mis manos en el lavado al igual que el biberón y el chupo de goma que va en la punta pero cuando debía empezar a preparar la bebida me atrofie, en la heladera habían cientos y tipos de botellas de agua con precios muy por encima del resto de las aguas, tome los envases y empecé a leerlos: Fiji: Agua procedente de las islas fiji, embotellada y rica en cilicio Elsenham: Proveniente de un manantial inglés, es rica en minerales y presenta una baja presencia de sodio en su composición. Ogo: Este agua presenta 35 veces más oxígeno que el agua normal.- no creo que eso le ayude a Nikola- Cloud Juice, Antipodes, Iskilde, Karoo, Chateldon, Voss, 10 Thousand BC- Irritada leí rápidamente los nombres sin detenerme en su descripción- Speyside Glenlivet: ideal parta mezclar con whiskey, Lauquen: agua argentina, que mierda? Hasta de Latinoamérica tiene agua? Bling H2O: esta agua se extrae a una profundidad de 800 metros en Smokey Mountains en Tenesse, con un embotellamiento en cristales de Swarovski y como si nada de esto fuese lo suficientemente lujoso, el grupo de botellas de agua también poseía la H2Oro: un agua sellada por una botella bañada en oro de 18 KL
-No sabes preparar un biberón?- inquirió viendo como ojeaba cada botella, aún estaba en bóxer con ese cabello azabache enmarañado y me forcé a mi misma a controlar mis hormonas y mirarlo como si del papa se tratase.
-Por qué tienen tantas botellas de agua aquí! Como quieres que sepa cual mezclar con la leche en polvo!- se acercó al refrigerador mirándome como si hubiese dicho la estupidez más grande.
-La Chateldon- menciono levantando una botella -Es lo que se conoce en Francia como: "la Rolls des eaux". En pocas palabras esta puta agua es el Rolls Royce de las aguas embotelladas, es la que le gusta tomar a Christopher (su padre)- La Voss- Tomo otro embace - Para mí no es más que agua del grifo en botella de lujo, pero según Victoria le ayuda a mantener su piel sana y joven pfff, asi que esta es la de ella, y la mía es la 10 Thousand BC es el agua derretida de un glaciar a 200 millas de Vancouver que se encuentra en el medio del océano, el agua embotellada más pura del mundo- Por alguna razón el hecho de que su agua viniera de un glaciar llamo mi atención, no fue el hecho de lo costosa que debía ser si no que parecía como si las fuerzas de la vida se confabulasen para que todo en el tuviese una razón de ser, él también era un tempano de hielo y justo esta vino a ser su agua favorita, ironías de la vida... -Pero no dejo de tomar la Bling H2O, la H2Oro y la ogo que está especialmente indicada para deportistas, ni se te ocurra darle una a Nikola- Amenazo
-Y a tu hermana?-
- Que pasa con mi hermana?- pregunto dando un sorbo al otro frasco de vidrio de su 10 Thousand BC en la nevera.
-Hablaste de tus padres, de ti, de lo que toman pero no de ella...- No me importaba que bebiera o no su hermana, solo quería saber porque no solía mencionarla... había visto la foto que él tenía de ella en el pequeño espacio donde juntaba las fotos de quienes él realmente apreciaba, pero nunca hablaba de ella por qué?
-Mi hermana...- Pensó por un momento -Ella es de las que se pegan en el grifo para beber agua y luego iba conmigo a burlarse de Victoria por comprar esa maldita marca que bebe como si en ella hubiesen encapsulado la fuente de la juventud eterna- No hablo más, se limitó a cerrar el refri.
-Porque ella nunca esta con ustedes? Entiendo que tus padres no estén pero no suelo verla más que por los pasillos de la universidad-
-Los fines de semana suele tomar el avión y viajar a Francia, ella esta grande como para rendirme cuentas de que hace entre semana, siempre esta escoltada, no hay de qué preocuparse- otro silencio fue gozado por sus labios -También trabaja, está muy comprometida con fundaciones, esta casa suele estar vacía Infinite... Creo que desde que llegaste a mi vida se ha llenado- un suave susurro danzo en su boca: -Creo que todo se va llenando... me voy extasiando- Yo había escuchado mal, eso tenía más lógica y quería golpear a mi subconsciente por engañarme de esta manera.
-Si esta mansión suele estar vacía donde vivías?-
-Tengo mi propio lugar, pero no llevo a nadie-
-ah ya- pronuncie como si algo en mí no se hubiese quebrado.
-A Nikola debes darle Agua embotellada de mineralización débil. La etiqueta debe incluir la mención "adecuada para la alimentación de lactantes" es la que siempre le doy aunque ya no sea un lactante.- el agua que buscaba ni siquiera estaba en el frigorífico! Yacía afuera a temperatura ambiente. El agua con la que se preparan los biberones debe estar a esa temperatura! Quise golpear mi frente con un palo, ahora entendí porque él había hecho ese gesto en su cara al encontrarme buscando donde no debía -1 dosis de leche en polvo por cada 30 ml de agua- expresó agregando 10 cucharadas al agua, lucia tan perfecto en ropa interior y ese tetero en sus manos! Por qué un hombre paternal tenía que verse taaan sexy! Porque él tenía que verse tan sexy! -Cierras el biberón y lo agitas bien con las manos para que el líquido quede homogéneo.- Concluyo realizando la acción.
-Cómo es que sabes tanto sobre cómo cuidar a un niño?- dejo el biberón sobre la isla de mármol en la cocina y posteriormente cruzo sus brazos.
-Soy bueno cuidando lo que quiero- y como si la centella de algún pensamiento cruzara por su mente rectifico:-Eso trato... Llevo cuidando a Nikola desde que nació, lo he visto crecer más de lo que su padre Magnus ha hecho o de lo que Alessa (su tía, hermana menor de su madre) ha soñado, son buenas personas, son jóvenes pero sus negocios los consumen-
-Entiendo- Quería decir más pero en cualquier momento me correría -Me voy, pasare mañana por Nikola, no tienes por qué aparecerte en su colegio, ya sé dónde vive Alessandra- soné áspera pero no me importaba, el había sido lo suficientemente cruel hoy.
[Inserte aquí: Skinny Love - Birdy y repita hasta que considere]
-Infinite, espera-
-Si? Pregunte irritada recordando todo lo que me había hecho y dicho con el fin de hacerme sentir mal.
-Tu siempre quieres estar cual puta controladora sabiendo que mierda pasa a tu alrededor, llego tu turno de hablar: que te dijo Nikola- grácilmente se subió en la barra de la isla de mármol, palmeo su costado lanzándome una invitación a sentarme a su lado, su mirada se volvió incognoscible, el mar en sus ojos volvía a congelarse y la gelidez empezaba a recorrer sus venas, su mandíbula se tensaba y el dolor ensalzaba sus ojos.
-Me dijo que estas salvando leones en África y que lo llevaras a verlos- respondí tratando de evadir el tema central, por primera vez me sentía realmente insegura de las respuestas, por primera vez no quería saberlas, quería ganar tiempo para saber que responder, quería no haberle dicho: Peter Pan, así no estaría al tanto de nada de lo que se, estúpidamente intente subirme a la encimera, retardando un poco la charla, ganando tiempo para mi mente, pero el choque de temperaturas entre nuestra piel advirtió que me tomaba de la cintura subiéndome con uno de sus brazos, no tuve más tiempo para concentrarme en que pensar porque su tacto había dejado una galaxia de sensaciones en mi...
-Como sabes que me llamo Peter Pan?- lanzo sin observarme, conteniendo cada una de las conmociones que chocaban desde lo más adentro de sus ser hasta la frontera de su dermis con el exterior.
-Me mentiste...-
-Que te dijo?- Y allí lo aborrecí mas, sentí mis ojos picar. Le importaba más que me hubiesen dicho a como yo me sentía, le importaba más que sus secretos fuesen destapados.
-Eres un maldito- vocalice entre dientes sintiendo el dolor presionar a mi garganta -me mentiste sobre ti y no te importa-
-Que te dijo Nikola- Repitió como si de un mantra se tratase. Una presión en mi pecho hizo que me irguiera un poco, solo podía apretar mis hombros intentando controlarme.
-Eres un maldito traficante de drogas Schwartz- la sola frase agrio mis labios y él rio -Me dijiste que solo consumías drogas imbécil! Como es que las traficas! Como es que las repartes a esos hombres!- grite mirándolo a los ojos, sus oscuras cejas se arquearon examinándome y la risa desapareció. Su mano viajo a la parte posterior de su nuca y sus ojos se entornaron al techo, quizás buscando ayuda divina. Imposible cuando él era ateo.
-Te dijo lo de aquella noche?- no podía hablar, solo asentí -Eran las 9 de la noche, lo recuerdo- articulo gradualmente, había chispas de dolor que se prendían de su voz cual juegos artificiales en pleno 4 de julio -Ellos llegaron y Nikola se había quedado conmigo en un departamento que tengo a las afueras de la ciudad, fue una estupidez llevarlo conmigo, no había quien cuidara de él, solo me tenía a mi... esa noche le leía Peter Pan- Rio con amarga ironía - sabía que ellos vendrían por un poco de polvo de hadas pero no tan pronto y cuando las llantas de los coches chillaron supe que habían llegado, muy tarde para tratar de dormir a Nikola, él vio cuando saque el polvo y me pidió de el, sabes que es estar ocultando al crio que más quieres de unos hombres que gozan de las debilidades de los demás mientras él te pide que le des algo de droga porque quiere volar como tú, porque quiere volar como su ídolo, yo, el gran Peter Pan- otra sonrisa sinsabor rasgo sus labios -Lo escondí y entregue la droga, nunca había estado tan feliz de verlo encerrado en un armario tapando su orejas, pero yo sabía que él había escuchado, hubiera sido imposible que no escuchase algo... y allí surgió lo de los niños perdidos, le dije que era uno de ellos después me hizo gracia, como es que en el condenado infierno una película infantil podía encajarme tanto? Morí hace mucho tiempo cuando solo era un niño, esto es un círculo vicioso, no puedo crecer porque no se me ha permitido, por mi jodida rebeldía, porque ya no puedo salir de nada de esto, tampoco es como que me importe, soy un jodido arrogante vanidoso que se niega a sacar la cabeza de este hoyo- por un breve intervalo de tiempo no existió mas que el silencio a forma de sosiego, el mantenía su cuerpo desprendiéndolo de cualquier emoción lucia como una estatua: no reflejaba nada. Pero tal como una areola boreal lucecillas y sombras (en su mayoría) se alzaban por sobre su figura, estaría sufriendo? -Sabes que es un niño perdido?- objeto sin esperar a mi respuesta - Es estar sentenciado Infinite, Un niño perdido no conoce que es un hogar, no conoce del calor, solo sabe de la soledad, de vagar y disfrutar de la vanidad, deambulamos solos sin alguien que se preocupe por nosotros más que uno mismo, nunca tuvimos a alguien para nosotros y así ha estado bien... Estoy perdido Infinite, no puedo salir de este barranco, estoy vacío, estoy abandonado, mí parte humanitaria no se ha desarrollado y no supero traumas... solo conozco del frio, del olvido y de un montón de mierda que tú no necesitas, mi pecho no ha bombeado más que témpanos... no puedes pedir que cree brazas para alejarte del frio.
-Los niños perdidos... son valientes con esa rebeldía, pero profundamente cobardes- Sus labios crearon una sonrisa que apoyaba aquella frase que se terminó de escurrirse de mi boca.
-Soy un desastre Infinite y no se mas que dejar desastres, imagina que las personas que quieres pueden ser contadas con los dedos de una mano, es lo único que te queda... no sentirías miedo de perderlas? la cobardía es una borrasca que termina lanzándose al peñasco cuando levantas un altar a la anarquía y yo levante ese altar antes de que tu encantadora y atolondrada presencia chocara con la mierda que me baña-
-Me mentiste... Por qué?- Recuerdos se instalaron en mi mente, recuerdos de él diciéndome que no estaba en los negocios del bajo mundo de Los Ángeles y la rabia nuevamente broto en mi -POR QUE TENIAS QUE MENTIRME! ES QUE HAY MAS!?
-No, no hay más- Sus Flameantes ojos azules me encuadraron, el mar se agito... justo como la tormenta agitaría las agua antes de ahogar a alguien -Infinite, duerme conmigo esta noche...-
-Nikola me dijo que el amor había empezado a aparecer en tus historias...
-Lo ha hecho- Aceptó mirando al suelo.
-Que le has dicho del amor...-
-Empecé leyéndole algo que decía:
"- Amor.
- ¿Amor?
- Amor.
- No sé lo que es eso.
- Creo que sí, Peter. Seguro que tú también lo has sentido, por algo... o por alguien.
- Nunca. Hasta la palabra me revienta."
Y entonces termine con: «Te ahogarán de una forma bonita si te acercas a ella» sé que algo ha cambiado Infinite y me aterra saber que es...
-Juras que no hay más?-
-Ningún secreto igualara a la mierda que encierro dentro-
-Juras que no hay más secretos?-
-Dormirás conmigo esta noche?- preguntó jugando a: forcemos al otro a responder primero.
-No vas a venir con tu sonrisa bonita y tus ojos cautivadores a tirar por la borda toda la ira que siento por cada cosa que hiciste para lastimarme, por tirar mi celular con aquella horrible palabra mientras besabas a Deborah y se reían de mi bajo mi ventana, por follarte a Amber a propósito, por mentirme tan fácilmente como respirar, por insultarme y tratarme mal cada que se te presento la oportunidad, por abandonarme en New york, por dejar que me fuera sin preocuparte por que me pasaría, ni siquiera tenía zapatos Schwartz! por gritarme y tratar de lastimarme fuertemente, por verme como un juego, porque a decir verdad nunca te importe- Solo ahora que lanzaba a su cara cada una de las cosas que él había hecho contra mí, podía realmente darme cuenta de cuánto daño me estaba causando, de cuantos problemas me estaba generando y de cuantas fallas cometió, esto realmente pesaba -Adiós- con un salto me baje de la mesa de mármol y antes de atravesar la estancia en un hilo de voz lo escuche hablar.
-En un momento me preocupe Infinite, no sé si me importas... no sé cómo se siente eso, siempre he tenido que preocuparme solo por mí, no por alguien más, no de esa manera...-
-QUE SOLO EN UN MOMENTO TE PREOCUPASTE POR MI?!- Alce los brazos no dándole crédito a lo que escuchaba -SOLO TE "PREOCUPASTE" UN MOMENTO! CUANDO YO ESTUVE VAGANDO DESCALZA EN UNA CIUDAD QUE NO CONOCIA! No puedo con esto Schwartz, no seas tan cínico, cuando descubras si te importo espero que no sea demasiado tarde-
*
Mi cerebro había estado sobre cargado, no podía procesar ninguna de las palabras que Schwartz me había dicho, había sido demasiada información para mi... tal vez no lo fuera, tal vez solo quería no devanarme los sesos en cosas que no me darían respuestas, caminaba por los pasillos, cual Zombie mi vida había estado en una montaña rusa desde que el espectro de Matthew se había ceñido sobre mí, la universidad esta revuelta, hoy los Cardinal (equipo de futbol americano de la universidad) viajaban a el estadio que Stanford tenía en San francisco, Schwartz era el Mariscal de campo o Quarterback lo que lo hacía poseedor de la posición más importante y la sola presencia de él en el equipo hacia que tuviera las apuestas a su favor en un vara alta, todos confiaban en él y en que trajera el trofeo a casa, su rival: la UCLA [Universidad de California en Los Ángeles] este era el primer año del peli negro jugando para nuestro equipo y las rachas pasadas se vieron opacadas por los consecutivos triunfos de la UCLA sobre Stanford, con Schwartz en la ecuación el futuro de los cardinal lucia prometedor.
Podías sentir las vibras de agitación en el aire y yo solo estaba preocupada por ir a donde John Hennessy (Nuestro rector) Para que arreglaran mi ventana, por más que tratase de no pensarlo el recuerdo se instauro en mi cabeza, él quería que yo lo acompañara en ese partido al que debía viajar a San francisco y del cual no regresaría sino hasta el fin de semana, él me había obsequiado la camiseta con la que jugaba futbol Americano, quería que yo la usara ese día. "él, él, él, él. Nunca le importaste!" Reclamo eufóricamente mí conciencia, suprimí cualquier pensamiento apresurando mi caminata hacia Bárbara, la secretaria de John.
-Hola puedo pasar a ver a el Director?- Pregunte a la pechugona mujer que tenía por recepcionista.
-A ti fue a quien le quebraron la ventana de su habitación?- Interrogo en respuesta la pelinegro
-Si, a mí, como lo sabes?-
-Schwartz estuvo aquí más temprano, antes de que tuviera que ir a la práctica del equipo con el entrenador, le conto a el Rector sobre tu ventana y ya se hizo un pedido a Santa Mónica, traerán el vidrio esta tarde- Bárbara metió un esfero a su boca y por unos instantes me examino -Eres su novia?- al captar la frase que había dicho se rio con una de las risas más molestas que jamás escuche -Ay que tonta disculpa mi intrusión, no puedes ser su novia, él ni siquiera tiene novias-
-Eso es lo que tú no sabes- reí de vuelta como si realmente escondiera un gran secreto del que ella se perdía, no yo no era la novia de Schwartz pero borrarle la sonrisa de la cara fue hermoso.
Retorne mi marcha por los pasillos, quería ir a mi dormitorio a descansar para mi suerte los miércoles tenía pocas horas de clase así que ya podía marcharme a una buena siesta, iba a girar por una esquina cuando un murmullo capto mi atención, por alguna razón los niños pijos de la Universidad siempre estaban hablando en voz medianamente alta, sus risas se escuchaban intensamente, pero algo me decía que eran risas falsas era un tipo de fachada: nosotros estamos divirtiéndonos a cada rato, vivimos la vida, somos lo mejor que ha pisado esta universidad y tú no puedes sentarte con nosotros.. ohhh pero Deborah Cusnier bien que se sentaba en las piernas de Schwartz quise desaparecer antes de que notaran mi presencia pero los aprisionantes ojos del inmoral chico me capturaron, sin chistar se levantó del asiento haciendo que la rubia se estrellara de rodillas contra el piso, no se inmuto por mirarla pero el estruendo y las risas de sus acompañantes eran (además del hecho de que él tenía claro que la había hecho caer) prueba de que ella yacía en el suelo en posición animal (en 4) la chica levanto la mirada buscando respuestas al repentino actuar de Matthew y entonces fue el turno de sus llameantes ojos de chocar con los míos, como si un barco se hundiera y Schwartz fuese el único salvavidas la rubia se engancho más rápido de lo que callo al torso del alto chico, sonreí viendo como ambos me miraban y unos segundos después de que la ronda de besos entre ellos empezara me marche, él no se alteró y respondió efusivamente cada uno de sus toques
Ya me estaba acostumbrando a que el pecho se me comprimiera un poco con cada conducta hiriente de Schwartz, había recibido un mensaje de Alessandra informándome que esta noche llegarían temprano a casa y por temprano nos referimos a: 10 de la noche. Tal como se lo había pedido, Matthew no apareció hoy en todo mi día, no después de ver como se devoraba delante de todos a Deborah o como la Devoradora de hombres se lo devoraba a él. Supuse que él debía estar ya en San francisco, hoy debía salir su vuelo, no quería más dolores de cabeza y para mi buena suerte en la tarde otra maestra fue la que acompaño a Nikola hasta donde yo estaba así que no tuve que ver a Amber, probablemente el cielo se apiadaba de mí.
-Isabella, mañana en la mañana viajaremos con Nikola a San francisco, el monstruo (como cariñosamente Alessa llamaba a Matthew) juega su primer partido con Stanford y sus padres son dueños de una parte del estadio así que estamos invitados, no será necesario que vengas a cuidar a Niko, el realmente te quiere, estamos felices de tenerte y quiero una salida de chicas!- indicó Alessa apuntándome con su dedo, Magnus la tomo por la cintura acercando el cuerpo de la rubia contra su pecho, Dios ellos si se amaban
-Si quieres puedo llevarte a tu casa, para mí no será un problema- hablo esta vez Magnus.
-Gracias, pero no será necesario, tomare un taxi y Alessa también espero esa salida de chicas- sonreí despidiéndome y la muy cariñosa mujer me abrazo
-Cuídate hermosa-
-Igual Alessa, hasta luego Magnus-
Salí de la mansión y decidí caminar hasta encontrarme con un taxi, iba sola y ya me lamentaba por haber rechazado la oferta de Magnus, tenía los nervios a flor de piel no había nadie a fuera de las casas solo autos y uno de ellos particularmente llamo mi atención, debían ser psicosis mías pero podía jurar que la camioneta de vidrio polarizado me seguía, camine cruzando la calle y nuevamente me regañaba a mí misma por no haberle dicho que si a Magnus Ferragamo, los taxis no solían visitar este acomodado sector de la ciudad, así que tendría que caminar mucho para encontrar uno, la camioneta ralentizó su marcha y sin previo aviso acelero, sabía lo que venía: me iban secuestrar.