Algo no estaba bien.
Eso es lo primero en lo que Baekhyun pensó al presenciar —o al no hacerlo— la ausencia de Kris. Después de todo él había dicho que no lo vería al día siguiente, pero, después del siguiente, y el siguiente... Y el siguiente día, Baekhyun quiso preocuparse.
Lo peor es que Baekhyun ni siquiera sabía dónde vivía el mayor y no podía ir a averiguar directamente a su casa a saber qué es lo que pasaba. Aunque bien, podía ir a su trabajo... Pero no le parecía correcto. Después de todo ¿Baekhyun quién era para preocuparse?
Decidió hacer como si nada pasara, a pesar de que Minseok había preguntado ya varias veces por el oficial y había comentado acerca de como las cosas parecían poco interesantes sin él.
Baekhyun creía lo mismo, así que sólo asintió.
Aparte, seguro Kris tendría demasiado trabajo que hacer como para tomarse el derecho de holgazanear; así que Baekhyun también, sólo se puso a trabajar y no a perder el tiempo en cosas que parecían obvias.
* * * * *
ㅡ¡Baekhyun! ¡Mousse, mousse, mousse! ㅡllegó Minseok gritando a la cocina con una hoja en la mano. Agitó la hoja en la cara del castaño, mientras éste alzaba la mirada y veía cómo su compañero sonreía ampliamente.
ㅡPero hoy no hay mousse, hay 'tentación de chocolate' ya sabes. ㅡrecalcó, mientras que con su mano apartaba la hoja que mostraba Minseokㅡ. O bien, puedes dar la opción de beignets de manzana.
El mayor hizo una mueca a la sugerencia que dio Baekhyun y negó con la cabeza junto a una sonrisa disimulada.
ㅡHas de suponer que esto es distinto. ¡Mousse! ¿No sabes?
Baekhyun frunció el ceño a las supuesta aclaración de su amigo —muy confuso, conciso, y no entendía— y tomó la hoja que Minseok sostenía para así darle un vistazo rápido.
Mousse de cereza.
Sólo una idea cruzó por su cabeza—una que significaba más o menos a ansiedad, haciendo que formara una sonrisa de labios cerrados. Minseok aún lo observaba, esperando.
Esperando una respuesta.
ㅡ¿Quién? ㅡpreguntó Baekhyun en un tono demasiado emocionado para su gusto. De inmediato se aclaró la garganta y agitó el papel una vez más al ver la ceja enarcada del mayor.
ㅡBueno, en realidad me lo ha dado alguien a quien no había visto antes ㅡrespondió Minseok, frunciendo los labios un poco después al no estar tan consiente de lo que prosiguió a decirㅡ. Pero, tú y yo sabemos ¿no? ㅡinsinuó con una mirada y una sonrisa divertidaㅡ. Kris no ha venido hace unos días cuando sabemos que él ni siquiera puede salir de aqui, o al menos no puede estar sin comer uno de tus postres brincándose el almuerzo que nuestro jefe euforicamente le ha ofrecido algo asi como V.I.P. así que ¿tú que crees?
Baekhyun vio la hoja una vez más como si ésta fuera sospechosa y luego miró de nuevo al mesero.
ㅡ¿Tú crees?
Minseok negó.
ㅡNo, tú crees ㅡafirmó encogiéndose de hombros, sabiendo exactamente que ni él estaba seguroㅡ. Pero, ¿quién más? Aparte aquel señor dijo que vendrían a recoger la tarta en la noche. Ya sabes, eso lleva tiempo ¿no?
Baekhyun asintió y dio un largo suspiro. ¿Qué más podía hacer? Aparte, si era para el oficial —si de verdad era así— entonces no le pesaba tanto, asi que hizo un ademán con la mano a Minseok afirmando que ya lo comenzaría a hacer y comenzó a acomodar su delantal, preparándose como todo un buen repostero de un gran establecimiento—de un importante restaurante que se hacía llamar “La Gran Cafetería”, y como así, todos la veían.
* * * * *
Cuando Baekhyun terminó de preparar el mousse de cereza ya era un poco tarde. Después de eso, esperó aun más hasta que llegó la media noche y supo que no vendría nadie por él. Así que guardó el postre en el refrigerio para ver si al día siguiente alguien lo recogía.
Ciertamente, Baekhyun se encontraba un poco decepcionado; pensando —al igual que Minseok— que quizá Kris hubiera hecho el pedido, ya que a nadie más se le preparaba un postre que no estuviera en el especial del día, y mucho menos hacían pedidos. Baekhyun también estaba un poco triste, porque también extrañaba un poco más al oficial. Y respecto a sus sentimientos hacia el mayor, prefirió ignorarlos como la primera sensación que éste le había provocado —todo él lleno de perfección y sonrisas encantadoras— ahora sólo podía dar un largo suspiro y cambiarse de ropa para ir a casa y descansar aunque sea un poco.
Cuando Baekhyun intentó salir del establecimiento, se dio cuenta que su compañero no le había dejado llaves, y que sí, Minseok ya había cerrado sin acordarse de él.
«Seguro tenía algo importante que hacer y no se acordó», se dijo a sí mismo, bufando un poco después. Pensó que sólo le quedaba una sola opción si queria irse.
Se dirigió de nuevo a la cocina y sacó unas llaves de un cajón. Se dirigió a la puerta trasera de ahí mismo, dando un vistazo antes por la ventana, viendo que todo estaba muy oscuro para su gusto. Si bien recordaba, esa puerta lo dirigiría a un callejón donde nadie transitaba y que por su bien, nunca había salido por ahí. Dio otro rápido vistazo y se resignó a abrir la puerta y salir con cuidado para no tropezar con nada. Cerró la puerta de nuevo y miró a sus costados, entendiendo que para salir de ahí, tenía que rodear un gran tramo para llegar a la calle principal. Caminó despacio por el callejón, apreciando el silencio de la noche... Eso, sólo hasta que caminó un poco más y escuchó algo parecido a murmullos. Se detuvo en seco y entornó los ojos, tratando de distinguir si había alguien o algo más allá de la oscuridad. Apenas pudo ver un destello, algo parecido a una linterna, y más murmullos de personas que parecían molestas.
Baekhyun sintió sus rodillas temblar, sin embargo, caminó un poco más, con más cuidado, con más cautela para no ser visto de quién sea que se encontrara ahí. Al estar cerca del destello, se obligó a acercarse a unas escaleras de emergencia de un edificio y esconderse tras éstas sin saber exactamente qué hacer. Al ver unas siluetas cerca de él, se agachó en su lugar, tratando de agudizar su oido y saber que decian —buscar la oportunidad para salir de ahí lo más rápido posible— pero, al lograrlo, algo incómodo y amargo se amontonó en su estómago.
ㅡAsí que lo harás, eh. Bien, entonces suerte. Pero te diré algo. ㅡHubo una pausa demasiado larga y Baekhyun pensó que se podían estar alejando, pero cuando vio entre el espacio que había entre los peldaños de la escalera, vio una silueta delgada acercándose a otra -igual de delgado pero el sujeto era más alto- y mejor se mantuvo en su lugar sin hacer ningún ruido temiendo que hasta su respiración la pudieran oir. Baekhyun había entrado en pánico, sin evitarlo, al ver al más bajo de aquellos dos tomar al otro de su ropa y jalarle con rudeza, parecía querer intimidarle. El más alto no hacía nada, no parecía querer defenderse.
Baekhyun se arrodiló en el suelo, temiendo -por la escena frente a él- a que uno de los dos se acercara tan solo unos pasos más y lo viera. Aparte, el chico rudo había estampado al otro contra la pared, y éste había girado la cabeza -evitando la cercanía de su rival- y ahora sí que podría ver a Baekhyun, ya que había girado al lado donde se encontraba.
ㅡ...Si algo sale mal, y tú caes... Yo me encargaré de que desaparezcas y no haya prueba de nada para la policía. Tú decides. Arriésgate, pero ya sabes. Te borraremos a ti... Y al chico, y a todo aquel que se involucre. Aquí no nos podemos equivocar. Ya ves lo que pasó con... Tu hermano ㅡescuchó Baekhyun. Lo último dicho en un tono de burla y advertenciaㅡ. Si quieres jugar, atente a las consecuencias. Esto es un juego donde si ganas, bien. ㅡdijo, soltando al más alto pero sin alejarse un centimetroㅡ. Pero si pierdes, pierdes. Y pierdes, muriendo.
Baekhyun tembló. Le parecía tan desagradable esa escena. Él no tenía nada que decir al respecto, claro estaba, pero él quería decir algunas cosas, porque le molestaba ese tipo de personas. Pero no quería arriesgarse. Aun así, no podía ver nada con claridad, no podía asegurar nada, sin embargo, sabía, y estaba casi seguro que ahí sucedía algo que no debería pasar —que estaba mal, y que él debería hacer algo, lo que sea— y pudo ver algo que el más bajo tenía en la mano y que antes no había visto, entonces, se asustó más, soltando algo así como un quejido por la sorpresa al distinguir un arma. Pero, su respiración se esfumó al notar una mirada sobre la suya. No la veía pero la sentía y recordó que anteriormente solo podía sentir la mirada sobre él, así, en una persona —una persona que ni siquiera era de su agrado— y supo que desde aquel lugar, se podía apreciar donde él estaba, aunque él, ahí, no viera ni su sombra. Al poder saber quien lo observaba, todo su cuerpo se tensó y el miedo se hizo mayor, aunque un leve sentir de alivio se encontraba en el fondo de sus sentires.
Y no sabía que hacer
ㅡYa entendí, ¿de acuerdo? ㅡrespondió el más alto, su voz confirmaba su identidad, según Baekhyun, y su mirada aún estaba en dirección al él y parecía tranquilo al hablar. Ni siquiera parecía afectado por las palabras de su acompañante.
ㅡBien. Toma en cuenta que no me detendré ni porque seas mi amigo.
ㅡLo sé. Lo más importante eres tú y tu familia ㅡmencionó el otro con iróniaㅡ. Asi que me arriesgo.
ㅡTú sabrás ㅡFue lo último que dijo el otro y después encendió una linterna que mantenía en su mano contraria a la que tenía el arma, y, tras dar un último vistazo al más alto, comenzó a alejarse y dar la vuelta en el final del callejón -donde Baekhyun quería llegar con urgencia- dejando al más alto solo. Éste, dio un vistazo al lugar donde el otro se había ido, y al ver que desaparecía, dio un bufido y se giró de nuevo a donde el más bajito se mantenía escondido. Dio un paso al frente y Baekhyun sintió algo extraño, queriendo salir corriendo, pero a la vez temiendo a que aquel chico lo alcanzara y le hiciera daño.
Y en ese momento, sólo un nombre se le vino a lamente. Kris.
ㅡ¿Qué haces ahí? ¿Buscas algo? ㅡdijo el más alto. Baekhyun sintió su garganta seca, evitandole responder. Aparte, no sabía qué responder, aunque él no tuviera la culpa de haber escuchado conversaciones que no le correspondían, amenazas que no le debieron haber importado. Iba a responder después de un momento relativamente largo, pero fue tan lento en hacerlo que el otro se dio la vuelta y se fue por el mismo lugar que antes había tomado su amigo.
A Baekhyun le tomó un par de minutos para incorporarse y tocarse el pecho, su garganta. Ni siquiera se atrevía a decir una palabra.
* * * * *
Cuando Baekhyun llegó a su trabajo al día siguiente, se sentía cansado, demasiado. Apenas y podía preparar algunos postres, pero con los movimientos más lentos que pudiera hacer en otras ocasiones. Ni siquiera había podido dormir bien y ya le comenzaba a doler la espalda. Fue a la cocina continua y pidió a uno de los chicos de ahí que le prepararan un café, aclarando que si no tenía uno, posiblemente se dormiría sobre un montón de harina y chantillí. Un chico de sonrisa amable se lo preparó y Baekhyun agradeció con una cansada sonrisa.
Regresó a su cocina —donde solo él trabajaba y que a veces se sentía solo a excepción de que Minseok iba seguidamente— y se sentó en una silla que parecía cómoda. Tomó su café sin percatarse de nada, aunque fue un fuerte golpe en la parte trasera de la cocina lo que le hizo dar un respingo y tirar un poco de su bebida a su pantalón. Chasqueó la lengua al ver la pequeña mancha que había ocasionado y dejó el café a un lado, parándose de inmediato a ver qué había pasado. Al rodear la mesada y acercarse un poco, se detuvo, estático al ver la alta silueta que estaba frente a él, el chico con el pomo de la puerta en la mano y su pie atorado en uno de los tantos cables que había tirados ahí y que Baekhyun se había olvidado de recoger cuando Minseok los había dejado ahí. Pero no se preocupó por eso.
Chanyeol estaba ahí, y quién sabe cómo había forzado la puerta a abrirse.
Seguro tenía algo que decir al descubrirlo la noche anterior, bajo unas escaleras de emergencia, escuchando por accidente conversaciones ajenas.
Aunque ahora mismo parecía muy frustrado al tener su pie enredado en los cables.
Chanyeol alzó la mirada, viendo al castaño con una mueca extraña.
ㅡ¿Podrías ayudarme?