—¡Buenos días solecito! - entró a la habitación del pecoso siendo ruidoso y dándole golpes a la puerta.
—¡Han Jisung! - se quejó, cubriéndose con las sábanas.
—Ay lo siento, ¿Estás amanecido? ¿Resolviste hasta tarde? - se tiró encima del rubio y quitó la sábana de su cuerpo. —¿¡Donde has estado estas dos noches Lee?!
—¡Haciendo algo! - sacó al moreno de encima y volvió a cubrirse con las sábanas.
—Lee Felix - el nombrado soltó un suspiro cansado. —IN y yo terminamos - e inmediatamente quitó la sábana de su cuerpo y se sentó con evidente preocupación.
—¿Estás bien? ¿Que pasó? Todo iba bien
—Los dos lo decidimos - alzó los hombros, se veía deprimido. —Nos dimos de cuenta de que nos gustamos pero las personas que hay de por medio lo interrumpen
—¿Quién está de por medio? Que yo sepa los de aquí aceptamos esta relación
—Minho y Changbin - soltó. Volvió a suspirar y se tumbó en la cama del pecoso. —Me gusta Jeongin pero amo a Minho - levantó su dedo índice de su mano izquierda. —Jeongin está enamorado de mí pero ama a Changbin - levantó el dedo incide de su mano restante.
—¿Hablaron de ellos?
—Están aquí y saben dónde vivimos así que - miró al pecoso. —Hyunjin pronto vendrá
—Sobre eso - arrascó su nuca algo nervioso.
—Lee Felix - se sentó aún mirando al nombrado. —¿Qué no me has dicho? - alzó una ceja.
—Bueno - se quedó unos segundos en silencio. —Me arreglé con Hyunjin hace dos días - soltó, esperando algún tipo de insulto, o las palabras de decepción del moreno.
—¿¡Y me lo ocultas?! ¡Con razón no llegas a casa! - se hecha a reír. —¿¡Qué han estado haciendo par de desesperados?! - dijo riendo.
—¡Nada de eso! - negó rápidamente con el sonrojo en sus mejillas. —No hemos ni pensando en eso
—Mmm, ¿Entonces que?
—Solo hemos estado muy cariñosos - sonrió embobado, realmente le gusta Hyunjin. —El es tan lindo
—Ay Dios - hizo una mueca de asco, haciendo que Felix rodeara los ojos.
—Ridículo - rió junto al moreno. —Entonces, ¿Hablaras con Minho? - volvió a acostarse junto al moreno, este acurrucándose en su pecho.
—No sé ni qué hacer, creo que lo mejor sería hablar con él pero - soltó un suspiro. —No sé
—Te complicas la vida Jisung, si te gusta habla con él, no es tan difícil - el moreno miró a Felix con una pequeña sonrisa en su rostro.
—¿Juntarte con Hyunjin te hizo maduro? - rió por el bufido de su amigo y luego se levantó de la cama. —Bien, hablaré con el - sin más salió de la habitación para prepararse.
De nuevo estaba en el hotel, esta vez decidido a arreglar todo con Minho porque Felix tenía razón, se complicaba mucho la vida con sus propios pensamientos. Caminaba por los pasillos del lugar en dirección a la habitación de Minho y al estar a solo pasos de ella, vió a Seungmin salir de ella.
Sus miradas conectaron al instante y juro ver fuego en los ojos del castaño.
—¿Para qué vuelves? - dijo. —¿No te cansas de hacerlo sentir mal?
—Seungmin no intentes formar alguna discusión, no saldrás bien de ella - claro está, el castaño no sabe en lo absoluto sobre el encuentro que tuvo Jisung con su esposo.
—Ya basta de lastimarlo Jisung, él no merece esto - el nombrado miró a Seungmin, lo analizó por unos segundos y lo ignoró. Se adentró a la habitación del pálido cerrando la puerta detrás de el.
Minho destapó su cabeza de las sábanas para ver quién era y al ver a Jisung se sentó rápidamente en la cama.
—¿Intentabas dormir? - se acercó al mayor.
—Intentaba
—Minho me gustas - soltó sin más rodeos. —Quise tenerte lejos pero simplemente no puedo, quiero estar contigo
Minho, con un leve sonrojo en sus mejillas se puso de pie y se acercó al menor. Esperó tanto esto que no quiere preguntar qué cambió, solo quiere estar con Jisung y listo. Es lo que deseó desde el momento en que se fue.
—Pero no me quiero ir - dijo en un pequeño susurro.
—No - negó rápidamente con la cabeza, tomando el rostro del menor entre sus manos y acariciando sus suaves mejillas. —Haremos la vida que quieres, tú y yo, tu hermano, tus amigos, mis amigos. Todos, tendrás la vida que quieres
La pequeña sonrisa que se dibujo en el rostro de Jisung fue relajante. Sus labios se unieron formando un lindo beso, uno donde se veía a clara vista lo mucho que se habían extrañado.
Chat de Jeongin.
(...)
—¿No piensas irte de aquí? - preguntó el moreno, entrando de nuevo a la habitación donde se quedaba Minho luego de haber salido a comer con el pálido.
—Estoy esperando que me aprueben la casa que compré - quitó su chaqueta y fue a sentarse en su cama.
—Mm, ¿Y Changbin? - se sentó a la par del pálido.
—No sé, creo que fue a ver a Jeongin - miró al moreno. —Comenzaré con una empresa, mañana iré a hablar con un socio para que me deje mitad de la empresa
—Me dices cómo te va - sonrió con un tanto de emoción.
Miró la hora en su teléfono y se levantó. —Ya debo irme Min, te diría que te quedes conmigo pero - miró al mayor. —No hay espacio
Sonrió, tomó a Jisung de la cintura y lo sentó sobre sus piernas a horcajadas para darle un beso. El menor continuó el beso, rodeando el pálido cuello con sus brazos.
Extrañó tanto sus labios que podría quedarse horas besándolos sin problema. Sentir los cortos suspiros que soltaba el menor se sentía bien de una manera extraña. Su vientre sintiendo cosquillas, sus mejillas calientes.
Jisung lo hace sentir tan, tan bien.
Poco después se separaron para poder recuperar la respiración. —Me están esperando Min - dijo sobre los labios del contrario.
—Unos minutos más - dejó otro corto beso sobre los labios del menor haciéndolo sonreír.
Volvieron a unir sus labios en un beso más apasionado. Las manos del mayor sosteniendo la cintura del contrario y dando pequeños apretones de vez en cuando.
El teléfono de Jisung comenzó a sonar haciendo que se separen del beso, miró la pantalla de su teléfono y quien lo llamaba era Beomgyu. Miró al pálido con una leve sonrisa.
—Aún no - volvió a besarlo.
—Me están esperando - apenas pudo decir entre besos.
—Te extrañé Jisung, solo unos minutos más - se dió la vuelta, dejando al menor debajo de su cuerpo y volvió a besarlo.
—No más de diez minutos - dijo después de volver a alejar al pálido.
Con diez minutos se conforma, volvió a besarlo y esta vez dejando que sus manos exploren dejaba de la camisa del moreno.
Extrañó absolutamente todo de Jisung y quiere volver a sentir todo de él. Sus besos, caricias, escuchar sus tiernos y lindos ruidos.
Jamás se cansaría de escucharlo.
Lo ama. Ama escucharlo y ama ver su intento de callarse y no ser ruidoso.
Incluso volver a juntarse con Minho fue inesperado porque llegó a pensar que estaría con Jeongin toda su vida. Ahora viendo como ha progresado su vida —ya cuatro años desde que se fue de Corea—, todo ha ido de maravilla.
Minho comenzó su empresa sobre moda, se llegó a dar cuenta lo mucho que le gustaba diseñar vestidos, crearlos con las mejores fábricas y venderlos era mejor.
Changbin y Jeongin se juntaron luego de casi nueve meses. Jeongin se había dado cuenta de lo enamorado que estaba del musculoso y habló con él sobre eso, dos semanas después ya era novio oficial de Seo Changbin.
Felix y Hyunjin habían rentado un pequeño departamento para ellos dos solos ya que querían su espacio personal. Una relación hermosa entre ellos que cualquiera llegaría a envidiar y querer destruir. Dos años de ser novios y Hyunjin ya le había pedido matrimonio, y claro que Felix aceptó.
Beomgyu y Yeonjun había progresado igualmente en su relación, ambos habían abierto una tienda de ropa y joyas. Y con el pasar del año Beomgyu comenzó la universidad junto a Yeonjun.
Christopher se había mudado igual y estuvo quedándose con Minho hasta que consiguió su propia casa y se fue a vivir con su esposo. Al final la verdad de que Christopher y Jisung habían tenido sexo salió a la luz pero Seungmin quiso dejarlo todo atrás, eso fue en el pasado y está consiente y seguro de que su esposo jamás le volvería a fallar.
Y luego está la relación de Jisung y Minho. Perfecta relación, la que tantos quieren. Confianza extrema y sin problemas, si algo les hace sentir mal lo dicen al instante y buscan opciones para mejorar la situación. Jisung ya graduado como psicólogo de la universidad, buscó un trabajo que tenía que ver con la psicología y le va de maravilla.
Gana bien, bastante como para poder mantener las deudas de la casa al día y que le sobre dinero para sus propios gustos, y sin tener que vender su cuerpo.
Dejó su pasado atrás, enterró a su padre en el. Nunca ha recibido una llamada de él o mensaje, no sabe de su padre y eso no le molesta en lo absoluto.
Lo que le importaba estaba a su alcance. Sus amigos, su pareja, su trabajo, su casa. Todo a su alcance.
Ama la vida que tiene, no se queja, ¿Por qué lo haría? Si estaba viviendo lo que tanto soñó. Tiene todo lo que deseó y no lo cambiaría por nada, ni por millones de dólares.
—FIN—.
NOTAS;
Espero que les haya gustado esta historia y déjenme decirles que ya tengo la idea de la siguente 😻.