Caballero de compañía(Toji Fu...

By ItsMedusa96

14.4K 1.4K 245

Una historia con Toji Fushiguro. ⚠️Prohibida su adaptación. ⚠️Contenido explícito, lees bajo tu propia respon... More

Sinopsis.
Capítulo 1.
Capítulo 2.
Capítulo 3.
Capítulo 4.
Capítulo 5.
Capítulo 6.
Capítulo 7.
Capítulo 8.
Capítulo 9.
Capítulo 10.
Capítulo 11.
Capítulo 12.
Capítulo 13.
Capítulo 14.
Capítulo 15.
Capítulo 16.
Capítulo 17.
Capítulo 18.
Capítulo 19.
Capítulo 20.
Especial; 20 capítulos.💫
Capítulo 21.
Capítulo 22.
Capítulo 23.
Capítulo 24.
Capítulo 25.
Capítulo 26.
Capítulo 27.
Capítulo 29.
Capítulo 30.
Capítulo 31.
Capítulo 32.
Capítulo 33.
Capítulo 34.
Capítulo 35.
Capítulo 36.
Capítulo 37.
Capítulo 38.
Capítulo 39.
Capítulo 40.(Final)
Especial de final y datos extras.

Capítulo 28.

126 24 1
By ItsMedusa96

Caminó a pasos rápidos por el pasillo de aquél hospital y lo único que sus ojos azules buscaron, fueron a su mejor amiga.

¿Dónde diablos estaba Hana y porqué había llegado a parar al hospital?

No entendía absolutamente nada pues desde que llegó al hotel, había sido avisado de que Hana se encontraba en tal lugar. Ni siquiera lo dejaron poner un pié en el suelo cuando sus padres le mencionaron que su novia estaba internada.

[Satoru no podía creerlo.]

¿Acaso aquél tipo tenía algo que ver con ésto?

Eran pensamientos que no quería tener que creer, odiaba con todas sus fuerzas que Hana se haya fijado en alguien como él, ¿Por qué tenía que buscar los sucios brazos de un prostituto?

El rostro de Satoru se tensó por la frustración de batallar con su propia mente, su mandíbula estaba marcada y después de dar varias vueltas buscando su destino, al fin pudo encontrar la habitación de Hana.

La puerta se abrió de repente y verla recostada en aquella camilla mientras platicaba con su padre, lo hizo suspirar de alivio.

Tanto Hana y Nanami voltearon hacia su dirección, él se miraba demasiado alterado, traía consigo las mejillas coloradas y su respiración estaba agitada.

—¿Qué haces aquí, cariño?

—¿Estás bien? ¿Que fué lo que sucedió? —Satoru ni siquiera saludó a Nanami, había ido directo a Hana para poder tomarla de las mejillas y ésto demostró al señor Kento, que Satoru había estado muy preocupado por ella— No debí dejar que ese tipo te...

—Primero que nada, saluda a mi padre —le dijo tomando sus manos para poder tranquilizarlo, Satoru se sonrojó de inmediato, Hana se miraba muy bien así que supuso que solo había sido algo inofensivo.—

—Es un gusto verte, Satoru...—saludó Nanami poniéndose de pié, listo para poder ir en busca de algo a la panadería y así aprovechaba también a hacer una llamada importante— Voy a retirarme un momento, necesito hacer una llamada.

—Te amo, papi.

—Y yo a tí, bebé.

Hana sonrió con las mejillas teñidas en carmesí, Nanami le había dado una última mirada antes de caminar en dirección a la salida.

Por otra parte...

Satoru no borraba aquél semblante lleno de preocupación, había estado hablando con los chicos esos días y no habían podido recibir alguna señal de Hana.

Suguru había sido el más afectado pues Hana le había prometido jugar en sus tiempos libres, no era normal para él pelinegro tomar a Hana como una irresponsable ilusionista. Ella no era de ese tipo, se conocían desde hace 7 años y Hana jamás había sido una chica majadera pese a estar en un puesto bastante grande en la sociedad.

—¿Vas a decirme qué pasa? —él había tomado asiento dónde hace un instante Nanami se encontraba platicando con Hana. Ella había estado bastante shockeada por lo que había pasado, incluso Itadori Choso se había tomado el costo de decirle toda la verdad... A Hana eso le causó tristeza, le dolió saber que no quiso hacerse cargo de ella pero por otra parte, agradeció rotundamente que Nanami haya tomado su lugar— ¿Recuerdas cuando dijimos que no nos ocultaríamos nada sin importar la circunstancia?

—Solo tuve mis días rojos... Nada más.

¿Días rojos? Satoru observó detalladamente el cómo Hana se sonrojó al extremo, la pelinegro sintió vergüenza comentar de eso pero tanto Shoko y los chicos, sabían que Hana solía caer enferma sus primeros 2 días de menstruación.

Por un instante le dió algo de gracia, ¡Ella se encontraba bien! Fué lo único que le importó, pero...

¿Por qué había dejado de comunicarse con ellos por casi 4 días?

—Lo siento, pero eso tengo que contarlo con Suguru y Shoko presente —musitó al verlo apoyarse con cuidado a su lado, él se miraba muy bien... Satoru siempre se miraba muy bien y le sorprendía saber que gustaba de un chico, a sabiendas que tenía a casi toda la universidad sobre él siendo el crush millonario que toda mujer desea. Satoru ya se sentía listo de gobernar la empresa de sus padres y una vez haciéndolo, podría al fin hacer lo que él quisiera— Tranquilo, ya me siento mejor.

—Le debes una disculpa a los chicos, fueron los que más sufrieron al no saber de tí —Hana se sintió culpable, solamente que caer en una inmensa tristeza dónde te encadenaba la ansiedad y la soledad era algo de casi perder la cordura. Habían golpeado a Toji de forma injusta y no podía ni siquiera escuchar el nombre del culpable... Hana no quería saber nada sobre Itadori Choso— Llamaré de ellos y les comunicaré que estás bien, mis padres están en el hotel L.V así que tú y yo, tenemos una cita ésta noche...

Hana hizo puchero, ¿Salir junto a Satoru? No le molestaba para nada, lo que le molestaba era buscar la ropa adecuada para poder usar esa noche y demostrarle a sus padres que ella era la novia perfecta.

—Sé que es una tortura, pero lo tomaré como una disculpa a no haber sabido de tí por varios días —Hana lo miró con resentimiento, cosa que a Satoru lo hizo sonreír. ¡La había extrañado! Estaba tan acostumbrado a su compañía que era horrible tener que viajar junto a sus padres y no verlos hasta por meses— Te amo, Hana... Mi única prioridad es que tú y los chicos siempre se encuentren bien.

...

Los observó platicar entre murmullos y ya casi comenzaba a aburrirse.

Toji había llegado hace casi 1 hora y ni siquiera podía ver a Hana todavía. El reloj en Mónaco marcaba las 6 de la tarde y en 40 minutos aquellos grandes empresarios, debían asistir a una cita muy importante.

Pero primero debían tener en claro alguna cosas, cosas que definitivamente podría ayudarlos a quitarse de encima a Naoya Zenin.

—Tu cuerpo...—habló Choso primero mientras lo observó lentamente de pies a cabeza, Toji iba vestido algo informal pero se miraba muy bien pese a no llevar un saco de marca Louis Vuitton cubriendo sus hombros(en éste caso como al gran señor Itadori Choso)— Mis hombres mencionaron que tu cuerpo no tiene tatuajes...

—No, no tengo los tatuajes de la organización Zenin porque pude huir de ellos cuando apenas tenía doce años —respondió con el entrecejo levemente fruncido, ¿A dónde rayos querían llegar? ¡Él deseaba ver a Hana!.—

—Si huiste de los Zenin, como es que Naoya al ser hijo de Naobito, ¿Llegó a tener el mando que te correspondía a tí? —Toji hizo una mueca, él no quería estar ahí pero si su plan seguía yendo al pié de la letra, probablemente descubría el porqué Naoya había estado en el hotel ese día... Aunque ya comenzaba a sospechar sobre algo, primero lo primero era hablar con sinceridad y hacerles entender que no quería lastimar a Hana, solamente quería amarla como siempre se lo ha merecido.—

Los Zenin son una mierda, desde que supe a qué se dedicaban decidí no seguir una vida tan asquerosa pese a saber que llegaría a la cima y obtendría todo lo que deseara...

—¿Y fué dónde te aprovechaste y te metiste con mi hija..?

—No, no metas cosas que no tienen sentido en la conversación —exclamó llevando su mirada a ese hombre. Choso Itadori era un dolor de huevos, ni él era tan impulsivo y celoso y eso era de verdad un gran problema, porque era un hombre poderoso que podría hacer cualquier cosa... Incluso matar si a Hana le sucedía algo malo— No sabía quién era Hana hasta cuando nos conocimos en persona...

—¿Cómo rayos fué que Hana dió contigo? Jamás me imaginé que mi hija se fijaría en un maldito puto —espetó entre dientes un estresado Choso, a Nanami se le hizo algo extraño. Por su mente pasó que Hana era de enamorarse de alguien como su mejor amigo Suguru, pero observando al tipo frente a él, supuso que los gustos físicos de su bebé eran de hombres bastante grandes y fuertes— No lo comprendo, mi pequeña niña es un ángel, ha tenido la mejor educación que se le puede dar a una persona y sus últimas calificaciones me hicieron sentir muy orgulloso.

—Hana es extraordinaria, llevamos más de un mes de conocernos y fué suficiente para mí como para darme cuenta que ella es la mujer por quién daría mi vida... Así que no piensen que soy igual a la escoria de Naoya...

—Tienes hijos, Hana dijo que tienes dos hijos —mencionó rápidamente Nanami dando un paso al frente, Toji tragó saliva, ¿Hana mencionó su más grande debilidad? No la culpaba, supuso que lo dijo para poder defenderlo de aquellos 2— No me importa lo que haya pasado en tu pasado, mi importa el presente y el futuro de Hana —A Toji también le importaba su presente y futuro pero ponerse a pensar que se fijaría en una de sus clientes, todavía lo hacía creer que todo lo que estaba pasando era solamente un sueño.—

—Es una larga historia...

—Lamentablemente no tenemos tiempo así que...

—Solo seré breve —mencionó el de cabellos negros antes de soltar un suave resoplido pues contarle de su vida a sus 2 suegros demasiado pronto, lo hacía verse como un bobo adolescente que era presionado a caerle bien a los padres de su futura novia— Mierda...—masculló entre dientes sintiendose un completo idiota, Choso ya comenzaba a aburrirse y tenían que ser puntuales a su cita— Hace unos años... Perdí a mi esposa en un accidente automovilístico —ambos mantuvieron su mirada en él, ¿Esposa? Casi por un momento pensaron que solo había embarazado a la mamá de los niños y luego la había abandonado, se dieron cuenta que se presipitaron en pensar mal de él— Sucedió algo que la hizo salir de compras, me quedé con mis hijos en casa y luego de media hora, dos policias estaban parados frente a mí con la jodida noticia de que mi esposa habia fallecido.

Hubo un silencio algo ensordecedor en aquel ambiente, los grandes líderes se quedaron callados pues jamás se esperaron escuchar que un Zenin había sido feliz en su momento de vida.

[Sintieron lastima...]

Lamentablemente eso no le quitaba que haya endulzado el oído de Hana, claro que lo hizo, hasta él lo admitía pero el principio fué el principio... Ya había pasado más de un mes y definitivamente eso había curado parte de su vida llena de miserias.

—Lamento escuchar eso...

Choso no dijo nada respecto a ello, en cambio Nanami... Él lo comprendió, él estaba casado y ponerse a pensar que podría perder a la mujer que amaba con toda su alma, lo hacía sentir escalofríos, era una sensación indescriptible que lo hacía hasta estremecerse y no era algo que deseaba.

Nanami quería que fuera de una forma natural, de una forma en dónde ambos envejecieran juntos, todavía tenían mucho qué disfrutar y a sabiendas de que ambos tenían una agenda demasiado apretada... Cuando estaban juntos, no había nada que parara esa guerra tan intensa que se hacía llamar; amor.

—Mataste a dos de mis mejores hombres...

—¿Qué mierda querías que hiciera? —espetó alzando la mirada mientras fruncía el entrecejo— Tú hiciste que me golpearan... Fuí entrenado para defenderme y antes de conocer a mi esposa, trabajé para un hombre en Vladivostok, fué ahí dónde me entrenaron.

—¿Vladivostok?

—Queda en la península del mar de Japón —respondió Choso frunciendo el entrecejo, ¿Qué clase de personas había en aquél lugar como para que entrenaran de una forma tan voraz a un hombre. Era peligroso, Choso sabía que tenía una gran arma entre sus manos pero saber que era un Zenin lo complicaba, no quería ese apellido junto al suyo y aunque Hana no tuviera Itadori, tenía Ishikawa de nacimiento— Necesito saber cómo fué que diste en ese lugar...

—¿No tienen una cita acaso? —Nanami observó su reloj, faltaban veinticinco minutos así que supuso que podría hablar un poco más. Algo muy en el fondo le creó curiosidad de saber con qué personas había estado, casi por un instante deseó poder entrenar más de su cuerpo para estar en una mejor forma,(aunque sabía que tanto su esposa y su hija, no dejarían que intentera hacer locuras)— Bien, supongo que puedo decir algo sobre mi vida antes de haber sido feliz por primera vez.

...

Los 3 tenían el rostro tenso, estaban totalmente shockeados pues lo que Hana había dicho los había dejado no solamente preocupados... Satoru, Suguru y Shoko no pudieron creer que el mismísimo Itadori Choso, fuera su padre biológico.

—P,Pero... ¿Como es que..?

—Nanami me mencionó que cuando mamá y él se conocieron, fué porque los padres de mi madre la obligaron a casarse con el hijo de un hombre millonario que buscaba procrear a un heredero universal —musitó recostada en el hombro de un Satoru consentido, tanto Suguru y Shoko estaban del otro lado de la pantalla y en Japón el reloj marcaba ya la 1 de la madrugada. Hana les había pedido tener una conferencia y todos habían aceptado de dicho pedido, pero jamas se esperaron que ella vendría con información que podria meter en muchos problemas a Itadori Choso— Lamentablemente lo que le hizo a Toji no tiene perdón...

—Es un Zenin, Hana...

—No, él no es un Zenin —respondió rápidamente al reproche del ojiazul, se separo un poco de él y éste llevaba consigo un semblante de niño malcriado, estaba celoso y molesto así que no quería verlo cerca de Hana. Satoru agradeció que haya recibido una golpiza y se lo hayan llevado lejos de aquél lugar, así Hana no se encontraba en peligro alguno y su tiempo solo se centraría nada más en él— No les conté ésto para recibir regaños, mucho menos reproches o que me juzguen por haberme fijado en un hombre maravilloso...

A Hana se le llenaron los ojos de lágrimas, tanto era el dolor que sintio en su interior que comenzaron a escaparse por sus mejillas y con el corazón roto, no quiso mostrarle su debilidad a los chicos.

Solo se puso de pie y caminó en direccion al baño, era momento de tomar una ducha y aunque no quisiera verle la cara al dueño del hotel, no podía quedar mal ante los padres de Satoru.

—Satoru...

—No me vengas con reproches, estoy siendo realista, Suguru —espetó por lo bajo luego de arrugar ligeramente su entrecejo. Satoru sabía que esos 2 lo maldecirían y aunque entiendiera el dolor de Hana, estar en manos de un Zenin podría arruinarle la vida y no quería... En ese momento quiso ser egoísta y tomar la idea de hacer que Hana se olvidara por completo de Toji, estaba muy presente en su cabeza— Tanto como yo, tú tambien la amas y ponerme a imaginar una vida sin ella es...—Satoru pausó por un instante, Suguru comenzaba a sentirse asustado y sabía que su mejor amigo tenia razón... No podían permitir que Hana terminara en malas manos— Tenemos una cita, debo prepararme así que pueden descansar.

No dijeron nada, era obvio que todo lo que Hana les había contado no los haría poder dormir tranquilos. ¡Era imposible!

Satoru estaba obligado a algo esa noche, sabía que lo complicaría todo pero si eso funcionaba para que Hana se olvidara de él, lo cumpliría sin queja alguna.

—Amm...—se apoyó en la puerta del baño antes de tocar suavemente de ésta, Satoru tenía que retirarse pues era hora de prepararse para la cena de esa noche— Hana, tengo que irme...—él suspiró profundamente, supuso que Hana ya se encontraba en la ducha así que era mejor dejarla sola.—

—A,ääh...

Los ojos de Satoru se abrieron lentamente en sorpresa, ¿que había sido ese sonido? Su cuerpo fué como una bala cuando se apoyó por completo en la puerta y su curiosidad había hecho que tambien se abriera.

Su cuerpo se paralizó, su cara se pinto de rojo y la imágen que tenía enfrente jamás se imagino verla en toda su vida.

Hana estaba apoyada de pecho contra la pared, su mano derecha estaba perdida entre sus piernas, su cara completamente roja, el cabello humedo cayendo por sus hombros y aquella posición dónde arqueaba su espalda, le dió una perfecta imágen de un buen culo perfecto listo para ser bombeado con fuerza y desesperación.

Satoru había dado un paso al frente, por un instante hasta una ligera sonrisa se había dibujado en su rostro y con un abrir y cerrar de ojos...

[La puerta se cerró.]

Satoru había cerrado la puerta a sus espaldas sin hacer ruido. Su cara no borró aquél bochornoso sonrojo y su mirada estaba puesta en algo que lo hizo sentir el patético más grande del mundo.

—¿A quién engaño..? —susurró para él mismo observando el bulto que sobresalía en su pantalón, su corazón no dejó de martillar su pecho y escuchar a Hana gemir no lo ayudó en nada. El sentimiento reprimente de Satoru lo hizo sentir más frustrado que nunca y no sabía como acabaría todo eso al final... ¿Hana terminará siendo su esposa? ¿O terminará en los brazos de alguien quién nunca debió haberla tenido?— No soy yo el causante de eso...—musitó nuevamente con lagrimas borrando su vista, intentando contenerse a no llorar como un maldito idiota no correspondido— N,No soy yo por quién gimes y no sabes como me duele... No ser él, Hana...

Capítulo nuevo por 15 votos, gracias por su apoyo, niñas.💕

Vengo a mencionarles que ya estoy trabajando en mi siguiente historia así que si te gustan las historias BL, traigo una fuera del otro mundo.🤭
OJO: Será una historia hetero, se los aviso desde ahora.🥰

Por otra parte, ¿Te gustan los vampiros y Blue Lock? Tengo una historia en emisión que te podría gustar, puedes buscarla en mi perfil.❤️

Sin más qué decir, nos leemos pronto.💗

Continue Reading

You'll Also Like

2.5K 195 3
(Y/n) es una chica que va a de campamento con unos amigos, pero ella lamentablemente se pierde y se va por otro camino, ese camino la lleva hasta Sil...
45.4K 5.3K 27
Un hechicero malvado, y una santa inocente. Hina Satsuki, una joven pura, cruza caminos con Ryomen Sukuna, justo antes de que este sea el temido "Re...
132K 7.1K 31
𝘋𝘪𝘤𝘦𝘯 𝘲𝘶𝘦 𝘭𝘢 𝘱𝘳𝘪𝘮𝘦𝘳𝘢 𝘪𝘮𝘱𝘳𝘦𝘴𝘪ó𝘯 𝘦𝘴 𝘭𝘢 𝘮á𝘴 𝘪𝘮𝘱𝘰𝘳𝘵𝘢𝘯𝘵𝘦, 𝘗𝘦𝘳𝘴𝘰𝘯𝘢𝘭𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦, 𝘦𝘯 𝘦𝘴𝘦 𝘮𝘰𝘮𝘦𝘯𝘵𝘰...
4.6K 400 28
Alaska enfrenta problemas al volver a la Tierra luego de cien años y encontrarla habitada, pierden muchos amigos buscando la paz entre todos en el pl...