-Que mierda dices?, pregunto Amelia-
- Es bastante obvio - respondió Sara con simpleza- los chicos tendrán que huir
- Lia en serio es la mejor idea que pudiste dar, acaso no podías aconsejarle que le entregará está chica a su padre.
- ¿ Cuando Demir a escuchado mis consejos o los tuyos? Respondió Lia con simpleza.
- Pues deberia empezar a hacerlo así nos evitaríamos muchas cosas- la chica paso a mirar fijamente a Demir como tratando de hacerlo entrar en razón - lo mejor es entregarla así nos sacamos a Campbell de encima y no le seguimos dando más poder a torner para que te siga.
- Ya dije lo que pienso hacer y no hay punto de discusión Amelia- respondío el chico dedicandole una mirada helada
~ Quiero que organicen una junta rápida con los miembros más influyente de bordhelia, antes de irme del país necesito dejar el asunto de Tasha cerrado~
- Es estúpido si quiera pensar en que la gente de bordhelia la aceptará.
- Poco me importa.
Demir paso a mirarnos a lía y a mi,
- No es seguro volver a la mansión así que Lia encárgate de ir con Tasha y comprar algo de ropa y lo que necesite para el viaje.
- Puedes caminar bien la herida no te molesta? Me preguntó el chico
- no me molesta
- ¿Segura?
- si segura.
El chico buscó algo en el bolsillo trasero de su pantalón de ahí saco una cartera la brío y tomo un pequeño papel doblado,- aquí está la dirección de una de las bodegas que tenemos más cerca de esta zona, vayan y tomen todo el dinero que necesiten
Lia tomo el papel con una sonrisita traviesa
- No sé cómo puedes vivir sin usar una tarjeta de crédito - soltó Sara divertida - por eso no soy narca, odiaria tener que andar con dinero en efectivo a todos lados.
-A mi no me molesta andar con varios billetes de cien, encima.- respondió Lia igual de divertida
Despues de un rato Demir, Amelia y Ender salieron de la casa rumbo a la reunión con la gente de bordhelia, mientras yo me quedé con lia.
La chica hablo un rato con Sara mientras yo estaba sentado en el sofá mirando sin ánimos el televisor por el cual seguían pasándo noticias, aunque ya no relacionada a la mafia
- Vamos- dijo Lia acercándose a mi invitandome a levantarme del sofá - se me fue el tiempo hablando con Sara si Demir vuelve y ve que no te e llevado a comprar tus cosas, me matará
Me pare del sofá pero no respondí nada a su comentario, se me hacía difícil estar junto a esa chica aunque ella me hablaba como si nada hubiese pasado.
Salí junto con ella de la casa subimos a su auto el viaje fue en un total silencio incómodo.
Luego de conducir un rato llegamos a un lugar muy apartado, era una propiedad privada, Lia me pidió que esperase en el auto.
La chica se planto frente a una puerta mecánica luego de un par de minutos la puerta fue abierta para ella la Vi perderse entrando a aquel lugar, por curiosidad intente abrir la puerta del auto pero me di cuenta de que Lia la había dejado con seguro.
Pasado varios minutos la chica salía de aquel lugar con una sonrisa de oreja a oreja traía en sus manos un bulto mediano, abrió la puerta de su auto y entro me dedico una sonrisa traviesa y abrió el bulto para mostrarme lo que tenía dentro, estaba repleto de billetes.
- No es una cantidad exagerada? Pregunté
- Esto no es nada para Demir, ni siquiera se dara cuenta.
Asentí no tan convencida, el ambiente en el auto volvió a ser tenso e incómodo la chica conducía y ninguna de las dos dijimos media palabra.
- Lamento mucho haberte mentido - soltó de repente -se que no estás obligada a perdonarme pero solo queria que sepas que todas esas noche de película y pijamada, las risas los momentos que vivimos como amigas fue genuino para mí.
- Claro por eso me entregaste a Demir.
La chica me miró avergonzada más no dijo nada para contradecirme
Hicimos silencio el resto del camino hasta que aparcamos frente a un mall.
- No sabemos a dónde irán, pero estamos entrando en invierno así que lo mejor será comprar ropa abrigada.
Entramos al lugar allí parada en el pasillo de ropa me sentí brevemente como una chica común y corriente llevando una vida normal, me sentia como antes cuando salía con María de shopping y luego me sentía culpable por abusar de la tarjeta que Campbell me había dado.
Ahora mi realidad era otra miraba a las chicas pasar por mi lado, su única preocupacion era que el vestido que habían elegido les quedará bien o que aquel abrigo de piel estubiera en oferta.
Y luego estaba yo que vivía con el miedo de hacer enojar a Demir y que me hiciera daño o peor aun que Roan me encontrará. Sabía que el si me mataría ví esa decisión en sus ojos cuando lo tuve frente a frente en el hotel.
Esa determinación de hacerme daño, ese deseo de hacer lo que Demir por alguna razón no había hecho hasta ahora,
Demir, quizás por eso no me iba de su lado el miedo que el causaba en mi era grande pero no sé comparaba con el que sentía por Roan, bien podía gritar ayuda aprovechar que estaba en un lugar público y escapar pero aquien quería engañar, sentía que ese chico era el único que podía defenderme de Roan
- Atrapada en tus pensamientos? Pregunto Lia al lado mío
No me había dando cuenta de que me hubiese quedado parada como una estatua mirando el abrigo que un rato atrás habían estado mirando las chicas.
- Ah, ya se,te gusto este abrigo- dijo Lia señalandolo mientras se acercaba a el- no te culpo es muy bello
En verdad el abrigo me parecía lindo pero me había quedado mirándolo mientras tenía la mente en otro lugar.
- Nos lo llevamos, tienes que estar hermosa para Demir.
Lia no espero respuesta de mi parte tomo el abrigo y se fue a otra sección a buscar lo que ella llamo " artículos de importancia", Yo por otro lado elegí varios sueter e pantalones jens super cómodos
Luego de un rato vi cuando se acercaba a mi traía consigo varias cosas- mira esto dijo mostrándome-, cera depiladora, jabón intimo, cepillo dental. Y otras cosas de uso personal.
Mis ojos se abrieron grandemente cuando ví que saco unas lencerías - esto es lo más importante de todo, nunca sabes que puede pasar cuando estás hullendo sola junto a un chico sexy.
- Ni en broma yo no me llevare eso- dije intentando quitárselo de las manos...
- Ni lo pienses- Dijo apartando todo rápidamente de mi- Ya tenemos todo lo necesario, ahora volvamos
#######
Ya empezaba a oscurecer cuando Lia aparco su auto frente a la casa de Sara nos dimos prisa al entrar a la casa ya que una leve lluvia caía.
- Pero que paso? Pregunto Lia al ver a Demir sentado en el sofá y la camisa que llevaba cubierta de sangre
Amelia fue quien respondió - Demir se encargó de matar a la única persona que se atrevio a decir lo que opinaba de la chica Campbell.
- Me parece bien el es el jefe nadie debería andar opinando en lo que haga o no- respondió Lia.
- Ja!- Soltó Amelia- como se nota que eres una ignorante en este tema
- Al contrario Amelia, yo naci en una de la familia más influyente de bordhelia por lo tanto entiendo todo esto a la perfección y se muy bien como se maneja todo, recuerda que a mi no me Trajo ninguna prostituta.
- Cuida esa lengua, Lia si no quieres perderla- dijo la rubia mirándola con rabia.
- Solo te recordaba a qué lugar pertenece cada quien, eso no debería ofenderte
Sara que se encontraba en la sala mirando atentamente la situación carraspeó la garganta un poco incomoda- Creo que deberías ir a cambiarte esa camisa Demir.
- Y tú - dijo la señora enfocándose en mi - deberías ir a preparar tus cosas para el viaje.
Lia me ofreció las bolsas de compra que tenía en sus manos y Sara me indico a dónde estaba la habitación dijo que encima de la cama reposaba una maleta para que colocara lo que había comprado, le agradecí mentalmente no solo por la maleta también por intervenir entre las dos mujeres, me dirigi a la habitación que me indico.
Efectivamente la maleta estaba ahí, me encontraba sacando de las bolsas lo que habiamos comprado y colocándola en la maleta cuando la puerta de la habitación se abrió, no me gustó ver a la persona que entraba.
Amelia entro su mirada se clavo en la maleta, no sabía que hacía aquella chica ahí.
- Me veo reflejado en ti, sabes?
Una sonrisa triste se dibujo en sus labios.- Demir también arriesgo todo por mi.
La mire con interés
~Cuando mate a mi madre quien en ese entonces era esposa de selim el padre de Demir, mi nombre estuvo como número uno en la lista de bordhelia, Demir me escondió y me protegió arriesgo todo por mi, aun su padre vivía, tenía a Roan como competencia pero no le importo.
La chica hizo una pausa y me miró, sus ojos estaban aguados a punto de llorar reflejaba en ellos una profunda tristeza
- Iba a perderlo todo estaba dispuesto a eso y más para protegerme, me sentí la chica más afortunada, tenía al lado un hombre dispuesto a quemar el mundo por mi, hasta que lo entendí todo, Nunca se trató de mi, nunca fue por por cuidarme.
~ Demir es un chico "diferente" - sabía que ella había usado esa palabra para no llámarlo enfermo- lo único que el quería era sentir esa adrenalina esa euforia que le daba llevarle la contraria a su padre, me estaba salvando pero solo era por lo que sentía al romper las reglas y desafiar a todos
- Ya muerto su padre y teniendo el lugar como jefe del clan, aquella adrenalina aquel juego de mantenerme a salvó aquel desafío, acabo.
Dos lágrimas gruesas salieron de sus ojos
- Amelia yo...- la chica me interrumpió impidiendome hablar
- Ahora veo como la historia se repite contigo te veo como esa versión de mi, de nosotros, de lo que fuimos.
~ contigo intenta volver a sentir lo que sintió conmigo aquella vez, solo por eso se afana por cuidarte para el representas ese reto~
Sentí un fuerte latigazo en el corazón
La rubia salió de la habitación sin dedicarme una mirada mas mientras se limpiaba las lágrimas
Yo quedé parada sin saber que hacer aquella confección me había dejado desestabilizada.
¿ Eso era yo para Demir?
¿ Una versión de su historia con Amelia?
¿Un reto?
Alguien toco la puerta solo para llamar mi atención por qué está ya estaba abierta
- Demir está esperando ya tienen que irse.- aviso Lia.
Seguí parada mirándo el piso con atención aún tenia entre mis manos una prenda de ropa que no había llegado a meter en la maleta, apretaba aquella prenda como si así pudiera aliviar lo que sentia
No sabía por qué pero aquello me había llenado de tristeza.
Lia pareció notarlo.
- Ay no ¿ Que te dijo esa perra?