La tarde había caído, y mi habitación estaba en completo silencio.
Solo el ruido de las hojas pasando en el álbum interumpia el aura de paz que se había creado entre nosotros.
Mirábamos fotos de cuando eramos pequeños y entonces encontré una muy peculiar de los dos.
K: Mira...- susurré para no asustarlo, y como era de esperarse, Alex no siquiera se inmutuo. Desde hace ya varias semanas que estaba raro, se quedaba pensativo cuando estaba conmigo, ya no me hablaba con frecuencia y rara vez se quedaba a comer ya que era algo habitual en los dos. Al parecer estaba cambiando algo en el.
Suspire pesadamente, ya cansada de esta situación.
K: Está bien... ¿Qué es lo que te ocurre?- cruze mis brazos sobre mi pecho y me acomode mejor en mi cama donde estábamos sentados los dos. El como siempre mirando al vacío.
A: No sé de qué me hablas- levanté una ceja incrédula y ese gesto llamó la atención de Alex ya que puso sus ojos en mi- Está bien... - suspiro como si estuviera buscando las palabras correctas para decirlo - me gusta una chica.
Las comisuras de mis labios se elevaron y luego empeze a darle codazos cosa que sirvió para que el riera un poco.
K: Y... ¿Quién es la afortunada? -De nuevo me veía de esa forma tan extraña y sin poder descifrar le dije de nuevo-: ¿No me dirás?
A: Bueno...es...- empezó a jugar con sus dedos para luego verme y soltar-: complicado.
K: Bien- digo resignada - pero ten en cuenta que no saldrás de aquí hasta que me des un nombre.
A: No te gustará lo que responda
- murmura. Entonces lo observo detenidamente para saber que me oculta. El nota que lo veo y conecta sus ojos grises con los mios. Frunzo el ceño cuando no aparta su mirada. Es decir... Se acerca despacio y lento a mi. Y yo por supuesto me quedo en mi lugar esperando.
- ¿esperando qué?
- No lo sé.
- Entonces por que están a centímetros de besarse.
- ¿qué?
Me sobresalto un poco al notar que su rostro esta a centímetros del mío. Puedo sentir su aliento chocando con mis labios. Mi respiración se atasca en mi garganta y mi corazón late con fuerza como si quisiera salirse de mi pecho entonces...
El sonido de alguien tocando la puerta nos hace separarnos rápidamente.
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Editándose :').