Finalmente el día del vuelo a Miami había llegado.
Itziar y sus amigos estuvieron esperando durante un largo rato a sus nuevos "niñeros" y dado que se adelantaron expectantes por poder embarcar en el avión y salir de allí, libres de deberes y exámenes y madrugones innecesarios hasta que fueran a la universidad pues querían irse cuanto antes. Pero sus gánster no habían llegado aún al aeropuerto y eso tenía a todo el mundo mosqueado, ella incluida.
No era que le agradara tener que llevar niñeros como si fuera una mocosa de dos años, pero ya que iban esos tres tipos amigos de su padre lo mínimo que podían hacer era hacerles un viaje divertido.
Tyler y ella ya habían estado planeando como hacerles un viaje inolvidable a los tres niñeros que su padre mando con ellos, y se les ocurrió ideas muy buenas, sobre todo ideales para un metabolismo lento. Compraron somníferos y laxantes fuertes, consiguieron algunas pelucas, y varias cosas más para tener planes listos y alternativos, de ese modo ellos no podían estar tranquilos y siempre tendrían que estar en guardia para ver que les prepararon ese día. Itzi sonrió. Iba a ser un viaje divertidísimo.
Itziar y Tyler estaban riéndose cuando ella vio lo impensable.
No podía ser, era imposible ¿Verdad? Todo lo que veía era efecto del madrugón que se había dado para prepararse e ir al aeropuerto.
Mirando bien al grupo de tres hombres, Itziar sintió mariposillas en el estomago, al verlo.
Alexander estaba allí con dos hombres muy parecidos a él, llevando una enorme sonrisa en su rostro. El muy… ¡¡El ya sabía que iba a ir con ella de viaje y no dijo nada!!
Eso requeriría venganza… si era capaz de hacerlo, dado que ella se sentía un poco débil cuando él le lanzaba esas radiantes sonrisas con esos traviesos ojos verdes.
Encima iba guapísimo y un amor de hombre.
Alexander llevaba unos vaqueros blancos y una camisa de cuadros, blanca, gris y marrón, de su hombro colgaba una mochila y se acercaba a ellos con las manos en sus bolsillos. Al parar ante Itziar sonrió más abiertamente con un divertido brillo en sus verdes ojos. Itzi lo miro con una ceja enarcada.
No solo Alexander estaba allí, si no que Kevin, el novio de Gloria, iba con él.
--Supongo que vosotros sois el grupo que va a Miami.
Itziar vio a Gloria asentir y contenerse. ¿Gloria conteniéndose?
Mirando hacia ambos, Itziar supo lo que ocurría. Gloria estaba en el ajo, ella sabía todo.
Iba a matarla en cuanto la enganchara, se juro Itziar.
--El padre de Itziar. —la señalo con la barbilla. —Me pidió el favor de que fuera con vosotros, chicos, para que no se metieran en ningún lio. Soy Alexander y ellos son mis hermanos, Kevin y Héctor.
Presento a los hombres. Ambos la miraban a ella y eso la puso nerviosa.
Nunca supo que tenia hermanos, y mucho menos que el fuese su niñero. Itziar no podía enfadarse con él, pero si estaba un poco molesta. Le dijo de su deseo de que se encontraran en el viaje, y el sabia que ocurriría ¿Por qué no le dijo que harían ese viaje juntos, que podrían conocerse y divertirse?
--Seremos vuestros...
--Niñeros.--le corto Tyler. Alex miro Tyler, sin mostrar más que una enorme indiferencia como si el chico no fuera más que un objeto inanimado al que habían dado cuerda para hablar.
--¿Y tú eres?.--pregunto.
--Lorenzo Tocapelotas.--dijo Tyler pasando un brazo sobre los hombros de Itziar, acercándola a su cuerpo. Un par de chicos que iban con ellos le rieron la gracia.--Y esta es Marivi Quetefrei.--Alex la miro ignorando a Tyler, se acerco y se inclino besando su mejilla.
--Buenos días, diablillo.--la saludo. Sintió a Tyler tensarse a su lado, pero estaba ocupada viendo los verdes ojos del hombre.
Eran hipnotizantes, no podía dejar de mirarlos.
--Buenos días, Alex.--saludo ella aun en estado de shock por aquel encontronazo.
Nunca hubiera imaginado que el seria su niñero. Itziar suspiro viendo como Alex y Tyler se lanzaban dagas con los ojos, cuando Gloria corrió hacia Kevin y se lanzo a sus brazos. Parecía que llevase años sin ver a su chico.
--¡¡Osito!!--todos los que no sabían de su relación con Kevin la miraron desconcertados.
--¿Osito?—preguntaron algunos de sus compañeros, divertidos ante el infantil mote que Gloria le había dado a su chico.
Itziar conoció desde el principio a Kevin y sabía a ciencia cierta que su amiga le puso ese mote cariñoso el primer día que se conocieron, alegando que él era como un tierno osito de peluche.
A ella no le caía tan bien porque se comía sus golosinas.
--Si. Ella es Gloria, mi novia.--la presento. Itziar miro a su amiga con el ceño fruncido.--Por eso cuando me dijiste que ibas a cuidar de Itziar, la mejor amiga de Gloria, acepte en ir contigo. Porque mi chica iba a ese viaje.
--Espera.--dijo Alex volviéndose hacia ella.--¿Conoces a mi hermano?--pregunto señalando al hombre.
--Lo conozco por Gloria, me lo presento hace unos meses.--Itziar frunció su ceño y ladeo su cabeza.
--Y no sabía que era tu hermano.
Se defendió.
--Y tu cabro.--señalo a su hermano.--¿No podías haberme dicho que conocías a Itziar?
Le pregunto Alexander a su hermano Kevin, dándole una mirada furibunda, cruzo sus brazos sobre su pecho y espero por una respuesta.
--No. Se lo prometí a Gloria.
La defensa del hombre, aunque corta, era convincente. Si Gloria le pidió que no dijera nada, ella sabía muy bien como de persuasiva podía llegar a ser su infantil amiga, y conociéndola como la conocía, sabía que pulso el botón adecuado para mantener a Kevin calladito con su hermano.
Girándose hacia ella, Itziar y Alexander la miraron atentamente a los ojos.
--¡¡No me matéis!! Lo hice por vosotros.--aseguro escondiéndose detrás de un divertido Kevin.
Itziar rodo sus ojos. Gloria era demasiado dramática para ella, pero la quería por que era su amiga, así que tenía que soportar esas cosillas.
--Cuando vi las fotos de Alex en casa de Kevin, pensé en que aria muy buena pareja con Itziar... además... ella te ayudo.--le dijo suavemente a Alexander. El hombre suspiro mirando al techo del aeropuerto resignado por la mentalidad de los dos. Itziar sentía curiosidad por lo que había dicho Gloria sobre ayudarlo. Ella no recordaba haber ayudado al hermoso y buen hombre, más bien fue él quien la salvo de freírse en el desierto cuando su coche se frio, de modo... ¿que había querido decir su mejor amiga? ¿Por qué quiso juntarlos? Y algo mucho más intrigante ¿El hecho de que ambos se conozcan es a causa de Gloria y Kevin?
Tyler se puso a su lado y la llevo con él, alejándola de Alex con movimientos bruscos. Ella simplemente se dejo hacer sabiendo que no tenia caso luchar contra aquello.
Poco tiempo después el vuelo fue llamado y todos subieron al avión aun sorprendidos. Muchos cambiaron sus asientos con otros para poder estar o bien en parejitas o con los que realmente se llevaban bien, en su caso no le toco cambiarse de lugar, su asiento era de ventanilla y Tyler iba a su lado con Alex y Héctor tras ellos. Itziar decidió que sería una mejor situación si ella ignorara a todo el mundo, así que cogió su enorme bolso y busco en su interior su Ipod y se puso su música a un volumen considerable, cuando el avión despego.
No podía creer que Alex fuera su niñero y tenía la sospecha de que el sabia que lo seria cuando se conocieron o al menos algo sabría y no le dijo nada, eso la tenía un poco enfadada. El comportamiento extraño de Tyler también la tenia enfadada, porque aunque siempre fue muy suyo con ella nunca fue tan rudo y pasota y eso no le gusto en lo mas mínimo. Por otro lado odiaba el hecho de que hubiera conocido a Alexander por maniobras y jueguecitos de Gloria, eso hacia todo lo que habían hablado irreal como si fuera algo escrito meticulosamente para ser provocado. Itziar se sentía defraudada y enojada y apenas habían comenzado las vacaciones.
Recogiendo sus piernas en el asiento, Itziar cerró sus ojos y dejo que su mente se inundara en la alta música. Pitbull tronaba con su irremplazable tema "culo" y Itziar sintió como su cuerpo se relajaba, a pesar de que de vez en cuando su mente recuperaba el recuerdo reciente de Gloria haciendo entender que ella tramo todo. Cuando eso ocurría apretaba fuerte sus puños y respiraba hondo queriendo dejar atrás todo lo escuchado.
A medida que pasaban las horas se fue sintiendo más y más cansada, hasta que se quedo completamente dormida. Itziar pensó en lo bueno que sería tener a Alex a su lado y poder recostarse contra él. Cuando se saludaron olía tan bien que ahora ella pensaba en ese masculino y a la vez dulce olor. Sabía que colonia usaba el hombre, era su preferida y cada vez la olía y mas en alguien que imponía tanto como el se derretía como chocolate.
Alexander estaba que trinaba prácticamente, era un hombre conocido por su paciencia pero en esos momentos no tenia su habitual paciencia de santo, más bien estaba a nada de saltar sobre el pequeño adolescente que mantenía a una muy dormida y agotada Itziar contra sí. Su hermano mayor Héctor intentaba mantenerlo en sus cabales, pero de poco le sirvió cuando Alex veía como el tal Tyler, descubrió que era el tipo del bate de baseball, besaba y acariciaba a su diablillo cada poco tiempo. Se tomo la libertad para quitarle los cascos, desabrocharle un poco la sudadera para que el aire le diera mejor en su dorada y tersa piel, y se atrevió a recostarla en su costado. Alex quería levantarse y empotrar al mocoso contra una de las paredes del avión y estrangularlo.
Alex gruño nuevamente cuando vio como Tyler besaba el cabello y la frente de Itzi mirándolo con regocijo.
Héctor le pego un puñetazo en el hombro llamando su atención para que se calmara.
--No soporto como la toca.--rechino.
Héctor suspiro.
--Es él quien está sentado con ella.--lo miro directo a los ojos.--Y tu hermanito eres su niñero, estas aquí para asegurar que no se mete en líos, no para que no consiga novio.
--Ella no será su novia.--gruño.--Itziar no...
--¿Acaso te ha dicho que le gustas o que le gusta alguien especial?--Alex negó sintiendo como la ira burbujeaba en su interior al ver al mocoso acariciar un lado de la tierna y hermosa cara de Itziar.
--Entonces atente a que muy posiblemente sean o estén empezando a ser novios. Ella es muy joven, Alex.
Alexander sabia eso, Itziar apenas y había cumplido sus dieciocho y aunque sí que era mayor de edad, el tenia unos cuantos años mas por delante. Pero ¿Qué podía hacer? Itziar era como un ángel con él, era dulce y tierna y se preocupaba. Le gustaba tenerla cerca. Era la única mujer que no había saltado sobre el al verlo, no se insinuó, no coqueteo.
Para Itziar, Alexander era un hombre normal y corriente sin nada especial. Le daba igual como fuese su rostro o su cuerpo. Ella estaba más interesada en su alma y corazón. Y eso… eso era lo que adoraba de su diablillo.
--Itzi no es así.--aseguro mas para convencerse que para contestar a su hermano.
Tenía que creer firmemente en esas palabras de lo contrario se volvería loco viendo como se besaban delante de él durante todo el viaje, aunque siempre podría quitársela.
Alex sonrió ante aquella idea.
--No trames nada, se un maldito adulto.--gruño su hermano mayor mirando por enésima vez por el pasillo.
Alex siguió su mirada y vio como fruncía el ceño y se tensaba. Dos asientos más adelante en la otra fila de asientos, estaban dos de las amigas de Itzi charlando y riéndose bajito, de vez en cuando miraban hacia atrás y cuando los veían se reían tontamente volviendo sus cabezas hacia sus revistas.
Alexander vio como su hermano admiraba a una de ellas en especial, pero decidió presentárselas a ambas. No quería que el sospechara que sabía que estaba intrigado por una de las chicas.
--Ellas son Katherine y Anabella.--le dijo a su hermano con una sonrisilla.--Ambas son de la misma edad. 18.
--No me interesa, solo estoy confuso por sus risitas.--mintió entre dientes. Su hermano no sabía mentir, maldición, cada vez que el hombre lo intentaba las palabras fluían entre sus apretados dientes y cuando no un musculo en su mandíbula temblaba.
--Seguro, hermano. Seguro.--se recostó en su asiento y miro hacia delante. Resignado a pasar todo el vuelo rechinando sus dientes por cada muestra de afecto o amor que Tyler, el mocoso tocapelotas, le daba a su diablillo, Alex cerró sus ojos un momento no dándose cuenta de lo realmente cansado que estaba.
Despertó confuso cuando sintió algo moverse a su lado, sabía que no era su hermano por que Héctor se ahorcaría antes que acurrucarse a su lado como un niño buscando abrigo. Abrió sus ojos y lo que vio en primer lugar le confundió aun más. Héctor estaba sentado delante de él, en el asiento de Itziar. Alexander giro su cabeza y miro con asombro como su pequeña diablillo estaba allí sentada, dormida con sus piernas arriba del asiento y su cabeza apoyada sobre su hombro. Estaba hermosa con sus pequeños shorts rosas y su sudadera negra, llevaba pequeños calcetines tobilleros, su cabello en dos coletas bajas y su cara tan relajada y serena que le daban ganas de poder plasmar una imagen de ella de esa manera. Alex sonrió, recorriendo con un dedo un lado de su cara. Su piel era suave como la piel de un melocotón, y tenía el mismo hermoso color.
Sintiéndose satisfecho con ello, la recoloco un poco para que estuviera mas cómoda y apoyo su cabeza sobre la de Itziar, conciliando el sueño nuevamente.
Alex respiro hondo el perfume de su diablillo, captando el dulce olor de su perfume y de su piel.
El esperaba que aquello no hubiera sido un sueño o de lo contrario se volvería loco, no sabía si podía soportar el saber que Itziar realmente estaba con el mocoso de Tyler como dijo su hermano Héctor.
En el tiempo que estuvieron hablando, Alexander se había ido prendando de ella, la cuestión era ¿Itziar lo quería? Y no se refería a como un amigo, si no como algo mas.
Cerrando sus ojos más cansado de lo creído, Alexander cayo dormido en compañía de su diablillo.
Estaba dormido entonces... ¿Por qué lo molestaban? se pregunto enfadado, volviendo a sentir cosquilleos en su rostro y cuello. Alex se dio cuenta entonces de que ese cosquilleo era producido por una suave caricia.
--Arriba dormilón.--dijo bajito la voz dulce y divertida de Itziar. Los pequeños dedos se arremolinaron en su mejilla produciéndole pequeñas cosquillas.
--No.--se quejo.--No seas mala Itzi.--ella se rio.
Quería seguir durmiendo ¿Tan malo era eso?
--Es hora de prepararse. Dentro de poco llegamos al aeropuerto, ¿No quieres componerte un poco?
--No.--Itziar se rio, la sintió moverse y poco después, pincho sus costados con sus pequeños dedos haciéndole muchas cosquillas. Alex se rio sin poder evitarlo, retorciéndose.
--¡Para!...--rio.--¡Detente Itzi... tengo... muchas... cosquillas!--continuo carcajeándose.
Itziar paro, besándole ambas mejillas. Alex lloraba de tanto reírse, y para cuando ella paro tenia las mejillas mojadas y su respiración acelerada. Alex puso una mano sobre su estomago e intento respirar hondo abriendo sus ojos, topándose con una Itziar muy sonriente.
--Eres malvada.
--¿Yo?--dijo inocentemente.--No, soy muy buena.--sonrió y se inclino le limpio las mejillas y se las beso.--Ahora estas despierto.
--¿Como no estarlo?--dijo Alex riendo.
--Has dormido durante todo el viaje.--se defendió ella haciendo un adorable pucherito.
Alex sintió deseos de pasar su dedo sobre ese gordito labio.
--¿Y tú no?--negó.--Te quedaste dormida antes que yo, y cuando desperté estabas dormida a mi lado.
--Si pero antes que eso estuve despierta, antes de obligar a Héctor a cambiar su lugar conmigo.--dijo bajando la voz y la mirada. Alex se incorporo en su asiento y la miro, buscando su mirada.
Itziar lo esquivaba y supo entonces que debía obligarla, o persuadirla. Algo había pasado.
--¿Que es, diablillo? Dime que te ha puesto así.--ella negó.--Por favor.--pidió con voz suave. Itzi alzo su mirada. El sabía que no podría resistirse a esa voz, conocía a las mujeres y aunque ella fuera su amiga, no era diferente.
--No.--dijo para sorpresa de Alex. Con sus ojos abiertos por la sorpresa de su negativa aun cuando uso su voz suave de ruego, algo que a las mujeres les encantaba, Alex sintió nuevamente esa corriente que lo recorrió cuando la conoció en persona en el desierto. Y cuando la vio en el aeropuerto.
--¿Por qué no quieres decírmelo?
--Solo no puedo.--dijo ella.
--Los amigos no se ocultan cosas.--ataco él. Sabía que había sido duro, pero quería entender que puso a su pequeña diablillo de ese humor tan... triste.
--Eso es un golpe bajo.--dijo ella dolida. Al ver como sus ojos perdían el brillo que tanto le gustaba por otro muy distinto que no quería, Alex se apresuro a agarrarla de las manos y tirar de ella hacia él.
--Perdona, no quise ser tan brusco. Solo... quiero saber que te puso triste e intentar solucionarlo.--susurro cerca de su oído mientras la abrazaba.
--Tuve una pesadilla.--el espero por mas.--Sobre ti. Me desperté cuando Tyler me empujo para que reaccionara. Lloraba.
--¿De qué iba, Itzi?
--No se... es extraño.--susurro.
--¿Quieres contármelo ahora o...?
--Paseábamos.--su voz era baja. Tan baja que Alex tuvo que bajar su cabeza para que los labios de la pequeña y hermosa niña estuvieran cerca de su oído.--Íbamos hacia el parque... yo quería un helado y tú te reías de mi por ser caprichosa. Llevaba mucho pidiéndote uno.--Alex sonrió ante lo adorable que era.--Nos sentamos en... un banco, frente a una fuente. Te reías. Me picabas. Y lo siguiente que vi era que todo se volvía negro. Una luz ilumino la fuente y... estabas allí... lleno de sangre y...--la meció cuando la sintió sollozar.
El sabía lo que eran las pesadillas traumáticas, el las tuvo durante un tiempo después de salir del servicio militar y ver tantas cosas.
--Shh... Tranquila Itzi. Solo fue una pesadilla.--susurro en su oreja.--Solo ha sido una pesadilla, pequeña diablillo, sabes que estoy bien ¿Verdad?
--Si pero... fue tan real que...--sorbió por su nariz y Alex sonrió un poco. Ella simplemente era adorable.--Héctor me vio tan mal cuando me pregunto que...
--Cambio su lugar.--ella asintió.--Escúchame Itzi.--le levanto el rostro quitando de sus ojos y sus mejillas todas las cristalinas lagrimas.--Si cuando estemos en el hotel te pasa, ven a mi ¿Vale?--asintió.--Sea la hora que sea, no te preocupes por eso, tu solo entra en el cuarto.
--No quiero molestarte con mis pesadillas, Alex.--dijo ella. Su voz dejaba ver sus lágrimas.
--No me molestas Itzi. Quiero que vengas a mi cuando esto ocurra, la única forma de que te calmes es que veas que estoy bien.
--Vale.--susurro escondiéndose bajo su barbilla. Alex la rodeo con sus brazos, mirando hacia su hermano que había estado allí todo el tiempo desde que Itzi comenzó a contarle su sueño. Héctor miraba a la niña y luego a él y una lenta sonrisa se formo en su cara. Alex frunció su ceño pues sabía que aquella sonrisa no era nada bueno.
--¿Como estas enana?--Itziar suspiro y se incorporo. Alex quiso pegar a su hermano por hacerle perder su abrazo.
--Mejor.--aseguro.
--¿Te calmo estar a su lado?--ella asintió.--Bien.
Para estar en un avión hacían lo que les daba la gana, pensó Alex cuando vio a su hermano ponerse en cuclillas para ver a los ojos de Itziar.
--Quiero que hables con nosotros si algo te pasa ¿De acuerdo?
--Si.
--Busca a Alex o a mi... no creo que Kevin sea de mucha ayuda.
--¡Oí eso!--dijo su hermano pequeño con su ceño fruncido. Gloria miraba a Itziar preocupada, pero al ver que Alex le negaba asintió abrazando a su chico.--Y yo seria de mucha ayuda a Itzi, ya que si lo pensáis por unos momentos, algo difícil para vosotros, yo soy quien mejor la conoce de los tres.--dijo orgullo. Itziar suspiro y rodo sus ojos.
--¿Y en qué momento me conociste lo suficiente, Kevin? ¿Cuando tenias la lengua en la garganta de Gloria, o cuando jugabas con Tyson en el jardín?--arqueo sus finas cejas y el hombre se sonrojo. Itzi se rio.--Ah... que fácil ha sido esta vez.--Gloria se incorporo y le lanzo una almohada que impacto en el pecho de Alex cuando Itzi se agacho.
--¡No seas perra, Itziar!--dijo ruborizada.
Alex alzo sus cejas ante el nombre. Itziar sonreía de modo que eso lo calmo haciéndole saber que no la ofendió, lo cual lo confundió.
--¡¡Ya me gustaría a mi verte toda fría cuando tengas novio!!--Itzi se rio.
--Si yo no digo nada, se os ve felices. Además, esta vez Kevin me lo debía. Se comió mis chupa chups.--refunfuño. Alex miro a Héctor y su hermano a el, y ambos se echaron a reír ante aquello. Solo Itziar buscaría venganza porque alguien se comió sus golosinas.
--No tenían tu nombre.--gruño Kevin.
--Todo el mundo sabe que los malditos chupa chups de fresa con chicle están prohibidos. Son exclusivamente míos, hombre.--discutió ella señalándolo con un dedo. Las azafatas de vuelo miraban impresionadas a todos ellos, riéndose divertidas. No que las culpara, Alex sentía dolor de tan duro que se estaba riendo pero por más que quería parar no podía cuando Itziar aun despotricaba sobre sus chucherías como una niña pequeña ofendida por qué le habían arrebatado su bolsa de gominolas, e igual de mala buscaba venganza.
--Te comprare un puñetera bolsa en cuanto aterricemos.--gruño su hermano.
--Tengo picapica y se cómo utilizarlo, Kevin.--alzo sus cejas y Gloria gimió. Su hermano frunció el ceño, igual que él y Héctor, no entendía el punto pero por la cara de Gloria debía ser algo grave a tener en cuenta que ella tuviera aquel picapica.
--No serias capaz.
--O si. Lo soy.--rio malvadamente.
--Kevin cómprale los dichosos chupa chups.--suplico Gloria.--O no será divertido.--Itziar le sonrió.
--¿Ves? Colaborando se entiende la gente.--Alex se rio. Ella era traviesa y malvada pero le encantaba.
Alex beso el cabello de Itziar sonriendo. Nunca conoció a una niña como ella, tan dulce y traviesa, tan adorable y malvada, tenía todo en uno y era preciosa. Era más pequeña que él, y más infantil que él, pero toda la ayuda que le había dado sin conocerlo y sin saberlo, le dio tanta fuerza que ahora no sabía cómo hacer para que todo lo que sentía por ella no estallara delante de sus narices cuando no había tenido la oportunidad todavía de diseminar y exprimir sus sentimientos esperando encontrar la respuesta más clara.
Alex miro a su hermano Héctor.
--Quédate con ella mientras voy a arreglarme un poco.--le pidió a su hermano mayor. Este asintió.
--Hey Itzi.--Alex arqueo una ceja al ver la familiaridad de Héctor al tratarla, como si de repente hubieran conectado.--¿Seguimos con nuestro juego?--ella sonrió abiertamente y asintió.
--¡Sip! Pero no seas tramposo, te e pillado cuatro mentiras ya.--Héctor se rio empujando a Alex fuera de su asiento y apalancándose el en su lugar, tirando de una de las pequeñas orejas de Itziar. Alex suspiro, cogió su mochila y fue al baño. Allí uso el inodoro, se lavo los dientes, cambio su camiseta por otra negra e intento verse lo más presentable posible, cambio su ropa y suspiro.
Alex sonrió pensando en Itziar, en su dulzura en como había llorado por él en un sueño aun cuando apenas se conocían. Lo que si le causo curiosidad fue el hecho de ver a su muy serio hermano Héctor interactuar con ella como si la conociera de toda la vida, bromeando y jugando con ella.
Curioso y algo celoso Alexander salió y se encontró a Itziar riéndose apoyada en el hombro de su hermano mientras Héctor apoyaba a su vez su cabeza en la de ella, con una enorme sonrisa.
--¿Me devuelves mi sitio?--le pregunto Alex con su ceño fruncido a su hermano.
--No. Itzi y yo nos lo estamos pasando muy bien.--discutió su hermano.
--Héctor.--gruño en aviso. Este sonrió. Itziar lo miro con sus grises ojos, una dulce sonrisa en su rostro. No le extrañaba que lo miraran pero por alguna razón le pareció curioso.--¿Qué?
--Me gusta cómo te queda el negro.--dijo ella casualmente. Alex se rio.--¿Qué? tú has preguntado.--se defendió ella. Puso una adorable expresión en su rostro y Alex se derritió allí mismo.
Itziar hizo un puchero, poniendo ojitos tiernos, mirándolo. En ese momento Alex se dio cuenta de algo que hasta ese instante no noto. Itziar traía otra ropa puesta. Llevaba una camiseta verde, que le caía de un hombro y enseñaba la tira de su sujetador blanco, llevaba unos claros shorts vaqueros y en sus pies unos diminutos calcetines tobilleros, sus deportivas tipo botín estaban bajo su asiento y ella estaba adorable y hermosa tan sencillamente vestida como iba. E iba muy suavemente maquillada. Alex miro a su hermano de nuevo esperando que finalmente levantara su culo del asiento, pero no parecía dispuesto.
--Héctor.--gruño cansado del jueguito de su hermano mayor.--Sal de ahí.--el se levanto con un suspiro resignado, beso la frente de Itziar y choco su hombro con el de Alex.
--Cuida bien de ella, Alexander.--dijo cerca de su oído.--O te colgare por las pelotas si ella sale lastimada.--no esperaba aquello pero le agrado ver como su hermano mayor aprobó al parecer que él fuera detrás de Itziar como un adolescente lleno de hormonas. Alex se desplomo en su asiento. A pesar de haber dormido durante casi todo el vuelo estaba hecho polvo, quería una cama y una ducha caliente. O una ducha y un buen masaje. O las tres cosas.
--Queda media hora para aterrizar, así que en cuanto lleguemos... nos vamos a la playa.--dijo Itziar emocionada, Alex la miro como si le hubieran crecido dos cabezas.
--¿Estás loca? ¿No estás cansada?
--No.--negó deshaciendo sus dos trenzas. Alex miro asombrado la enorme cantidad de cabello negro tinta de su pequeña diablillo. Itzi tenía el cabello extra largo, llegándole fácilmente un poco más abajo de la cintura.
--Oh... joder.--ella lo miro arqueando una ceja al ver como las puntas de su cabello le acariciaban los muslos. Ella se puso en pie y se dio la vuelta para que viera donde le llegaba. Las puntas de su melena hacían un triangulo invertido justo sobre su redondito y hermoso trasero. Alex sintió deseos de alargar las manos y acariciar cada perfecta mejilla. Pero se contuvo recordándose a si mismo que ella vio atreves de su físico y el debía hacer lo mismo.
--Enseguida vuelvo.
--¿Dónde vas?
--A por mi móvil. Tyler lo ha secuestrado.--suspiro y se marcho unos asientos por delante, la vio discutir unos momentos y luego desaparecer entre los asientos. Alex apretó sus dientes, sintiéndose tensar solo con la idea de que ella estuviera tan cerca del tocapelotas de Tyler. Alex aguanto como un campeón hasta que la vio levantarse con una triunfal sonrisa en su rostro. Llego hasta él y se subió a su asiento.
--¿Estás bien?
--Sip.--sonrió. Busco en su móvil unos momentos y lo miro.--¿Una foto?--Alex sonrió.
--Por supuesto.--Itzi soltó un gritito de emoción y se recostó contra él para hacer la foto.
Alex absorbió aquella cercanía como si fuera agua. El tacto de su piel era suave y cálido, y el aroma dulce era propio de ella. Itzi olía genial aun llevando casi un día entero en un avión. Hizo la foto y Alex la agarro, sentándola sobre su regazo.
--Así saldrá mejor.--dijo a modo de escusa. Itziar y él se tomaron más de una foto, en una salían abrazados, en otra ella besaba su mejilla, en otra salían haciendo el tonto. Alex se rio como nunca pensó reírse, teniendo únicamente a Itzi a su lado hacia que cada momento fuera divertido para él.
El capitán anuncio el inminente aterrizaje y pidió amablemente que todos volvieran a sus asientos. Itziar se sentó, calzándose rápidamente y se abrocho el cinturón de seguridad. Alex sonrió al verla tranzar su cabello en una sola trenza lateral, ella estaba hermosa.