Es en éste momento en donde todo empieza a tornarse una jodida pesadilla. Es aquí donde me doy cuenta de que desearía haber estado soñando. Si, justo aquí, donde el sentimiento de culpa comienza a quemarme de forma violenta creando nudos en mi garganta casi asfixiandome, mi estómago daba vueltas y mi piel quedó pálida.
—Estoy muy decepcionada de ti, hijo. Yo te crié con principios, con valores. —me mantuve callado durante todo el sermón—. ¿Cómo pudiste hacer esto? A tu novia y más aún... a Thomas, tu tío, faltando tan sólo días para su boda. ¿Acaso quieres seguir los pasos de tu padre?
—Yo no soy como ese —reproché.
Ella negó suspirando y firmó unos papeles.
—¿Desde cuando? ¿Desde cuando estan juntos en secreto?
—Mamá, no somos amantes, sólo fue uno o dos besos y ya. —mentí, claro que no iba a decirle que nos habiamos acostado.
—Esa chica es una cínica. —murmuró y Selenia tocó la puerta—. Adelante.
—Siento interrumpir pero la buscan allá afuera. —dijo al abrir.
—Diles que voy en segundos —respondió mi madre y cuando la chica se marchó, continuó—. Seguiremos esta conversacion en otro momento —se levantó tomando sus papeles y salió de la oficina bastante molesta.
Frente a mí, descansando en la mesa, habia quedado la fotografía reciente donde estaba con Kiara, la guardé en uno de mis bolsillos y luego tomé la caja donde estaba mi traje para irme del lugar.
Antes de volver a casa pasé por Ben, su auto se habia averiado y me pidió que lo arreglara puesto que me conocia del taller donde trabajaba antes. Le comenté lo que habia pasado con aquel empleo y dijo que hablaria por mi en un lugar donde buscaban "buenas manos" para los autos.
Los autos fueron siempre mi debilidad.
Todo ese día estuve fuera de mí, no podia dejar de pensar una y otra y otra vez, no podia ver a Alexa a los ojos, Thomas no me importaba pero si Alexa se enteraba de todo, yo no sé que haría, no habia tomado conciencia de la gravedad de toda la situacion, de lo que pasaría con las personas a mi alrededor. Kiara tenía razón, mi egoismo me habia cegado por completo, olvidé a todos los demas, olvidé que por mi culpa por ejemplo, Alexa terminaria destruida y eso no me lo perdonaria nunca.
Llegué al departamento y fui a nuestro cuarto, ella estaba alistandose para ir al cumpleaños de su mejor amiga, deje la caja sobre la cama y me senté allí mirándola callado.
—¿Te sucede algo, amor? Estas muy extraño.
—Sólo estoy cansado, tranquila preciosa —sonreí disimulando la preocupación que comenzaba a atormentarme y suspiré—. ¿Recuerdas el accidente que tuvimos aquella vez? Donde iba a decirte algo importante.
—Si, y luego te dije que necesitabas descansar porque estabas delirando —respondió arreglando su cabello y prosiguio a maquillarse.
—Nunca pude decirte la verdad —dije mirando hacia ningún lugar puesto que estaba algo ido.
—¿Que verdad? —volteó mirandome frunciendo el ceño.
—Yo... —reaccioné. ¿Pero en que estaba pensando? Era el cumpleaños de su mejor amiga, probablemente estaba a segundos de arruinarle todos sus planes de diversion—. Que yo te amo tonta —sonreí un poco nervioso y ella se acercó.
—¡Aww! Eres es hombre de mi vida ¿sabes? Nunca te alejes de mí. —dijo posando sus manos sobre mis mejillas y besó mis labios.
¿Por qué tuvo que decir eso?
¿por qué? ¿por qué? ¿por qué?
—Ya debo irme —hice pico mis labios y ella se acercó para darme otro beso, sonreí como idiota y ella acarició mi mejilla—. Yaaa, en serio, mi amiga está esperando afuera.
Su iphone seguía sonando pero honestamente todas sus amigas me caían mal asi que no me importaba si esperaban 3 días afuera.
—Me dejas solo. —bromeé.
—Ve a ver a Tyler y me cuentas luego si esta mucho mejor ¿de acuerdo? —tomó su bolso y caminó hasta la salida arreglando su cabello.
Yo me quedé en la cama, llevé ambas manos sobre mi cara y me tumbé suspirando fuerte, no podia dejar de pensar, ¿Adela hablaría con Thomas? ¿Quién mas vería aquél video? Mi vida estaba por dar un giro espantoso en dias, todo dependía de mi madre.
Estaba quedando dormido hasta que mi iphone vibró, lo saqué de mi bolsillo y el nombre de Tyler estaba en pantalla.
"Pizza, alcohol y videojuegos en casa"
No lo pensé dos veces.
Avisé que iba en camino y fui a tomar una ducha rápida, me alisté, busqué las llaves junto con mi billetera tomando camino directo hacia el auto. En el viaje noté que mi iphone estaba practicamente agonizando al igual que el transporte, quizás eso de que las cosas se parecen a su dueño es una jodida verdad. Como sea, llegué a destino y despues de estacionar con cuidado, fui hasta la puerta para tocar. Tyler me recibió con un abrazo el cual correspondí aliviado, mi mejor amigo ya se encontraba en sus cabales y eso me hacia sentir muy bien, éste animal es mas que mi mejor amigo, él es mi hermano y yo haria cualquier cosa por verlo feliz.
—Aquí esta la pizza hecha con mis propias manos —oi una voz femenina a lo lejos y cuando ingresé al hogar terminé por confirmar que era Breana—. Oh, hola Dylan —dijo al verme y despues de haber dejado las dos pizzas en la sala sobre la mesita frente a la TV en medio de los sofás, se cercó para saludarme.
—Ahora entiendo tu cara de idiota —le susurre a Tyler y él golpeó mi brazo. Reí divertido y Breana nos exigió que nos sentaramos a comer porque iba a enfriarse y no se que otra cosa más.
Verán, Breana es de caracter fuerte así que no ibamos a arriesgarnos a hacerla esperar.
Fui para tomar asiento en uno de los sofás y allí estaban Jacob y Kiara, él tenia sus manos unidas porque ella estaba contandole la historia del anillo de matrimonio que me habia contado antes.
Mi humor pasó de un extremo al otro y para mal.
—Hola —saludé seco y me senté al lado de Tyler. Había solamente 2 sofás de estos que son largos asi que en uno estaba él, Breana y yo, y en el otro, Kiara y Jacob.
—Hey mira —dijo Jacob enseñandome sus dedos unidos—, intenta separar tus dedos anulares ¡Es jodidamente imposible!
—Ya lo sé —contesté y dirigí la mirada hacia Kiara—. También me contó esa historia.
Desde ese momento odié la estúpida maldita historia del anillo.
Breana se encargó de cortar en porciones la pizza y despues de haber encontrado una buena película, comenzamos a cenar.
La película contaba la historia de una esposa que tenía un amorío con el hermano de su marido quien estaba por contraer matrimonio con una bonita mujer.
—¿Con quién creen que se queda la mujer? —preguntó Jacob mirando con intriga.
—Pues con su marido porque el otro esta por casarse —dijo Breana luego de dar un mordizco a su porcion de pizza.
—Yo creo que con el amante porque cada tanto le dice para darse a la fuga —agregó Tyler y bebió un poco de alcohol.
—A mi me parece que la mujer esta obsecionada con el pobre hombre —opinó Kiara—, ama a su marido pero duerme con su hermano.
—Quizás ni ella sabe lo que quiere —respondí llenando mi copa de alcohol.
—El que no sabe lo que quiere es el hermano de su marido. —reprochó.
—Él piensa que ella sólo esta jugando, si fue infiel con el tipo entonces seguira siendo infiel —contesté recostando la espalda por el sofa.
—Uy claro, porque él es un santo, te recuerdo que también le está siendo infiel a su novia —volvió a decir ella comiendo lo ultimo de su porción.
—Pero fue ella quien comenzó todo, claramente es una depredadora que sólo busca nuevas presas como diversión y luego todo le vale verga —dije mirandola levantando una ceja.
—Él tiene novia y aún asi la busca ¿dónde quedo su fidelidad? Acéptalo, el tipo no es ningun santo —insistió tomando una copa para beber un poco de alcohol.
—¿Acaso no ves que está enamorado de la perra? —volví a contestar mirándola serio.
—Oh vamos, uno no se enamora tan rápido —rió negando y siguió bebiendo de su copa.
—Pues con tenerla una noche es más que suficiente para caer en desgracia —confesé y noté que Jacob, Tyler y Breana estaban observandonos en silencio.
—Tal vez deberíamos mirar Rápido y Furioso. —agregó Jacob pero todos nos negamos.
Al final, el tipo le rompió el corazón a la mujer y siguió en lo suyo con su futura esposa pero al llegar el dia de la boda, ella nunca llega al altar puesto que la mujer de su hermano la había lanzado desde el balcón.
—¡Qué mierda! —dijo Kiara al asustarse cuando de golpe la mujer empuja a la otra chica vestida de novia—. Espero que no aparezca ninguna ex de Thomas y me arroje al vacío.
Todos reímos.
Vimos otras dos películas más y coincidimos en no volver a invitar a Kiara porque ella le hablaba a los personajes viviendo todas las escenas en 3D.
Al terminar el encuentro conduje primero hasta el bar donde Franchesca estaba esperando a Jacob, luego seguí el viaje solo —porque mi futura tía se negó a subirse a mi auto— iba directo a mi hogar pero al pasar frente a la casa de Kiara la vi en la puerta con Alexa, mi novia.
¿Era esto acaso una alucinación por el alcohol que tenía encima?
Alexa la señalaba con el dedo y su expresión me daba miedo, por otra parte Kiara la miraba con los ojos casi saliéndose de su cara. Mi corazón se aceleró y es que tenía un mal presentimiento de todo esto, estaba al borde del final del camino, podía sentirlo, este secreto estaba escapándose de mis manos y es que ambos éramos culpables, pero yo más por haberme enamorado de lo que para ella había sido tan sólo un juego.