-¿Un día? Ann, lleváis una semana desaparecidos.
Ann apoyo la cabeza contra la mesa. No se lo podía creer. ¡Una semana! ¡Habían estado ahí una semana! Sabía que desde que despertó había pasado solamente un día así que solo quedaba una opción. Después de hacerles inhalar el cloroformo, les habían inyectado sedantes.
Pero... ¿Por qué? Probablemente para llevarlos a la base donde estaban los científicos, así que su base no estaba tan cerca como creían...
Ann negó con la cabeza y miro a Loren de nuevo.
-¿Así que las habitaciones están bajo tierra?- Loren asintió.- Solo abrimos la entrada de noche, a la hora de ir a dormir. Hemos tenido suerte, la puerta está bastante bien escondida.
Ann suspiro y bajo los hombros.
-¿Cansada?- Loren la miro con compasión, al fin y al cabo habían escapado de los cazadores y los científicos a la vez. "Vaya, realmente debe de estar cansada." Pensó Loren para si mismo.
Ann asintió un poco, decidió comer un poco de la bandeja que Loren le había traído. Nada mas comer un poco empezó a notar el hambre. Loren se fijo en la voracidad con la que Ann comía así que pensó en un pequeño plan. Le hizo una señal a la persona que estaba en la esquina. Señalo a Ann y después a la jarra de agua. Al principio el chico no lo entendió, pero después llamo a Ann para que le pasara la jarra.
Mientras Ann agarraba el agua Loren aprovecho para cambiarle el plato casi vació por uno lleno. Ann se sentó de nuevo y continúo comiendo, sin darse cuenta del cambio. Loren sonrió miro el plato de Ann. El en realidad no tenía hambre... Miro a Vanessa, ella tampoco parecía tener mucha hambre, miraba su comida y tenía una mano en la frente. ¿Le dolería la cabeza?
De repente ella giro la cabeza y miro directamente a los ojos de Loren. Le sorprendió pero se negó a dejar de mirarla. Respiro hondo y le hizo un movimiento con la cabeza, como antes solían hacer. Vanessa se encogió de hombros y se señalo la cabeza. Si, le dolía la cabeza.
Pensó en preguntarle si se había tomado alguna pastilla pero sabía de sobra que a ella no tomaba pastillas que no fueran 100% naturales. Podía estar muriéndose del dolor y no tomarse nada, era muy cabezota. Loren sonrió mientras recordaba, sin darse cuenta de que Vanessa aún lo seguía mirando.
Loren pego un bote cuando alguien puso una mano sobre su hombro. Se giro para ver a Flora. "Ah, ya es la hora." Pensó. Flora miro a Ann, quien le sonrió.
-Yo me encargo de ella, será mejor que ayudes a los demás.- Le dijo Loren. Flora asintió y se giro para ir a abrir la puerta.
-Flora.- La llamo Loren. Ella se giro de nuevo.
-¿Si?
-Por casualidad... No tendrás... Bueno.- Miro a Vanessa.- ¿Alguna pastilla natural?
Flora sonrió y miro a Vanessa que jugaba con el pan.
-Creo que algo tengo. ¿Quieres que le diga algo?
-Dile que se recupere... Pero no le digas que lo he dicho yo.
Flora sonrió un poco, sabía que Loren sufría y que no debería sonreír. Pero no podía evitarlo, al fin y al cabo ella poseía una información muy valiosa. A demás, le sorprendía la fuerza con la que Loren amaba a Vanessa. Incluso cuando el mundo se negaba a que se juntaran él seguía amándola a pesar de la distancia.
Flora se fue y Loren se quedo pensativo. ¿Había sonreído? Negó un poco, no era momento de pensar eso. En su lugar miro a Vanessa que estaba empezando a apagar las luces.
-Vamos Ann.- Le dijo agarrándola del brazo.- Deberíamos acercarnos a la entrada antes de que apaguen las luces.
Ann asintió. Se acercaron lo máximo que el gentío les permitía antes de que se apagaran todas las luces.
-¿Qué pasa?- Le pregunto Ann, podía notar su nerviosismo.
-Flora está abriendo la puerta, ella y algunas personas más tienen gafas de visión nocturnas para ayudarnos a entrar. Es por precaución, así conseguimos que nadie vea donde está la entrada. De hecho.- Añadió.- Muchos de nosotros no saben dónde está.
-Apuesto a que tu si lo sabes.- Loren sonrió.
-Porque yo soy el mejor.
Paso un poco de tiempo hasta que al fin les toco entrar. Ann estaba en tensión, no tenía miedo aunque no le gustaba estar a oscuras, el problema era que las corrientes querían salir y librarse de la oscuridad. Mantenerlas bajo control era difícil, y estar rodeada de cuerpos era horrible.
-Tranquila, pasara rápido.- Le dijo Loren.- Levanta un poco el pie, como si fueras a subir un escalón.
Lo hizo, pero se sorprendió al notar que el suelo estaba más abajo de lo que creía. Loren la agarro del brazo la llevo unos metros más adelante. Escuchaba a Flora ayudar a la gente detrás de ella. Loren de detuvo.
-Esto es como un agujero de alcantarilla.- Le dijo.- Siéntate en el borde.
Loren la ayudo, Ann no se sentía a gusto con las piernas colgando.
-Dime que no tengo que saltar.- Le dijo. Loren se quedo en silencio, Ann escucho como retenía la risa.
-Tranquila, hay una red abajo. Es como saltar en las camas elásticas. Tu solo déjate caer y cuando estés abajo alguien te ayudara a salir.- Podía notar algo en su voz. Loren planeaba algo...
Ann asintió y pensó que aquello podría ser divertido. Entonces Loren la empujo, quiso gritar pero decidió no hacerlo, en su lugar agarro el brazo de Loren y lo arrastro con ella. Cuando toco la red todos sus músculos se relajaron. Se acerco a Loren y lo empujo.
-Tú, maldito idiota.- Le dijo sonriente.
Loren no paraba de reír.
-Vale, eso no me lo esperaba.
Alguien les tendió una mano que asusto a ambos. Les llevaron hasta una puerta donde Loren se golpeo la frente.
-Te pasa por querer ir primero.- Ann empezó a reírse tanto que tuvo miedo de electrocutar a Loren. La puerta se abrió y la luz los cegó.
-Nooo mis ojooos. ¡La luz! ¡Me quemaaa!- Empezó a actuar Ann como si fuera un vampiro. Loren se agarro el estomago mientras reía.
-Decidido, tienes que venir más con nosotros. Me da igual lo que digas, necesito otro compañero de bromas.
Cuando se relajaron Loren la guió por el complejo subterráneo. Pasillos, pasillos y pasillos. Ann no entendía como podía guiarse por allí, hasta que se fijo en las marcas de la pared. Alguien había utilizado un spray para poner números y letras en las paredes, le recordaba a los parkings de los centros comerciales.
-Aquí es. 23H, acuérdate del numero.- Ann asintió.- Sam y yo estamos un poco lejos así que si queréis algo mandarnos un mensaje.
-¿Queréis? ¿Kevin está en la habitación de al lado?
-Am... Si. Eso es.- Le dijo Loren casi sin poder ocultar la sonrisa.- Bueno me voy, tengo que echar una mano.
Antes de que Ann pudiera preguntarle Loren se fue corriendo. Le ocultaba algo, era demasiado evidente. Se giro para ver la habitación. Se notaba que ese pequeño lugar no fue creado para ser una habitación pero tampoco estaba tan mal.
El suelo era de gravilla fina y tierra pero le habían puesto una lona para que no doliera al pisar. Había una pequeña mesa con una lámpara, una toalla con un jabón y un colchón con un edredón encima.
...
Tampoco estaba tan mal.
Alguien toco la puerta. Se sobresalto pero después sonrió por la estupidez del momento. Abrió la puerta para encontrarse a Flora.
-Hola cielo. Venía a traerte un par de cosas.- Le entrego un neceser.-Ya sabes, cosas de chicas. Oh, esto me lo han dado Sam y Loren. Estaban sonriendo así que si tengo que dejarles sin comer solo avísame.
Ann rió un poco.
-Está bien, Flora. Gracias.
-La ducha de chicas esta justo tres puertas a la derecha.- Se acerco a ella y le susurro.- Si vas ahora no habrá nadie. Espero que pases buena noche.- Se fue antes de que Ann pudiera responderle, tendría prisa.
Una vez dentro de la habitación, abrió el neceser para ver ropa interior limpia, una camiseta blanca grande y compresas. Sonrió, Flora realmente era muy atenta. Saco la pequeña caja envuelta en papel, ponía "KEVIN" en ella así que decidió no abrirla.
Cogió la ropa interior, el jabón y la toalla y se fue a la ducha, realmente la necesitaba.
Media hora después
Salió con la toalla anudada en el pecho, se había olvidado la camiseta en la habitación... Se asomo y como vio que no había nadie ando rápido y abrió la puerta. La cerró igual de rápido y apoyo la espalda en ella para suspirar.
-¿Ann?
Se quedo congelada al ver a Kevin sin camiseta. Empezó a ponerse aún más nerviosa al ver los abdominales de Kevin. ¿Se había equivocado de habitación? ¿De verdad?