Mis ojos estaban rojos y me ardían después de haber estado llorando todo este tiempo.
Así me encontraba yo Paul McCartney.
Encerrado en unos de los cubículos del baño sollozando por mi desdicha, no sabia cuanto llevaba aquí pero ya debieron pasar un par de horas.
Me quedare aquí hasta que sea la hora de salida, hasta que no quede ningun alumno en la escuela que pueda reconocerme, dramatize.
Ahora que lo pienso, porque si estar aquí encerrado y solo te da mucho tiempo para pensar. Puedo deducir que soy un estúpido, un tonto, un idiota. Como pude decirle eso a John Lennon.
John Lennon era uno de los chicos populares del instituto era bien conocido por su imagen de Teddy boy y porque formaba parte de "los seis".
Los seis era un grupo que esta conformado por los seis chicos más rudos del instituto no cualquiera entraba, la única manera era hacer algo lo suficientemente malo para ser admitido es por eso que la mayoría le temía a Lennon, los rumores no se hacian esperar algunos decían que el fue el responsable del accidente del profesor de matemáticas ya que este era paralítico, pero lo cierto es que esto sucedió mucho antes de que Lennon ingresará a la escuela.
Otra versión que era muy bien conocida por los estudiantes era que John en un acto de desesperación por entrar había incendiado los laboratorios y los salones de la parte de atrás aunque este era un acto de pironamía pura para atribuirselo al chico castaño.
La verdad nadie la conocía. Mucho menos yo que me habia dedicado a acosar a John desde que entre, sabía muchas cosas que pocos conocían, por ejemplo el segundo nombre de John es Winston, era algo obvio que necesitaba lentes porque si lo observabas bien él estaba más ciego que un murciélago, amaba a los gatos y no es tan malo como se creía.
Esto último lo puedo confirmar por experiencia propia. Un día que venía de la escuela a mi casa vi que un grupo de matones atacaban sin piedad a un chico de ojos azules, su nombre era Richard y había entrado nuevo este año, era objeto de burlas y maltratos por su prominente nariz y su baja estatura. Si por estupideces así, como yo no era un héroe en teoría ni un cobarde me lanze sobre ellos para tratar de defenderlo, recibí varios golpes en la cara y en los brazos, pensé que los dos acabaríamos aquí tirados porque ellos eran cinco pero de repente llegó él y los agarro a golpes hasta dejarlos bien jodidos. Después de esto me ayudó a mi y a Richard a levantarnos, yo no hablé mucho con él ese día sin embargo Richard no dejo de agradecerle, desde ese día ambos fueron muy unidos y nadie volvió a molestarlo.
Desde entonces yo me obsesione con él con cada mínima cosa que hacía bastaba para volverme loco yo lo admiraba, yo lo amaba.
Pero si así estaban las cosas ¿Que fue lo que paso? Por que en el inicio del relato me encontraba tan devastado.
Les diré cada día me enamoraba más de John solía dedicarme recesos enteros a mirarlo y a sonreír como estúpido cada vez que hacía una de sus payasadas.
Un día me decidí a confesarle lo que sentía, gran error. Pocas veces había cruzado palabra con él y ahora iba a llegar y decirle que me gustaba, si contamos mi timidez y la alta probabilidad de que John no sea bisexual ¡Ah! Y no olvidemos la paliza que me daría si lo agarro de mal humor, desde el principio todo podía salir mal pero sin hacer caso a mi sentido lógico me lanze a la aventura.
Cuando fui a su búsqueda Lo encontré demasiado rápido incluso pensé que el universo quería que lo hiciera porque ahí estaba a menos de un metro y solo, que convienente. Estaba recargado en la pared a lado de los bebederos con esa posee de chico malo, su mirada parecía pérdida y tenia un cigarrillo en los labios, me acerqué y logre posicionarme enfrente de él, este salió de su ensoñación y levantó la vista rápidamente hacia mi, tome aire y de manera torpe y nerviosa le confesó todo al terminar de hablar él solo me miró no pude saber que pensaba sólo se me quedo mirando tal vez le pareci estúpido o a lo mejor demasiado estúpido porque ni siquiera se burló como es clásico de él.
Salí corriendo de ahí para evitar seguir haciendo el ridículo, el único lugar en donde podría estar sin ser molestado era en los baños de hombres que casi siempre están vacíos, rápido me encerré en el último cubículo y comencé a llorar.
Ya no podía ni siquiera pensar que pasaria durante los siguientes días tal vez reciba una paliza de los seis o toda la escuela terminará sabiendo de mis sentimientos en una forma de John para ridiculizarme...
Estaba tan distraído que no escuche cuando alguien entró a los baños.
--¡Paul!
La voz me resultaba familiar, se trata de George.
--Se que estas aquí ahora sal.
Sin mas quite el pasador de la puerta y camine hacia él, lucia horrible después tanta lloradera y mi amigo me veía con lástima.
--¡Oh Paullie! No llores más, no tienes idea de lo que acaba de pasar.
¿Que? Lo mire desconcertado y él empezó a hablar.
--John dejo casi inconsciente a Stuart, no se sabe el motivo de la riña pero según las buenas fuentes lo hizo por ti.
Mi cabeza no daba crédito a lo dicho por George, Stuart también formaba parte de los seis y además era el mejor amigo de John ¿Porque pelearian? Y más importante aún porque se cree que es por mi. George me llevo arrastrando hacia las canchas de atrás donde supose que se encontraban, cuando salimos me di cuenta que llovía de manera leve había estado tanto encerrado que no me había dado cuenta.
Al llegar lo primero que note fue a Stuar tirado en medio de una multitud de gente, estaba lleno de moretones y la nariz no le dejaba de sangrar a lado de él estaba una chica rubia de nombre Astrid que intentaba curarlo he impedir el sangrado, George se acercó a Richard y le pregunto que había pasado no escuche lo que Richard contestó ya que mas a la lejos se encontraba John con la mirada gacha y las manos llenas de sangre; al notar mi presencia camino hacia mi hasta quedar tan cerca que pensé que iba a besarme enfrente de todos, en ese momento todo se resumió en silencio John sólo me miraba al igual que el resto ya que podía sentir varios pares de ojos quemándome la nuca.
Él me tomo de la mano y me llevo a dentro caminaba muy rápido y se me dificultaba seguirle el paso llegamos a un salón vacío y este me empujó adentro luego entró él y cerró la puerta con seguro.
Otra vez su rostro se acercó a el mío quitándome mi espacio personal, pensé que iba a golpearme ya que su mirada lucia endemoniada y su respiración agitada a causa de la adrenalina quise apartar el rostro pero él me lo impidió, me sujeto de la cintura y me atrajo más hacia él sus labios chocaron con los míos pude notar a primer instante que sus labios eran muy suaves, esta era la primera vez que besaba a un hombre y presencié lo diferente que era comparado al de una mujer, este era mas brusco después de unos segundos John intento profundizar más el beso pero yo se lo impedi.
--Que es lo que pasa ¿No era esto lo que querías?-- dijo mientras aún estaba entre sus brazos.
-- Si bueno... No, aún no me quedan claras muchas cosas. ¿Porque golpeaste a Stuart?
Él suspiro y volvió a dirigirme la mirada esta vez viéndome directo a los ojos.
-- Él estaba diciendo cosas sobre ti que no me agradaron para nada, no podía permitir que se expresara de esa manera.
-- Pero eso te traerá muchos problemas con los demás y Stuart es tu amigo porque lo sobrepusiste sobre mi.
-- Porque me gustas mucho Paul
No lo quería creer, no podía ser.
-- ¿Es enserio?
Este afirmó levemente con la cabeza y comenzó a hablar.
--Te he querido siempre y cuando me confesaste lo que sentías no pude creer la grata coincidencia. Recuerdo que desde que te vi me parecíste muy lindo eres un buen chico dedicado, amable, tranquilo. Todo lo contrario que yo tal vez es cierto lo que dicen los opuestos se atraen.
Estaba sorprendido muy sorprendido por su reacción nunca espere que John me correspondiera o que pensara esas cosas de mi. Estaba muy feliz parecía un sueño, no ojala no sea un sueño. Pero había un gran detalle que pasara cuando el resto de los seis se entere de los sentimientos de John.
--John que pasara contigo no tienes miedo de lo que te harán si te enteras lo más seguro es que te expulsen de los seis-- declare en forma preocupada no quería que le hicieran nada a John y menos por mi culpa.
--No te preocupes por lo que pensarán de nosotros lo único que importa es como te sientas tú y con respecto a los seis sólo serán cinco hasta que se encuentren a alguien que pueda igualarme nose como le harán-- exclamó con el mentón bien alto.
Solo puede rodar los ojos y sonreír ante su egocentrismo.
--Ahora donde nos quedamos bonito-- dice mientras su boca se acerca a mi cuello.
--John puede entrar alguien
Y si en ese instante pude escuchar como abrían la puerta por fuera, debieron ir por la llave. John y yo nos separamos y salimos por las ventanas antes de ser descubiertos. Una vez a fuera John tomó mi muñeca y me acercó a él.
--Nos vemos en la salida tengo algo que decirte-- susurro en mi oído, al final me dio un beso en la comisura de los labios en forma de despedida y se alejo con su particular forma de caminar.
--Oh por supuesto que estaré ahí Johnny-- dije para mi mismo.